A pesar de todos los esfuerzos que han realizado los trabajadores ante el Ministerio de Trabajo, su situación aún no ha sido solucionada.
Una vez más los trabajadores de Limón siguen siendo maltratados por parte de las empresas, sin contar con el apoyo de aquellas instituciones que deben velar por los derechos laborales de la clase trabajadora. Ya habían sido despedidos también un grupo grande de trabajadores en la empresa DECAR.
Es muy curioso que las empresas que están despidiendo trabajadores en Limón son aquellas en las cuales hay sindicatos consolidados. Pareciera más bien que después de lo que hizo el Gobierno en Sintrajap, las empresas que tienen sindicatos quieren seguir el mismo camino y van despidiendo a todos aquellos trabajadores afiliados al sindicato.
Solicitamos a la Ministra de Trabajo intervenir de inmediato en la situación que se está dando en ENVACO y lo que le está ocurriendo a los trabajadores miembros del Sindicato STICA.
La comunicación entre el sindicato y la empresa está totalmente rota y esto crea una tensión muy fuerte.
¿No era que el TLC iba a traer más empleos?
La empresa, con la ayuda del TLC, ha vanido mejorando su producción e ingresos, sin embargo los resultados son buenos para la empresa y no para los trabajadores y trabajadoras que son enviados a la calle.
El Gobierno de Arias, del cual también era parte la actual Presidenta Laura Chinchilla, prometió miles de empleos con el TLC, hasta cambiar los “Hyundai por Mercedez Bens y las bicicletas por motos BMW”, pero en Limón, como en el resto del país, lo que estamos viendo es cientos de desempleados y persecución sindical.
La empresa ENVACO S.A. ha adquirido nuevos equipos, valorados en millones de dólares, sigue aumentando sus ganancias a costa del trabajo de sus empleados, sin embargo el “premio” es la calle.
Servicios Agrícolas y nuevos desarrollos para América Latina de Del Monte, una transnacional, es la dueña de ENVACO S.A., y tiene fama en todos los países por ser represiva con los y las trabajadoras al impedirles, limitarles y constreñir su derecho a sindicalizarse para defenderse de sus atropellos.
Esto es una muestra más de la fuerte ola de acciones antisindicales en Costa Rica y por lo cual nuestro país está acusado ante la Asamblea de la O.I.T., sin que las autoridades del Ministerio de Trabajo actúe en defensa de los derechos laborales.