San José, 15 de junio de 2009.
Honorables señores
Consejo Nacional de Salarios
Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS)
Presente
Estimados señores:
Con motivo de la nueva fijación salarial que ha de establecerse para la clase trabajadora del sector Privado y valedera para el segundo semestre del año 2009, la Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP) presenta a este honorable Consejo nuestra propuesta al respecto de Aumento Salarial.
Nótese que hablamos de un Aumento Salarial, no de un “ajuste”, que es lo que se ha venido haciendo en los últimos años, dejando un rezago que se ha venido arrastrando durante décadas y que este Consejo ha dejado de conocer, cuando su deber debió ser el de equiparar esas diferencias con la realidad.
Es necesario un incremento sustancial en el poder adquisitivo de las personas trabajadoras asalariadas de nuestro país. Creemos firmemente en que ha llegado el momento para establecer una Política de recuperación de poder adquisitivo y de salarios crecientes progresivos, como una de las principales medidas a adoptar en esta época de crisis.
Es por ello que debemos hacer mención a la propuesta “Diez medidas para enfrentar la crisis económica con inclusión social y productiva”, dada a conocer al país el pasado 24 de abril y de la cual la entidad que representamos es suscribiente para indicarles lo siguiente:
“La capacidad de consumo depende de forma directa de la política salarial. Una mayor restricción salarial, puede ser vista como razonable de forma inmediata, pero generará en el corto y mediano plazo una mayor contracción del mercado interno, y por lo tanto de la capacidad empresarial para sobrevivir la crisis…
Por otra parte,_ “…es necesario mantener el poder adquisitivo a partir de la variación de una canasta de consumo fundamental, lo cual requiere que los ajustes salariales no respondan a la inflación sufrida, sino que el costo inflacionario se reparta equitativamente entre empleadores y personas trabajadoras, a partir de un aumento parcial de la inflación adelantada”._
Algo grave ha venido pasando con los indicadores actuales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), cuyos índices de variación de precios mensualmente conocidos no guardan congruencia con la realidad que emerge de los debilitados bolsillos de las personas trabajadoras; al punto de que se constata el fuerte endeudamiento que la clase trabajadora ha tenido que acumular, por ejemplo, con la utilización de tarjetas de crédito que hoy suma más de quinientos ochenta mil millones de colones de deudas a los grupos usureros prestamistas, quienes hacen clavos de oro con la miseria de los trabajadores a falta de un salario digno que les permita vivir decentemente.
Los ajustes salariales no responden a la inflación arrastrada, sino que el costo inflacionario se ha cargado a las clases más bajas, mientras que el Estado asume posiciones paternalistas para favorecer los grupos de poder político y económico, los cuales se agachan cuando vienen las vacas flacas amparándose a_ “papá Estado”_; pero cuando están las vacas gordas deciden no repartir las ganancias, lo que se ha constituido en una práctica de privatizar las ganancias y socializar las perdidas.
Entre tanto eso sucede, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), predice centenares de miles de desempleados a nivel mundial (entre doscientos diez y doscientos treinta y nueve millones), de los cuales muchos miles corresponderán a Costa Rica, situación que ya estamos viviendo, sin que el Estado asuma una posición confrontativa que permita palear la crisis.
Esto quiere decir que el Estado asume la posición más fácil de entregar el patrimonio nacional, lejos de procurar la creación de empleos y de políticas sociales; lejos también de dinamizar la economía nacional poniendo en práctica las políticas sociales de desarrollo que permita mantener un blindaje protector para enfrentar el desempleo, como lo ha dicho la Organización Internacional del Trabajo.
El actual Índice de Precios al Consumidor (IPC) que maneja el INEC necesita de adaptaciones estructurales en cuanto al concepto de canasta de consumo fundamental y la relación de la misma con las realidades de aquel segmento de la clase trabajadora de bajos salarios (que es el mayoritario); lo cual no permite tener una visión clara de la situación que viven la gran mayoría de las personas trabajadoras asalariadas de los segmentos medio y bajo. Ello conduce a que los índices que hoy nos presentan no se ajusten a una realidad vivida por la gran mayoría laboral en el día a día, cual es la del divorcio entre una realidad salarial determinada y la realidad del mercado que no hace distinción alguna entre capacidades de ingreso.
Si a lo antes expuesto le agregamos la situación que a diario viven miles de trabajadores con jornadas extenuantes no pagadas; sin que el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) asuma la posición que debe y que es para lo que fue creado; podemos asegurar que cualquier aumento que se fije no está razonablemente ajustado a la realidad de la que nosotros hablamos: la del deterioro del poder adquisitivo vs. un indicador de variaciones de precios inmisericorde con las realidades salariales medidas y bajas, las de apabullante número entre quienes dependen de un salario para su existencia cotidiana.
Estas crudas realidades salariales difícilmente puedan ser mitigadas en los actuales momentos, dado que (entre otros factores), la acción colectiva no se puede impulsar ante la ausencia de libertades sindicales en la empresa privada; ausencia que es del conocimiento del MTSS, de los tribunales, de los empresarios y de la_ “gran”_ prensa, pero que todos juntos callan en nombre de la “Democracia”, a sabiendas de que el Derecho Sindical es un derecho consagrado en nuestra Constitución Política.
PROPUESTA
Ante esta situación, la Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP), considera que el Consejo Nacional de Salarios debe de asumir una posición positiva y ajustarse a la realidad nacional, no al informe que rinde INEC como parámetro único, porque como lo señalamos anteriormente, este olvida elementos no contemplados en lo que debería ser una real canasta de consumo fundamental.
Por lo antes expuesto, la Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP), solicita un aumento del 5% para el sector privado, en general; y un 6%, para la cajuela de café y para la recolección de coyol.
p/ Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP)
Albino Vargas Barrantes
Presidente CSJMP
Luis Ángel Serrano Estrada
Vicepresidente CSJMP