Santiago de Chile, Enero de 2009
Si al menos su artículo décimo, el rechazo de la guerra como método para resolver conflictos internacionales, se incluyera en todas las constituciones del mundo, ya se tendría un nuevo panorama mundial.
Pero también el artículo 344, que no sólo prohíbe la fabricación de armas nucleares y biológicas, sino que además impide su tránsito por territorio boliviano.
Explicita en su articulado que para el estado boliviano, el ser humano es el valor central y por tanto vela por la justa distribución de la riqueza.
Promueve la educación de la No Violencia y la Educación Humanista en su sistema educativo.
Además de la propiedad privada, promueve la empresa estatal y la coparticipación de los trabajadores en las decisiones de reinversión de utilidades.
Permite la elección directa de los máximos cargos del poder judicial, perfeccionando la democracia.
Permite la consulta popular para cualquier ley que afecte a cualquiera de las etnias.
Es Descentralizada, dando autonomía a regiones y municipios.
Es Participativa, dando la voz a aquellos ciudadanos y culturas postergados durante siglos.
Es Progresista, buscando modelos nuevos para salir del atraso y la pobreza.
Es Solidaria, aceptando además de la propiedad privada, otras formas sociales de propiedad
Es Profunda, surge de la sabiduría profunda de los pueblos y no busca una nueva revancha contra los que dominaban con anterioridad sino un modelo inclusivo y diverso donde todos tengan oportunidades
Es Innovadora, defendiendo la soberanía alimentaria como un derecho básico y defendiendo también el cuidado del la Pacha Mama como una obligación moral frente a las futuras generaciones.
Es No Violenta, la Primera Constitución en la Historia que excluye a la guerra como forma de solucionar conflictos entre países vecinos.
Por todo lo anterior, los Humanistas de Latinoamérica y del mundo apoyamos resueltamente este gran paso que da el pueblo boliviano.
Los Humanistas decimos SI a la nueva Constitución