Volante sobre el pago de una deuda a los trabajadores y trabajadoras del Sistema Nacional de Radio y Televisión.

La primera acción acordada por la Seccional ANEP-SINART de aquella época, fue la de meter la demanda judicial contra el SINART por infracción a la legislación laboral; demanda que firmó el compañero Albino Vargas, en representación de la ANEP, así como los compañeros Mauricio Solano y Fernando Vargas como sus testigos. Dicha demanda fue interpuesta en momentos en que vivíamos la peor de las represiones y dictaduras que hemos tenido en la institución.

Luego esperamos por dos años hasta que llegó la primer cita a los Tribunales de Justicia, a la que asistieron los señores Miguel Salguero y Gerson Córdoba, además de la señora Katia Torres, como representantes patronales. Por la parte laboral, los representantes de los trabajadores arriba señalados, con la asesoría jurídica de ANEP, a cargo del Lic. Mauricio Castro. Esa mañana tuvimos al primer acuerdo extrajudicial y se prorrogó el plazo por seis meses más, para honrar la deuda.

Después de muchas reuniones, de jornadas de trabajo, de negociaciones políticas y de movilizaciones a la Casa Presidencial y a la Asamblea Legislativa, se aprobó la Ley del SINART, S.A.; ley que establece el pago de dicha deuda y que nos costó mucho que se incorporaran esas reivindicaciones económicas. Aquí contamos con el apoyo, no sólo de los diputados y de las diputadas, quienes aprobaron unánimemente la ley; sino que, también, con el respaldo de algunos asesores que fueron claves en ese proceso.

De ahí en adelante la lucha no ha cesado. Una y otra vez hemos insistido y luchado en el mismo Consejo Ejecutivo del SINART, S.A., para que se hicieran las gestiones políticas para el pago de la deuda. Incluso, luego asistimos otra vez a la Asamblea Legislativa para que se incluyeran los recursos en el presupuesto ordinario de este año, para que el Estado honrara su compromiso. También ahí cumplimos con el objetivo, aunque en ese momento asistimos muy pocos a las barras legislativas. Eramos seis personas nada más.

Tocamos muchas puertas en ese largo y difícil camino. Hablamos hasta con el hijo del Presidente de la República, Fabián Pacheco Rodríguez, a quien le agradecemos todos sus esfuerzos y solidaridad.

Agradecemos también al señor Presidente de la República, Dr. Abel Pacheco de la Espriella, porque siempre contamos con su respaldo incondicional, tanto en la tramitación de la ley como ahora que se nos cancelará la deuda. Muchas gracias, don Abel.

Hoy nos anuncian la fecha de pago. Los recursos están listos desde hace más de quince días, lo mismo que la voluntad política para pagar. Entonces, compañeros y compañeras, celebremos hoy con orgullo. A nuestros afiliados y afiliadas, nuestro profundo agradecimiento por confiar en nosotros. A quienes aún hoy no están en ANEP, les invitamos a que se integren; y a quienes nos criticaron mal intencionadamente y no creyeron, ahí está la respuesta.

Gracias, don Miguel Salguero; gracias, Albino Vargas, Mauricio Castro, Gerson Córdoba, Allan Trigueros, Gilberto Soto, Juan Carlos Chavarría; pero sobre todo, muchísimas gracias a todos ustedes.

Son muchos los retos que nos quedan por delante, entre éstos, la Convención Colectiva de Trabajo y una nueva escala salarial para todos. Solo unidos y organizados podremos alcanzar esas y otras metas, de ahí que les invitamos, con todo respeto, a que se sumen a las filas de nuestro sindicato.

Si por alguna razón no se cumple con la fecha que nos dará hoy el señor presidente del Consejo Ejecutivo del SINART S.A., inmediatamente estaremos tomando las medidas que acordamos en la Asamblea General pasada, aunque confiamos en que tanto él, como el Director General, harán todo lo posible por ayudar en este trámite administrativo (que es lo último y más sencillo que hace falta), para hacer realidad el pago de la deuda.

Que viva la ANEP
Que viva la Seccional de ANEP-SINART, S.A.
Que vivan los trabajadores y
trabajadoras del SINART, S.A.

¡¡¡Felicidades!!!

Seccional ANEP-SINART,
TRABAJANDO POR SU BIENESTAR

San José, 10 de mayo de 2004

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