ANEP contra nueva Ley de inmigración de la ultraderecha norteamericana

San José, 30 de marzo del 2006.
S.G. 05-07-0465-06

Señores senadores
Señoras Senadoras
Senado de los Estados Unidos de América.

Señor
George W. Bush
Presidente de los Estados Unidos de América.

Señores senadores:
Señoras senadoras:
Señor Presidente:

Estamos notificados del proyecto de Ley H.R.4437, Ley de Seguridad Fronteriza, Antiterrorismo y Actos de Control de la Inmigración Ilegal.

Señores senadores, señoras senadoras: Como centroamericanos, miembros de las organizaciones sindicales y sociales que pertenecemos a la Plataforma Sindical Común Centroamericana (PSCC), no podemos dejar pasar desapercibido el trámite de este tenebroso proyecto de ley en su respetado y poderoso país.

Como nación soberana, nada le impide al Senado de los Estados Unidos de América dictar, como le compete, sus políticas migratorias. Entendemos que tal menester es asunto absolutamente soberano que corresponde a su Gobierno y Senado. Gústenos o no somos respetuosos de ello.

Pero debe saber el Gobierno y el Senado de los Estados Unidos de América, que la aprobación de una ley como la planteada, profundizará, las condiciones de pobreza y pobreza extrema en la que han caído nuestros pueblos después de 20 años de aplicación de las llamadas política neoliberales, el famoso Consenso de Washington y sus brazos diabólicos conocidos como programas de ajuste estructural.

Estas políticas tienen a más del 60% de la población regional sumida en el desempleo; y, en el “mejor” de los casos, empleos precarios, sin acceso a la seguridad social y muy lejos de alcanzar un salario justo y digno.

Por otra parte, la acumulación de capital y de riqueza que han generado las políticas neoliberales, resultan odiosas y obscenas a los ojos de una inmensa mayoría de centroamericanos, quienes carecen de los medios económicos mínimos para el pleno desarrollo de sus facultades vitales.

No sobra señalar que la entrada en vigencia del CAFTA, en los países que ya lo han ratificado, profundizará la ruindad de este modelo. Sea, se nos empuja, lamentablemente, por el camino de una mayor pobreza y exclusión social, situación que generará naturalmente una mayor inestabilidad social en la región y, por tanto hará necesariamente que miles y miles de gentes de la región, opten por llegar al territorio de los Estados Unidos de América, en busca del sueño americano; sueño que el modelo impuesto les niega en sus países.

Respetuosamente señores Senadores, señoras Senadoras: No bastará con criminalizar la migración, construir gigantescos y largos muros para asegurar que los pobres producidos por el modelo neoliberal lleguen a su país. Cuando el derecho a la dignidad, a la libertad, a la vida, entra en movimiento, no hay nada que los detenga.

Deben saber señores Senadores, señores Senadoras, señor Presidente de los Estados Unidos de América, que los centroamericanos añoramos y soñamos con desarrollar nuestras potencialidades humanas en estas hermosas tierras que nos vieron nacer y viajar a su gran país, no por necesidad y en condiciones indignas para la vida humana, sino en condición de ciudadanos y ciudadanas centroamericanos, como hombres y mujeres del mundo.

Para eso necesitamos que su poderoso país, trate a nuestros pueblos con respeto; que negociemos tratados de libre comercio para el crecimiento y bienestar mutuos; que mantengamos relaciones comerciales que consideren las gigantescas asimetrías de producción y comercio que hay entre nuestras naciones.

Hace falta que globalicemos la solidaridad entre nuestros pueblos. Sólo entonces no hará falta que su Gobierno levante murallas vergonzantes, para detener las oleadas de personas expulsadas por un modelo económicos que socava la dignidad de nuestros pueblos.

En todo caso quién lo creería. Cayó el muro de Berlín; posteriormente, sin que nadie también lo creyera, la cortina de hierro, también se desboronó, como un terrón de azúcar en un vaso de agua.

Definitivamente, lo humano, la razón, la solidaridad terminarán por imponerse y no habrá ya más muros de miseria que nos separen. Los llamamos, respetuosamente a iniciar el tránsito por este urgente y necesario camino. Les solicitamos con vehemencia no aprobar esa inhumana ley. Consideren además que, lamentablemente, ya muchos de nuestros pueblos subsisten de la venta barata de su capital humano, como fuerza de trabajo, legal o ilegal en su poderoso país. Tal proyecto de ley, por tanto, conspira contra la frágil estabilidad democrática que hoy persiste en nuestra región.

Respetuosamente,

Albino Vargas Barrantes
Secretario General

Edgar Morales Quesada
Secretario General Adjunto
Coordinador en Costa Rica
Plataforma Sindical Común Centroamericana
(PSSC)

c.:Organizaciones de la Plataforma Sindical Común Centroamericana (PSSC-CR).

c.:Junta Directiva Nacional de ANEP.

c.:Medios de Comunicación Colectiva.

c.:Archivo.

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