Dictadura hondureña suspende garantías e interviene medios de comunicación

Militares golpistas toman Canal 36 y Radio Globo en Tegucigalpa




Radio Globo (momento en que ingresan los militares)

Las instalaciones de las emisoras de televisión y radio fueron ocupadas por fuerzas militares luego de la firma de un decreto que suspende garantías constitucionales en Honduras.

Un grupo de soldados irrumpió durante la madrugada de este lunes en los edificios del Canal 36 y de Radio Globo que servían como canal de comunicación de la resistencia contra el Golpe de Estado.

Hasta ahora, las dos emisoras se habían mantenido al aire con interferencias y dificultades, pero desarrollando una tarea periodística de relevancia histórica.

A través de estas señales el presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, podía hablar para el pueblo en resistencia y dar a conocer la situación que se vive dentro de la embajada de Brasil, donde permanece alojado.

También los ciudadanos y las ciudadanas realizaban sus denuncias al aire, respecto de las persecuciones, detenciones, torturas y asesinatos que ocurren en diversos lugares del país.

Al cumplirse tres meses de iniciado el Golpe del 28 de junio, el Gobierno de facto de Roberto Micheletti emitió la orden de allanar los dos medios de comunicación.

Fue tras la publicación del decreto que suspende cinco garantías constitucionales entre la que están la libertad de expresión, de circulación y reunión.
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Gobierno de facto de Honduras suspende garantías constitucionales




Andres Thomas, periodista de DN (despacho desde la embajada de Brasil en Tegucigalpa)

La medida del Gobierno de Facto se extenderá por 45 días y ordena el desalojo de toda institución pública tomada por manifestantes y la detención de personas que sean consideradas sospechosas.

También establece el cierre de medios de comunicación que “ofendan la dignidad humana, a los funcionarios públicos o atenten contra la ley”, según el texto del decreto.

El periodista Andrés Thomas, de la agencia estadounidense Democracy Now que permanece dentro de la embajada de Brasil, junto al presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, informó a Púlsar sobre los alcances de esta medida.

Aseguró que la situación en el país centroamericano es cada vez más grave y detalló que el régimen de facto estableció un plazo de 10 días al Gobierno de Brasil para que defina el estatus de Zelaya dentro de la embajada.

Explicó que si ese plazo no se cumple, los golpistas están amenazando con quitar la inmunidad de la sede diplomática.

“Eso quiere decir que este edificio se convierte en un edificio cualquiera y la policía puede entrar” detalló Andrés Thomas desde la embajada de Brasil en Tegucigalpa.

Fuentes: PÚLSAR y Telesur

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