San José, 5 de mayo de 2008.
Doctor
Oscar Arias Sánchez
Presidente de la República
y Premio Nóbel de la Paz
Casa Presidencial
Su Despacho
Estimado señor:
Con suma preocupación hemos visto cómo su Gobierno, en el mensaje presidencial del Primero de Mayo, se plantea y propone elevar a rango constitucional, al movimiento solidarista. Esta ponencia la comprendemos puesto que, ideológicamente hablando, su Gobierno se orienta movido por los intereses patronales que tutelan e impulsan el desarrollo del solidarismo, como un arma de ataque, oposición y destrucción del Movimiento Sindical Costarricense. Además de que entendemos que tal halago, tiene el claro designio de premiar a este movimiento propatronal, por los servicios prestados a su Gobierno, a favor del referéndum, en la reciente campaña sobre el TLC.
Como lo hemos indicado, tales halagos los comprendemos, plenamente; de la misma manera que comprendemos su desprecio por el sindicalismo, que se resiste a la imposición del modelo neoliberal impulsado desde Zapote y desde Llorente; movimiento sindical que, además, ha tenido la osadía y la capacidad de proponer un modelo alternativo de desarrollo, humano y solidario, donde la producción y el comercio sean instrumentos para el bienestar común; modelo en el cual la economía está al servicio de la persona humana y no a la inversa.
Todo esto lo entendemos y comprendemos. Sin embargo, lo que realmente no entendemos ni comprendemos, es como usted, señor Presidente y Premio Nóbel de la Paz, se da el lujo de asistir al foro internacional más importante del mundo laboral global, la Conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que se realiza en el mes de julio de cada año en Ginebra, Suiza; para reconocer las violaciones que se cometen en nuestro país contra el pleno ejercicio de la libertad sindical; para, de seguido, comprometerse ante los representantes laborales, patronales y gubernamentales de todos los estados allí reunidos, a tutelar y resolver las demandas planteadas por la parte sindical costarricense; y, finalmente, luego de dos años de su presentación, deshonrar su palabra.
En esa ocasión, julio del 2006, la palabra que usted empeñó ante dicho foro universal, fue para asumir un acuerdo mediante el cual, el país fue retirado, provisionalmente, del banquillo de los acusados, gracias a su palabra y compromisos ahí asumidos, nada menos y nada más que ante los representantes laborales, patronales y de los gobiernos de casi todo el mundo.
Recuerde señor Presidente y Premio Nóbel de la Paz, que usted y su Ministro de Trabajo y Seguridad Social, se comprometieron y, por tanto, se comprometió al país, en este importante foro internacional, a resolver los siguientes asuntos laborales, que afectan tanto a trabajadores y a trabajadoras, como a las propias organizaciones sindicales de nuestro país:
1- Enviar a conocimiento y debate de la Asamblea Legislativa, así como apoyar en el seno de esto órgano parlamentario, la ratificación de los Convenios 151 y 154 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
2- Impulsar en el seno de la Asamblea Legislativa, la Reforma Procesal Laboral (Código Procesal Laboral), creando una Comisión Legislativa Mixta (diputados, diputadas, sindicatos, cámaras y poderes Ejecutivo y Judicial) y convocar el respectivo proyecto de ley a sesiones extraordinarias.
3- De la misma manera usted se comprometió a convocar, en sesiones extraordinarias de nuestra Asamblea Legislativa, la reforma a varios artículos de nuestro Código de Trabajo, mismas que constan en el Expediente Legislativo 13475; expediente que ya fue debatido y únicamente está pendiente su votación. Como usted, señor Presidente, no ha honrado la palabra empeñada ante la OIT, este proyecto está a punto de ser archivado por vencimiento del plazo cuatrienal, a menos que si se decide honrar lo que se le prometió a tal organismo internacional, sus diputados y diputadas apoyen la moción de extensión del plazo, presentada por el diputado don José Merino del Río.
4- También su Gobierno se comprometió y comprometió al país, de cara a ese foro internacional del Trabajo, a apoyar y llevar al seno de la Asamblea Legislativa, un proyecto de reforma a la Constitución Política, con el objeto de garantizar la celebración de Convenciones Colectivas de Trabajo en el seno de la Administración Pública y del Gobierno Central en particular
Hoy, a la fecha de su segundo discurso como gobernante, ante la Asamblea Legislativa y a casi dos años del compromiso asumido ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la clase trabajadora y sindicatos costarricenses, comprendemos y entendemos su mensaje de apoyo y halago para con la causa patronal solidarista, pero no entendemos ni comprendemos, que usted como gobernante, Premio Nóbel de la Paz, hasta la fecha no le haya cumplido a la OIT y le haya tomado el pelo a la buena fe de nuestra representación sindical, presente en la Conferencia de Ginebra, celebrada en julio del 2006.
Por tanto, en forma respetuosa pero vehemente, demandamos de su persona y Gobierno, cumplir con los acuerdos, saldar la deuda con la OIT y sobre todo, la deuda con la clase trabajadora, sus sindicatos y la democracia costarricense.
Sin sindicatos no hay democracia.
Sin más nos suscribimos de usted,
Albino Vargas Barrantes
Secretario General
Asociación Nacional de
Empleados Públicos y Privados (ANEP)
Edgar Morales Quesada
Coordinador
Plataforma Sindical Común Centroamericana-Capítulo Costa Rica
(PSCC-CR)
Luis Ángel Serrano Estrada
Presidente
Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP)
C.c.
Lic. Francisco Morales Fernández, Ministro de Trabajo y Seguridad Social.
Organización Internacional del Trabajo (OIT), cedes, Ginebra y Costa Rica.
Movimiento Sindical Nacional e Internacional.
Medios de Comunicación colectiva.
Archivo.