El señor Ricardo Martinelli, quien hace poco asumió la Presidencia de la hermana República de Panamá, acaba de lograr la aprobación parlamentaria de una ley que acaba con la estabilidad laboral en el empleo púbico panameño, generándose una peligrosa involución en el desarrollo del Derecho Laboral que pone en peligro a más de 30 mil personas trabajadoras asalariadas de la administración estatal de Panamá.
Más grave todavía es la circunstancia de que dicha ley, adicionalmente, violenta la institucionalidad democrática de la Libertad Sindical y de la Libertad de Asociación; afectando seriamente la naturaleza del principio jurídico del debido proceso y el principio de la legítima defensa. Con esta nueva legislación, Panamá hace caso omiso de sus compromisos en la materia en cuanto a su condición de estado miembro de la Organización Internacional del Trabajo OIT
La derogatoria en Panamá, por parte del Presidente Martinelli, de lo que en Costa Rica equivale al sistema del Servicio Civil, merece la más enérgica condena del mundo laboral nacional y de sus contrapartes internacionales. Panamá había avanzado hacia la construcción de un Estado de Derecho sólido en el seno de su sector Público y había venido mostrando soluciones modernas para un servicio público de mucho profesionalismo y estabilidad.
La “ley Martinelli” amenaza las garantías laborales, la calidad en el empleo y la libre organización; por tanto, nuestra solidaridad de clase, de clase trabajadora, nos lleva a declarar “persona non grata” al Presidente de Panamá, el señor Ricardo Martinelli, durante su visita de horas a Costa Rica, con motivo de la XI Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla, a celebrarse en Guanacaste.
San José, martes 28 de julio de 2009.
Albino Vargas Barrantes
Secretario General ANEP
Edgar Morales Quesada
Secretario General Adjunto ANEP