Sin embargo no concretó en cuales son las medidas que tomaría y mucho menos pudo explicar las razones de porqué hasta ahora se le ocurre que esto es necesario, luego de más de 20 años de estar en ese puesto. ¿No será que detrás de ese “overhaul” sólo se esconde la “operación despido” de las y los funcionarios de la ANEP que no están con él en la contienda electoral que por primera vez en 27 años, de forma histórica se está desarrollando?
Lamentablemente y para información de los costarricenses y en especial de las y los afiliados, debemos decir que desde hace bastante tiempo el Secretario General y su grupo de incondicionales definieron esto, al extremo de hacer circular un correo electrónico en el que se pide al área de finanzas de la organización que le entreguen un cálculo detallado del monto que habría que pagarle en prestaciones a cada trabajador. ¡Lamentable acción de amenaza de despido catalogable como terrorismo, que como organización condenamos cada vez que lo aplica un patrono en el sector público o privado!
Por lo demás está decir que la Tendencia Rescate de ANEP a la que represento, cree que efectivamente la organización necesita CAMBIOS, pero que estos debemos enfocarlos a asuntos más trascendentales entre los que priorizamos:
La regionalización del sindicato para que estemos más cerca de todos los afiliados, fortaleciendo los organismos de base y articulando los diferentes sectores que lo integramos.
La democratización, en la que proponemos crear un Consejo de Presidentes de Seccionales con poder de decisión sobre asuntos trascendentales, la redistribución de los recursos financieros, humanos y materiales, para que el respaldo y apoyo real llegue a todos los organismos y afiliados. La realización periódica del Congreso establecido en los estatutos, donde se puedan discutir y acordar participativamente las orientaciones políticas de la organización, desterrando las visiones personalistas y el caudillismo.
La creación de un programa de formación sindical con financiamiento permanente, para preparar a los afiliados y a los próximos dirigentes de seccionales, regionales y nacionales.
Hacer transparente el manejo financiero, humano y material de la organización para que nunca más nos vuelva a ocurrir lo que pasó con el frustrado proyecto TITI.
Mejorar TODOS LOS SERVICIOS QUE BRINDA LA ANEP, para que las y los afiliados sean atendidos como se lo merecen. Aquí indicamos que esto tendrá que realizarse con participación protagónica de todas las partes involucradas, destacando a los afiliados que reciben los servicios, como los trabajadores de ANEP que lo brindan.
Como puede verse hay muchos cambios que podemos realizar en la organización, antes que llevar a cabo una “cacería de brujas” en contra de cualquier posición que no sea la del que manda. Nosotros esperaríamos que sea posible realizar varios de estos proyectos independientemente de cual sea el resultado de las elecciones. Podemos construir colectivamente una agenda – sindicato que trascienda el momento político que vivimos.
Por último no podemos dejar de indicar, que si proponemos realizar estos proyectos y cambios, lo es con el objetivo estratégico de transformar a la organización para que adquiera la fuerza necesaria para enfrentar las grandes luchas que se avecinan en contra del modelo neoliberal y excluyente que se viene imponiendo en el país, el que está llevándonos aceleradamente hacia la pérdida de derechos fundamentales, como la salud, la educación, la seguridad y la felicidad. ANEP debe pasar de ser un fenómeno privilegiadamente mediático y una especie de “tigre de papel”, a una organización con gran capacidad de organizarse y movilizarse junto al variopinto movimiento popular costarricense, en defensa de la patria en peligro.
* Candidato a la Secretaría General
Tendencia Rescate de ANEP