El Viernes 29 de Enero, alrededor de las 8 p.m., el compañero Pedro García salió de su trabajo en la Municipalidad de Malacatán, San Marcos, para trasladarse hasta su casa, pero en el trayecto fue interceptado por asesinos desconocidos que le dieron muerte con saña. Dispararon en su contra 23 balazos. Pedro era dirigente del Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras de la Municipalidad de Malacatán y, a su vez, de los vecinos de su comunidad que se oponen a la presencia de Unión FENOSA en su Departamento y en el país. Aunque no hay testigos, es criterio generalizado entre la población que este nuevo hecho de sangre fue perpetrado por las mismas fuerzas criminales que previamente dieron muerte a Víctor Gálvez y a Evelina Ramírez, con un modus operandi similar y, muy probablemente, con idéntica autoría intelectual. Adjuntamos íntegro el comunicado que, sobre este doloroso hecho, hicieron circular los compañeros del Movimiento Sindical Indígena y Campesino de Guatemala, MSIC-G, del cual el FNL es parte, en el cual se explica con detalle lo acontecido.
Dos días después, el Domingo 31 de Enero a eso de las 5 p.m., antes de que cayera el sol, el compañero Santos Cruz Nájera, dirigente comunitario de San Carlos Alzatate, salió de su casa a ver unas vacas que tenía pastando en un potrero cercano. Nunca regresó con vida. Desconocidos lo atacaron a machete y su cuerpo, aún con vida, sus familiares lo localizaron temprano el Lunes, a 500 metros del terreno que había ido a visitar. Murió desangrado en brazos de sus hijos antes de recibir atención médica.
Don Santos cometió el “flagrante delito” de colocarse al frente de su comunidad en la lucha contra la corrupción imperante en su Municipio y por impedir que la Alcaldía asumiera un préstamo leonino que hipoteca el futuro de hijos y nietos de San Carlos Alzatate. Por ello, había recibido varias amenazas de muerte, que fueron oportuna pero infructuosamente denunciadas.
Ambos casos son absolutamente inaceptables. Permitir que la represión y la muerte retomen el sitio de instrumentos únicos para la resolución de conflictos es, simple y sencillamente, aceptar un retorno a un pasado que no debe de reinstalarse.
Que la fuerza bruta, el crimen, el terror sean las armas para disuadir las legítimas luchas populares es del todo intolerable.
De todas maneras, es un hecho que esta violencia que se le impone al pueblo empieza ya a colmar los ánimos. A lo largo y ancho del país muchas agrupaciones populares se preguntan si, ante esta oleada represiva, no será ya tiempo de asumir la auto-defensa como estrategia de sobrevivencia.
¿Cuántos muertos más tienen que sumar las legítimas organizaciones populares antes de que el agua llegue al cuello? No se le puede pedir a la población que siga poniendo la otra mejilla cuando lo que la golpea son balas.
En ese marco el Gobierno, dando prueba fehaciente de su sumisión abyecta ante el capital extranjero y de su voluntad antipopular en defensa de los ricos, decide prolongar por cuarta vez consecutiva el Estado de Sitio en San Marcos, es decir, retirarle al pueblo sus garantías y derechos, sin razón alguna que justifique semejante disparate. Argumenta que lo hace porque aún no se ha normalizado el pago de los cobros que realiza Unión FENOSA. Con ello, aporta no un grano sino una carretada más de arena al descontento social que ha sabido ir acumulando.
Está conduciéndose al país hacia un punto muy peligrosamente cercano al de la ingobernabilidad. El Gobierno Central, con sus Estados de Prevención anti-populares, está sentando la violencia como pauta a seguirse para enfrentar la conflictividad social, y el pueblo ya está cansado, (pero empieza a estar harto), de ser quien siempre pone los muertos.
Por su parte el Congreso de la República, la Corte Suprema de Justicia e incluso la Corte de Constitucionalidad, ante esta situación guardan un silencio que los convierte en cómplices. Al fin y al cabo, sabio es el refrán que afirma que_ “quien calla, otorga”_. Y varios Gobiernos locales parecen ser coautores de la matanza.
Estas instancias del Estado deben pronunciarse y actuar al respecto, y deben hacerlo cuanto antes. Dejarlo para mañana puede ser demasiado tarde.
Desde el FNL exigimos la intervención de las autoridades correspondientes a efectos de que pongan fin, de una vez por todas, a estas prácticas políticas asesinas.
En particular pedimos la intervención de la CICIG, como único cuerpo de investigación en el país al cual se le puede depositar confianza. Instamos a la CICIG a acelerar los procesos que ha puesto en marcha, como vía para evitar que la lista de Héroes y Mártires siga creciendo. Los culpables, tanto los materiales como quienes dieron las órdenes, deben pagar sus culpas en términos de lo inmediato.
Instamos a la comunidad internacional, como un ferviente llamado a la solidaridad activa, a incrementar su presión sobre Unión FENOSA y sobre el Gobierno de Guatemala, a efectos de detener el baño de sangre que sigue enlutando al pueblo a lo largo y ancho del país.
¡LA LUCHA SIGUE!
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EL MOVIMIENTO SINDICAL, INDÍGENA Y CAMPESINO GUATEMALTECO –MSICG-
Actuando a través de su consejo político
DENUNCIA:
1. Que desde el año 2009 los trabajadores sindicalizados del sector municipal aglutinados en el MSICG, miembros específicamente de la Confederación Central General de Trabajadores de Guatemala, CGTG, Confederación de unidad sindical de Guatemala CUSG y la Unión sindical de trabajadores de Guatemala UNSITRAGUA han venido trabajando de manera unitaria en el diseño e implementación de estrategias para enfrentar las graves violaciones a la libertad sindical y derechos laborales cometidas por el Estado de Guatemala en su calidad de empleador por medio los Alcaldes y concejos municipales, trabajo que además ha permitido elaborar una propuesta de reformas a la Ley de Servicio Municipal que el MSICG ha presentado al Congreso de la República de Guatemala como parte de una agenda legislativa actualmente conformada por siete propuestas tanto de reformas a leyes existentes como de creación de nuevas leyes. Entre estas también la propuesta de eliminación del pago dietas a dirigentes sindicales por la representación de su sector en los diferentes espacios en los que se participa.
2. Como parte de este proceso con fecha 05 y 06 de enero del año en curso los trabajadores sindicalizados de la Municipalidad de Malacatán organizaron acciones para demandar el pago de los salarios que se les adeudaban desde el mes de diciembre del año 2009, el pago del aguinaldo correspondiente al año 2009, el cumplimiento del pacto colectivo y el pago de otras prestaciones laborales. Todos ellos derechos mínimos obligatorios contemplados en la legislación laboral.
3. La acción estuvo encabezada por el compañero PEDRO ANTONIO GARCIA, Secretario de Cultura y Deportes del Sindicato de Trabajadores Municipales de Malacatan, San Marcos; Sindicato afiliado a la Confederación de Unidad Sindical de Guatemala CUSG y al Movimiento sindical, indígena y campesino guatemalteco –MSICG-.
4. Con fecha 29 de enero del año 2010, a eso de las 08:00 AM, el compañero PEDRO ANTONIO GARCIA se retiró de su centro de trabajo ubicado en la Municipalidad de Malacatán rumbo a su casa de habitación, siendo interceptado minutos después, a las 08:15 Am, por individuos que fuertemente armados le dieron muerte. El asesinato se produjo en la Finca Barranca Honda, Malacatan, San Marcos. En el lugar de los hechos se encontraron, 23 cascabillos de arma de fuego.
5. Una vez más el MSICG condena este hecho de sangre en contra de sus bases, y las graves violaciones a los derechos laborales y sindicales de los trabajadores y trabajadoras guatemaltecas especialmente de los trabajadores aglutinados en el sector municipal donde el empleador es el propio Estado de Guatemala a través de los gobiernos municipales.
6. El MSICG llama la atención de la Comunidad internacional y nacional sobre la reiterada violación de los derechos sindicales y laborales acaecidas en las Municipalidades y la protección de que gozan las mismas para actuar con toda impunidad. Hace apenas unos días condenamos la intimidación e intento de asesinato de que fuera objeto, justo al iniciar el año 2010, nuestro compañero ABEL ROLDAN Directivo del Sindicato de trabajadores de la municipalidad de Zaragoza y los al menos 6 asesinatos acaecidos en el año 2009 contra los miembros del Sindicato de trabajadores comerciantes de Coatepeque, ambos miembros de la Confederación Central General de Trabajadores de Guatemala –CGTG- y adscritos al Movimiento sindical, indígena y campesino Guatemalteco.
7. Solicitamos a la Comunidad internacional fiscalizar el cumplimiento de los derechos laborales y sindicales en todas aquellas municipalidades con las que cooperan y limitar cualquier tipo de apoyo al respeto del Estado de derecho, principalmente al respeto de los derechos humanos laborales y sindicales.
8. Exigimos al Ministerio Público investigar este asesinato y cualquier vínculo que haya podido tener en él la parte empleadora, es decir el Alcalde y miembros del Consejo Municipal, de la Municipalidad de Malacatán, San Marcos.
9. Ante este panorama reiteramos una vez más la solidez de nuestra lucha por la justicia social, la democracia y el respeto a los derechos socioeconómicos del pueblo de Guatemala.
¡ANTE LA REPRESIÓN: ORGANIZACIÓN Y UNIDAD!
¡PORQUE SOLO EL PUEBLO SALVA AL PUEBLO!
MOVIMIENTO SINDICAL, INDÍGENA Y CAMPESINO GUATEMALTECO –MSICG-
Guatemala, 2 de Febrero del 2010