Este jueves 10 de agosto, en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), prácticamente ocurrirá el desenlace de las conversaciones entre las autoridades del Gobierno del Presidente Arias Sánchez y las principales organizaciones laborales representativas del Sector Público, a propósito del tema salarial del semestre en curso y de toda la administración.
El Gobierno debe dar dos respuestas claras. Por un lado, referirse al documento entregado por el Movimiento Sindical Costarricense, sobre los contenidos para una política salarial integral en los cuatro años de su mandato. Por otro, decidir el porcentaje salarial definitivo para este segundo semestre ya en curso, luego del anuncio indignante y generalizadamente rechazado del 2 %.
Sobre este último aspecto, es insostenible la propuesta del 2 %, porque el argumento de que no hay plata no tiene asidero a juzgar por los siguientes datos:
Primero: El Banco Central subestimó las cifras del crecimiento económico del 2005, pues en realidad fue del 5.9 % del Producto Interno Bruto (PIB) y no del 4.1 % como inicialmente lo había previsto.
Segundo: Los ingresos reales del Gobierno crecieron en un 9 % durante los cinco primeros meses de este año, pues hubo 50 mil millones de colones más que en el 2005. El superávit primario entre esos dos años aumentó.
Tercero: El Gobierno alargó los plazos y redujo las tasas de interés de la deuda. Según los datos, la deuda pública que vence entre 1 y 5 años, pasó del 34 al 39 %; y las tasas de interés a corto plazo bajaron 3 puntos y las de largo plazo, 4 puntos.
Cuarto: la inversión extranjera directa superará los mil millones de dólares este año, lo cual es indicador de que la situación de las finanzas públicas puede mejorar; a través de una agresiva política tributaria que no tenga compasión con los grupos ganadores de las políticas económicas de los últimos años y que, precisamente, son los receptores de esa inversión.
Lo anterior quiere decir que hay dinero para un incremento salarial mayor al ridículo e indignante 2 %, por cuanto hay mayor disponibilidad de recursos dado que hubo mayor crecimiento económico, la presión de los intereses de la deuda bajó, se aumentaron los ingresos y la inversión extranjera rompe marcas.
Todo ello permite a las autoridades del Ministerio de Hacienda tener un escenario de mayor flexibilidad para considerar un incremento salarial para el Sector Público sensiblemente superior a ese vergonzoso 2 %.
Después del jueves 10 y sin un resultado satisfactorio, cualquier cosa puede pasar.
San José, 8 de agosto de 2006.
Albino Vargas Barrantes
Secretario General
Edgar Morales Quesada
Secretario General Adjunto