Un grupo de sindicatos convocó a una concentración y luego a huelga en los próximos días, con el fin de exigir mejores salarios para los sectores público y privado, defender a Japdeva y oponerse al plan de reforma fiscal.
Los sindicalistas realizarán primero una concentración frente al Ministerio de Trabajo, el 23 de febrero, para plantear el pedido sobre salarios.
Al mismo tiempo, anunciaron una huelga nacional para el 10 de marzo, fecha en la que exigirán la mejora en las remuneraciones en los sectores público y privado.
Ese día tienen previsto una concentración masiva en la capital y una marcha hacia el Congreso.
“La agenda de lucha consta de varios puntos, pero el primer objetivo específico es lograr una política sostenida de salarios crecientes para los sectores privado y público, y así acabar con el congelamiento salarial”, dice un comunicado de la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE).
Los sindicatos públicos advierten que no están satisfechos con el alza del 2,33% que se aprobó para este semestre por parte de la Comisión Negociadora de Salarios del sector público.
Ellos exigían un ajuste extra de 1,25% para quienes perciben menores ingresos.
Édgar Morales, de la Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP), dijo que a la protesta también se sumarán los trabajadores de la Central Social Juanito Mora.
Asimismo, participarán la Central General de Trabajadores y los sindicatos del Banco Popular y la Universidad de Costa Rica.
El segundo objetivo de esa huelga es exigir que no se apruebe el plan fiscal, el cual se discute en la Asamblea Legislativa.
La agenda gremial anunciada incluye “la defensa de los muelles de Limón y de las instituciones autónomas y la oposición al Plan de Fortalecimiento Municipal y Descentralización”.
Fuente: nacion.com
Vanessa Loaiza N.