El pulso protagonizado entre gobierno y sindicatos no tuvo vencedor. Tras seis días de plantarse en el sétimo piso del Ministerio de Trabajo, agotadoras y largas conversaciones, documentos que iban y venían y de presentar propuestas horas después de la hora convenida, ninguno de los dos bandos obtuvo resultados positivos.
El movimiento sindical no logró que el Ministerio de Trabajo desistiera de la intención que tiene el Gobierno de reconocer la reunión del 15 de enero en Limón, donde el autodenominado “Grupo mediador” en el que se acordó el cambio del modelo de gestión de los muelles de Limón y Moín a cambio del pago de una indemnización que en total sumaría $137 millones.
Tampoco el Ejecutivo pudo que los sindicatos le dieran el visto bueno al hecho de que la mencionada agrupación al planteamiento de que el Ministerio de Trabajo reciba, valore y resuelva cualquier documentación que aporte el grupo mediador.
Ante esta situación ambas partes dieron por agotado el proceso de negociación y los sindicatos esperaban ser desalojados del piso siete y el Ministerio de Trabajo y el viceministerio de la Presidencia, Álvaro González y Roberto Thompson, respectivamente, esperaban las órdenes que se emitirían desde Casa Presidencial.
Minutos antes de las 7:00 p.m., las organizaciones sindicales acordaron abandonar, pacíficamente las instalaciones del Ministerio de Trabajo, tras seis días de estar en el piso siete, inicialmente en el despacho del Ministro y luego en el salón de ex ministros.
Hasta las últimas consecuencias
Y es que el movimiento sindical del país le exige al Gobierno respetar la autonomía, libertades y derechos sindicales, por lo que en conjunto solicitaron a las autoridades del Ministerio de Trabajo desconocer al “grupo mediador” que está a favor de la concesión portuaria, pues el Sintrajap es la representación legal de los trabajadores portuarios, legalmente constituido.
“Sentimos que el Gobierno necesita mantener, a toda costa, su cruzada ilegal para legalizar lo que hemos llamado la mordida, el soborno, la compra de conciencias por $137 millones para que se lo ‘repartan’ entre 1.500 personas”, reafirmó Albino Vargas, secretario general de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP), quien manifestó además que “lucharemos hasta las últimas consecuencias para que la mordida más grande de la historia del Estado costarricense no se consuma”.
José Luis Castillo Solano, del sindicato de Trabajadores de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Sintrajap), comentó que con las acciones emprendidas por el Gobierno las cuales fueron calificadas de “chantaje” pretende disolver la agrupación sindical.
“No han logrado consumar el golpe de Estado. Sintrajap no va a permitir que se consuma y que se apruebe ese vulgar, inmoral, deshonesto y corrupto intento de hacer un golpe de estado en un sindicato que es una organización social legítimamente constituido y legalmente inscrito con todas sus condiciones a derecho y tampoco lo permitirá el movimiento sindical”, recalcó Castillo.
Tras dar la conferencia, los sindicatos no dieron espacio para hacer preguntas.
Hasta aquí
Por su parte, el viceministro de la Presidencia, Roberto Thompson, sostuvo que el Poder Ejecutivo se ha interesado por velar y resguardar las garantías de los trabajadores de Japdeva, y prueba de ello, es el proceso de negociación emprendido, pero que tras las últimas horas se determinó que las conversaciones ya no iban a ninguna parte.
“Hemos llegado a un punto en el que ya no podemos avanzar, pero siempre existe la posibilidad de llegar y sentarnos en la mesa de diálogo, pues existen otros temas, además de este, que están pendientes con las organizaciones sindicales”, afirmó Thompson.
El jerarca del Ministerio de Trabajo, Álvaro González, manifestó que hasta el momento, esa instancia no ha recibido la petición para el reconocimiento de la reunión y los acuerdos alcanzados el 15 de enero anterior, por lo que no puede adelantar criterio al respecto.
Última actualización el Martes 26 de Enero de 2010 09:12
Fuente: La Prensa Libre
Krissia Morris Gray