Queríamos saber sobre el aumento salarial del primer semestre del presente año, de lo cual sólo tenemos una carta firmada por el jerarca, en la que nos informa que el aumento correspondiente debe limitarse al costo de vida emitido por el Banco Central de Costa Rica (BCCR), pero no nos dice cuándo se hará efectivo.
Qué piensa el Sr. Alcalde Molina Rojas sobre la vigencia de la Convención Colectiva de Trabajo y sus alcances, para exigir el cumplimiento de derecho que atañen a los trabajadores y las trabajadoras municipales; también sobre la Salud Ocupacional, tan venida a menos en esta municipalidad desde siempre; así como algunas otras cosas que no se contemplaron en la carta, como el asunto de las últimas contrataciones de personal, que según algunas autoridades municipales sobrepasan el numero de los despedidos por “Modernización Institucional”.
Pretendíamos, también, discutir sobre la necesidad de definir políticas claras para normalizar la secuencia de sesiones en la Junta de Relaciones Laborales, toda vez que la misma se ha perdido.
En la citada carta de la ANEP, demandamos al señor Alcalde Municipal, atención para resolver con diligencia, los problemas que agobian a los funcionarios y funcionarias de la corporación; enfatizando el término “demandamos” obligados por su actitud displicente, para con el sindicato y los trabajadores, después de los recursos interpuestos por ANEP, contra los despidos aplicados al personal, para nosotros injustificados.
El señor Alcalde Molina Rojas se sorprendió por el término displicencia; no obstante, ocho días después del recibo de nuestra misiva, nos da la razón al respondernos con un lacónico oficio que denota esa actitud. Juzgue usted. Lea al dorso la carta de respuesta que firma el citado jerarca y tome nota; ha pasado más de un mes y aún no ha tenido la “oportunidad” de atendernos.
Ante tal situación, ANEP ha considerado oportuno cambiar de táctica. No más cartas que las estrictamente necesarias al señor Alcalde Molina Rojas; ni más consideraciones que a la postre resultan infructuosas. Nuestras gestiones se harán ante las autoridades competentes: Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Sala IV y Juzgados de Trabajo; amén de denunciar ante instancias internacionales como la Organización Internacional del Trabajo (OIT), dependencia de las Naciones Unidades (ONU). El daño a Costa Rica se lo hará el Alcalde Molina Rojas, no la ANEP.
Además, impulsaremos las acciones propias de los sindicatos y los trabajadores cuando no se nos quiere escuchar. Esto último implica más organización y más espíritu de lucha. Sólo así, recuperaremos el aumento salarial correspondiente al primer semestre de este año y nuestro derecho a los beneficios que contempla nuestra Convención Colectiva de Trabajo.
Preparémonos para hacerle una visita al señor alcalde en su propio despacho, en fecha próxima.
“Si Mahoma no viene a la montaña la montaña debe ir a Mahoma”. Allí está nuestro aumento salarial. Sólo falta que se firme el Convenio Simple como es costumbre, para que el Señor Alcalde Municipal honre su compromiso de no atrasar aumentos.
A todos consta, que ANEP ha actuando con respeto, con paciencia, con transparencia, con contundencia. El poder es usted. Decídase a emplearlo.
ANTE LA INTRANSIGENCIA, LA RAZÓN Y LA FUERZA.
LOS TEMORES NOS EMPEQUEÑECEN
AFÍLIATE A LA ANEP
San José, 21 de abril de 2004