1. El comercio y las exportaciones mexicanas aumentaron dramáticamente, así como la inversión extranjera en México…
Durante la vigencia del tratado, las exportaciones mexicanas se triplicaron, sin embargo se concentraron en el sector de manufactura es decir de productos industriales. Además en el período de vigencia del Tratado se atrajo una enorme cantidad de inversión extranjera.
2. Sin embargo, la economía no creció…
Por el contrario, la tasa de crecimiento económico por habitante es de apenas el 0.98%. ¿Por qué sucede esto? Básicamente porque las inversiones extranjeras importan la gran mayoría de la materia prima para volverla a exportar. En Costa Rica, la zona franca, apenas compra en Costa Rica el 7% de lo que necesita para producir. Todo lo demás lo importa para luego volverlo a exportar.
3. Pero además el empleo cayó dramáticamente
En el sector agrícola en el periodo de vigencia del TLC la proporción de trabajos bajó del 27% al 18%. El TLC abrió una cascada de importaciones de granos básicos de Estados Unidos, lo que empobreció dramáticamente las zonas rurales de México.
El sector ganador del tratado, que es el manufacturero y que ha incrementado dramáticamente sus exportaciones, perdió empleos. En el período de vigencia del tratado perdió el 9.4% de empleos.
4. Y como si fuera poco los salarios también empeoraron
En el sector manufacturero que es el ganador del tratado, los salarios cayeron 7%, y en las empresas industriales grandes los salarios cayeron un 40%
5. Todavía falta más: los empleos que se han creado con el TLC son, en su gran mayoría informales, es decir, no aseguran a sus trabajadores ni les pagan lo que por ley corresponde…
Además el 59% de los empleos nuevos no cumplen con seguridad social, aguinaldo y días de vacaciones, que son los derechos de carácter legal. Si solo se toma el empleo asalariado, 49% de los empleos no cumplen con esos derechos. Esto no solo es un fenómenos mexicano. En los tres países que negociaron el TLC se perdieron empleos, se perdieron prestaciones sociales y se precarios el empleo, afectando las clases de menos ingresos.
6.¿Qué va a pasar en Costa Rica?
Una de las principales preguntas que debemos hacernos es qué va a pasar con nuestros puestos de trabajo luego del TLC?
Para poder contestar esto deberíamos decir primero que, los empleos se van a afectar de forma distinta, si se trata de empleos dirigidos a la exportación a Estados Unidos, o bien, a empleos dirigidos a la producción para el mercado interno, es decir, empleos que producen bienes y servicios que nos vendemos entre nosotros.
Tal y como lo ha anunciado el Gobierno, con muy escasas excepciones, el TLC lo que va a permitir es que se mantengan vigentes las condiciones que ya han existido para las empresas que exportan a Estados Unidos, es decir, va a representar lo mismo que hemos tenido hasta ahora.
En ese sentido, para las empresas costarricenses ligadas a la exportación, más allá que la permanencia de las normas que ya existían, el TLC no va a representar por sí mismo ningún empleo nuevo.
Sin embargo, los productos elaborados en Estados Unidos, en determinado plazo van a entrar libre de impuestos, o con impuestos muy bajos a Costa Rica. Esto hará que, por ejemplo, si un productor nacional produce frijoles, y a partir del Tratado o un tiempo después se empieza a importar frijoles de Estados Unidos a un costo menor, el productor nacional tendrá que desaparecer, o bien procurará evadir las contribuciones a la seguridad social, los impuestos, etc., para poder bajar sus costos y así tratar de competir con el frijol traído de Estados Unidos. Lo mismo sucederá con las papas, el pollo, la carne de cerdo, etc.
Es decir, esto significa que los productores que deben competir con las importaciones de Estados Unidos probablemente se quedarán sin empleo, aumentando la pobreza en el país, sobre todo en zonas rurales, y generando mayor inseguridad ciudadana como producto de gente sin empleo emigrando a San José. Dentro de los sectores más claramente afectados están el campesinado nacional, que actualmente representa 161.395 empleos.
Fuente: La situación del trabajo en México, 2003. Enrique de la Garza y Carlos Salas coordinadores.