Entre camaradería, sentidos homenajes y enérgicos llamados a luchar contra la corrupción del Gobierno y el desmantelamiento de las garantías sociales, transcurrió la cuarta Sesión del Consejo Consultivo Nacional de ANEP, celebrada el pasado viernes 28 de setiembre, y que reunió en el Auditorio de la Conferencia Episcopal (CECOR) a unos 250 dirigentes de base provenientes de todo el país.
La actividad, presidida por el Secretario General de ANEP, Albino Vargas Barrantes, y el Secretario Adjunto, Walter Quesada Fernández, dio inicio a las 9:15 a.m. con las notas del Himno Nacional y la aprobación por unanimidad de la agenda. En sus palabras iniciales, Vargas fue enfático en afirmar que ANEP se ha constituido en un ente con total independencia político-partidaria, y que por esto mismo ya ha habido “coqueteos” de distintos actores políticos interesados en generar algún tipo de acercamiento, sobre todo en el contexto preelectoral. También reconoció el intenso trabajo realizado, desde ANEP y todas sus seccionales, en aras de consolidar la actividad de la organización sindical.
Posteriormente se abrió un espacio donde compañeras y compañeros de distintas seccionales expresaron su satisfacción por la labor realizada y por el apoyo que de una u otra forma han recibido de ANEP, tanto en los logros alcanzados como en las luchas que se han dado por persecución y conflictos varios que enfrentan los afiliados en sus instituciones. Tal es el caso de la compañera Heidy Mena, de la Municipalidad de Nicoya, quien contó su experiencia reciente y destacó que el suyo fue el primer caso de despido sin causal justificada que se resuelve –con restitución en el puesto– gracias a la acción directa del movimiento sindical, es decir, sin recurrir a instancias judiciales.
“Esto es una causa viva, un corazón enérgico”. Con estas palabras cerraba su intervención el compañero Roy Castillo, del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, en relación con el espíritu que impera en el movimiento sindical, y que se vio reflejado en las experiencias compartidas. Por su parte, Heiner Díaz de la Municipalidad de Heredia, hizo énfasis en la idea, reiterada luego por Albino Vargas, del “sindicalismo ciudadano” como forma de organización construida desde las y los trabajadores, lejos de intereses y compromisos partidarios. Unas 10 intervenciones en total siguieron la misma tónica y fueron recibidas con aplausos por parte de las y los asistentes.
Casi una hora después, se retomó la agenda con la lectura de la carta que horas más tarde se entregaría al Fiscal General de la República, en relación con las denuncias de irregularidades financieras en la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), pidiendo que se agilice el proceso respectivo.
El trabajo de taller organizativo que estaba previsto en relación con las “10 medidas para comenzar a ordenar la Caja” no pudo realizarse ya que las condiciones de espacio y tiempo no eran las idóneas, así que se invitó a los presentes a trabajar el tema en cada una de sus seccionales.
La Reforma Procesal Laboral y las pretensiones del gobierno con respecto a los “pluses” salariales, fueron los siguientes puntos en discusión. Con distintos artículos de prensa publicados en el transcurso del mes que evidencian la posición del gobierno y sus aliados y la contrarrespuesta de ANEP, tanto Vargas como el asesor político Rafael Mora expusieron las condiciones actuales de los proyectos, el progreso de las negociaciones y la necesidad de capacitar a las y los trabajadores en materia de estas reformas con el fin de coordinar las medidas a tomar en el corto plazo.
Lo más emotivo para el final. Con motivo del 152º aniversario de la muerte del ex-Presidente de la República y héroe de la campaña Nacional de 1856, Juan Rafael Mora Porras, se hizo un breve pero emotivo acto de conmemoración a la figura del prócer. En su presentación, Raúl Arias y Mauricio Ortiz llamaron a la recuperación de la memoria histórica de los hechos de 1856-57 y a rescatar la figura de Mora como ejemplo de la lucha social en el país.
Acto seguido se hizo entrega oficialmente de un retrato en gran formato de Don Juanito, y cámaras fotográficas y teléfonos celulares saltaron para capturar este momento. El retrato permanecerá de momento en la Casa Sindical Mario Alberto Blanco Vado, sede central de ANEP –esto, según dijo Vargas, hasta que la Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP) tenga un local propio–.
También se rindió un merecido reconocimiento al compañero José Gerardo Ibarra Garita, por cumplir 40 años de afiliación sindical. Ibarra se ha desempeñado como Inspector de Patentes en la Municipalidad de Turrialba desde el 8 de junio de 1970, y se acogerá a su pensión en diciembre próximo, con lo cual completará 42 años y medio de labor en el sector público. El homenajeado dijo sentirse muy complacido y afirmó que trabajar en la Municipalidad y participar del movimiento sindical ha sido toda una escuela de vida para él.
A las calles. A eso de las 11:45 a.m. se levantó la sesión y los y las participantes se dirigieron a los buses que los llevarían a la Fiscalía General de la República, en Barrio González Lahmann. Una vez allí, poco antes de la 1:00 p.m. y tras unas breves palabras de motivación de Albino Vargas, se solicitó el ingreso al edificio para entregar la carta personalmente al Lic. Jorge Chavarría, Fiscal General. Se indicó que Chavarría estaba atendiendo una llamada y que pronto se daría paso.
Tocaba esperar un poco más bajo el fuerte sol de mediodía, pero eso no bajó los ánimos de los y las presentes. Hubo quienes se refugiaron en los aleros de las casas y muros aledaños, o abrieron sus sombrillas; circularon un par de botellas de refresco que rápidamente se agotaron.
Entre consignas como “En el presente y en el futuro, con la Caja del Seguro” y variopintas bombas y retahílas del compañero Walter Quesada, el tiempo de espera pasó rápido, hasta que se abrieron los portones. Vargas y Quesada ingresaron a la Fiscalía y fueron revisados por los oficiales de seguridad; “seguro porque escucharon a Walter diciendo ¡BOMBA!”, la broma no se hizo esperar.
Pasados unos diez minutos salieron los emisarios: la misión estaba cumplida. Tras abrazos y calurosos saludos, los y las asistentes comenzaron a dispersarse con la satisfacción de concluir otra jornada exitosa, con el “corazón enérgico” del sindicalismo latiendo al unísono.