Honorable y estimada periodista Ana V. Amenábar C., Diario Extra:
Respetuosos saludos. Le quedaremos infinitamente agradecidos si nos concede la publicación de las siguientes declaraciones que dejamos manifestadas por esta vía, dada la nota de prensa que en este día, lunes 23 de julio de 2012, publica el diario de mayor circulación de Costa Rica, en su página 4, con el titular “La alcaldía no está en quiebra“, consignándose declaraciones del señor Marco Antonio Jiménez, alcalde de Nicoya; declaraciones en las cuales a este servidor suyo, él alude directamente, indicando ante pregunta suya, doña Ana, que “Lo que debería decir don Albino Vargas es por qué se reúne con la gente de gobierno ahora que viene el 25 de julio y que el alcalde se le paró como los hombres a este gobierno“…
Al respecto, es más que perentorio indicar lo siguiente:
El pasado jueves 19 de julio de 2012, nos hicimos presente en la Casa de la Cultura de Nicoya para atender convocatoria que nos formuló la Junta Directiva de la Seccional ANEP – Municipalidad de Nicoya, ante la realización de una Asamblea General Extraordinaria de afiliados y de afiliadas a la ANEP en tal entidad. Asistimos en compañía de la señora Iris Cervantes Paniagua, profesional que labora para la ANEP en su Unidad de Desarrollo Organizacional (UDO), a quien se le han asignado las cuestiones cotidianas de tal municipalidad como parte del trabajo sindical de nuestra agrupación.
La indicada asamblea se dedicó a analizar el problema de que el personal no ha recibido el reajuste salarial por costo de vida correspondiente al primer semestre de este año que ya pasó, a la vez de que tampoco hay señal patronal alguna de cómo va a resolver el reajuste que corresponde al segundo semestre de este 2012. El costo de la vida sigue subiendo y la gente trabajadora de la Municipalidad de Nicoya ve deteriorarse el poder de compra de sus salarios. El alcalde de Nicoya le tiene el “perro amarrado“ a sus trabajadores y aunque dice que les va a pagar, no dice cuándo “lo soltará“.
Además de analizó el problema presupuestario institucional pues se está trabajando con el del 2011 ante los problemas de improbación del presupuesto del 2012 por parte de la Contraloría General de la República (CGR), algo imputable al despacho del señor alcalde de Nicoya. Además, este jerarca está impulsando un proceso de que no se sabe si es de “reestructuración“, de “modernización“, de “reacomodo“ o de cualquier otra cosa similar pero sobre lo cual el personal no tiene la menor noción ni, mucho menos, participación alguna.
Sí se hizo mención a que se están cancelando por tal proceso una importante cantidad de dinero sin que, a criterio de la ANEP, sea ello necesario pues hay entes públicos que ofrecen asesorías para transformaciones institucionales de verdad, sin que a la municipalidad le cueste plata. Por ejemplo, se pudo haber acudido al Instituto de Fomento y Asesoría Municipal (IFAM), a la Unión Nacional de Gobiernos Locales, a la Dirección General de Servicio Civil. En tal sentido, nadie se explica porqué el señor Alcalde de Nicoya está gastando plata en eso.
Finalmente, ni el Secretario General de la ANEP, ni la ANEP misma, ni su seccional en la Municipalidad de Nicoya, tenemos nada que ver en el “miche“ que el señor Alcalde de Nicoya tiene con la señora Presidenta de la República. Rechazamos, tajantamente, que pretenda desviar la atención en torno a sus verdaderos problemas, utilizando la limpia imagen sindical de nuestra entidad laboral. Si cometió un error político al respecto, y se compró un pleito por ello que ahora no puede manejar, pues que apechugue con sus consecuencias y no embarre con su “torta“ a la organización de los trabajadores. Él podrá menospreciar al sindicato, como en verdad lo hace, pero no al propio Estado de Derecho que le tiene sentado en la silla de servicio público que está ocupando. La ANEP seguirá en su clásico, histórico y reconocido camino de lucha social en este país; incluso, cuando ya él se haya ido de ese puesto; por tanto, la ANEP estará presente del lado del personal de la Municipalidad de Nicoya.