Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon exige fin de gobierno de facto en Honduras

Julio 6, 2009

El secretario general de la Organización Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, manifestó este lunes que “ningún cambio inconstitucional de gobierno es aceptable”, en referencia al golpe de Estado en contra del presidente legítimo de Honduras, Manuel Zelaya.

“El principio fundamental de la democracia es que cuando un líder ha sido elegido por un procedimiento constitucional su autoridad y mandato como líder de un país deben ser protegidos”, dijo el Secretario, en apoyo al regreso del presidente electo por el pueblo de Honduras, secuestrado y expulsado del país hace nueve días por fuerzas militares de la nación.

Durante una rueda de prensa en la sede de la ONU en Ginebra instó al gobierno de facto liderado por Roberto Micheletti a dejar los caminos de represión y “proteger la vida humana y la seguridad de todos sus ciudadanos”.

En un intento conciliador, Ban les solicitó a las partes contrapuestas en la nación a que unan esfuerzos para “encontrar una solución a través del restablecimiento de los procedimientos constitucionales”.

Con respecto al papel de la Organización de Estados Americanos (OEA), elogió el liderazgo que ha asumido en esta situación y sus esfuerzos por encontrar una solución pacífica.

La OEA ha rechazado de manera categórica la instalación del Gobierno de facto. El pasado sábado mediante una resolución, los Estados miembros del Sistema Interamericano, decidieron suspender a Honduras del organismo, tras no reconocer a las autoridades que intentan gobernar bajo el marco de la inconstitucionalidad.

Ban Ki-moon dijo desconocer “cuál sería la solución práctica después de lo que hemos visto ayer (domingo)”, en relación a la dos muertes que se registraron en la represión policial en los alrededores del aeropuerto de Tegucigalpa.

El pasado domingo el presidente Manuel Zelaya viajó a Honduras acompañado por el presidente de la Asamblea General de la ONU Miguel D’Escoto, con el fin de retornar a su cargo, pero el Gobierno golpista no lo dejó aterrizar en el aeropuerto de Toncontín, Tegucigalpa, donde miles de seguidores le esperaban.

La Fuerza Especial del Ejército hondureño estuvo desplegada en toda la pista. Pocos momentos antes de que apareciera en el horizonte la aeronave que transportaba a Zelaya y Miguel D’Escoto, los militares arremetieron con disparos y gases lacrimógenos contra las cientos de personas congregadas en las afueras del aeropuerto para esperar a su Presidente.

El ataque contra los civiles desarmados dejó dos muertos, uno de ellos un menor de edad, y una cantidad de heridos aún inderterminada.

Imágenes difundidas por teleSUR demostraron de que se trató de una
emboscada, pues los militares permitieron el ingreso de los manifestantes al aeropuerto internacional de Toncontín y luego arremetieron contra el pueblo. En la pista estuvieron militares en posición de combate.

El presidente Manuel Zelaya impulsaba en la nación una convocatoria a una consulta popular no vinculante, en la que los hondureños dirían si estaban de acuerdo o no con la colocación de una cuarta urna en las elecciones del próximo 29 de noviembre.

La cuarta urna permitiría votar en favor o en contra de la instalación de una asamblea constituyente en la nación centroamericana.

Esta iniciativa fue rechazada por el Parlamento de la nación y a partir de ese momento comenzaron los movimientos golpistas.

El mandatario Zelaya fue secuestrado y obligado a abandonar el país. Fuerzas Militares lo trasladaron a Costa Rica y se instauró el Gobierno de facto de Roberto Micheletti, quien hasta ese momento ejercía la presidencia del Congreso.

(TeleSUR)

Carta al Movimiento Sindical hondureño

CARTA AL MOVIMIENTO SINDICAL HONDUREÑO

Jorge Chavarría:
Coordinador de la Federación Sindical Mundial en Honduras

Juan Barahona:
Presidente de la Federación Unitaria de Trabajadores de Honduras (FUTH)

René Andino:
Presidente del Sind. de la Univ. Autónoma de Honduras (SITRAUNAH)

Carlos Reyes:
Presidente del Sindicato de Trabajadores de Bebidas y Similares (STIBYS)

Norma Fonseca:
Presidenta del Sindicato de Trabajadores de la Salud (SITRASA)

Demás organizaciones amigas de la Federación Sindical Mundial:

Movimiento sindical hondureño:

A través de ustedes queremos hacer llegar este mensaje solidario con los trabajadores y pueblo de Honduras, con todas nuestras hermanas y hermanos hondureños.

El día de ayer, domingo 5 de julio, presenciamos con gran indignación la ola de represión que la fuerza fascista del régimen golpista de Honduras desató contra la protesta pacífica de un pueblo que exige legítimamente el regreso del Presidente José Manuel Zelaya Rosales y el retorno a la constitucionalidad en el país.

Utilizando los métodos característicos de dictaduras padecidas en otros tiempos por Latinoamérica, los golpistas no dudaron en agredir con saña a los ciudadanos causando muertos, heridos y un sinnúmero de apaleados, intentado además enfrentar a los medios de comunicación que posibilitaron al mundo conocer la indomable resistencia del pueblo que volcado a las calles, SIN ARMAS y exponiendo su vida, reclamaba el retorno a la democracia.

Es infame y cobarde la actitud de los altos mandos militares que faltando a su compromiso traicionan a la patria y a su pueblo. Ya no podrán volver atrás la historia y tampoco impedirán que la voluntad mayoritaria del pueblo hondureño sea la que triunfe.

La Federación Sindical Mundial, sus organizaciones afiliadas y amigas, en particular su Secretario General, George Mavrikos, los vicepresidentes y la Secretaría América, permanecen atentos y activos denunciando cada una de las maniobras de esta mafia corrupta y ladrona que pronto tendrá que responder por la grave violación del Estado de Derecho en este país y por ser culpables de crímenes de Lesa Humanidad.

Estamos seguros que estos delincuentes organizados que se dicen gobernantes, en su afán de sostener la dictadura serán derrotados por esa masa de pueblo que permanece levantada exigiendo el respeto a sus legítimos derechos.

Honduras es en este momento histórico bastión para salvaguardar la soberanía, independencia y autodeterminación de toda la América Latina y el Caribe; para proteger la seguridad, estabilidad y el futuro de otros pueblos de la región que consolidan la democracia participativa; es la oportunidad de aplastar a los sectores de la ultraderecha conservadora y demostrarles que los pueblos tienen poder para construir sociedades con verdadera justicia social e igualdad y preservarlas con la vida.

Queridos compañeros:

El mundo no ha quedado esta vez observando la masacre. De manera absoluta los gobiernos de todos los continentes, las organizaciones multilaterales, los movimientos sociales y sindicales, ciudadanas y ciudadanos, apoyamos la lucha de los hondureños cerrando el cerco a los tiranos traidores.

Este dramático conflicto ha colocado a nuestra organización en estado de emergencia y no admitiremos ni negociaciones ni salidas tibias.

Desde nuestra posición estamos exigiendo la salida incondicional de todos los integrantes del gobierno de facto con la restitución de su Presidente legítimo; el cese de la represión y el respeto irrestricto a los derechos humanos; el retiro inmediato de la Policía y fuerzas Armadas de las calles de Tegucigalpa; el castigo a los autores intelectuales y materiales de los asesinatos y de los actos de violencia ejecutados contra el pueblo.

Responsabilizamos a los golpistas de la represión contra la población y solicitamos a la OEA y a la ONU acciones eficaces y definitivas para restituir el Estado de derecho en Honduras y devolver la paz y la tranquilidad a su pueblo.

En esta hora de lucha en los que se entremezclan indignación, dolor y sangre para engendrar coraje y firmeza, les acompañamos con la satisfacción de que el sindicalismo clasista de Honduras está protagonizando una proeza que honrará su historia.

FEDERACION SINDICAL MUNDIAL.
Región América

Hipocresía democrática

La reacción de los países ha sido rápida y contundente. Repudio unánime al golpe por parte de presidentes y jefes de gobierno. Censura de las naciones del ALBA, SICA, Grupo de Río y Unión Europea. Reconocimiento incuestionable de Mel Zelaya como legítimo Presidente de Honduras y demanda de inmediata restitución en su cargo.

También se han tomado medidas específicas para respaldar las palabras: expulsión de la OEA, retiro de embajadores, suspensión de créditos internacionales y de ayudas de cooperación, interrupción temporal del comercio regional.

Si bien es posible que estas posturas y presiones no sean suficientes para revertir la situación y obligar a las autoridades de facto a reconsiderar sus actuaciones y restaurar en el poder al Presidente constitucional, sí reafirman el respeto por los valores democráticos.

Pero más allá de las prolijas y pertinentes declaraciones oficiales, también se han observado en estos días gestos y comentarios de personas, medios de comunicación e incluso instituciones que más que expresar una genuina vocación democrática parecen estar cargados de enorme hipocresía. Condenan lo sucedido pero tratan de matizarlo y justificar a los golpistas.

Dicho en palabras simples. En un primer momento critican y rechazan el golpe de Estado, pero luego parecen disculparlo y hasta celebrar el derrocamiento. Las razones: Zelaya se había inclinado hacia la izquierda, había estrechado su amistad con Chávez, su gobierno amenazaba los intereses de una clase política y económica poderosa y pretendía cambiar las normas para reelegirse.

Estos hechos, para quienes tienen una concepción oportunista y sesgada de la democracia, eran más que suficientes para respaldar la separación del Presidente del poder a como hubiera lugar. Llevaba a Honduras por la misma ruta que Venezuela y eso había que evitarlo a toda costa. No importaba que el mandatario hubiese sido elegido con la mayoría del voto popular y que existieran leyes que permitían juzgarlo si las transgredía. Había que sacarlo de inmediato, aunque fuera por la fuerza.

¿Puede un demócrata justificar de alguna manera que el presidente de un país sea detenido por el ejército y obligado a abandonar el territorio nacional sin previo juicio, derecho de defensa y condenatoria? No conozco ningún régimen jurídico que legalice semejante proceder ni a ningún convencido de la democracia que lo avale.

Si un gobernante comete actos ilegales lo que procede es juzgarlo en los tribunales de justicia. Si sus actuaciones contradicen lo que de él se esperaba en la función pública lo que corresponde es enfrentarlo en la arena política. En ninguno de los dos casos se justifica un golpe de Estado. Este razonamiento no admite matices ni gradaciones.

Es difícil predecir lo que ocurrirá en Honduras si el presidente Zelaya regresa a su país. Es posible que se produzcan actos violentos y que se derrame sangre en defensa de la democracia. Triste reminiscencia de una Centroamérica de antaño. Desde esta columna, escrita en la mañana del domingo 5 de julio, hacemos votos por una restauración incruenta del sistema democrático.

07/07/2009

Organizaciones sociales costarricenses piden excluir al gobierno golpista de Honduras sobre el SGP-Plus de la UE

San José, Costa Rica, 2 de julio de 2009.
¡URGENTE!

Señores

Stefano Sannino
Director Para América Latina

Petros Mavromichalis
Jefe Negociador Dialogo Político y Cooperación

Rupert Schlegelmilch
Jefe Negociador de Comercio

Comisión Europea-Unión Europea (UE)

Distinguidos señores:

Reciban un cordial y respetuoso saludo, a nombre de las organizaciones sindicales costarricenses suscriptoras de la presente petición, que nos agrupamos en la Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP), en la Plataforma Sindical Común Centroamericana-Capítulo Costa Rica (PSCC-CR) y en a Federación Sindical Mundial-Región América Central (FSM-AC).

Como es de vuestro conocimiento, la oligarquía neoliberal hondureña derrocó, con el uso de la fuerza militar, al presidente constitucional de nuestra hermana república centroamericana de Honduras, el señor José Manuel Zelaya Rosales.

La oligarquía militar golpista hondureña, hasta ahora, ha hecho caso omiso a los gobiernos, organismos internacionales, personalidades y movimientos sociales del mundo, que exigen a los golpistas (mostrando una impresionante unanimidad), retornar el país por el cause de la convivencia constitucional y democrática.

La respuesta de los golpistas ha sido violenta y energúmena, a la vez que se burlan de la OEA y de la ONU, de los gobiernos de todo el planeta y de los organismos internacionales, reprimen con gran brutalidad al pueblo hondureño, el cual exige desde las calles, el retorno del país a la democracia.

Cientos de ciudadanos y ciudadanas de todos los movimientos sociales, son constantemente amenazados de muerte, golpeados, detenidos y, lamentablemente, asesinatos a mansalva, tal y como ocurrió el pasado domingo 5 de julio, en las afueras del aeropuerto internacional de Tegucigalpa, la capital de Honduras; cuando los militares, sin ninguna contemplación, dispararon sus metrallas contra los manifestantes, dejando como saldo dos muertes y cientos de heridos y personas detenidas.

Consideramos que, si los gobiernos y organismos internacionales no actúan de forma más concreta y categórica, esta desafortunada oligarquía golpista, arrastrará a esta hermana república centroamericana, a una confrontación civil de consecuencias lamentables para el pueblo hondureño; y, llevará a toda la región hacia una inestabilidad política y social preocupante, sobre todo en momentos que la crisis financiera, energética y alimentaria, sume a la inmensa mayoría de las poblaciones de nuestros países en el cause de la pobreza.

Por tanto, observamos que la pura diplomacia no mella en los desalmados golpistas y que, por tanto, se hace necesario y demandamos de los gobiernos del mundo, organismos internacionales y muy en especial de la Unión Europea, tomar otro tipo de medidas que realmente logren persuadir a los golpistas y los lleven a devolver la paz a nuestra hermana República de Honduras.

Consideramos que, en primer lugar, la CE debe suspender, indefinidamente, las negociaciones del Acuerdo de Asociación y de Libre Mercado (AdA), hasta que la constitucionalidad retorne a la República de Honduras; y se proceda, colateralmente, a enjuiciar a los culpables de violentarla.

En segundo lugar, conforme a su compromiso de Diálogo Político y a los Acuerdos de Paz, la CE debe suspenderle a Honduras, las preferencias arancelarias, de las que se beneficia en el marco del SPG plus.

Respetuosamente, consideramos que ante la soberbia y criminalidad manifiesta por esta oligarquía golpista, ya es hora de que la Unión Europea (UE) pase de las sanciones morales a la reales, retirándole de forma inmediata, a Honduras, los beneficios del SPG plus.

Reiterándoles nuestro mayor respeto y consideración,

Albino Vargas Barrantes
Secretario General ANEP
Presidente CSJMP

Luis Chavarría Vega
Secretario General UNDECA
Coordinador FSM-AC

Luis Serrano Estrada
Secretario General SITEPP

Xiomara Rojas Sánchez
Secretaria General SITECO

Francisco Aguilar García
Presidente ASDEICE

Edgar Morales Quesada
Coordinador PSCC-CR

Gilberth Bermúdez Umaña
Coordinador COLSIBA

cc.: Sr. José Manuel Borroso, Presidente Comisión Europea.
cc.: Sr. Hans-Gert Pottening, Presidente, Parlamento Europeo.
cc.:Sra. Benita Ferrero Waldner, Comisaria UERE
cc.: Licda. Lourdes Castro, Grupo Sur.
cc.: Lic. Luis Guillermo Pérez, CIFCA.
cc.: Sr. Juan Moreno, CSE.
cc.: Sra. Onidia Gómez, PSCC.
cc.: Honorable Cuerpo Diplomático de la UE en Costa Rica.
cc.: Gobiernos legítimos y constitucionales de la América Central.
cc.: Organizaciones sindicales y sociales de la Unión Europea y de la América Latina.
cc.: Organizaciones sindicales y sociales de Costa Rica y de la América Central.
cc.: Medios de Comunicación Colectiva.
cc.: Archivo.

ESPECIAL HONDURAS n° 3

www.michelcollon.info – Investig’Action

Tras una interrupción de nuestro sitio web, debido a problemas técnicos, le proponemos consultar nuestras noticias, testimonios y análisis provenientes de Honduras y del mundo. Esta resistencia popular, absolutamente olvidada por los medios tradicionales, necesita de nuestra solidaridad. Se trata también del futuro de toda América latina y del derecho de los pueblos a una alternativa.

Michel Collon y todo el equipo de Investig’Action les invita a difundir estas informaciones, protestar ante las autoridades USA, organizar acciones de solidaridad en su país.

HECHOS :
Michel Collon et Cédric Rutter – Breves urgentes

Yamila Blanco – Diputados del Congreso de Honduras exigen retorno de democracia

Indymedia Argentina – Torturador y jefe de los escuadrones de la muerte, nuevo asesor del presidente golpista

Investig’Action – Ayude al pueblo de Honduras

USA :

Michael Parenti – Honduras: ¿Obama es inocente?

Osly Hernandez – ¿Qué pasa detrás del golpe en Honduras?

COMENTARIOS :

Adolfo Pérez Esquivel – Honduras, tierra desgarrada golpe a golpe

Vicent Boix – ““Estamos volviendo a la época donde ser de “izquierda’ era una herejía”“:http://www.michelcollon.info/index.php?option=com_content&view=article&id=2171:qestamos-volviendo-a-la-epoca-donde-ser-de-qizquierda-era-una-herejiaq&catid=6:articles&Itemid=11

Rosalba Moreno – Y Morazán vigila

Miguel Cáceres Rivera – Carta a un amigo hondureño que está lejos

Lagos Nilsson – La oscura, contradictoria y nueva internacional

Honduras: La triste historia se repite

Honduras tiene a todo el continente en vilo, a una semana del golpe de estado contra el presidente José Manuel Zelaya, la calma y la tranquilidad no se asoman a este país centroamericano. Todo lo contrario, vemos con indignación la imposición de la opinión de un grupo que tiene el poder y las armas para reprimir, manipular y violentar a una población que, como siempre en la triste historia de América Latina, es la más pobre y la más oprimida.

Honduras sufre en manos de hondureños, la población está en la calle apoyando al presidente al que eligió democráticamente, las fuerzas armadas reprimiendo a golpes, los medios de comunicación incomunicados a la fuerza o transmitiendo las voces de los golpistas, los servicios públicos de electricidad con cortes caprichosos, la internet controlada y la telefonía celular interrumpida, mientras asume la presidencia un típico fascista que sonriente inicia su gobierno de facto declarando un estado de sitio, retando a toda la comunidad internacional y al mismo pueblo hondureño.

América Latina, con su historia de guerras y dictaduras ha tratado de construir democracias representativas, de construir herramientas legales y estados de derecho que en este momento, con el vivo ejemplo de Honduras, se muestran frágiles ante los poderes fácticos; tanto como para retroceder a la oscura época de la violencia atroz, llamada también de “seguridad nacional” impuesta en nuestra región por las políticas norteamericanas de dominación en los 70´s y 80´s. Cabe resaltar que Honduras al igual que Costa Rica, fueron centros militares de Estados Unidos en los 80`s, desde donde se atacaba a los movimientos de resistencia en El Salvador y se fraguaba la contra revolución sandinista, hecho que guarda profunda relación con la carencia de una izquierda fuerte y organizada en ambos países; aunque esto tiene raíces más profundas, fortalece históricamente a una oligarquía que se siente dueña y señora del destino de ambos países.

En Honduras, parece que la alianza entre la burguesía oligarca, las fuerzas armadas, la iglesia católica y los medios de comunicación se considera con la facultad de burlarse de los derechos humanos, de la constitución política que dicen defender, de las garantías individuales que aseguran la libre convivencia de la población, de la democracia y de la paz, generando un caos social y una incertidumbre que creíamos no volverían a nuestra Centroamérica, y como si eso fuera poco, subestiman a la población asegurando que todo es por el “bien” del pueblo y como dijo el obispo Maradiaga, “para evitar un baño de sangre”.

La respuesta internacional ha sido clara. La ONU excepcionalmente condenó por aclamación el golpe de estado (como no lo ha hecho en muchos casos como en la invasión norteamericana a Irak), como si tuviese la autoridad moral para condenar y sus juicios cambiaran en algo el rumbo de los acontecimientos. La OEA observa y observa, como siempre, en este caso por lo menos suspendió por segunda vez en su historia, a uno de sus miembros, Honduras, pero veremos en qué actos se concretarán sus observaciones. Tengo fresca en la memoria, que la misión internacional de la OEA encabezada por Insulza, jamás vio el fraude electoral que se fraguó meses antes del referendum costarricense sobre la ratificación del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, realizado el 7 de octubre de 2007, por citar solo un caso.

Lo que sí es admirable en el caso de Honduras, son las voces de apoyo y solidaridad que se han levantado en todo el mundo a favor del pueblo hondureño y repudiando al gobierno espurio. Es admirable también la resistencia de la ciudadanía, que a sabiendas de que una solución mediada y pacífica no se avisora como probable en este momento, está ahí en las calles, gritando y saltando el cerco mediático como pueden. Nos llegan sus mensajes por teléfono, sus grabaciones de video le dan la vuelta al mundo a través del internet y sus fotografías se publican en cientos de sitios web.

Pareciera que al manual del golpe de estado de las élites conservadoras hondureñas les faltó considerar que estamos en otra era, la de la información y la comunicación y que las posibilidades tecnológicas rebasan las obsoletas formas de censurar y las mentiras impuestas (hechos que tampoco consideró el gobierno de Irán frente a los miles de manifestantes que denunciaron el reciente fraude electoral y la represión mediante sus teléfonos y con conexiones a internet de baja velocidad).

Tampoco consideraron los golpistas hondureños que existimos miles de internautas ansiosos de recibir y transmitir información y que mostramos nuestra indignación ante lo que ocurre en ese vecino país como podemos: escribiendo, transmitiendo, multiplicando, investigando, opinando y publicando en internet.

A Honduras debe de volver el presidente Zelaya, electo por la mayoría de la población, que con su acercamiento a la izquierda y sus políticas para beneficiar a los pobres ha ofendido tanto al congreso, a las empresas y a los militares. Debe volver la calma y la discusión y no bajo el reconocimiento de un gobierno de facto, ni adelantando las elecciones presidenciales, lo que constituiría una nueva burla a la democracia y a las leyes hondureñas.

Finamente respondo a la petición de las cientos de feministas que están resistiendo en las calles hondureñas: toda la solidaridad con el pueblo hondureño, condena para los golpistas, condena a la represión, condena al miedo.

* Periodista

Religiosos contra el golpe de Estado

San Pedro Sula, Honduras, 04 de julio del 2009.

Reunidos como Comunidad Cristiana: Miembros de la Familia Dominicana (Orden de Predicadores), Hermanas Claretianas y Hermanas de la Misericordia.

Ante los acontecimientos socio-políticos que se están suscitando en nuestro país, denunciamos y condenamos:

1. La violación de la Constitución de la República de Honduras, producida por el Golpe de Estado mediante el cual, a su vez, se violan todas las Garantías Constitucionales y Derechos Humanos de las personas y pueblos.

2. La Represión constante y sistemática llevada a cabo con la agresión física a personas individuales y grupos por parte del ejército militar hondureño y la policía nacional civil.

3. La desinformación obligada en la que se ha sometido a la ciudadanía mediante la censura de los medios de comunicación radial y televisiva ajenas al gobierno de facto; la libre circulación… llevando la situación actual del país de un toque de queda a un estado de sitio.

Por tanto, abogamos y exigimos ante la Comunidad Nacional e Internacional:

1. El restablecimiento del Orden Constitucional y de las Garantías Individuales y del pueblo hondureño.

2. Dado que con el Golpe de Estado se violaron todos los derechos del Ciudadano Señor José Manuel Zelaya Rosales; sea restituido en su cargo constitucional como Presidente de la República de Honduras.

3. Exigimos el cese a la violencia, la represión y la privación de la libertad en contra de nuestro pueblo.

4. Exigimos el respeto y restablecimiento de las garantías de todos los ciudadanos y ciudadanas de la República de Honduras.

Como ciudadanos y ciudadanas, miembros de la Iglesia, Pueblo de Dios, nos solidarizamos y tomamos parte en los esfuerzos de reivindicación del Estado de Derecho y Constitucionalidad basados en la Verdad, la Justicia y la Construcción de una Auténtica Paz.

A su vez, convocamos a todos los hombres y mujeres del pueblo a solidarizarse y unirse a las movilizaciones en protesta de estos abusos en contra de nuestros derechos fundamentales, los cuales se estarán anunciando previamente.
Firmas:

Fr. Óscar Vásquez OP.
Luis Enrique Jovel
Velia Ocampo.
German Turcios

La lucha social frente al conservadurismo

La conjunción de estos hechos produce tal nivel de temor a las derechas centroamericanas que, con el afán de revertir esa tendencia, han recurrido a sus viejas prácticas como los golpes de Estado. En Guatemala la derecha lo intentó sin mucho éxito. Y lo último que ocurrió en Honduras, como hemos podido atestiguar, fue de los más brutales e impensables en estos tiempos. Tiempos en los que eso de los Golpes de Estado supuestamente estaban relegados al cajón de los malos recuerdos.

En Guatemala, la práctica de los golpes de Estado es algo que, sin duda, marcó a la toda la sociedad. Ahora, y ya por dicha, lo que se escucha en conversaciones de quienes experimentaron estas funestas practicas, son los recuerdos en tono de broma, de los hechos que antecedían cada golpe militar. La interrupción de la programación regular de todas las radios del país, para dar paso a la música da marimba, como preámbulo al anuncio oficial, es un lugar común que recuerda los golpes militares.

En Latinoamérica, durante las sangrientas dictaduras militares, salvando las diferencias, las sociedades experimentaron de forma amarga los golpes de Estado y todo lo que ello implicaba. De ahí que la declaración de anoche en San Salvador, de la presidenta argentina Cristina Fernández, es explicativa cuando señala que el golpe de Estado en Honduras es un golpe para todo América latina. En clara referencia a lo que esta práctica implicaba, para la democracia y paras las víctimas de la represión.

Stroessner en Paraguay, Pinochet en Chile, Ríos Montt en Guatemala, Videla en Argentina, son sólo algunas figuras paradigmáticas que representan esa época de terror que casi nadie quiere volver a vivir. Excepto quienes se beneficiaban de diferentes formas de esa práctica, ya sea para satisfacer sus intereses, como forma de control o como disputa de poder entre cúpulas.

En la actualidad, aunque se viera como algo que nunca pasaría, existen algunas claves que llevan a pensar que, por más que se dieran transiciones democráticas en el marco de la implementación del neoliberalismo, ello no implica que la alianza oligarquía-militares tendría necesariamente que haber desaparecido. Posiblemente porque, en opinión de algunos, al término de las guerras contrainsurgentes, éstos no habían sufrido derrotas estratégicas.

Sólo de esta forma se puede explicar cómo grupos económicos en los que confluyen sectores latifundistas y financieros hagan y deshagan respecto de lo que les conviene en los diferentes países latinoamericanos. Por supuesto, vinculados a logias militares con alto poder de incidencia en el ámbito político. Configurando de esta forma una especie de enclave antidemocrático.

En la actualidad, esa idea anacrónica de poder hegemónico que implementaba la alianza oligarquía-militar y que servía de canal para un mensaje dirigido a las clases populares, que señalaba: “Pueden tener democracia si respetan al capitalismo, pero, si no lo aceptan, se quedarían sin democracia y tendrían que seguir aceptándolo de todos modos”[1]. Esta a todas luces agotada. Pero es evidente como se ha dicho desde diferentes ópticas; y en lo que es necesario insistir; es que sigue exisitiendo la intención de regresarnos a esas épocas. Y eso es algo que simplemente no se puede permitir.

Al término de estas líneas, el gobierno de facto encabezado por el golpista Roberto Micheletti, insiste de manera irracional en no restituir el gobierno legítimo al pueblo de Honduras, y se aferra a su decisión de impedir que vuelva el presidente constitucional Manuel Zelaya.

Por ello, a las decenas de miles de manifestantes que en el aeropuerto de Tegucigalpa esperaban la llegada de quien ellos reconocen como su único presidente, el gobierno de Micheletti, utilizó a su ejército para reprimirles violentamente. Ya se contabilizan en centenares los heridos. Incluso se habla de un número aun no establecido de muertos; seguir por ese camino de confrontación es irracional. La única salida que le queda al gobierno de facto es restituir de inmediato el orden que rompió, y esto pasa únicamente con aceptar el retorno del presidente Zelaya.

[1] Anderson, Perry. Citado en: Revista Critica y Emancipación, Año 1, no. 1. Junio de 2008. Clacso.

Honduras como experiencia piloto

El pueblo hondureño vivió momentos de fuerte tensión y fue brutalmente reprimido por el ejército, provocando muertos y heridos. Los golpistas impidieron que aterrice el avión venezolano que conducía al presidente Manuel Zelaya de regreso a Honduras y al Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Miguel D¨Escoto.

La dictadura hondureña no autorizó tampoco el aterrizaje del avión que conducía a los presidentes de Ecuador, Argentina, Paraguay y al Secretario General de la OEA, Insulza, quienes querían acompañar al presidente Zelaya. Debieron continuar hacia El Salvador.

Un ejército de cobardes y represores, transformado en tropas de ocupación de su propio pueblo, es indigno del pueblo hondureño. Los cómplices que apoyaron el golpe militar para instalar la dictadura son delincuentes a quienes sólo les interesa dominar al pueblo y someterlo. Deben ser juzgados por sus crímenes.

Entre los golpistas hay personajes de diversos ámbitos sociales, políticos, económicos y eclesiásticos, de pastores evangélicos y de la iglesia católica, como el Cardenal Oscar Andrés Rodríguez y el vocero de la Conferencia Episcopal Hondureña, Mons. Pineda, Obispo Auxiliar de Tegucigalpa. Parece que algunos jerarcas religiosos han olvidado el mensaje del Evangelio de buscar la Verdad y la Justicia, y prefieren recostarse en el poder de turno. Lo hemos vivido y sufrido en muchos países durante las dictaduras militares pasadas y ahora en Honduras, vuelven a las andanzas.

Debemos rescatar y señalar a aquellos pastores que son coherentes con el mensaje del Evangelio y no han claudicado, comunidades de religiosos, religiosas, como la Diócesis de Copan, que ha publicado una carta donde denuncian “las graves violaciones de los derechos humanos, la forma violenta en que fue silenciada la Radio Progreso y otros medios de comunicación, las detenciones ilegales, el destierro de algunos compatriotas, los golpes y heridas sangrantes” “No más mentiras. Queremos que se nos diga la verdad. No más injusticias. Queremos el respeto a la integridad de la persona y a los Derechos Humanos. Queremos vivir en libertad. No queremos la represión”. Hacen un claro llamado a la Paz, al diálogo y a restablecer el Estado de Derecho.

Hay silencios que se oyen y golpean la conciencia y es necesario hacer una lectura serena, de gobiernos que se han expresado tímidamente frente al golpe de Estado y que parecen consentir el golpe militar, como el presidente Obama quien se ha pronunciado en el primer momento por presión de los mandatarios latinoamericanos y después, mira para otro lado, sabe que el Pentágono y la CIA son los impulsores y sostenedores del golpe militar en Honduras.

Nos preocupa el presidente de Brasil, Ignacio Lula da Silva, quien aparece desdibujado y sin una presencia clara y decidida frente a la situación que vive el pueblo hondureño.

Los hechos son evidentes, los golpistas desconocen la Presidencia de las Naciones Unidas y la OEA, no les preocupa las sanciones y expulsión de ese organismo. No tienen respeto a los presidentes latinoamericanos, impidiendo su entrada en Honduras.

ES URGENTE QUE LOS PUEBLOS DE AMERICA LATINA Y EL MUNDO SE PRONUNCIEN CON FUERZA CONTRA EL GOLPE DE ESTADO EN HONDURAS. ES UNA AMENAZA PARA TODO EL CONTINENTE, UN INTENTO DE VOLVER A IMPLANTAR LA DOCTRINA DE SEGURIDAD NACIONAL Y EL INTERVENCIONISMO DE EE.UU. EN PAISES DE LA REGIÓN.

No hay casualidades, ni hechos aislados, esto responde a políticas impuestas para asegurar los intereses hegemónicos, políticos y económicos en el continente. Se debe convocar a una fuerte movilización continental para impedir que la dictadura se consolide. Es un llamado de alerta por las consecuencias de otros golpes militares que vuelvan a aparecer en el horizonte de nuestro continente.

El Presidente Zelaya demostró responsabilidad y coraje en el intento de regresar a su país. Los presidentes y representantes de la ONU y la OEA, asumieron la responsabilidad de buscar los caminos de diálogo y tratar de restablecer el Estado de derecho. No han sido escuchados por los dictadores.

La situación que se ha generado en Honduras no ha terminado; queda aún un largo camino de resistencia frente a la barbarie, a la represión y la falta de libertad en Honduras bajo la dictadura cívico-militar.

El pueblo hondureño no está sólo, lo acompañan millones de hombres y mujeres solidarios con su lucha por la Vida y la Libertad en América Latina y el mundo.

Buenos Aires, 5 de julio del 2009

Hondureños mantienen movilizaciones a favor del retorno de Zelaya

TeleSUR 06/07/09

Los movimientos sociales, sindicales y la sociedad civil de Honduras rechazaron la represión militar del domingo que dejó el asesinato de uno de los miles de participantes de la multitudinaria manifestación que esperaba al presidente constitucional de ese país, Manuel Zelaya, y anunciaron que este lunes proseguirán sus protestas pacíficas para exigir el retorno del hilo constitucional en el país centroamericano.

Tal como precisó el enviado especial de teleSUR en Tegucigalpa Eduardo Silvera, la población hondureña no retoma la normalidad en el país y se niega a regresar a su trabajo, clases y actividades habituales, a pesar del llamado del presidente de facto y promotor del golpe de estado del pasado 28 de junio, Roberto Micheletti.

Aunque el cerco militar permitió, aparentemente el paso, ya dentro de las áreas del aeropuerto el pueblo fue violentamente reprimido. Gases lacrimógenos y disparos contra una multitud que reclamaba la restitución de su presidente, democráticamente electo, provocó la muerte de una persona y decenas de heridos.

Luego que se produjera un ataque violento por parte del Ejército hondureño hacia la población, que protagonizaba octava jornada de protesta por la restitución de la democracia en Honduras y el regreso del presidente legítimo, murió un manifestante y el número de heridos aún es incierto.

Se estima que entre 120 mil y 200 mil hondureños acudieron a darle la bienvenida a Zelaya.

Entretanto, los medios de comunicación privados y el gobierno de facto apoyan la actitud del Ejército golpista, y aplauden el hecho de haber impedido el aterrizaje de Manuel Zelaya, según el recorrido por la prensa hecha por Silvera

Mientras se desarrollaban los actos violentos en el aeropuerto internacional de Tegucigalpa, miembros del gobierno de facto de Honduras, protagonizados por Micheletti, ofrecían una rueda de prensa en la que proponían una especie de diálogo con un grupo de la Organización de Estados Americanos (OEA), a pesar que el organismo los desconoce como Gobierno.

La madrugada del domingo, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, anunció la suspensión de Honduras del Sistema Interamericano, a raíz del vencimiento del plazo de 72 horas otorgado al gobierno de facto para que restituyera a Manuel Zelaya en sus gestiones legítimas presidenciales. Micheletti, se abstuvo de acatar la medida.

Para este lunes, se tiene prevista una concentración a las 08H00 locales (13H00 GMT) desde la Universidad Pedagógica de la capital hondureña para dirigirse al aeropuerto Toncontín, en una marcha para exigir que el gobierno de facto permita el ingreso al país centroamericano del presidente Manuel Zelaya.

Luego que la Policía Nacional se retirara de las inmediaciones del aeropuerto y responsabilizara directamente al Ejército hondureño por las muertes acontecidas en la manifestación de la población, los medios de comunicación privados del país insisten en publicar que se trató no de un ataque a los manifestantes, sino de un “enfrentamiento”.

Incluso, reportó Silvera que estuvo presente en el aeropuerto internacional este domingo, luego del anuncio del coronel de la Policía Nacional, retiraron el helicóptero que se encontraba sobrevolando los alrededores horas más temprano, y lo ubicaron en una esquina para evitar más sobrevuelos.

A pesar del estado de sitio, que este domingo fue extendido por tres horas más temprano, la población hondureña aprovechará el tiempo para salir a las calles y cumplir con la agenda establecida.

Luego de que Zelaya intentara regresar a su país para reasumir su cargo de legítimo jefe de Estado hondureño; lo cual fue impedido por fuerzas militares golpistas de su país, presidentes latinoamericanos y los dirigentes de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización de Estados Americanos (OEA), se reunieron en El Salvador para analizar sobre las medidas diplomáticas que se tomarán para la restitución del orden constitucional en Honduras.

Específicamente, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, aseguró que continuará con las acciones para lograr la restitución del presidente constitucional de Honduras Manuel Zelaya.

“Como secretario general de la OEA, estoy dispuesto a seguir con todas las acciones diplomáticas para lograr nuestro cometido, cumplir con las normas que todos los países de la región han adoptado, contenidos en la Carta Democrática Interamericana”
, sostuvo Insulza desde San Salvador.
teleSUR / in – PR