Refinería ahorra dinero al país

Producto de esta negligencia, la ciudadanía costarricense pierde dinero cada vez que llena el tanque de su vehículo, pues los combustibles que se importan terminados son cada vez más caros y en una proporción mayor que el precio del crudo.Según datos de RECOPE, en 2003 el precio del barril de diésel era, $3,16 más caro que el del crudo y para el año pasado, esa diferencia llegó a $12,25, lo que refleja un crecimiento del 285%.

En el caso de la gasolina, la diferencia pasó en el mismo periodo de $6,6 a $12,6 por barril, un crecimiento del 91%.Este aumento es producto del incremento en la demanda mundial de petróleo, la cual está motivada por el crecimiento acelerado de economías emergentes como India y China; la desaceleración en el descubrimiento de nuevos yacimientos, la devaluación del dólar en el mercado internacional (es la moneda en la que se transa mundialmente el petróleo y sus derivados) y una disminución en la construcción de refinerías en el mundo.Tenemos dos décadas de rezago, y el consumo nacional crece año con año, mientras que con la planta de proceso no sucede lo mismo.

Desde el periodo 82-86 nació la idea de ampliar y modernizar la refinería, lo cual originalmente fue aprobado por el Ministerio de Planificación y considerado como un proyecto prioritario. Sin embargo, no se concretó.

En 1989 se presentó a la Asamblea Legislativa un financiamiento mediante un empréstito con el gobierno español por $12,2 millones y no fue sino hasta 1993, cuando se aprobó. Ya para entonces, las normas de los combustibles se habían modificado, por lo que se debió plantear otro proyecto, por desarrollarse en dos etapas, cuyo costo se estimaba en $120 millones.

Por miopía del gobierno no se permitió obtener el dinero necesario para desarrollar la primera etapa y se decidió dividirla en dos fases. La primera concluyó en el 2000 y el resto aún está inconcluso.Gracias a que se hizo una huelga para exigir financiamiento, se autorizó un presupuesto por $125 millones para la segunda fase de la primera etapa.

Pero otra vez el retraso en la toma de acciones le jugó una mala pasada al país y las empresas interesadas en la obra presentaron ofertas por $232 millones y $435 millones, lo que hizo inviable el proyecto.

La desidia y la negligencia por parte de las autoridades de gobierno de las tres últimas administraciones, que no han tomado las decisiones oportunas y la constante politización de los proyectos de RECOPE nos han ganado la partida, cuando finalmente se estaba a las puertas de su ejecución, el proyecto se quedó corto en sus expectativas financieras.Con solo desarrollar esta etapa del proyecto, Costa Rica contaría en este momento con una refinería con mayor capacidad, con lo que se economizarían $70 millones al año (unos 39 mil millones de colones).

Ese dinero equivale a 80 veces lo presupuestado este año en el programa ‘Desarrollo social y lucha contra la pobreza’ o la cuarta parte de lo que invertirá el Ministerio de Obras Públicas y Transportes en mejoramiento y conservación de la red vial en 2008.

Este monto también es comparable a los $100 millones del préstamo con el BID, que el gobierno pretende utilizar para el mejoramiento de la línea del ferrocarril TREM, que unirá a San José, Heredia, Cartago y Alajuela.

Costa Rica requiere asegurar el abastecimiento nacional con productos terminados mediante sus propios medios, ya que la mayor crisis mundial se da con estos y no con el petróleo crudo, cuyo costo es inferior y más fácil de conseguir.Esta situación requiere soluciones inmediatas, RECOPE ha apostado a China como opción para construir una refinería con capacidad para 60 mil barriles, esta es una buena idea, pero aún no hay mayores detalles de cómo se concretaría.

Ahora que se habla de la inserción de Costa Rica a Petrocaribe, lo cual nos daría la ventaja de pagar un 60% del petróleo a 25 años, con un interés anual del 1%, podríamos aprovechar esos recursos y realizar inversiones a largo plazo, como la modernización de la refinería.

En épocas de crisis como la que estamos viviendo, no hay tiempo para seguirle dando vuelta a las posibles opciones, que terminan encareciéndose por no aprobarlas y ejecutarlas a tiempo.

En este momento lo que se requiere son acciones inmediatas para ampliar y modernizar la refinería, lo que traería positivas consecuencias para la población costarricense, con el aseguramiento de combustibles a menor costo y para la limonense que vería un incremento en las opciones de empleo.

* Secretario General Sitrapequia

Movimiento Diversidad llama a protestar

A PROTESTAR CARAJO !!!

TODOS -AS A LA ASAMBLEA LEGISLATIVA
A la Comisión de Asuntos Sociales

MAÑANA 4 DE SETIEMBRE 1:00 PM

A DEFENDER NUESTROS DERECHOS, NUESTRA CIUDADANIA, NUESTRA OPCION DE VIDA

Mañana la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa recibirá a Monseñor Hugo Barrantes cuya Conferencia Episcopal condena los proyectos de avance de Derechos de la Comunidad GLBT como contrarios a la estabilidad de la Familia y del Estado

La Comisión de Derechos Humanos se reúne en la sala de la Comisión de Asuntos Sociales, la cita es a la 1:30p.m. este antes por si acaso no vaya a ser que le impidan la entrada, debe presentar un documento de identidad, cédula o pasaporte.

La privatización del agua

Tres cosas podemos afirmar sobre el agua: (1) es un bien cada vez más escaso porque el consumo crece y solo un pequeño porcentaje puede utilizarse para satisfacer las necesidades humanas, (2) hay zonas del mundo donde la contaminación, la salinización, la carencia de fuentes hídricas y las sequías hacen padecer a millones de personas, y (3) la competencia por usos alternativos (necesidades vitales o regar jardines y campos de golf) aumenta de manera acelerada entre consumidores pobres y ricos.

Esta realidad se refleja en la forma en que el agua es asignada por el mercado. Si la oferta de agua se va reduciendo y crece la demanda de quienes pueden pagar precios más elevados, las leyes del mercado actúan en beneficio de estos consumidores de mayores ingresos, sin importar cuan importante y esencial sea para los otros seres humanos.

Así funciona el mercado. Así son las leyes de la oferta y la demanda. Los “votos monetarios”, a que hace referencia el economista Paul Samuelson, y no las necesidades de las personas, son los que deciden quienes pueden adquirir en el mercado y quienes quedan excluidos.

El agua se está mercantilizando cada vez mas. Se ha ido convirtiendo en un producto que se transa en el mercado y en un negocio que genera millones de dólares de ganancias. Si bien la mayoría de las fuentes de agua en el mundo aún están bajo el dominio público, múltiples contratos de concesión para extraerla, distribuirla, purificarla y embotellarla están instrumentalizando su privatización.

El Banco Mundial ha defendido la tesis de que la forma de aumentar la disponibilidad del agua es tratándola como un producto más del suelo y del subsuelo, que como el cobre, el hierro o el petróleo, debe ser explorado y desarrollado por capitales privados que tengan el aliciente de la ganancia para animarse a invertir.

Pero como la condición para que el capital invierta en actividades nuevas es que no existan obstáculos para apropiarse también de las explotaciones existentes, el Banco Mundial también apoya la privatización de las empresas de servicio de agua que actualmente están en operación, sean nacionales, municipales o comunales.

Andrés Barreda y Tony Clarke han enumerado cinco mecanismos utilizados para la privatización del agua en el mundo.

-*Privatización de territorios y regiones.* Las empresas que comercian con el agua pretenden la privatización de territorios y biorregiones para garantizarse el uso monopólico del recurso.

-*Privatización por desviación de aguas.* La construcción de represas y recanalización de ríos para abastecer zonas de alto consumo, privando del recurso a poblaciones y causando daños irreparables sociales y ecológicos.

-*Privatización de servicios municipales de agua.* A través de concesiones y contratos, sustentados en nuevas leyes, adquieren redes de distribución y plantas purificadoras, fijando condiciones de acceso y tarifas más elevadas a la población.

-*Privatización por el embotellamiento de agua.* En la mayoría de los países no existe legislación apropiada para el control de la extracción del agua para ser embotellada y se subsidia con tasas ridículamente reducidas la explotación de fuentes de agua que son patrimonio de la colectividad.

-*Monopolio de las tecnologías.* A través de control monopólico de licencias y patentes, las empresas privadas se convierten en las únicas autorizadas para extraer el agua o para purificarla conforme a normas legales de su conveniencia.

Así, la privatización del agua avanza a paso lento pero sin pausa.

02/10/2008

Ahora, la teoría del desacople

Han pasado de los sesudos análisis de por qué América Latina debía articularse a esa economía de manera estrecha, vía la aprobación de los Tratados de Libre Comercio diseñados por el Departamento de Comercio de la Casa Blanca, y olvidado, con gesto de mono sabio, sus invocaciones por una fuerte vinculación con la economía norteamericana para hacer posible la “modernización” de las vetustas estructuras económicas reguladas de América Latina, y han dejado atrás sin siquiera pestañear, sus alegatos sobre la necesidad de la desregulación económica –mientras divulgan sin empacho los llamados del Tesorero Norteamericano a la regulación financiera como una necesidad estructural para evitar crisis de esta escala y envergadura. Y con descaro finalmente se inventan, como parte de su necesidad vocinglera, una “teoría del desacople” entre las economías de la región y la maltrecha economía norteamericana. Esa es la catadura teórica de los neocons latinos con la que llenan los espacios televisoras, radioemisoras y periódicos dominantes de la opinión pública de nuestros países.

¡Qué se puede hacer ante la sencillez y falta de acuciosidad de periodistas que cubren los hechos económicos!, que repiquetean los argumentos escuchados en las “fuentes autorizadas” para colmar los espacios que deben llenar y cumplir con su trabajo, construyendo opinión pública en razón de intereses muchas veces por ellos insospechados.

Si observamos los datos que nos depara el “International Trade Statistics Yearbook de las Naciones Unidas para los distintos años, se puede sacar en conclusión que la dependencia de la Región con el mercado de los Estados Unidos se ha venido acrecentando desde el quinquenio 1970-1975 (cuando sus exportaciones a ese mercado representaron el 37% del total), hasta el quinquenio 2000-2005 (cuando esas exportaciones representaron el 44% del total). Y si se toma en cuenta la aprobación del Tratado de Libre Comercio con EUA-Centroamérica-República Dominicana en los primero años de este quinquenio, con seguridad que esa relación de dependencia ha aumentado en este período.

En el área de la exportación de servicios esa relación es aún mucho mayor y su tendencia ha adquirido una fuerte aceleración en ese último período.

De manera que por cuanto se refiere a las relaciones comerciales no hay razones por las que uno pudiera siquiera conjeturar una_ “teoría del desacople”_ en las condiciones en que se encuentran hoy día las relaciones económicas entre nuestra región y los Estados Unidos.

En cuanto a la afluencia de capitales de inversión la relación entre las dos regiones guarda una proporción parecida con el comportamiento de las exportaciones; los Estados Unidos es el origen de entre el 25 y el 30% de todas la inversiones que se llevaron a cabo en la Región en los dos últimos años, según cálculo de la CEPAL en su último informe sobre la Inversión Extranjera en América Latina y el Caribe, 2007, (Santiago, mayo del 2008). Solo superado por el monto de las inversiones de “origen desconocido” (sic) con un 40% e inmediatamente seguido por los Países Bajos con un lejano 10%.

Si los analistas que concurren a los espacios de los medios de comunicación tradicionales se tomaran el cuidado de consultar estos datos no deberían caer en la trampa del halago mediático con ocurrencias como la teoría del desacople y más bien señalar la necesidad de que los países de la región trabajen en esa dirección desarrollando nuevas relaciones económicas con los Estados Unidos y abriéndolas con regiones relativamente inmunizadas contra esa crisis. Las nuevas relaciones con aquél país, deben basarse en el reconocimiento de la desproporción existente en los niveles de acumulación de capital entre América Latina y los E.U.A. y en el objetivo histórico de acrecentar la acumulación en nuestra región. Asimismo, responsablemente, en lugar de anunciar gratuitamente el desacople entre las dos regiones, deberían señalar que esa posibilidad solo se podrá dar realmente, si trabajamos en proyectos de integración económica, si nos incorporamos a instituciones como el Banco del Sur, el ALBA, el MERCOSUR y el Mercado Común Centroamericano, para citar las más conocidas y si, finalmente, impulsamos un desarrollo económico que distribuya entre los trabajadores la propiedad del capital.

Los TLC a lo mexicano y a lo centroamericano y la desregulación de nuestras economías nos arrastran irremisiblemente al vacío de la crisis norteamericana.

* Catedrático
Escuela de Sociología
Universidad de Costa Rica

Publicado en el semanario Universidad No.1771 del 13 al 20 de agosto de 2008.

Obama arremete contra Bush y McCain

‘Nos encontramos en uno de esos decisivos momentos – el momento en el que nuestra nación está en guerra, nuestra economía atraviesa una situación confusa, y la promesa americana ha sido amenazada una vez más’.

‘Este país nuestro tiene más riqueza que cualquier nación, pero no es eso lo que nos hace ricos’.

‘Tenemos las fuerzas armadas más poderosas de la Tierra, pero no es eso lo que nos hace fuertes’.

‘Nuestras universidades y cultura son la envidia del mundo, pero no es eso lo que hace que el mundo siga llegando a nuestras costas’.

‘En vez de todo eso, es el espíritu americano esa promesa americana que nos impulsa adelante aun cuando el camino es indefinido, que nos une pese a nuestras diferencias, que nos hace fijarnos no en lo que se ve, sino en lo no visto, ese lugar mejor a la vuelta de la esquina’.

Con profunda gratitud y una gran humildad, acepto vuestra nominación para la Presidencia de Estados Unidos.

Dejadme expresar mi agradecimiento a la histórica lista de candidatos que me han acompañado en este viaje, y especialmente a quien ha llegado más lejos -una campeona para los trabajadores americanos y una inspiración para mis hijas y las vuestras – Hillary Rodham Clinton.

Al presidente Clinton, que anoche demostró la necesidad de cambio como sólo él puede hacerlo, a Ted Kennedy, que encarna el espíritu de sacrificio; y al próximo vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, os doy las gracias.

Estoy agradecido de terminar este camino con uno de los más brillantes estadistas de nuestro tiempo, un hombre con el que se siente a gusto todo el mundo, desde los líderes mundiales hasta los revisores de la compañía de trenes Amtrak que todavía toma para regresar a su casa cada noche.

Al amor de mi vida, nuestra próxima primera dama, Michelle Obama, y a Sasha y Malia -os amo mucho y estoy muy orgulloso de vosotras.

Hace cuatro años, estaba delante vuestro y os conté mi historia – de la breve unión de un joven de Kenia y una joven mujer de Kansas que no les iban muy bien las cosas ni eran muy conocidos, pero que compartían la creencia de que en América, su hijo podía alcanzar lo que se propusiese en su cabeza.

Es esa promesa la que ha hecho este país destacar – que con un duro trabajo y sacrificio, cada uno de nosotros puede tratar de alcanzar sus sueños y también seguir siendo parte de la familia americana para asegurarnos que la siguiente generación podrá perseguir igualmente sus sueños.

Es por ello por lo que comparezco hoy, esta noche. Porque durante 230años, en cada momento en el que esa promesa estaba en peligro, hombres y mujeres corrientes estudiantes y soldados, granjeros y profesores, enfermeras y limpiadoras encontraron el coraje para mantenerla viva.

Nos encontramos en uno de esos decisivos momentos – el momento en el que nuestra nación está en guerra, nuestra economía atraviesa una situación confusa, y la promesa americana ha sido amenazada una vez más.

Esta noche, más americanos están sin trabajo y más trabajan por menos. Muchos de vosotros habéis perdido vuestros hogares y muchos más veis cómo cae en picada el valor de vuestras casas. Muchos tenéis automóviles que ahora no os podéis permitir conducir, deudas de las tarjetas de crédito que no podéis pagar, gastos de matrículas inalcanzables.

Todos estos desafíos no son todos atribuibles al Gobierno. Pero el no haberles hecho frente es la consecuencia de la descomposición de la vida política en Washington y las fallidas políticas de George W. Bush.

América es mejor que estos últimos 8 años. Somos mejor país que eso.
Este país es más decente que uno en el que una mujer de Ohio, a punto de jubilarse, se encuentra por una enfermedad en una catastrófica situación después de una dura vida de trabajo.

Este país es más generoso que aquel en el que un hombre de Indiana tiene que ver cómo la maquinaria con la que ha trabajado durante veinte años es embarcada hacia China y, turbado, ha de explicar cómo se siente fracasado al regresar a casa y contarle lo ocurrido a su familia.

Somos más compasivos que un Gobierno que permite que sus veteranos duerman en la calles y sus familias caigan en la pobreza; que permanece de brazos cruzados mientras delante de nuestros ojos se hunde una gran ciudad de América.

Esta noche, le digo al pueblo americano, a los demócratas y a los republicanos, a los independientes de toda esta gran nación. Ya basta.
Este momento esta elección es nuestra oportunidad para mantener viva en el siglo XXI la promesa americana.

Como la próxima semana, en Minnesota, el mismo partido que os ha traído dos mandatos de George Bush y Dick Cheney le pedirá a este país un tercero, estamos aquí ahora porque amamos este país demasiado para dejar que los próximos cuatro años se parezcan a los últimos ocho.

El 4 de noviembre tenemos que levantarnos y decir: ya estamos hartos.

Ahora no dejemos ninguna duda. El candidato republicano, John McCain, ha vestido el uniforme de nuestro país con valor y distinción, y por ello le debemos respeto y gratitud. La próxima semana, también escucharemos sobre esos momentos en los que había roto con su partido como prueba de que el puede traer el cambio que necesitamos.

Pero los hechos son claros, John McCain ha votado con George Bush el noventa por ciento de las veces.

Al senador McCain le gusta hablar de juicio, pero en realidad, qué os asegura a vosotros que George Bush ha estado en más del noventa por ciento de las ocasiones acertado.

No sé lo que pensáis vosotros, pero yo no estoy dispuesto a asumir sólo una posibilidad de cambio en el diez por ciento.

La verdad es que en cada uno de los asuntos, en cada uno de los que afecten a vuestra vida salud, educación y en la economía, el senadorMcCain ha sido todo, menos independiente.

Asegura que nuestra economía ha hecho grandes progresos bajo este presidente. Sostiene que los fundamentos de la economía son fuertes.
Y cuando uno de sus principales consejeros el hombre responsable de escribir su programa económico hablaba de la ansiedad en la que viven los americanos, dijo que estamos viviendo sólo una recesión mental y que somos, y cito textualmente, una nación de quejicas.

¿Una nación de quejitas?

¿Dígale eso a los orgullosos trabajadores de las plantas de automoción de Michigan que, después de enterarse de que iba a cerrar, todavía siguen yendo cada día a trabajar tan duro como siempre, porque saben que hay quienes cuentan con los frenos que han hecho.

Dígale eso a las familias de los militares que cargan sus problemas en silencio, sobre sus hombros, mientras ven cómo sus seres queridos parten para su tercer o cuarto o quinto despliegue. Estos no son quejitas. Trabajan duro, lo entregan todo y aún siguen sin quejarse. Estos son los americanos que yo conozco.

Bien, no creo que al senador McCain no le importe qué es lo que está pasando con la vida de los americanos. Pienso que es que no lo sabe.
¿Por qué otro motivo si no podría él definir a la clase media como aquella que gana menos de cinco millones de dólares al año?

¿De qué manera si no podría proponer cientos de miles de millones en rebajas fiscales para las grandes corporaciones y compañías petroleras pero ni un solo penique de ayuda fiscal para más de cien millones de americanos?

¿Cómo si no puede él ofrecer un plan de salud que penalizará con impuestos a las personas o un plan educativo que no servirá para ayudar en nada a las familias a pagar las escuelas, o el plan para privatizar la seguridad social y jugarse vuestras pensiones’.

No es porque a John McCain no le importa, es porque no lo capta.

Durante más de dos décadas ha estado abonado a esa vieja, desacreditada filosofía republicana -da más y más a los que más tienen y confía en que la prosperidad descienda a los demás. En Washington, lo llaman la sociedad de propietarios, pero lo que realmente significa es que estás sólo. ¿Te has quedado sin empleo? Mala suerte. ¿no tienes seguro de salud? El mercado lo resolverá.

¿Has nacido pobre?

Arréglatelas con tu propio esfuerzo, aunque no puedas. Estás sólo.
Es hora de que paguen por sus fracasos. Es nuestro momento para cambiar América.

Lo veis, los demócratas tenemos una medida diferente de lo que es el progreso en este país.

Medimos el progreso por el número de personas que pueden encontrar un empleo en el que ganen lo suficiente para hacer frente a las hipotecas, que también permite un poco de dinero extra a final de mes para poder ver algún día a vuestros hijos recibir sus diplomas universitarios.

Medimos el progreso en los 23 millones de nuevos empleos que fueron creados cuando Bill Clinton era el presidente -cuando la familia media estadounidense vio subir sus ingresos hasta 7.500 dólares en vez de los 2.000 que ha caído bajo George Bush.

Nosotros medimos la fortaleza de nuestra economía no por el número de multimillonarios que tenemos o los beneficios de las empresas de la lista Fortune 500, sino si alguien con una buena idea puede tomar el riesgo y emprender un nuevo negocio, o si las camareras que viven de las propinas pueden librar un día para poder llevar al médico a su hijo enfermo sin ser despedidas – una economía que honra la dignidad del trabajo.

Las claves que empleamos para medir la fortaleza económica son si estamos cumpliendo con la promesa fundamental que ha hecho que este sea un gran país – una promesa que es la única razón por la que estoy aquí esta noche.

Porque en las caras de esos veteranos jóvenes que regresan de Irak y Afganistán, veo a mi abuelo, quien se alistó después de Pearl Harbor, marchó en las filas del Ejército de Patton y fue premiado por una nación agradecida con la oportunidad de ingresar en la universidad mediante del Acta para los veteranos.

En la cara del estudiante joven que duerme sólo tres horas antes de entrar en el turno de noche, pienso en mi mamá, quien, sóla, nos crió a mi hermana y a mí mientras trabajaba y estudiaba para un título, quien una vez recurrió a la asistencia pública para la alimentación pero todavía pudo enviarnos a las mejores universidades del país con la ayuda de los préstamos para estudiantes y las becas.

Cuando oigo a otro trabajador que me dice que su fábrica ha cerrado, recuerdo a todos aquellos hombres y mujeres del barrio sur de Chicago con quienes me solidaricé y por quienes luché hace dos años, después del cierre de la planta siderúrgica.

Y cuando oigo a una mujer que habla de las dificultades de abrir un negocio propio, pienso en mi abuela, quien progresó trabajando, desde el grupo de secretarias hasta ser supervisora, pese a los años en que no fue considerada para un ascenso por ser mujer.

Es ella quien me enseñó lo que es el trabajo duro. Es ella quien aplazó la compra de un nuevo automóvil o un nuevo vestido para que yo pudiera tener una vida mejor. Me entregó todo lo que tenía. Y aunque ya no puede viajar, sé que está siguiéndonos esta noche y que esta es su noche también.

No sé qué tipo de vidas cree John McCain que llevan los famosos, pero ésta ha sido la mía. Estos son mis héroes. Sus historias son las que me formaron. Y es en nombre de ellos que pretendo ganar estas elecciones y mantener nuestra promesa viva, como presidente de Estados Unidos.

¿Qué es esa promesa?

Es una promesa según la cual cada uno tiene la libertad para hacer de nuestras vidas lo que queramos, pero que también tenemos la obligación de tratarnos mutuamente con dignidad y respeto.

Es una promesa que dice que el mercado debería premiar la ambición y la innovación y generar crecimiento, pero que las empresas deberían cumplir con sus responsabilidades en cuanto a la creación de empleos americanos, vigilar por los trabajadores americanos, y atenerse a las reglas de buena conducta.

La nuestra es una promesa que dice que el gobierno no nos puede solucionar todos los problemas, pero lo que sí debe hacer es lo que no podemos hacer por nosotros mismos, Protegernos del daño y proveer a cada niño una educación adecuada, mantener nuestra agua limpia y nuestros juguetes seguros, invertir en nuevos colegios y nuevas carreteras y nueva ciencia y tecnología.

Nuestro gobierno debe trabajar por nosotros, no contra nosotros. Debe ayudarnos, no dañarnos. Debe garantizar la oportunidad no sólo a aquellos que más dinero e influencia tienen, sino a cada americano dispuesto a trabajar.

Esa es la promesa de América. La idea de que somos responsables de nosotros mismos, pero también de que nos levantaremos o caeremos juntos como una nación: la creencia fundamental de que yo soy el guardián de mi hermano: yo soy el guardián de mi hermana.

Esa es la promesa que debemos cumplir. Ese es el cambio que necesitamos ahora mismo. Por tanto, dejad que precise exactamente qué es lo que significará ese cambio si yo soy elegido Presidente.

El cambio implica un código fiscal que no premie a los ‘lobbys’ que lo redactaron, sino a los trabajadores americanos y las pequeñas empresas que lo merecen.

A diferencia de John McCain, dejaré de conceder ventajas fiscales a las corporaciones que trasladen los empleos al extranjero, y comenzaré a darlas a las empresas que creen buenos puestos de trabajo aquí mismo en América.

Eliminaré los impuestos sobre ganancias para los pequeños negocios y empresas recién establecidas que van a crear los empleos bien remunerados y de alta tecnología del mañana.

Rebajaré los impuestos – los voy a rebajar – para el 95% de todas las familias que trabajan, porque en una economía como la nuestra lo último que se debe hacer es aumentar los impuestos para la clase media.

Y, por el bien de nuestra economía, nuestra seguridad y el futuro de nuestro planeta, estableceré una meta clara como Presidente: en un plazo de diez años, pondremos fin a nuestra dependencia respecto al petróleo de Oriente Medio.

Washington lleva 30 años hablando de nuestra adicción al petróleo, y John McCain lleva 26 de esos años allí. En este tiempo, él ha dicho ‘no’ a las exigencias de mayor eficiencia energética de los automóviles, ‘no’ a las inversiones en energía de fuentes renovables,’no’ a los combustibles renovables. Y hoy, importamos el triple de petróleo que el día que el senador McCain asumió el cargo.

Ahora es el momento de poner fin a la adicción, y de comprender que sacar petróleo de los pozos es una medida para salir del paso, no una solución a largo plazo. Ni remotamente.

Como presidente, aprovecharé nuestros recursos de gas natural, invertiré en tecnología del carbón limpia, y encontraré la manera de aprovechar con seguridad la energía nuclear.

Ayudaré a nuestras empresas del automóvil a readaptarse, para que los automóviles de bajo consumo del futuro se construyan aquí mismo en América. Voy a facilitar que los americanos tengan suficientes recursos para comprar esos autos nuevos. Y voy a invertir 150.000 millones de dólares en la próxima década en fuentes renovables de energía que podamos costear -energía eólica, y energía solar y la próxima generación de biocombustibles; una inversión que desembocará en nuevas industrias y cinco millones de empleos que paguen bien y que nunca puedan ser externalizados.

América, ahora no es el momento de pequeños proyectos.

Ahora, es el momento de cumplir por fin nuestra obligación moral a facilitar a cada niño una educación de primera clase, porque es lo mínimo para poder competir en la economía global.

Michelle y yo estamos aquí esta noche sólo porque nos dieron la oportunidad de una educación. Y no voy a conformarme con una América donde algunos niños no tienen esa oportunidad. Voy a invertir en la educación de los más pequeños. Voy a reclutar a un ejército de nuevos maestros, les pagaré salarios más altos y les daré un mayor apoyo. Y, a cambio, voy a pedir un listón más alto y que se rindan cuentas. Y mantendremos nuestra promesa hecha a cada uno de los jóvenes americanos – si tú te comprometes con tu comunidad o con tu país, garantizamos que podrás pagar una enseñanza superior.

Ahora es el momento de cumplir, por fin, la promesa de un acceso aprecios razonables a cuidados sanitarios para todos y cada uno de los americanos. Si ya tenéis acceso a la Sanidad, mi proyecto supondrá el desembolso de primas más pequeñas. Si no lo tenéis, vais a poder disfrutar de la misma cobertura que los miembros del Congreso se conceden a si mismos.

Yo mismo vi cómo mi madre discutía con las empresas de seguros desde la cama donde moría de cáncer y voy a asegurarme de que esas mismas empresas dejen de discriminar a los que están enfermos, los que más necesitan atención sanitaria.

Ahora es el momento de ayudar a las familias con bajas pagadas por enfermedad y mejores permisos por asuntos familiares, porque nadie en América debería tener que elegir entre salvar su empleo y cuidar a su niño o a su progenitor enfermo.

Ahora es el momento de cambiar nuestras leyes sobre quiebras para que vuestras pensiones estén protegidas por encima de las primas de los ejecutivos; y es la hora de salvaguardar la Seguridad Social para generaciones futuras.

Y ahora es el momento de cumplir la promesa del mismo salario por el mismo trabajo, porque yo quiero que mis hijas tengan exactamente las mismas oportunidades que vuestros hijos.

Ahora, muchos de esos proyectos van a costar dinero, y es por eso que he explicado de dónde va a proceder cada céntimo – cerrando los resquicios corporativos y los paraísos fiscales que no ayudan a América crecer. Pero también voy a analizar el presupuesto federal, línea por línea, eliminando los programas que no dan resultados, y mejorando y reduciendo costes en los que sí necesitamos – porque no podemos afrontar los desafíos del siglo 21 con una burocracia del siglo 20.

Los Demócratas también debemos reconocer que realizar la promesa de América va a necesitar más que dinero. Requiere un sentido renovado de la responsabilidad por parte de cada uno de nosotros, para recuperar lo que John F. Kennedy denominó nuestra ‘fortaleza moral e intelectual’.

Sí, el Gobierno debe dar ejemplo en la dependencia energética, pero cada uno de nosotros debe ayudar a hacer nuestros hogares y negocios más eficientes.

Sí, debemos ayudar a salir de su situación a los jóvenes que caen en la delincuencia y la desesperación. Pero debemos reconocer que los programas por sí solos no pueden sustituir a los padres: que el Gobierno no puede apagar el televisor para que una niña haga sus deberes: que los padres deben asumir una mayor responsabilidad a la hora de dar el amor y la orientación que sus hijos necesitan.

La responsabilidad individual y la responsabilidad mutua: esa es la esencia de la promesa de América.

Y de la misma forma que nosotros cumplimos nuestra promesa a la próxima generación aquí en casa, también debemos cumplir la promesa de América en el exterior. Si John McCain quiere protagonizar un debate sobre quién tiene el mejor temperamento, y juicio, para servir como el próximo Comandante en Jefe, ese es un debate en el que yo estoy dispuesto a entrar.

Porque mientras el senador McCain dirigía la vista hacia Irak en los días justo después del 11-S, yo me levanté para oponerme a esta guerra, sabiendo que nos iba a distraer de las auténticas amenazas que afrontamos.

Cuando John McCain dijo que podríamos ‘arreglárnoslas’ en Afganistán, yo hablé a favor de recursos y tropas adicionales para terminar la lucha contra los terroristas que realmente nos atacaron el 11 S, y dejé claro que debemos eliminar a Osama bin Laden y sus lugartenientes si se ponen a tiro.

A John McCain le gusta decir que perseguirá a Bin Laden hasta las puertas del Infierno – pero ni siquiera se acercará a la cueva dónde vive.

Y todavía hoy, cuando mi llamamiento a establecer un marco temporal para retirar nuestras tropas de Irak ha encontrado el eco del Gobierno iraquí e incluso la administración Bush, incluso después de saber que Irak tiene un superávit de 79.000 millones de dólares mientras nosotros nos ahogamos en déficits, John McCain se queda solo en su negativa obstinada a poner fin a una guerra equivocada.

Ese no es el ‘juicio’ que necesitamos. Eso no nos mantendrá seguros. Necesitamos a un presidente que sepa afrontar las amenazas del futuro, no aferrarse a las ideas del pasado.

No se derrota a una red terrorista que opera en 80 países al ocupar a Irak.
No se protege a Israel y se detiene a Irán simplemente con un discurso duro desde Washington.

No se puede realmente dar la cara por Georgia cuando se ha puesto en entredicho a nuestras alianzas con más solera.

Si John McCain quiere seguir a George Bush con más discurso duro y estrategia equivocada, es su opción – pero no es el cambio que necesitamos.

Somos el partido de Roosevelt. Somos el partido de Kennedy.
Así que, no me digan que los Demócratas no defenderemos a este país.
No me digan que los Demócratas no nos mantendremos seguros.

La política exterior Bush-McCain ha malgastado el patrimonio que generaciones de estadounidenses Demócratas y Republicanos han construido, y estamos aquí para restaurar ese patrimonio.

Como Comandante en jefe, nunca dudaré en defender a esta nación, pero no enviaré a nuestras tropas para enfrentarse al peligro sin una misión clara y un compromiso sagrado para aportarles los materiales que necesitan en la batalla y la asistencia y ayudas que se merecen cuando vuelvan a casa.

Pondré fin a esta guerra en Irak de forma responsable, y terminaré la lucha contra Al Qaeda y los Talibán en Afganistán.

Reconstruiré nuestras fuerzas armadas para hacer frente a futuros conflictos.

Pero también reanudaré la diplomacia dura y directa que puede impedir que Irán obtenga armas nucleares y frenar la agresión rusa.

Construiré nuestras alianzas para vencer a las amenazas del siglo XXI: el terrorismo y la proliferación nuclear, la pobreza y el genocidio, el cambio climático y la enfermedad. Y restableceré nuestro nivel moral, para que América una vez más sea esta última, mejor esperanza para todos los que acuden a la causa de la libertad, que están deseando vivir en paz y que anhelan un futuro mejor.

Éstas son las políticas que voy a desarrollar. Y en las semanas venideras, quiero debatirlas con John McCain.

Pero lo que no voy a insinuar es que el Senador adopta sus posturas con fines políticos. Porque una de las cosas que tenemos que cambiaren nuestra vida política es la idea de que la gente no puede discrepar sin poner en duda la ética y el patriotismo del otro.

Los tiempos son demasiado graves, está demasiado en juego para seguir este mismo guión político. Así que pongámonos de acuerdo en que el patriotismo no tiene partido.

Yo amo a este país, y John McCain también lo ama. Los hombres y las mujeres que prestan servicio en nuestros campos de batalla pueden ser Demócratas y Republicanos e independientes, pero han luchado y derramado sangre juntos y algunos han muerto juntos bajo la misma orgullosa bandera. No han prestado servicio a una América roja o a una América azul – han prestado servicio a los Estados Unidos de América.
Así que, tengo una noticia para usted, John McCain. Todos damos la prioridad a nuestro país.

América, nuestra tarea no será fácil.

Los desafíos a que nos enfrentamos exigen hacer elecciones difíciles, y tanto Demócratas como Republicanos tendrán que deshacerse de las desgastadas ideas y políticas del pasado.

Una parte de que lo que se ha perdido en estos últimos ocho años no se puede medir en sueldos perdidos o mayores déficits comerciales.

Lo que se ha perdido en esos últimos ochos años es nuestro sentido de una misión común -nuestro sentido de una misión superior. Y eso es lo que tenemos que restablecer.

Puede que no estamos de acuerdo sobre el aborto, pero seguramente podemos ponernos de acuerdo sobre la reducción de los embarazos no deseados en este país.

La realidad de la tenencia de armas puede ser diferente para cazadores de las zonas rurales de Ohio que para aquellos castigados por la violencia de bandas en Cleveland, pero no me digan que no podemos defender la Segunda Enmienda mientras mantengamos los AK-47 fuera de las manos de delincuentes.

Sé que hay discrepancias sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero seguramente podemos estar de acuerdo en que nuestros hermanos y hermanas gays y lesbianas se merecen poder visitar a sus seres queridos en el hospital y llevar vidas libres de la discriminación.

Los ánimos están enardecidos en cuanto a la inmigración, pero no sé a quien le beneficia cuando se separa a una madre de su hijo en la infancia o un empleador socava los sueldos estadounidenses al contratar a trabajadores ilegales.

Esto también forma parte de la promesa de América – la promesa de una democracia donde podemos encontrar la fuerza y la elegancia para superar las divisiones y unirnos en un esfuerzo común.

Sé que hay quienes desprecian tales convicciones como meras palabras bonitas. Ellos afirman que nuestra insistencia en algo mayor, algo más firme y sincero en nuestra vida pública supone simplemente un caballo de Troya para impuestos más altos y el abandono de los valores tradicionales.

Y eso es de esperar. Porque si careces de ideas frescas, entonces empleas tácticas pasadas para espantar a los votantes. Si no tienes historial para sostener tu candidatura, entonces presentas a tu contrincante como alguien del cual la gente debería huir.
Haces una gran elección de cosas pequeñas.

Y ¿saben una cosa? – ha servido en el pasado. Porque se alimenta del escepticismo que todos tenemos con respecto al gobierno. Cuando Washington no funciona, todas sus promesas parecen huecas. Si tus esperanzas han sido frustradas una y otra vez, lo mejor es dejar de esperar, y conformarse con lo ya conocido.

Lo capto. Reconozco que no soy el candidato más convencional para este cargo. No encajo en el pedigrí típico, y no he pasado mi vida profesional en los pasillos de Washington.

Comparezco ante vosotros esta noche porque a lo largo y ancho de Estados Unidos algo comienza a moverse. Lo que no entienden los escépticos es que estas elecciones nunca han sido sobre mí. Han sido sobre vosotros.

Durante 18 largos meses vosotros habéis dado la cara, uno por uno, y habéis dicho basta a las políticas del pasado.

Vosotros entendéis que en estas elecciones el mayor riesgo que podemos correr es intentarlo con las mismas viejas políticas, con los mismos viejos protagonistas y esperar una resultado diferente.

Vosotros habéis demostrado lo que nos enseña la Historia -que en un momento determinante, como éste, el cambio que necesitamos no procede de Washington. El cambio llega hasta Washington.

El cambio ocurre porque el pueblo estadounidense lo exige- porque se levanta y reivindica ideas nuevas, liderazgo nuevo, y una vida política nuevapara tiempos nuevos.

América, éste es uno de esos momentos.

Creo que, por muy difícil que sea, el cambio que necesitamos se nos acerca. Porque lo he visto. Porque lo he vivido. Lo he visto en Illinois, cuando aportamos asistencia sanitaria a más niños y pasamos a más familias desde ayudas sociales hasta empleo.

Lo he visto en Washington, donde trabajamos, superando las divisiones partidistas, para hacer más transparente el gobierno y pedir responsabilidades a los ‘lobbys’, dar mejor asistencia a nuestros veteranos y mantener las armas nucleares fuera de las manos de los terroristas.

Y lo he visto en esta campaña. En los jóvenes que votaron por primera vez y en aquellos que volvieron a participar después de mucho, mucho tiempo.

En los Republicanos que pensaban que nunca recogerían una papeleta Demócrata, pero sí lo hicieron. Lo he visto en los trabajadores que preferirían recortar su semana laboral en una jornada a que sus amigos perdiesen el puesto de trabajo, en los soldados que vuelven a enrolarse después de haber perdido una extremidad, en los buenos vecinos que acogen a un desconocido cuando golpea un huracán y llegan las inundaciones.

Este país nuestro tiene más riqueza que cualquier nación, pero no es eso que nos hace ricos.

Tenemos las fuerzas armadas más poderosas de la Tierra, pero no es eso lo que nos hace fuertes.

Nuestras universidades y cultura son la envidia del mundo, pero no es eso lo que hace que el mundo siga llegando a nuestras costas.

En vez de todo eso, es el espíritu americano esa promesa americana que nos impulsa adelante aun cuando el camino es indefinido, que nos une pese a nuestras diferencias, que nos hace fijarnos no en lo que se ve, sino en lo no visto, ese lugar mejor a la vuelta de la esquina.

Esa promesa es nuestra mejor herencia. Es una promesa que hago a mis hijas cuando las acuesto por la noche, y una promesa que vosotros hacéis a los vuestro -una promesa que ha motivado a los inmigrantes a cruzar océanos, a los pioneros a viajar al oeste; una promesa que llevó a los trabajadores hasta los piquetes y a las mujeres a aspirar al sufragio.

Y es esa promesa que hace hoy 45 años atrajo a estadounidenses desde cada rincón de esta tierra a reunirse en una explanada en Washington, ante el monumento a Jefferson, para escuchar a un joven predicador de Georgia hablar de su sueño.

Los hombres y las mujeres que se concentraron allí pudieran haber escuchado muchas cosas. Podrían haber escuchado palabras de ira y discordia. Pudieran haber sido empujados a rendirse ante el miedo y la frustración de tantos sueños demorados.

Pero lo que escucharon, en vez de eso, las personas de todas las confesiones y todos los colores, de todas las condiciones – es que en América nuestros destinos están inextricablemente unidos. Que, juntos, nuestros sueños pueden ser uno.

‘No podemos andar solos’, dijo el predicador. ‘Y mientras andamos, tenemos que jurar que siempre marcharemos hacia delante. No podemos volver atrás’.

¡América, no podemos volver atrás!.

No cuando hay tanto trabajo por hacer.

No con tantos niños por educar y tantos veteranos por cuidar.

No con una economía por arreglar y ciudades por reconstruir y granjas por salvar.

No con tantas familias por proteger y tantas vidas por reparar.

¡América, no podemos volver atrás!.

No podemos andar solos.

En este momento, en estas elecciones, tenemos que prometer una vez más marchar hacia el futuro.

Que cumplamos con esa promesa esa promesa americana y en las palabras de la Biblia agarrarnos firmemente, sin flaquear, a la esperanza que profesamos.

Gracias.

Que Dios os bendiga y que Dios bendiga los Estados Unidos de América.

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AGENCIA EFE/Inestco
Colombia Plural
29/08/2008

Los riesgos e impactos de la minería de oro a cielo abierto en la zona norte

El actual gobierno de Costa Rica y las empresas transnacionales del oro han vuelto a imponer a la Zona Norte la decisión de desarrollar proyectos de minería de oro a cielo abierto en esta región. Esta actividad constituye un riesgo social, económico y ambiental para la zona, por lo que debemos sostener una posición digna y valerosa de oposición a estos proyectos. Quienes los promueven no sufrirán directamente los problemas y las consecuencias negativas de esta actividad, además de que serán los únicos que le sacarán ganancias. Veamos, entonces, en qué consiste y cuáles son los impactos que nos acarrearán.

El legado de daños y problemas de la minería de oro

Las técnicas de la minería de oro a cielo abierto por lixiviación con cianuro (MCA) hacen rentable la explotación de yacimientos de oro de muy poca concentración, como el yacimiento de la Mina de las Crucitas, donde es necesario extraer y triturar una tonelada de tierra para obtener un poco más de un gramo de oro.

La MCA es insostenible por definición, tanto porque el aprovechamiento del oro conduce a su agotamiento, como por su enorme impacto ambiental (destrucción de la capa vegetal, eliminación del espacio vital de cientos de especies, destrucción del suelo, apertura de cráteres, liberación de metales pesados, empleo de cianuro, etc.), social y cultural (llegada repentina de nuevas personas, desplazamiento de las actividades productivas tradicionales, prostitución, alteración de las relaciones sociales y familiares, entre otros).

La literatura especializada documenta de manera categórica que la MCA es la actividad industrial más destructiva que existe, tanto en los países pobres como en países ricos. Dos ejemplos de que estos problemas son propios de las minas a cielo abierto lo constituyen las minas Mi-sima y Porgera, ubicadas en Papúa, Nueva Guinea, ambas propiedad de la corporación a la que pertenece Placer Dome, propietaria original del proyecto de las Crucitas.

Los problemas nunca fueron detectados por la SETENA y la empresa ha decidido despedir a casi todos sus empleados, a la vez que están retirando las máquinas y el equipo. Si bien el gobierno se comprometió a entregar un informe sobre el desastre, al día de hoy no hay ningún documento oficial, y muchos estudiosos aseguran que la situación puede desencadenar uno de los peores desastres ambientales en la historia de Costa Rica.

Entre los principales impactos identificados hasta el momento están:

  • destrucción de bosque, en medio de una zona de recarga acuífera y de alto riesgo sísmico;
  • ruptura de la membrana que retiene los metales pesados contenidos en 100 millones de toneladas de desechos de la mina, con lo que se liberan metales pesados y aguas cianuradas, y contaminando aguas subterráneas y superficiales, particularmente el río Ciruelas, con el riesgo de que esta espiral de envenenamiento alcance el Golfo de Nicoya, fuente de vida de miles de pescadores artesanales;
  • desecamiento de varias nacientes y pérdida de caudal del acueducto municipal;
  • sedimentación de ríos y quebradas, especialmente el “taponamiento” del cañón del río Ciruelas, provocando una represa que podría ceder ante la presión del agua y generar una gran inundación;
  • nubes de polvo en la zona de influencia del proyecto, incluído el casco urbano de Miramar.

Las Nefastas Experiencias de la Minería de Oro en Costa Rica

Aunque Costa Rica no ha sido un país de tradición minera, como sí lo han sido Chile, Bolivia, México o Perú, todas las experiencias de minas de oro que han operado en nuestro país han generado profundos impactos negativos a nivel social, ambiental y cultural, ya fueran que usaran técnicas a cielo abierto, técnicas tradicionales o de túneles, o los mismos coligalleros del Parque Nacional Corcovado.

En todos los casos, las experiencias de minería han dejado estelas de envenenamiento de ríos y acuíferos, destrucción de bosques y montañas, contaminación y destrucción de suelos, envenenamiento del aire y deterioro de la salud de obreros mineros y vecinos de las minas. Como contrapartida, las poblaciones residentes nunca han visto mejoradas sus condiciones de vida, como lo evidencia hoy la situación social y económica de Abangares, que ha sido un distrito minero desde el siglo XIX. La riqueza y los beneficios de estas actividades siempre quedan en manos de los inversionistas y de los testaferros nacionales que favorecen y facilitan la actividad, quienes, además, suelen abandonar los sitios una vez agotados los yacimientos, dejando los daños y problemas a las poblaciones locales.

Si bien en Costa Rica solo han operado tres minas de oro a cielo abierto, los daños ambientales que han provocado han sido profundos, y décadas después el pueblo costarricense sigue a la espera de su reparación.

Estas minas son la mina Macacona, la mina Beta Vargas y la mina Bella Vista. Veamos los probelmas y daños que han ocasionado:

1. Mina Macacona: fue la primera mina de oro a cielo abierto por lixiviación con cianuro que operó en nuestro país hacia la década de mil novecientos ochenta en la comunidad de Macacona en Esparza de Puntarenas.

Después de 9 años de operación, esta mina, propiedad de la transnacional Hearned Limited, repentinamente abandonó el país sin indemnizar un solo cinco por los daños provocados durante su operación.

Los principales daños provocados fueron:

  • contaminación de la quebrada Turbina por el depósito de materiales estériles, colas y aguas cianuradas;
  • reducción y alteración del cauce de la Quebrada Turbina;
  • deforestación de la zona de extracción del oro y la zona destinada a la construcción de la infraestructura;
  • apertura de cráteres y afectación de acuíferos en la zona del proyecto.

2. Mina Beta Vargas: se localizó en la cuenca del Río Lagarto, en la Pita de Chomes de Puntarenas, y fue propiedad de la transnacional canadiense Lyon Lake Mines. La mina operó de manera ilegal durante 1997 y 1998, ya que nunca contó con la patente comercial de funcionamiento municipal. Después de operar un poco más de un año, repentinamente cesó sus actividades sin autorización del gobierno.

Al día de hoy, el proyecto se encuentra abandonado y los daños ambientales aguardan su restauración. La empresa no ha indemnizado al país un solo cinco. Entre los principales impactos que provocó la mina se identifican:

  • destrucción del bosque donde se levantó la planta industrial, la zona de los tajos o cráter y la zona destinada a las escombreras y pilas de lixiviación;

* contaminación del Río Lagarto por el depósito de materiales estériles, colas y aguas cianuradas;

  • apertura de cráteres y afectación de acuíferos en la zona del proyecto;
  • destrucción y pérdida de biodiversidad.

3. Mina Bellavista: está ubicada en la parte alta del distrito central de Miramar de Puntarenas, en una zona de pendientes y de alto riesgo sísmico. También es propiedad de otra transnacional canadiense (Glencair Gold Corporation). Después de dos años de operación, a mediados del año 2007 suspendió sus actividades de manera repentina, a raíz del deslizamiento de más de cien toneladas de materiales. Solo para el año 2006, la empresa reportó ganancias cercanas a los tres mil millones de colones, pese a lo cual los beneficios para el país se redujeron al pago de unos cuantos salarios no calificados de costarricenses, dado que, desde el inicio de sus operaciones, la empresa se acogió al régimen de Zona Franca, que la eximía del pago de impuestos, tanto municipales como nacionales.

Diversas organizaciones australianas, como la Fundación Australiana para la Conservación y numerosos grupos ambientalistas, han denunciado sistemáticamente la contaminación de ríos por el uso de mercurio y cianuro y por descargas de desechos sólidos, así como contaminación atmosférica en estas minas. Además, según el Ministro Ambiental de Papúa, tanto la mina Misima como la mina Porgera han provocado serios daños a la salud, en tanto que, según el Instituto de Política Minera de Sidney, en Australia, la mina Porgera ha contaminado el ambiente de 7 mil personas con metales pesados en niveles 3 mil veces más altos que los permitidos en Nueva Guinea.

Además de los inevitables impactos que produce la MCA, la operación de estas minas constituye una fuente permanente de producción de desastres ocasionados por accidentes, tal como ilustran los casos de la mina de Summitville, en Colorado, Estados Unidos, en 1990, que produjo un escape de cianuro que mató toda la vida acuática a lo largo de treinta kilómetros del río Alamoza, o el caso de la mina Omai, en Guyana, en agosto de 1995, donde 685 millones de galones de aguas contaminadas con cianuro y varios metales pesados tóxicos se derramaron en el Río Omai, contaminando decenas de kilómetros, por mencionar solamente dos.

“Las naciones ricas, en persecución de las riquezas mineras de nuestros países pobres, los violan, abren profundos y dañinos huecos, se llevan todas las riquezas. Solo dejan hoyos hediondos y oscuros, nidos de plagas, enfermedades, hombres transformados y embrutecidos. ¿De riqueza? NADA (José Martí).

¡Todos/as contra la Minería en la Zona Norte!

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Gobierno de los Arias revive proyecto minero en Las Crucitas

Fiel a su actitud dictatorial y filibustera, irrespetando y desconociendo la voluntad de las comunidades de la Zona Norte y del país en su conjunto, el gobierno de Oscar Arias Sánchez dio vida nuevamente a la mina de oro “Las Crucitas”.

Mediante el Decreto ejecutivo Nº 217- 2008-MINAE del 21 de abril del 2008, firmado por el Presidente de la República y el Ministro del MINAE, el gobierno acordó “otorgar la concesión de explotación minera (…) por un plazo de 10 años para explotar oro, plata, cobre y minerales asociados…” a favor de la empresa Industrias Infinito, subsidiaria de la transnacional canadiense Vanessa Ventures Inc.

El gobierno de “Los Arias”, mediante resolución de la SETENA (Secretaría Téc-nica Nacional Ambiental) Nº 170- 2008-SETENA, de las 12:50 horas del 4 de febrero del 2008, aprobó la nueva versión del proyecto minero y su Estudio de Impacto Ambiental.

Además, “Los Arias” acordaron derogar el decreto promulgado por el Dr. Abel Pacheco, que prohibía la minería de oro a cielo abierto en nuestro país.

En qué consiste el Proyecto Minero de Las Crucitas

La decisión del gobierno de Oscar Arias le da luz verde a la transnacional canadiense Vanessa Ventures Inc. para que desaparezca los Cerros La Fortuna y la Botija en las Crucitas, así como el bosque primario y secundario que se encuentra en su entorno.

La nueva versión autoriza a la transnacional a hacer huecos de más de cien metros de profundidad en busca del oro diseminado en el yacimiento, usando dinamita y otros explosivos, así como el uso de gigantescas vagonetas y maquinaria para remover y trasladar hasta de cuatro mil toneladas diarias de material.

En total, el gobierno autorizó la destrucción, por parte de la empresa, de cerca de doscientos treinta hectáreas, incluida la zona de los “huecos” o tajos, las bodegas, las pilas de colas y la planta de procesado del mineral.

Para la extracción del oro, la empresa ocupará cantidades extraordinarias de electricidad que están negociando con COOPELESCA, así como cerca de treinta y cuatro mil setecientos litros de agua por hora, en momentos en que toda la región sufre de sequía o de problemas de abastecimiento de agua potable.

Aunque parezca increíble, la nueva versión del proyecto fue aprobada sin que la Municipalidad de San Carlos, y mucho menos las comunidades de la región, fueran notificadas sobre estos cambios.

¡No hay peor ciego que el que no quiere ver!

El Informe de la Contraloría General de la República Nº 04-PFA, “Fiscalización sobre Evaluación de Impacto Ambiental”, del año 2000, y el Oficio Nº 00827-2001-DHR del 29 de enero del 2001 de la Defensoría de los Habitantes concluyen que_ “La SETENA actualmente carece de recursos profesionales, administrativos y financieros que garanticen un análisis profundo y técnico de los estudios de impacto ambiental presentados ante sus oficinas, así como también carece de personal suficiente y capacitado para realizar una labor de control constante y efectiva, que garantice que no habrá afectación al recurso natural existente”_ (folio 418 del expediente Nº 00 007280-0007-CO).

Estos estudios sirvieron de fundamento a la Sala Constitucional para que, mediante la sentencia Nº 2001-13294 del 21 de diciembre del 2001, anulara la adjudicación de los bloques de exploración de hidrocarburos 5, 6, 7, 8, 9 y 10 a la compañía Mallon Oil Company, en la zona del Caribe.

Además, la SETENA desconoce las recomendaciones hechas por las Escuelas de Geología, de Ciencias Sociales y de Antropología de la Universidad de Costa Rica, quienes, a partir de una consulta hecha por la misma SETENA, recomendaron rechazar el Estudio de Impacto Ambiental por tener problemas de enfoque, por ser parcial, sesgado y complaciente.

Adicionalmente, la SETENA desprecia la voluntad y el rechazo de las comunidades de la Zona Norte y desatiende las preocupaciones externadas por las autoridades del gobierno de Nicaragua que, en voz de la Ministra del Ambiente de ese país, Juana Argenal, ha expresado que “como ministerio nos pronunciamos absolutamente en contra (…) del proyecto”.

Para colmo de males, la SETENA olvida los desmanes y desastres causados por las tres únicas minas de oro a cielo abierto que han operado en Costa Rica minas: la mina Machacona (en Esparza), la mina Beta Vargas (en La Pita de Chomes de Puntarenas) y la mina Bellavista (en Miramar), que después de haber tenido ganancias reportadas, solo en el año 2006, por más de dos mil millones ochocientos mil colones ($5.8 millones), decidieron suspender las operaciones de su mina en el mes de setiembre del año 2007 debido a deslizamientos en la mina.

Con Dios o con el Diablo: no se puede servir a dos amos a la vez

Sacándole brillo y billetes en cantidad a la imagen internacional que tiene nuestro país, el gobierno de “los Arias”, con bombos y platillos, anunció la propuesta de_ “Paz con la Naturaleza”_ como marco de su política ambiental.

Además, en la zona norte ha participado en la creación de la_ “Biosfera de la Humanidad”_ llamada “Agua y Paz”.

Sin embargo, más allá del discurso oficial, las políticas de la administración Arias están a favor de la destrucción de la naturaleza y al servicio del gran capital transnacional y de sus socios locales.

Las declaraciones del Ministerio de la Presidencia, que han satanizado la legítima lucha por el agua de los hombres y mujeres de Sardinal, evocando transnochados discursos y simplistas explicaciones que reducen al pueblo de Sardinal y del país en general a una masa que no piensa ni analiza, anuncia a nuestro pueblo combatiente, rebelde y digno, la descalificación, la represión y la cárcel.

A la hora de la verdad, no se puede servir a dos amos a la vez, y es claro que el gobierno de los Arias, lejos de velar por los intereses de las mayorías y de las futuras generaciones de este país, se ha mancuernado con el gran capital transnacional y sus grandes socios locales…

La lucha se inicia nuevamente

Es tiempo de recoger la cosecha de años de lucha, estudio, visita a las comunidades y sensibilización de nuestra gente.
Con la ayuda descarada de los Arias, la mina ha ganado una batalla, pero no la guerra.

Antes de que la empresa mueva un grano de arena para destruir el bosque y abrir los huecos profundos, deberán obtener permisos ante el ministerio de Salud, así como el visto bueno para el cambio de uso del suelo y la patente de la Municipalidad de San Carlos… pero, sobre todo, tiene que doblegar la voluntad de nuestro pueblo.

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Si desea colaborar o participar en esta lucha, contacte a las siguientes personas:
Lorenzo Cambronero, teléfono 8390-7647, Jeanete Rojas, teléfono 2478-0324,
Asociación DITSO, teléfono 2224-6780
Material informativo preparado por la Asociación de Iniciativas Populares Ditsö y el Frente de Oposición a la Minería de la Zona Norte.

Colaboración solidaria de ANEP

Sindicatos crean protocolos para la atención de discriminación por orientación sexual e identidad de género

Este taller tuvo lugar en el Centro Cultural Español los días 5 y 7 de agosto del presente año y contó con el aporte y participación de la Internacional de Servicios Públicos (ISP), con el soporte técnico de la Organización Internacional de Trabajo (OIT) y del Movimiento Diversidad, organización que trabaja por los derechos humanos de las personas LGBT.

Durante el taller se desarrollaron actividades tendientes a sensibilizar e informar sobre temas relacionados con la diversidad sexual y género, así como con la formulación misma del protocolo, cuyo propósito es facilitar a los sindicatos la atención de situaciones por discriminación laboral basadas en la orientación sexual e identidad de género.

Próximamente, se estará sistematizando esta experiencia y se estará socializando los resultados con el fin de validar dicho protocolo con todas las organizaciones sindicales que forman parte del Comité Inter Sindical y de otras más que estén interesadas. Asimismo, se realizarán más talleres de sensibilización para el personal y la membresía de los sindicatos.

A finales de setiembre estos protocolos serán presentados a la prensa con el fin de socializarlos más ampliamente, y de manera más específica, se le hará llegar a organizaciones sindicales nacionales e internacionales.

Los protocolos forman parte de un proyecto que derivará en una campaña dentro de los sindicatos que permita promover en los centros de trabajo los derechos laborales de las personas LGTB y combatir la discriminación basada en orientación sexual e identidad de género.

“A partir de este taller, el Comité Inter Sindical sobre Diversidad Sexual y Género de Costa Rica se vio fortalecido. Incluso, se ha generado mayor interés por parte de los sindicatos, especialmente los de la educación, que exigieron más actividades sindicales relacionadas con estos temas”, expresó Abelardo Araya Torres, Presidente del Movimiento Diversidad.

Esta iniciativa se lleva a cabo en momentos en que a nivel nacional hay un debate relacionado con el proyecto de ley que propone reconocer las uniones civiles y de hecho entre personas del mismo sexo. Este proyecto de ley permitiría avanzar, entre otros derechos civiles, aspectos relacionados con derechos que surgen del ámbito laboral.

* Comité Internacional LGTB de la ISP/IE
Directivo Nacional de ANEP

¡A politiquear se ha dicho!

Políticos y partidos tradicionales, la prensa y el nutrido ejército de los ideólogos-sabios oficiales, andan atareadísimos convenciéndonos de que ese es la única política que es posible hacer. A lo que se observa, el PAC no está aportando, y ni siquiera insinuando, ni una ínfima novedad en ese panorama estandarizado y previsible.

Se supone que esa política es como una competencia en piscina olímpica. Cada partido en posición; suena el pistoletazo y, entonces, ¡al agua y a brasear y patear con todo! La ciencia política oficial dice que en eso consiste el torneo electoral: es una competencia entre distintos partidos políticos procurando ganarse el apoyo del electorado. Se afirma que todo está normado según las reglas equitativas y racionales propias del sistema democrático.

Puro cuento, como vemos. A estas alturas solo la gente muy ingenua o desinformada se lo cree. Y solo los politólogos despistados, o quienes descaradamente mienten, pueden repetirlo sin ruborizarse.

Repasemos brevemente algunas de las mentiritas.

  • La competencia entre partidos no es equitativa ni responde a reglas igualitarias. Para empezar, se necesita mucho dinero. Tampoco es un proceso que dignifique ni eduque.
  • La oferta que los partidos presentan al electorado el llamado programa de gobierno resulta ser un artilugio altamente combustible. Cualquiera sea el resultado de las elecciones, su único destino es el olvido.
  • Las campañas electorales son gigantescos shows publicitarios: partidos y candidatos devienen mercancías que se venden con base en carísimos despliegues publicitarios, abundantes en manipulación y por completo vacíos de ideas.
  • Los partidos construyen maquinarias electorales que se rigen por ciertos principios bien reconocibles: en la cúpula, la realeza, a la cual se le rinde pleitesía y cuyo palabra es sagrada; en el medio, la bandada de incondicionales, corte bullangera y angurrienta; en la base, los pega-banderas, gente que ejercita una lealtad ciega y una obediencia robotizada.
  • Para las corporaciones mediáticas la política es un juego frívolo y superficial y un negocio muy rentable. Eficaces y cumplidas, actúan como espejo fiel de los intereses e ideología de los sectores más privilegiados. Ignoran y silencian cualquier visión crítica y toda propuesta alternativa.
  • Quienes ganan las elecciones tan solo alcanzan con ello una limitada cuota de poder. No reciben del pueblo la responsabilidad y el poder para “regir” los destinos del país, por la sencilla razón de que el pueblo carece de ese poder. Éste permanece prisionero en manos de grupos muy reducidos. El limitado poder que logran quienes salen electos
  • Basado en la capacidad para la ejecución de las leyes y la administración de las instituciones públicas- está subordinado a la densa telaraña de intereses y visiones ideológicas de esos grupos dominantes, base de sustentación y plataforma sobre la que se hizo posible todo el proceso de elección.

O sea, y en resumen, esta llamada democracia electoral no pasa de ser una farsa, en cuyo montaje se invierten muchos, pero muchos millones, incluyendo los pagos generosos a geniecillos encargados de diseñar la escenografía y los trajes. Pero, al cabo, va quedando claro que es puro teatro. Dicho en términos que los politólogos entiendan: es simplemente falso que los partidos sean ningún mecanismo mediador entre la sociedad civil y la sociedad política (agregaré que la tal sociedad civil es tan solo otra abstracción, tan conveniente como vacía).

Después de las cosas realmente extraordinarias que la ciudadanía organizada de Costa Rica hizo con motivo de la lucha contra el TLC, resultaba razonable pensar que, en adelante, estaríamos en capacidad de reinventar la política. Renovarla a profundidad, darle formas y contenidos y posibilidades nuevas. Sería, entonces, la política como participación informada y responsable. Un despliegue multicolor de organización ciudadana, construyendo, decidiendo, resolviendo. Un enorme intercambio de ideas y propuestas. Un concierto de mil voces, expresándose diversas y libres, con respeto e inteligencia. La política, también, como fragua y fruto de la creatividad e imaginación popular, y como espacio de alegría y fiesta, en plenitud de la vivencia ciudadana, autónoma y soberana.

Justo eso hicimos durante la lucha contra el TLC, particularmente en la fase del referendo. Y si me contestan que una elección presidencial y legislativa es otra cosa, les diré que justo de eso se trata: de hacer que esas elecciones sean efectivamente otra cosa y no esa farsa corrupta que son hoy día. Si este país ha de cambiar y sin duda que le urge hacerlo también ha de cambiar la concepción de lo político, incluyendo lo electoral. Plantearse entonces el reto supremo de lograr que, más allá de leyes y reglamentos, los procesos electorales sean apropiados por el pueblo y, entonces, resignificados, reinventados y, finalmente, reconstruidos enteramente, desde sus mismos cimientos. En el contexto costarricense, nada podría ser más revolucionario.

La madurez política acumulada a lo largo de la lucha contra el TLC sigue viva en el corazón de mucha gente que, sin duda, constituye el sector líder del pueblo costarricense. El germen organizativo, de reivindicación y propuesta palpita y lucha por reverdecer y ganar renovado vigor.

Entretanto, partidos y políticos quizá el Frente Amplio sea una excepción siguen en lo de siempre. Eso es, claramente, lo que conviene a los partidos tradicionales y a la oligarquía. Que me disculpe el jefe del PAC cuya epidermis se ha comprobado muy frágil ante mis comentarios pero lo cierto es que su partido no aporta ninguna novedad a este cuadro, si más bien se ve muy deseoso de entrar en el juego.

Pareciera, pues, que la cosa ha de esperar a tiempos mejores, más allá de 2010. Dependerá del movimiento ciudadano autónomo, de su capacidad para recomponerse, rearticularse, madurar y crecer. Solo entonces la aspiración por una democracia distinta y un nuevo proyecto de país cobraría viabilidad.


18 de Agosto 2008

Falacias y homofobia

Miedo irracional. La abogada es una de las proponentes de que el proyecto de ley que pretende legalizar las uniones entre personas del mismo sexo sea llevado a referéndum, y su estrategia es clara: sembrar un miedo irracional entre la opinión pública para atraer más votos en contra. Ella hace referencia a declaraciones de un activista gay extranjero que nada tiene que ver con la lucha por la igualdad de derechos que se libra en nuestro país.

También nos pinta un cuadro en el que, según ella, los homosexuales conspiran deliberadamente para destruir los conceptos de fidelidad, monogamia y compromiso, cuando la lucha es precisamente para que las muchas parejas del mismo sexo que tienen años de relación estable dentro de ese esquema puedan ver su unión respaldada con un marco legal adecuado, el cual es hoy inexistente, y la misma Sala IV y la Defensorí­a de los Habitantes recomiendan regular.

Se opone también a otro proyecto de ley para combatir la discriminación basada en la orientación sexual, aduciendo que, de aprobarse, se perdería el derecho a la libre expresión y que podrí­a castigarse penalmente a quien critique el estilo de vida gay. Una cosa es la libre expresión, que siempre garantizará el derecho a la discusión de ideas, y otra muy distinta son los insultos y la marginación injustificada que sufre este sector de la sociedad, lo cual es inaceptable.

Otras supuestas consecuencias como la pérdida de la libertad de culto están completamente fuera de lugar. La abogada cita declaraciones homofóbicas de un maestro canadiense que se apoya en el estereotipo de que los gais son inmorales, promiscuos y perversos. El siquiera insinuar que un homosexual es caracterizado por esos males, solamente por su preferencia sexual, es sí­mbolo de ignorancia y prejuicios.

El proyecto de ley. Invito al lector a informarse de manera objetiva y leer el proyecto de ley en discusión en la Asamblea. En él solo se pretende otorgarles a las uniones entre homosexuales algunos derechos especí­ficos como la cobertura por el seguro social a las parejas en las que uno de los miembros depende económicamente del otro, la posibilidad de herencia de bienes, así como la justa división del patrimonio en caso de separación, entre otros.

¿En qué afecta eso a la familia tradicional o a la sociedad? Absolutamente en nada. Todos los supuestos peligros y calamidades de los que nos advierte la abogada son falsos, y sus argumentos resultan profundamente ofensivos para los ciudadanos que estamos a favor de la igualdad de derechos. Inculcarles a nuestros niños la discriminación, la intolerancia y el irrespeto por las diferencias, sobre una base de argumentos falaces e irracionales, es el verdadero peligro para la sociedad.

* Ingeniero
jeudyx@gmail.com

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Nota de www.anep.or.cr

El homofóbico y enfermiso artículo al que se refiere lo puede leer de ARCHIVOS ADJUNTOS

Lo que queda del PUSC le debe casi ¢100 millones a la CCSS

San José, 11 de agosto de 2008

Licenciado
Alejandro Bermúdez
Mora
Secretaría Tribunal Supremo de Elecciones.
S.O

Estimado Licenciado:

Después de un cordial saludo, me dirijo a usted, con el fin de formular respetuosamente la siguiente consulta:

El Artículo 74 de la Ley Constitutiva de la Caja Costarricense de Seguro Social dice:

Artículo 74.-La Contraloría General de la República no aprobará ningún presupuesto, ordinario o extraordinario, ni efectuará modificaciones presupuestarias de las instituciones del sector público, incluso de las municipalidades, si no presentan una certificación extendida por la Caja Costarricense de Seguro Social, en la cual conste que se encuentran al día en el pago de las cuotas patronales y obreras de esta Institución o que existe, en su caso, el correspondiente arreglo de pago debidamente aceptado.

Esta certificación la extenderá la Caja dentro de las veinticuatro horas hábiles siguientes a la presentación de la solicitud, en papel común y libre de cargas fiscales, timbres e impuestos de cualquier clase.

Corresponderá al Ministro de Hacienda la obligación de presupuestar, anualmente, las rentas suficientes que garanticen la universalización de los seguros sociales y ordenar, en todo caso, el pago efectivo y completo de las contribuciones adeudadas a la Caja por el Estado, como tal y como patrono.

El incumplimiento de cualquiera de estos deberes acarreará en su contra las responsabilidades de ley. Penalmente esta conducta será sancionada con la pena prevista en el artículo 330 del Código Penal.

Los patronos y las personas que realicen total o parcialmente Actividades independientes o no asalariadas, deberán estar al día en el pago de sus obligaciones con la Caja Costarricense de Seguro Social, conforme a la ley.

Para realizar los siguientes trámites administrativos, será requisito
Estar al día en el pago de las obligaciones de conformidad con el artículo 31 de esta ley.

1. La admisibilidad de cualquier solicitud administrativa de autorizaciones que se presente a la Administración Pública y ésta deba acordar en el ejercicio de las funciones públicas de fiscalización y tutela o cuando se trate de solicitudes de permisos, exoneraciones, concesiones o licencias. Para efectos de este artículo, se entiende a la Administración Pública en los términos señalados en el artículo 1 tanto de la Ley General de la Administración Pública como de la Ley Reguladora de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa.

2. En relación con las personas jurídicas, la inscripción de todo documento en los registros públicos mercantil, de asociaciones, de asociaciones deportivas y el Registro de Organizaciones Sociales del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, excepto los expedidos por autoridades judiciales.

3. Participar en cualquier proceso de contratación pública regulado por la Ley de Contratación MAdministrativa o por la Ley de Concesión de Obra Pública. En todo contrato administrativo, deberá incluirse una cláusula que establezca como incumplimiento contractual, el no pago de las obligaciones con la seguridad social.

4. El otorgamiento del beneficio dispuesto en el párrafo segundo del artículo 5 de la Ley Orgánica de la Contraloría General de la República.

5. El disfrute de cualquier régimen de exoneración e Incentivos fiscales. Será causa de pérdida de las exoneraciones y los incentivos fiscales acordados, el incumplimiento de las obligaciones con la seguridad social, el cual será determinado dentro de un debido proceso seguido al efecto.

La verificación del cumplimiento de la obligación fijada en este artículo, será competencia de cada una de las instancias administrativas en las que debe efectuarse el trámite respectivo; para ello, la Caja deberá suministrar mensualmente la información necesaria. El incumplimiento de esta obligación por parte de la Caja no impedirá ni entorpecerá el trámite respectivo.

De igual forma, mediante convenios con cada una de esas instancias administrativas, la Caja Costarricense de Seguro Social podrá establecer bases de datos conjuntas y sistemas de control y verificación que faciliten el control del cumplimiento del pago de las obligaciones con la seguridad social.”

(Adicionado a la presente ley por el numeral 5 de la Ley Nº 6914 del 28 de noviembre de 1983 y reformado por el artículo 85 de la Ley N° 7983 del 16 de febrero de 2000).

De acuerdo a lo indicado en esta Ley, le agradeceré hacer la consulta correspondiente para estar al tanto del alcance que pueda tener ante el Tribunal Supremo de Elecciones, el hecho de que algún Partido Político se encuentre con Morosidad por concepto de cuotas obrero patronales con la Caja Costarricense de Seguro Social.

Considero inaceptable, que los dirigentes de los Partidos Políticos que cada cuatro años aspiran a la Presidencia de la República, se burlen del pueblo en cuanto a sus obligaciones con la Seguridad Social.

Le agradeceré llevar a cabo dicha consulta a la mayor brevedad posible, para tomar las acciones correspondientes.

Adjunto documento de la página web de la Caja.

Se despide de usted;

Atentamente;

Roberto Mora Salazar
Céd: 1-396-099