El año pasado, un trabajador murió cada dos días en la construcción del multimillonario proyecto de Qatar para el Mundial de fútbol de 2022. Una empresa americana gestiona gran parte del proyecto, mientras su directora ejecutiva vive en una tranquila zona de Colorado, en Estados Unidos. Si somos 1 millón los que nos unimos en nombre de la libertad, lograremos que nuestras voces le asalten cada vez que salga de su casa para ir a trabajar, a esquiar… hasta que actúe.
Esta misma táctica sirvió para que, en cuestión de días, la cadena de hoteles Hilton actuara contra el tráfico sexual de mujeres en sus hoteles. Suma tu voz para ayudar a liberar a los esclavos de Qatar:
https://secure.avaaz.org/es/bloodiest_world_cup_loc/?bpzIPab&v=54175
La raíz del problema radica en el programa diseñado para reclutar trabajadores extranjeros en Qatar. Les prometen buenos empleos a personas de Nepal o Sri Lanka pero, en cuanto ponen un pie en el suelo, sus empleadores les confiscan los pasaportes y les obligan a trabajar largas jornadas bajo 50º centígrados sin posibilidad de escapar.
La empresa norteamericana CH2M Hill echa la culpa a los contratistas locales y a las leyes nacionales. Sin embargo, CH2M Hill es la cara pública de las obras de construcción del Mundial. Su directora ejecutiva puede y debe asumir un rol de liderazgo a la hora de garantizar que no presenciemos otros siete años de muertes de trabajadores. Podría incluso amenazar con llevarse su negocio a otro lado si este sistema no cambia.
CH2M tiene la responsabilidad de ayudar a poner freno a esta forma de esclavitud moderna. Nuestra campaña puede conseguir que alcen su voz frente a la injusticia y conseguir que otras empresas se unan a la batalla hasta que no quede ni un trabajador prisionero en Qatar. Haz clic abajo para unirte y, cuando seamos 1 millón, el equipo de Avaaz le entregará nuestro mensaje directamente a Jacqueline Hinman, directora ejecutiva de CH2M Hill, una y otra vez hasta que responda:
https://secure.avaaz.org/es/bloodiest_world_cup_loc/?bpzIPab&v=54175
Una gran protesta global en el momento preciso puede salvar miles de vidas. Cuando la cadena de hoteles Hilton estaba ignorando el problema de tráfico sexual de mujeres y niñas en sus hoteles, el equipo de Avaaz puso el escándalo frente a los ojos de su director ejecutivo y cambiaron la política en cuestión de días. ¡Hagámoslo de nuevo!
Con esperanza,
Emma, Nell, Mais, Ricken, Alice y todo el equipo de Avaaz