En los últimos días, tanto la Presidenta Laura Chinchilla y el Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora han señalado en los medios de comunicación y a la opinión pública que han cumplido con la tarea en el tema de seguridad, pero ¿de qué forma cumplieron?; si en realidad lo hicieron… más allá del tema de percepción que se pudo haber manejado con el uso de las redes sociales y del mercadeo de imagen, esto último es lo que se podría resaltar en esta administración en el tema de seguridad.
Para Mainor Anchía, Representante de la ANEP en la Fuerza Pública lo que la Presidenta, Laura Chinchilla y el Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora no mencionaron, que para cumplir algunas de las tareas han sobre explotado a los efectivos de la Fuerza Pública con jornadas que superan las doce horas diarias, donde los obligan a descansar cinco horas para volver a estar en servicio.
“A esto se une que deben de laborar en verdaderos cuchitriles, porque tenemos más de 600 delegaciones en este país que siguen siendo cuchitriles, en algunos casos deben de alimentarse con animales de toda especie, situaciones que son de conocimiento del Ministerio de Salud, ente que en varias ocasiones ha declarado como inhabitables varios puestos de policía”, manifestó Anchía esta tarde en conferencia de prensa.
Otro de los problemas abordados por el representante de la ANEP en la Fuerza Pública, es la alta desintegración familiar que viven los efectivos de la Fuerza Pública. Situación que no es ajena a las autoridades del Ministerio de Seguridad Pública, ya que conocen el dato.
“No solo son familias desechas, si no familias que han perdido la cabeza de su hogar por la vía del suicidio, debido a la presión y estrés laboral a las que son sometidos. Estas situaciones no han sido dichas por esta administración, que de paso, es la que ha visto más decesos por la vía del suicidio de nuestros compañeros de la Fuerza Pública”, aseveró Anchía.
Anchía tampoco dejó de lado el tema del manual de puestos, anunciado con bombos y platillos por la administración del Ministerio de Seguridad Pública antes de finalizar el año (2013), el cual en apariencia vendría a solventar el tema salarial en la Fuerza Pública.
“El escenarios es muy diferente, ya que en este momento lo que se está manejando es una absoluta incertidumbre y frustración en nuestras compañeras y compañeros, ya que la forma en que fue diseñado el manual por la actual administración podría inclusive llevar a una parálisis institucional”, finalizó Anchía.