Carta de respuesta a un afiliado de la Dirección de Migración y Extranjería que nos escribe con honda preocupación sobre el decreto firmado por la Presidente Laura Chinchilla, el cual en su apartado nº5 habla sobre la eliminación de contratos de dedicación exclusiva.
Estimado licenciado don (nos reservamos el nombre del afiliado): Es un honor saludarle, muy respetuosamente. Estoy enviando copia de su importante señalamiento y de la respuesta de este vuestro servidor, a muchas personas trabajadoras del sector Público con las cuales nos comunicamos por esta vía. Le ruego tomar nota de lo siguiente:
1) En ANEP ya nada nos extraña con la lógica macroeconómica dominante, de sesgo neoliberal; lógica que se manifiesta de gobierno a gobierno, tan solo con matices y tonos algo “distintos“. El manejo apocalíptico, fundamentalista y casi que de obsesividad patológica, en este caso del déficit fiscal, lleva a planteamientos irracionales como el que usted comenta: La eliminación de la Dedicación Exclusiva y todo el significado de desvalorización profesional y de precarización laboral asociado a una decisión tan errática pero tan insustancial, si se trata de contener el tal mentado “déficit“, sobre el cual tenemos serias dudas de su existencia.
2) Permítasenos una disgreción. Esta cuestión del déficit fiscal, muy recurrente por cierto, no deja de representar un negociazo desde la perspectiva de la lógica hegemónica del capital financiero que ahora controla los verdaderos resortes del poder en el país. Se obliga al Gobierno a salir en carrera loca a buscar plata al mercado financiero y a vender bonos con atractivas tasas de interés. ¿Quién compra bonos a manos llenas?. Verdad que usted no. Nosotros tampoco tenemos plata para eso. ¿Entonces?… Grandes grupos económicos con vinculaciones financieras y con conectes políticos al más alto nivel, ganan mucho con el cuento del déficit y, por ende, comprándole al Gobierno gigantescas cantidades de bonos a alto interés.
3) Poco antes de la llegada de su correo, ya pensábamos referirnos al punto. Por un lado, pasar el asunto para su análisis en el seno de la Unidad de Asesoría Jurídica (UAJ), de la ANEP, lo cual estamos haciendo ya por esta vía, oficialmente. Solicitamos un criterio a nuestro personal profesional en la materia para compartir con usted y con toda nuestra gente.
4) Sin embargo, no hay elemento más fuerte en la defensa de derechos que la acción de la gente a la cual se le pretende quitar o se le está quitando esos derechos. Nosotros, en ANEP, creemos en el poder de la movilización, creemos en lo que hemos denominado la “Democracia de la Calle“; porque cuando nuestros gobernantes se alejan del sentir de la gente, que es el sentir del pueblo, de las mayorías, debemos salirles al paso. Nuestra forma de incidencia, como “ciudadanos y ciudadanas de a pie“ es la organización y la movilización para influenciar, a nuestro favor, la toma de las grandes decisiones. Los otros, que no somos nosotros, los de la acera de enfrente, también buscan influenciar, influir, presionar, incidir; sólo que ellos lo hacen en los pasillos de palacio, en reuniones “privadas“, en conciliábulos conspirativos y ahora que está muy de moda, con llamadas telefónicas, con el telefonazo.
5) Así que, sirva su relevante comunicación, sirva nuestra respuesta, como señal de alerta de que la DEDICACIÓN EXCLUSIVA SERÁ ELIMINADA si nos dejamos. Alístese usted a salir a la calle y comparta esta lucha que es su lucha. Por ejemplo, este miércoles 23 de febrero, luego de las 2 de la tarde, haremos una manifestación de inconformidad por todo esto, en las afueras de la sede central del Ministerio de Trabajo, en Barrio Tournón. Luego, el día jueves 10 de marzo, nos vamos en la calle, en el Parque Central, a eso del mediodía.
6) La eliminación de la Dedicación Exclusiva se une a otras nefastas medidas empobrecedoras, como el prácticamente real congelamiento salarial, como el venidero paquete de impuestos; como el impedimento para nombrar más gente y, por ende, el deterioro de los servicios, etc., etc.
En verdad, no hay quite. Si usted no se mueve, si cientos y cientos de profesionales como usted no se mueven; si las personas interinas no se mueven (las que entraron en el decreto y las que quedaron fuera); si las personas en propiedad no se mueven; en fin, si todos y todas no nos movemos, nos arrasarán. Nosotros y nosotras, en ANEP, no nos vamos a rendir. Hemos de pelear con todas nuestras fuerzas. Súmese a esta noble causa.
Servidor atento,
Albino Vargas Barrantes
Secretario General
ASOCIACIÓN NACIONAL DE EMPLEADOS PÚBLICOS Y PRIVADOS, ANEP