Se equivoca el señor Edwin Mora Montero al culpar a los sindicalistas y a los empleados públicos de la situación fiscal que vive el país. Nos imaginamos que el señor Mora desconoce que a los empleados públicos se les rebaja puntualmente el impuesto de la renta todos los meses, vía planilla.
Según el último informe de la Contraloría General de la República (mes de mayo del 2014), el cual le recomiendo leer, la evasión en este país es de ¢1.560.000 millones de colones y eso no lo dicen los sindicatos. Lo dice el máximo órgano de control de este país. De tal forma, don Edwin, que la crisis no se origina en los salarios o los pluses que reciben los empleados públicos.
Por otro lado, le debemos informar que en estos días nuestra organización mantuvo una reunión con una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) que visito el país y ellos mismos nos dijeron que es mentira que el país está en crisis. Esta versión la han hecho circular otras personas de manera mal intencionada y con el único propósito de satanizar los ingresos que reciben los funcionarios públicos, los cuales se están tratando de reducir mediante una campaña bien orquestada desde algunos medios de comunicación.
Como usted bien señala, los derechos que disfrutan los empleados públicos tienen su origen en leyes o en convenciones colectivas, la mayoría de las cuales han sido aprobadas y refrendadas por quienes siempre han administrado este país: los empresarios.
Olvida don Edwin que las convenciones colectivas son acuerdos bipartitos y que ninguna de ellas puede nacer a la vida jurídica sin el aval del patrono; que en el caso específico de Costa Rica son los empresarios, quienes hasta el gobierno de Doña Laura Chinchilla habían administrado este país.
No debe olvidar don Edwin Mora que las convenciones colectivas no pueden ser satanizadas ni eliminadas, por cuanto las mismas se fundamentan en convenios internacionales firmados por Costa Rica con la OIT; y si estamos hablando de seguridad jurídica, sería un contrasentido que se desconozcan los convenios internacionales firmados por Costa Rica con un órgano tan importante para la regulación de las relaciones laborales.