Se aprueba de manera anticonstitucional la reelección presidencial por parte de una Sala Cuarta absolutamente sometida a los dictados de los Arias. El Tribunal de Elecciones da por válidos los resultados de una elección presidencial truculenta, sucia y manipulada, como sólo la oligarquía costarricense y sus lacayos saben hacerlo.
El Ejecutivo impone en la Asamblea Legislativa reglamentos y mecanismos antidemocráticos y dictatoriales para “aligerar el trámite” del TLC y de las leyes entreguistas de la agenda complementaria. El pueblo solicita ante el Tribunal de Elecciones su propio referéndum para el TLC, pero el presidente espurio se acredita la solicitud del referéndum, que le es aceptada y convocada por el Tribunal de Elecciones en tiempo y condiciones acorde a los intereses del gobierno y la oligarquía. Los magistrados de la Sala Cuarta, a contrapelo del criterio de técnicos, científicos y de connotados juristas, avalan el TLC negociado por los vendepatrias, así como los reglamentos antidemocráticos de la Asamblea Legislativa.
Los magistrados del Tribunal de Elecciones, pusilánime y cínicamente, se prestan para las más burdas manipulaciones del proceso de referéndum, que incluyen la aplicación en todos sus alcances del tristemente célebre memorándum del miedo y la intervención del gobierno fascista de George Bush. Desde mucho antes de iniciarse la campaña del referéndum, el Tribunal de Elecciones permitió a los medios de comunicación de la oligarquía ejercer una violencia descarada e ilegal contra los promotores del NO, aún en el período de tregua (con honrosísimas excepciones que el pueblo ya ha identificado).
En el proceso de debate de la infame agenda complementaria, la licenciada Gloria Valerín ha sido privada de su deber profesional a la cabeza del Departamento de Servicios Técnicos de la Asamblea Legislativa.
Como corolario, tengamos por seguro que los tres expresidentes corruptos de los partidos de la oligarquía van a salir libres, como pago por el apoyo que dieron al TLC.
¿Se puede negociar con esa clase de gobierno? ¿No es indigno o humillante seguirle la corriente a dictadores como los Arias?
El compañero Albino Vargas, Secretario General de ANEP, en acertado análisis de la coyuntura de lucha contra el TLC, sintetiza una idea que se impone categóricamente en la conciencia de miles de costarricenses: el derecho a la rebeldía.
Como dice la canción: “Se está pudriendo esta basura. Si esto no es una dictadura… ¿Qué es?”
Marco Tulio Picado Méndez C.1-597-419
Anepista y Votante del NO