Una perspectiva bajo el concepto del REFERÉNDUM DE LA CALLE

1 – Vamos hacia el primer mes de instalación del nuevo parlamento costarricense, lapso suficiente para hacer públicas nuestras primeras consideraciones al respecto; a fin de compartirlas con los legisladores y con las legisladoras de recién llegada a sus respectivas curules y con sus correspondientes equipos asesores. Igualmente, con las bases sociales de nuestras respectivas organizaciones y con las de las agrupaciones amigas y fraternas.

2 – Estas consideraciones son producto de una seria reflexión colectiva tanto a lo interno de la ANEP como de ASDEICE. Las hemos conjuntado bilateralmente y luego compartido con compañeros y compañeras dirigentes de una amplia serie de organizaciones sociales, las cuales, en términos generales, comparten nuestra visión acerca del carácter del proceso político-social que vive hoy nuestra querida Costa Rica. Empezamos…

3 – La derecha económica oligárquico-neoliberal, aglutinada hoy en el Partido Liberación Nacional (PLN), está más que feliz pues se siente “empoderada” del control y de la iniciativa política parlamentarias; luego de su matrimonio ideológico con el sicariato político de esa derecha representada en el partido de los casinos y de las casas de apuestas.

4 – Particularmente, se nota como la fracción parlamentaria liberacionista está orientada por la agenda ideológica de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones de la Empresa Privada (UCCAEP). Este gremio empresarial logró posicionar, primero como candidata diputadil en ese partido y luego como jefa de su grupo legislativo, a la señora Mayi Antillón, figura de la máxima confianza de los connotados hombres de negocios, Marco Vinicio Ruiz (hoy Ministro de Comercio Exterior) y Samuel Yankelewitz. Así, la UCCAEP se posiciona en dos escenarios decisorios para sus intereses, relegándose a un segundo plano de la agenda política liberacionista puntos de barniz socialdemócrata como para guardar las apariencias.

5 – Esta situación pareciera tener incómodos a algunos de los nuevos legisladores liberacionistas, pero es muy temprano para el surgimiento de eventuales discordancias pues el máximo jefe está en el control total de la iniciativa política… Al menos por ahora. Se considera que la contundencia de las argumentaciones contra el denominado TLC, podría generar quiebres con un compromiso de lealtad personalista y hasta un “domingo siete” podría saltar en la fracción liberacionista cuando llegue la “hora cero”.

6 – Los sectores patrióticos parlamentarios, algunos ya plenamente identificados y otros que podrían asumir posiciones civilistas y democráticas, parecieran “arrinconados”; no obstante, el coraje, el valor y la claridad política de un diputado como don José Merino del Río, del Partido Frente Amplio, nos dan garantía plena de que la victoria ya cantada por esa derecha, podría convertirse en un revés que, definitivamente, cave su sepultura para siempre. Es sorprendente cómo este ciudadano, costarricense por adopción, tenga más interiorizada la esencia de la idosincracia costarricense que muchos de sus actuales colegas parlamentarios, evidentemente vendepatrias al sonido del tintineo metálico. La solidez intelectual y la base social del diputado José Merino es muy amenazante cuando la docilidad, el oportunismo y la mediocridad empiezan a aflorar en el nuevo parlamento. Su “peligrosidad” es tal que por eso lo excluyeron de la participación plena en la comisión legislativa que debe tramitar el TLC.

7 – Admirable resulta la valiente posición del señor diputado don Oscar López Arias, del Partido Accesibilidad sin Exclusión (PASE), quien pareciera perfilarse como un abanderado calificado de los sectores excluidos, no solamente por la situación de discapacidad, sino desde una perspectiva sociopolítica.

8 – Como bien sabemos, la amplísima mayoría del pueblo costarricense está excluido de los famosos beneficios del crecimiento económico tan pregonado por esa derecha codiciosa y angurrienta. La riqueza se concentra aceleradamente en pocas manos, especialmente luego de la llegada al país del capital sangriento centroamericano para enlazarse incestuosamente con algunos de sus pares nacionales, ya sin más escrúpulos que la avaricia por la acumulación más veloz posible. Tenemos fe en el legislador don Oscar López Arias, dada su trayectoria ética antes de convertirse en diputado; suponiendo la honra fiel a las estimulantes reflexiones y posiciones intercambiadas con nuestras organizaciones, poco antes de asumir su curul.

9 – Por su parte, la fracción del casi en extinción Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), podría tener una excelente oportunidad de exorcizarse de tanto neoliberalismo y corruptela, para recuperar la noble senda del humanismo cristiano. Esta fracción sabe que el gran capital (y particularmente, su sector oligárquico-financiero), los “descartó” en las pasadas elecciones como sus representantes políticos en el sistema institucional formal.

10 – Para la fracción PUSC retornar a la filosofía del humanismo cristiano y a la esencia de las enseñanzas de la Doctrina Social de la Iglesia Católica, implicará, necesariamente, una posición contraria a ese TLC que es defendido por esa oligarquía cuyos intereses estuvo el PUSC defendiendo tanto tiempo y que les “desechó” en la campaña electoral recién pasada. Somos escépticos de su reencuentro con las raíces del pensamiento del Dr. Rafael Ángel Calderón Guardia. Sin embargo, esperaríamos una recepción profunda y una audiencia calificada a los razonamientos construidos desde los sectores sociales en éste y en otros temas de la agenda nacional que tiene en sus manos el actual parlamento.

11 – Es cada vez más decepcionante el papel del Exdefensor de los Habitantes de la República, el Lic. José Manuel Echandi Meza, del Partido Unión Nacional (PUN). Le creíamos capaz de tener pensamiento propio pero cada vez notamos su “traslado” hacia las tiendas ideológicas del neoliberalismo. Su característica pusilanimidad le lleva a buscar aquel lugar de “mejor” sombra. En todo caso, para los sectores sociales, él ya es visto como furgón de cola de la iniciativa política parlamentaria de la derecha oligárquica pro-TLC.

12 – Sobre la derecha religiosa con escaño parlamentario, no es necesario hacer mayor mención. Está totalmente claro de cual lado está. La ética cristiana no parece colisionar con la “ética” neoliberal cuando de intereses se trata.

13 – Finalmente, la fracción parlamentaria del Partido Acción Ciudadana (PAC) parece tener un grave problema de “identidad” para perfilarse como opción política confiable. Estamos notando una decepción creciente en múltiples de los cientos y cientos de grupos sociales que, por razones de coyuntura, ayudaron, con toda mística y desprendimiento, al ascenso electoral de dicho partido, al punto cuantitativo de sobra conocido.

14 – La esperanza de una militante respuesta patriótica y cívica del PAC en la nueva coyuntura parlamentaria, pareciera estar en el carácter, la decisión y la firmeza de algunas de sus individualidades: algunas connotadas, otras empezando a visibilizarse y otras de potenciales sorpresas. Muchas de las curules del PAC se hicieron realidad por un enorme sacrificio social y eso, respetuosamente lo decimos, debería tenerse presente un día sí y otro también.

15 – El PAC debería entender que el concepto de “mayoría” manejado por esa oligarquía financiera y gran exportadora e importadora, pro-TLC, no necesariamente es aritmético. Por tanto, caer en la trampa de “dejar votar” en una cuestión tan sensible como el TLC, representaría un profundo menosprecio y una burla total para los miles y miles de compatriotas quienes, desde la sociedad civil organizada, escenificarán el Referéndum de la Calle en esa “hora cero”.

16 – La ética política defendida tan fuertemente por el PAC no es la misma “ética política” de esa derecha oligárquica pro TLC, la cual fue capaz de torcer la Constitución Política para permitir la reelección presidencial; facilitando así la llegada de “su mejor cuadro” al Gobierno, a fin de que éste, el Presidente Oscar Arias Sánchez, realice, ¡por fin!, la tarea que no pudieron completar ni Calderón Fournier, ni Rodríguez Echeverría, Ni Figueres Olsen, ni Pacheco de la Espriella, todos hijos de ella.

17 – Finalmente, debe quedar suficientemente claro a las nuevas autoridades legislativas, de todos los partidos sin excepción alguna, la siguiente perspectiva anidada en todos los Sectores Sociales: La suerte del país en las actuales circunstancias históricas, ya no es resorte monopólico de un parlamento reflejo del agotamiento de una democracia representativa totalmente prostituida por una combinación de factores, lo que parece tornar como irreversible una relegitimación institucional según los añejos parámetros todavía vigentes.

18 – En los sectores sociales de nuestra querida Patria, de profunda convicción democrática y civilista, va arraigándose fuertemente el concepto de democracia participativa que tiene hoy rango constitucional. Es bajo esa premisa correcta correspondiente al momento histórico que estamos viviendo, lo conducente para invocar, minuto a minuto, horas tras hora, día tras día, la movilización ciudadana bajo el concepto del Referéndum de la Calle. Es esta la única posibilidad real de frenar o atenuar la voracidad por la acumulación de riqueza de esa oligarquía pro TLC. Esa movilización tendrá que ser profunda, extendida; gremial, sectorial; regional y nacional; coordinada o por etapas, en procesos donde lo tradicional se mezcle con lo no tradicional, con tácticas y estrategias de lucha, típicas y atípicas

19 – La necesidad de esta concepción de democracia callejera, es completamente estratégica para el momento histórico que vive nuestra querida Costa Rica. Para los sectores sociales el TLC constituye el “asalto final”, la conclusión del proceso sistemático de desmontaje del Estado Social de Derecho; terminándose así la tarea sin finalizar todavía debido a la enorme resistencia ciudadana, de la agenda del denominado “Consenso de Washington”. Es decir, la apropiación privada final de los servicios públicos de mayor impacto, cobertura y potencialidad de rentabilidad que tenemos todavía en nuestro país, en manos de importantes instituciones ligadas a la esencia de nuestra nacionalidad costarricense: ICE, INS, CCSS, A y A, agricultura, entre otras.

20- Periódicamente bajo esta forma y otras por ponerse en práctica, los actuales legisladores y legisladoras tendrán una oportunidad directa de saber cómo se mira su accionar desde la perspectiva de los movimientos sociales ó en buena parte de los mismos. Además, se podrá conocer algunos planteamientos generados a partir de esa visión de los sectores sociales, sobre temas candentes de la agenda nacional parlamentaria. Bueno sería que las señoras legisladoras y los señores legisladores tengan presente y recuerden, antes de ingresar al recinto parlamentario, que juraron ante Dios y ante la Patria, honrarla y defenderla, día a día; de lo contrario, El y nosotros, el pueblo en las calles, os lo demandaremos.

Albino Vargas Barrantes
Secretario General de ANEP

Fabio Chaves Castro
Presidente de ASDEICE

23 de mayo de 2006

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