La Internacional de Servicios Públicos celebra la buena noticia del acuerdo alcanzado por diez países de la UE para la introducción de una Tasa a las Transacciones Financieras — también conocida como la ‘Tasa Robin Hood’. La ISP y sus afiliadas se enorgullecen de encabezar, junto a sus aliadas de la sociedad civil, el movimiento mundial en defensa de la justicia fiscal, en el cual se enmarca la campaña por la FTT, como medio de poner fin a la pobreza y a las desigualdades a través de la financiación de los servicios públicos de calidad.
David Hillman, coordinador de la campaña asociada “Stamp Out Poverty” (Erradiquemos la pobreza) comparte el siguiente informe:
Gracias a un acuerdo histórico, diez Estados acordaron introducir una Tasa a las Transacciones Financieras (FTT, sus siglas en inglés) tras un encendido debate durante la reunión de ministros europeos de Finanzas, el 6 de mayo. George Osborne se estremeció al conocer la decisión de estos países, encabezados por Alemania y Francia, de introducir por fases la aplicación de la FTT, empezando por las acciones y algunos derivados, para comenzar a recibir ingresos el año próximo.
El comisario europeo de Fiscalidad, Algirdas Semeta, tomando la palabra durante la sesión, transmitida por televisión, hizo referencia explícita al amplio respaldo que la ciudadanía europea da la FTT. Prueba de ello, informó a los ministros, era la movilización a favor de la Tasa Robin Hood que estaba teniendo lugar en el exterior para la prensa allí reunida. Como símbolo de la victoria de Robin Hood, los activistas instalaron un ring de boxeo en el que Robin acorralaba contra las cuerdas a un banquero, bajo los vítores de la multitud; aunque Robin no llegaba a alcanzar el premio del dinero, que seguía en manos de la canciller alemana Angela Merkel y del presidente francés, François Hollande.
Esta representación simboliza a la perfección el punto en el que se encuentra la campaña: A pesar del gran paso adelante que supone el acuerdo político alcanzado por los diez países de la UE, aún queda mucho trabajo por delante para traducir esta tasa en “gastos Robin Hood” que sirvan para proteger los puestos de trabajo, impulsar el empleo y mejorar y salvar las vidas en los lugares más pobres del mundo.
El sí de Alemania, Francia, Italia y España, entre otros, ha impulsado la nueva tasa, pero ¿qué hay del Reino Unido? El comportamiento de nuestro gobierno nos resulta deprimentemente negativo — presentó un recurso contra la decisión de estos países pioneros, en un intento de frenar la FTT. Afortunadamente, acaba de perder una batalla, ya que el Tribunal Europeo de Justicia desestimó el 30 de abril el recurso presentado por el Reino Unido, y allanó el terreno al histórico avance logrado la semana siguiente. Se trata de un enorme y embarazoso revés para el ministro Osborne y una reprimenda por defender los intereses del sector financiero por encima de los intereses de la Gran Bretaña en su conjunto. El recurso, además de inoportuno, mal calculado e infructuoso, resultará también un gasto enorme para los contribuyentes, ya que el tribunal europeo dictaminó que el Reino Unido deberá pagar las costas del caso.
Aunque el ministro de Hacienda del Reino Unido se oponga a Robin, muchas, muchas personas lo apoyan:
- 700 000 personas firmaron ya la petición a favor de la introducción de la FTT — ayúdennos a llegar a una millón de firmas, movilizándose y enviando la petición a dos personas más.
- Desde febrero, más de medio millón de personas han visto el video en defensa de la Tasa Robin Hood, protagonizado por Bill Nighy.
- 49 ayuntamientos británicos, representantes de 14 millones de ciudadanos y ciudadanas del Reino Unido, han aprobado mociones de apoyo a la Tasa Robin Hood.
- Incluso respetados miembros del sector financiero, como el antiguo director gerente de J P Morgan, John Fullerton, se han unido a nuestra causa — lean su excelente artículo, aquí (en inglés).
Juntos, ¡conseguiremos que este sea el impuesto más popular de la Historia!
Como una bola de nieve, cada vez son mayores los apoyos a la Tasa Robin Hood: entre la ciudadanía y los ayuntamientos británicos; entre los expertos financieros; a ello sumamos el fracasado intento del gobierno británico de bloquear su avance; y el respaldo de diez países europeos a la primera fase de la FTT. No obstante, aún queda mucho por delante hasta materializar el impuesto por el que estamos luchando.
Necesitamos lograr una tasa lo más firme y con el mayor alcance posible en Europa. Tenemos que conseguir que cubra tantos productos financieros como sea posible y que carezca de lagunas legales por las que se cuele el sector financiero. También necesitamos lograr que el dinero se dirija a los lugares correctos, es decir, que se destine a la protección de los empleos y de los servicios públicos; que sirva para responder a los compromisos en materia de agua potable, salud y educación de los países en desarrollo; y para combatir los problemas derivados del cambio climático. También necesitamos aprovechar el avance de la FTT en el continente europeo para cambiar los corazones y las mentes en el Reino Unido y persuadir a los partidos políticos, en el periodo previo a las elecciones generales de mayo del próximo año, que este es el momento de aplicar la Tasa Robin Hood.
Ayúdenos a reunir un millón de voces reclamando la Tasa Robin Hood — hasta ahora hemos conseguido 700 000 firmas. Por favor, pidan a dos personas que conozcan que firmen la petición, para que podamos transmitir a los medios de comunicación de todo el planeta que la Tasa Robin Hood será el impuesto más popular de la historia. Si nos ayudan, ¡lo lograremos!.