En este mes de enero del año que acaba de empezar, deberá definirse el monto del incremento salarial aplicable durante el primer semestre del 2003, para todos los trabajadores y para todas las trabajadoras del Sector Público.
ANEP considera que las discusiones con tal propósito, en el seno de la denominada Comisión Negociadora de Salarios del Sector Público, serán complicadas y conflictivas; habida cuenta de que el Gobierno de la República tiene la predeterminación de que tal incremento no supere la cifra del 3.5% semestral durante el presente año.
La fijación salarial de estos días se hará dentro del marco de la denominada crisis fiscal y muy particularmente, bajo la perspectiva de un recorte general del gasto público, del orden de los 120 mil millones de colones; decisión ésta de tipo shock, rechazada de manera tajante por la ANEP.
Mantenemos la tesis de que se impone en el país una política salarial diametralmente distinta a la imperante en los últimos años durante varias administraciones; cual es, aquella únicamente diseñada para compensar la inflación sin incrementar el poder de compra de los salarios de la clase trabajadora.
Esta situación es doblemente perjudicial para el trabajador porque aparte de que no se incrementa el poder adquisitivo de su salario, las variaciones de inflación se calculan son base en un Índice de Precios al Consumidor (IPC), totalmente desactualizado que data de 1988.
Así las cosas, la negociación salarial del Sector Público de los próximos días, será sumamente conflictiva y tenemos bastante escepticismo acerca de que se llegue a un acuerdo en la mesa de negociaciones. Serán las bases laborales del Sector Público las que dirán la última palabra.
San José, 2 de enero del 2002.