27 DE NOVIEMBRE DE 2019: Acerca de la codicia desenfrenada de la Asociación Bancaria Costarricense (ABC) y la posible regulación para una regulación del obsceno cobro de las tasas de usura. Hace 10 años, en 2009, escribimos esta serie de cuatro artículos, mismos que fueron publicados en la Página de Opinión de Diario Extra: el “cártel” de los banqueros y el candidato vicepresidencial de doña Laura. en ANEP pensamos que hoy mantienen una actualidad inobjetable. Le invitamos, respetuosamente, a leerlos y a compartirlos.
EL
“CÁRTEL” DE LOS BANQUEROS Y EL CANDIDATO VICEPRESIDENCIAL DE DOÑA LAURA[1]
Doña Laura, como aspirante a la Presidencia, usted no puede guardar silencio acerca de las acusaciones lanzadas en contra de su candidato vicepresidencial, el banquero Luis Liberman.
Doña Laura: El abogado y economista, don Jorge Guardia Quirós (figura de prestigio en los medios políticos tradicionales), publicó en el periódico oficial de la oligarquía (ese medio que está apoyando su candidatura), una columna que desde la perspectiva de los sectores sociales y de la ciudadanía patriota, constituye la denuncia más sensacional de los últimos tiempos.
¡Por fin! se le pone rostro a ese poderosísimo grupo del capital financiero nacional, los banqueros, quienes amasaron gigantescas fortunas al amparo de las políticas económicas neoliberales de los últimos cinco gobiernos, del binomio conocido por el pueblo como “PLUSC”.
Que los banqueros neoliberales hayan controlado la política económica costarricense en todos estos años, generó graves consecuencias que sufrimos hoy: crecimiento de la desigualdad, de la concentración de la riqueza, de la pobreza insuperada, de la violencia en todas sus formas; y como era de esperarse, de una corrupción desenfrenada.
Doña Laura: don Jorge Guardia acusa a su banquero, don Luis Liberman (y al grupo del que él forma parte; grupo que, sin duda, controlará su futuro gobierno si usted gana la Presidencia), de una impresionante cantidad de conductas impropias en materia de gestión financiera, conductas que podrían ser delictivas, delincuenciales. Es mas, hasta podría hablarse de un cártel de banqueros en el control de la política económica nacional.
Dice el señor Guardia que el señor Liberman es un cabildero que está en deuda con el país, porque los del grupo que él representa, “lograron aprobar leyes, decretos y políticas económicas que los beneficiaron en cantidades muy grandes, tan grandes que nadie las ha podido cuantificar”. Además de que el grupo banquero del señor Liberman fue tan influyente que “persuadió” a los partidos tradicionales (PLN-PUSC), para ubicar a miembros de su clan en Hacienda, Banco Central, Sugef, Conassif y Supen. Aquí emplazamos al sr. Guardia para que dé los nombres que nos ofreció en su denuncia.
Mientras al pueblo, a la clase media, a las micro, pequeñas y medianas empresas les recetaban altísimas tasas de interés por sus créditos, los banqueros del grupo del Sr. Liberman, “lograron que les rebajaran los encajes bancarios en ciertos períodos para poder prestar y lucrar más, obligando al Banco Central a absorber esos recursos e incurrir en pérdidas y afectar la inflación, que castiga a los más pobres. Lucraron con los bajos impuestos de renta a los intereses (8 %), mientras que los demás mortales, incluyendo asalariados, pagaban tasas mucho más elevadas, del 15 %, 25 % y hasta un 30 %…”.
Dice el sr. Guardia que los del grupo del banquero Liberman, candidato vicepresidencial de doña Laura, “captaron y prestaron mediante sus offshores sin satisfacer encajes, someterse a la Sugef, ni pagar impuestos. Todo una vida hicieron plata exenta por medio de sus offshores y, al final, tampoco pagaron nada (ni cuita), pues al ponerse viejos vendieron sus acciones a bancos extranjeros sin estar sujetos a impuestos sobre la renta”. A juzgar por tan graves acusaciones, aquí estaríamos hablando ya de, presuntamente, banqueros ladrones.
El sr. Guardia acusa al grupo de banqueros representados por el sr. Liberman (ahora colocado él en la fórmula presidencial de doña Laura), de que con el control que lograron del Banco Central, del Ministerio de Hacienda, habrían obtenido “…una interpretación favorable de los gastos asociados con ingresos gravados a tasas preferenciales para ahorrar millones en impuestos”. El denunciante dice que (algo así como para nuestro consuelo), que este chorizo, al menos, sí está en juzgados gracias a una valentía de Tributación.
La lista de los presuntos chorizos banqueros que nos denuncia don Jorge Guardia Quirós, es impresionante, pues según él, el grupo al que pertenece el candidato vicepresidencial de doña Laura, disfrutó “de los beneficios de las minidevaluaciones, pues traían capitales extranjeros mientras el Banco Central asumía todo el riesgo cambiario”.
Lo expresado por don Jorge Guardia debe provocar una profunda investigación del Ministerio Público. Don Francisco Dall” Anesse, en quien tanto confía la gente, debe actuar de hecho. Es más, le hacemos respetuosa petición pública al respecto, por esta vía.
Si hoy en día hay 600 mil personas trabajadoras que ganan por debajo del salario mínimo; si hay un millón de compatriotas que no ganan lo necesario para satisfacer, mínimamente, sus necesidades básicas; si la canasta básica alimentaria del INEC dice que una persona puede “vivir” al día con 996 colones, diez céntimos; si la clase media (en todos sus segmentos) está altamente endeudada como una forma desesperada de escapar de la pobreza; ¿cómo se puede explicar la presencia del banquero Liberman en la fórmula presidencial de doña Laura?… De ello hablaremos la próxima semana.
EL “CÁRTEL DE LOS BANQUEROS PRIVADOS”… Parte 2[2]
Doña Laura no respondió ni responderá. Su candidato vicepresidencial, el señor Luis Liberman Ginsburg no contradijo, no desmintió, no rechazó, las graves acusaciones que le hiciera su colega ideológico, el economista y abogado don Jorge Guardia Quirós, en cuanto a la presunta existencia de una especie de “cártel de banqueros privados”; los cuales, aprovechando su inmenso poderío político, amasaron fortunas incalculables controlando diversas variables macroeconómicas y financieras en los últimos gobiernos, por medio de colocar fichas afines en el Ministerio de Hacienda y en el Banco Central de Costa Rica (BCCR), entre otras entidades relacionadas con la actividad bancaria.
Siempre hemos sido del criterio de que en los últimos veinticinco años de políticas macroeconómicas inspiradas en el neoliberalismo, el lado ganador ha estado conformado por un reducidísimo grupo de gran poderío político: el sector financiero. El mérito de la denuncia del señor Guardia Quirós está en habernos indicado que tal sector es el de los banqueros privados que, entre otros, incluye al señor Liberman Ginsburg
La acumulación de gigantescos capitales y la abusiva concentración de la riqueza que se manifiesta en la Costa Rica de hoy, de acelerado crecimiento de la desigualdad, representa un crimen social que necesita ser investigado y juzgado. La circunstancia de que 600 mil personas trabajadoras tengan salarios por debajo del mínimo de ley, o que tengamos un millón de compatriotas sumidos en la pobreza, o que tengamos una clase media altamente endeudada porque se resiste desesperadamente a desaparecer, no puede quedar impune. Alguien o algunos tienen que rendir cuentas por impulsar y por imponer decisiones de política económica que nos han llevado a estos extremos que, de un modo u otro, han generado un proceso sostenido de desestabilización política, económica y social.
Si el gremio de los banqueros privados llega al mismísimo seno del gobierno para controlar, ahora desembozadamente, la política económica del país, es porque la derecha política quiere demostrarnos la naturaleza de su total hegemonía a través del pleno control del Partido Liberación Nacional (PLN), que podrá ser cualquier cosa, menos un partido socialdemócrata. No es casual que Wikipedia, la enciclopedia electrónica más famosa del mundo, identifique al candidato vicepresidencial de doña Laura, como del “PLN, derecha”.
El rechazo de doña Laura a cualquier intento de reforma tributaria nos manda una clarísima señal de quién ha de controlar su gobierno (de ganar ella la Presidencia de la República), pues es obvio que la ideología dominante de su política económica, estará determinada por la lógica de acumulación de capital con perspectiva banquera, de lucro privado sin control.
En consecuencia, está pendiente un gigantesco esfuerzo cívico de investigación patriótica sobre el dominio banquero de la política económica, fiscal, financiera y monetaria en las últimas administraciones. El silencio de doña Laura y la aceptación tácita de las denuncias del señor Guardia por parte del señor Liberman, confirman la comisión de un espantoso crimen social en contra del bien común que no podemos dejar pasar así no más.
Recordemos que según las denuncias del señor Jorge Guardia Quirós, los del grupo del banquero Liberman, candidato vicepresidencial de doña Laura, “captaron y prestaron mediante sus offshores sin satisfacer encajes, someterse a la Sugef, ni pagar impuestos. Todo una vida hicieron plata exenta por medio de sus offshores y, al final, tampoco pagaron nada (ni cuita), pues al ponerse viejos vendieron sus acciones a bancos extranjeros sin estar sujetos a impuestos sobre la renta”.
Nos duele reconocerlo pero en la actual campaña política esta situación ni es ni será objeto de debate. Insertados en el sistema, los diversos partidos políticos (los que tienen mucha plata, a los que les dan plata para ser turecas y los que carecen de ella), no muestran mayor interés en demandar cuentas por el festín orgiástico que han vivido en los últimos años los sectores del capital financiero privado. Estos sectores se sienten ahora tan seguros que manifiestan su pretensión descarada, totalmente abierta, sin necesidad de intrigas palaciegas, de controlar, ya oficialmente y por vía ejecutiva-presidencial, la política económica que, por cierto, no han dejado de manipular en todo este tiempo en que nos han sumergido en la desigualdad. Por cierto que sobre el “cártel de los banqueros privados”, don Jorge Guardia Quirós nos debe algunos nombres que prometió dar a la opinión pública. Estamos esperando…
EL “CÁRTEL” DE LOS BANQUEROS PRIVADOS… Parte 3[3]
Varias estimables personas que, semana a semana, nos hacen el gran honor de leernos, nos pidieron volver sobre el tema. En verdad es de extraordinaria relevancia este asunto de los banqueros privados y su abusivo control de la política económica, monetaria, fiscal y financiera en las últimas cinco administraciones gubernamentales, en la actual y, sin duda alguna, en la próxima.
Al debate se unió el muy respetado economista don Juan Manuel Villasuso, una personalidad académica de enorme prestigio. En su columna “Dialéctica”, del valiosísimo suplemento de opinión “Página Abierta” publicado por Diario Extra, ayer martes 1 de diciembre, Villasuso indicó que “hablar del sector financiero en Costa Rica es como tocarle los huevos al águila”.
Efectivamente. El “cártel” de los banqueros privados (uno de cuyos integrantes es el candidato vicepresidencial de doña Laura, el señor Liberman Ginsburg), tiene que haber invertido muchos, pero muchos, millones de colones financiando las candidaturas presidenciales de las últimas campañas electorales, apostando a varios partidos políticos a la vez para garantizarse, al menos y en cada uno de los sucesivos gobiernos, dos puestos fundamentales: el cargo de Ministro de Hacienda y la presidencia ejecutiva del Banco Central de Costa Rica (BCCR).
Ahora entendemos el verdadero significado del vocablo “PLUSC”, que fue el concepto acuñado por el pueblo para definir la unificación política del que una vez fue el socialdemócrata Partido Liberación Nacional (PLN), con el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), que renegó del humanismo cristiano como su filosofía inspiradora, degenerándose al punto de llegar a votar el TLC con los Estados Unidos.
Es más, el “cártel” de los banqueros privados debe estar “invirtiendo” plata en la presente campaña electoral y “jugando a varias bandas”. Solamente así podemos explicarnos el impresionante silencio de, prácticamente, todas las candidaturas presidenciales actuales, ninguna de las cuales ha alzado su voz, ni en prensa ni en propaganda, para demandarle cuentas a ese poderosísimo grupo de poder enquistado, succionando, extrayendo, transfiriendo… y robando, “…fondos de los grupos más pobres a los grupos de mayores ingresos”, tal y como lo sostiene otro economista de renombre y que sabe mucho de esta historia, el señor Bernal Jiménez Monge, seguidor de doña Laura.
Solamente vimos una fugaz página pagada por parte de Ottón Solís, reproduciendo la primera columna que al respecto escribió el señor Jorge Guardia Quirós, quien destapó este hediondo asunto del “cártel” de los banqueros privado. Pero luego… silencio, como todos los demás.
También es reprobable la conducta de los partidos de “oposición” (así, entre comillas), en el seno de la Asamblea Legislativa. Ninguno que sepamos se ha atrevido a presentar una moción para instalar una comisión investigadora de todas las acciones truculentas efectuadas por el “cártel” de los banqueros privados, en su insana orgía financiera de concentración abusiva de la riqueza, a expensas del ya sostenido proceso de empobrecimiento de la clase media y de las mayorías populares, en general.
Al respecto valga una “anotación” al margen de lo que acontece en el parlamento actual y la actitud de la “oposición”. Ninguno de los partidos integrantes de la misma fue capaz de plantear su propia denuncia en el seno del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), sobre el caso del “avionetazo” de la diputada Mauren Ballestero. ¡Qué curioso!
El “status quo” del sistema financiero costarricense, hoy muy consolidado por la acción de influencia política profunda que desarrolló el “cártel” de los banqueros privados en los últimos gobiernos, les permite obtener utilidades, solamente en el año pasado, de la impresionante cantidad de 55.000.000.000.oo (55 mil millones de colones), según cifras de don Juan Manuel Villasuso, dignas de la mayor credibilidad. Además, la actividad financiera del “cártel” de los banqueros privados muestra una tasa de crecimiento anual del 10 %, algo que ningún otro sector de la economía nacional ha logrado.
Este nefasto capítulo de la historia nacional está por escribirse. Don Juan Manuel Villasuso nos invitó a hacer un recuento de los nombres de los ministros de Hacienda y de los presidentes del Banco Central, en los años del poder (todavía vigente), del “cártel” de los banqueros privados. Si usted nos aguanta una cuarta parte, se los nombraremos la próxima semana.
Los banqueros privados se enriquecieron a costa de las estrecheces y congojas económicas que vive una clase media altamente endeudada; para que ellos hayan acumulado tantísima plata, 600 mil personas trabajadoras asalariadas han estado ganando salario por debajo del mínimo de ley, ya de por sí indignante; para que ellos sigan teniendo tanto poder, doña Laura les dio la vicepresidencia y los otros candidatos parece que les prometieron su silencio cómplice. No hay duda: hablar del “cártel” de los banqueros privados es tocarle los huevos al águila.
EL “CÁRTEL” DE LOS BANQUEROS PRIVADOS… (Parte 4)[4]
Este asunto del “cártel” de los banqueros privados hiede a tanta podredumbre como jamás se vio algo semejante. Hablamos de la más grande conspiración contra el bien común de la historia nacional, urdida entre sectores financieros y políticos para el origen de fortunas escandalosas de rápido crecimiento, con altísimas tasas de ganancia y bajísimos impuestos; quedando en el aire enormes preguntas: ¿y la procedencia de los capitales originales…?; ¿lavado de dólares?…
Ya el exministro de Seguridad don Fernando Berrocal Soto, en comisión legislativa (mayo de 2008), había advertido de que muchas entidades financieras en este país escapan al control de la Sugef. ¿Pasó esto en el caso del “cártel” de los banqueros privados?…
Mucha información ha llegado hasta nosotros de todo tipo de situaciones generadas en estos años de la hegemonía del “cártel” de los banqueros privados y sus cuadros políticos insertados y/o infiltrados en los últimos gobiernos.
Hay gente que sabe mucho porque ocuparon cargos tan relevantes como el de Ministro de Hacienda y/o el de Presidente Ejecutivo del Banco Central. A nadie inculpamos. Pero inobjetable resulta pedirles cuentas de cómo es que se generaron las más escandalosas fortunas desde el sector financiero, a partir de que dicho “cártel” pasó a tener el control total de instituciones como las mencionadas.
Veamos los nombres de los ciudadanos que estuvieron al frente de Hacienda en este nefasto período de la historia nacional, en el cual se ha dado la orgiástica fiesta de acumulación desenfrenada de capitales que los banqueros privados lograron realizar obscenamente:
Thelmo Vargas, Rodolfo Méndez Mata, Carlos Muñoz Vega, Fernando Herrero Acosta, Francisco de Paula Gutiérrez, Leonel Baruch, Alberto Dent, Jorge Wálter Bolaños, Federico Carrillo, David Fuentes y Guillermo Zúñiga.
Por otra parte, cuatro personas han controlado la presidencia ejecutiva del Banco Central en los últimos veinte años: Jorge Guardia (quien destapó la pudrición banquera privada), Rodrigo Bolaños, Eduardo Lizano y Francisco de Paula Gutiérrez (todavía hoy en ejercicio del cargo).
Una agresiva comisión legislativa investigadora, si la hubiese, tiene armas legales a su haber como para obligarles a que se presenten y expliquen sus decisiones sobre política monetaria, canje de deuda, sistema tributario para los banqueros privados, minidevaluaciones, tasas de interés, cat`s fantasmas, banca “off shore” y similares. Imaginemos, paralelamente, cuánto servicio le haría al país la intervención del Ministerio Público si se decidiese a actuar.
Dos casos que llaman la atención. Que el Banco Central estuviera controlado por don Eduardo Lizano Fait durante gobiernos de partidos “distintos” (Liberación-Unidad); y que don Jorge Wálter Bolaños fuera Ministro de Hacienda del Presidente Pacheco (Unidad) y ahora tesorero de la campaña presidencial de doña Laura (Liberación).
Antes de que el sr. Guardia “cantara” y antes de que desde esta columna retomáramos el tema, justo es reconocer que don Rolando Araya Monge, actual candidato presidencial del partido Alianza Patriótica (AP), ya se había comido una gigantesca bronca, en la campaña presidencial del 2002, cuando denunció que en el gobierno de Miguel Ángel Rodríguez Echeverría hubo una emisión de 500 millones de dólares para cambiar deuda interna por deuda externa, que, dice don Rolando, “produjeron enormes comisiones para bancos ligados al Ministro de Hacienda y al Presidente del Banco Central de entonces”. Don Eduardo Lizano y don Leonel Baruch, por ejemplo, podrían contarnos mucho al respecto.
Igual de justo es reconocer que sí hay propuesta de reforma tributaria estructural en el programa de gobierno de don Rolando, aunque apresuradamente de nuestra parte dijimos lo contrario. Y valga indicar que lo mismo nos pasó en los casos de los partidos Acción Ciudadana (PAC) y Frente Amplio (FA), que también plantean profundas transformaciones estructurales de carácter tributario. Una disculpa abierta y sincera para las tres agrupaciones, sí; pero un reclamo válido: ¿Por qué no se unieron?…
Sigamos. Hay otra arista de este asunto del “cártel” de los banqueros privados que tiene que ver con los famosos certificados de Abono Tributario (CAT’s), una fiesta de exportaciones fantasmas, verdadera estafa descarada con el dinero público que presenciamos en los años 90`s, de la cual un gran papel en su denuncia le correspondió al actual legislador don José Merino del Río, durante su primera diputación.
¿Cuáles bancos privados facilitaban el comprobante de “ingreso de divisas” que se presentaba al Banco Central para pedir el pago de ventas de exportaciones fantasmas? Nosotros creemos que al respecto don Rodrigo Bolaños tiene mucho que contar, pues él era el jerarca del Banco Central en los “años de oro” del robo con los CAT’s.
Agradecemos al Ing. Arturo Robles Coronas, asesor legislativo y militante del humanismo socialcristiano, la colaboración en el suministro de datos para este artículo.
Como se puede ver, hay muchísimo que investigar y
denunciar. Queremos conformar una comisión ciudadana para esta gigantesca tarea.
Si usted nos quiere ayudar, por favor, contáctenos. Seguiremos en esta batalla
cívica hasta que toda la verdad salga a la luz pública.
[1] Publicado en Diario Extra del 25 de noviembre de 2009.
[2] Publicado en Diario Extra el 2 de diciembre de 2009.
[3] Publicado en Diario Extra el 9 de diciembre de 2009.
[4] Publicado en Diario Extra el 9 de diciembre de 2009.