Ante el impactante aumento en los precios del combustible ANEP propone tres medidas excepcionales

– El Gobierno y la Asamblea están indolentes ante el sufrimiento popular.

– Más de 1.000 colones por litro de gasolina/diésel, mientras no hay una política salarial ante el alto costo de vida situación que tiene indignada a la clase trabajadora y personas pensionados por IVM CCSS.

Que la gasolina y el diésel superen la barrera de los mil colones por litro, solamente representa más combustible para la caldera en ebullición de las tensiones sociales.

Peligrosa es la pasividad tanto del Gobierno de la República como de la Asamblea Legislativa ante el creciente enojo de la gente. La indolencia de ambos pone en alto riesgo la paz social, ya de por sí agravada por una ola delincuencial que parece estar sin control.

ANEP estima que esta fuerte agresión económica a los bolsillos de la gente, del pueblo trabajador en especial, requiere que los poderes Ejecutivo y Legislativo tomen, coordinadamente, medidas excepcionales, como lo puede ser:

a) El control del tipo de cambio utilizando los 8 mil millones de dólares acumulados en reservas internacionales.

b) Imponer un impuesto extraordinario, al menos transitorio, a las rentas del gran capital sustitutivo del impuesto único a los combustibles.

c) Renegociar el pago diario de intereses de la deuda pública para contar recursos frescos que reemplacen esa injusta carga.

ANEP deja constancia de que ve con simpatías cualquier esfuerzo de expresión popular, cívico-pacífico, que se manifieste en las calles del país contra este inmisericorde ataque contra la estabilidad socioeconómica de las familias costarricense; apoyando, según sus posibilidades, tales esfuerzos.

Costo de vida sube y poder adquisitivo disminuye

Como organización sindical que aglutina a importantes sectores obrero-laborales de la clase trabajadora con empleo formal en los sectores Público y Privado, la ANEP recalca que no hay política salarial ni para el uno ni para el otro.

Ni siquiera puede afirmarse que alzas “automáticas” por costo de vida, compensen la acelerada curva descendente del poder de compra de los salarios.

En tal sentido, ANEP recuerda que, contándose con el apoyo de importantes gremios sindicales, con fecha 9 de mayo se le entregó al propio Presidente de la República una carta señalando la gravedad del problema indicado; y, puntualizando la urgente necesidad de abordar esta agenda de temas salariales, con miras de desacelerar, aunque fuera un poco, esa precarización de los salarios. Veamos:

1- Que se decrete con urgencia, una fijación extraordinaria al salario mínimo, emitida por el Consejo Nacional de Salarios (CNS), de manera inmediata; al menos para la clase trabajadora de la producción agrícola bananero-piñera y cañera; a los choferes de autobús, a quienes laboran en seguridad privada y en comercio.

2- Que se vuelva a la fijación semestral de reajuste por costo de vida al salario mínimo para la clase trabajadora del sector privado.

3- Que se emita una revaloración general del valor actual de los salarios mínimos para hacerlos congruentes con el dictado del Artículo 57 de la Constitución Política: debe procurar bienestar y existencia digna. Hoy en día no lo está haciendo.

4- Que se restablezca la protección de una cantidad mínima inembargable al salario, legislando con urgencia al efecto. Ya salió la primera sentencia judicial en tal sentido.

5- Que se restablezca la Comisión de Negociación de Política Salarial para el Sector Público: analizando con urgencia la precariedad salarial en programas sociales y de seguridad: CEN-CINAI, control de plagas, cuerpos policiales, por ejemplo.

6- Que se pague la deuda pendiente del reajuste salarial por costo de vida para el sector Público correspondiente al año 2021, arbitrariamente retenida por el saliente gobierno pese a tener contenido presupuestario debidamente financiado.

Adicionalmente, el planteamiento al Presidente de la República indicó el deterioro de la situación socioeconómica de las personas trabajadoras ya pensionadas por el sistema de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), señalándose:

7- Que se pague la deuda por reajustes pendientes de costo de vida ante la pérdida de poder adquisitivo a las personas trabajadoras pensionadas del régimen de IVM-CCSS, 80 % de las cuales ni siquiera tiene un monto de pensión igual al actual valor del salario mínimo que, por cierto, ya no está procurando ni bienestar ni existencia digna.

8- Que se instale, con urgencia, una mesa de discusión, no amañada y transparente, para analizar lo que está pasando con la sostenibilidad financiera del régimen IVM-CCSS: las razones del faltante en sus arcas de casi 50 billones de colones (50.000.000.000.000); y de la cruel decisión, aún no puesta en práctica, de elevar la edad para pensionarse, de reducir la cuantía al jubilarse y de, eventualmente, un nuevo aumento en la cotización obrera.

Mención especial merece resaltar el drama de un millón de personas compatriotas sin empleo y sin esperanzas, cuya batalla diaria por subsistir es ahora más dolorosa con el impacto generalizado de la desconsiderada alza en el precio de los combustibles.

San José, sábado 21 de mayo de 2022.

 Albino Vargas Barrantes, Secretario General ANEP

Wálter Quesada Fernández, Secretario General Adjunto ANEP

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