¡Fuera Industrias Infinito!: Proclama de comunidades de Costa Rica y Nicaragua

PROCLAMA

ENCUENTRO NACIONAL POR LA INDEPENDECIA Y SOBERANIA DE NUESTROS PUEBLOS:

FUERA INDUSTRIAS INFINITO

1. Que la crisis mundial que provocó el capitalismo, el fenómeno de cambio climático y el deterioro ambiental; exige una transformación profunda de los estilos de desarrollo y la atención prioritaria debe estar enfocada en asegurar la soberanía y seguridad alimentaria de nuestros pueblos, ante la privatización de la vida humana y mercantilización de los ecosistemas y la vida humana.

2. La minería de oro a cielo abierto por lixiviación con cianuro es una de las actividades industriales de más alto impacto ambiental, social y cultural y es una actividad insostenible por definición en el tanto la extracción del recurso mineral supone su agotamiento.

3. Que la eventual operación de explotación del proyecto minero “Crucitas” por parte de la empresa Industrias Infinito y con la complacencia y ayuda del gobierno de turno; vendría a profundizar el empobrecimiento de los pueblos y el deterioro ambiental, social y cultural provocados por la transnacionalización del agro y las economía de los países centroamericanos.

4. La zona en que se autorizó el proyecto minero Crucitas es de alta vulnerabilidad ambiental, muy cercana al Refugio de Vida Silvestre “Maquenque”, al Refugio de Vida Silvestre Corredor Fronterizo Norte y al Corredor Biológico_ “San Juan-La Selva”_, refugios destinados a la protección de especies en vías de extinción. De hecho, la zona en la que se autorizó la tala indiscriminada de árboles incluye la especie en veda almendro amarillo (Dipteryx panamensis), que no solo está amenazada, sino que constituye el hábitat y principal fuente de alimento en época reproductiva de la lapa verde (Ara ambigus), especie que está en peligro de extinción. Además el proyecto se ubica en el marco de la gran cuenca binacional del Río San Juan, una de las zonas transfronterizas de mayor importancia a nivel regional.

5. La declaratoria de interés público y conveniencia nacional de este proyecto no cuenta con los estudios que evidencien una base científico-técnica que demuestre que las ganancias económicas y sociales son mayores que las pérdidas socio-ambientales. El balance demuestra lo contrario: frente a la destrucción irreversible del bosque y la vida silvestre, incluyendo especies amenazadas como el almendro amarillo y la lapa verde, las supuestas ganancias económicas y sociales se basan en expresiones ambiguas tales como “se calcula”, “se procurará”, “se estima”, y no en cálculos y cifras concretas y demostrables.

6. Esta declaratoria de interés público o conveniencia nacional no puede darse a costa de pérdidas irreparables en la biodiversidad de nuestro país y del planeta, en menoscabo de actividades productivas tradicionales presentes en la región. Los Gobiernos de turno están obligados a proteger la riqueza natural de nuestros países para beneficio de las generaciones presentes y futuras, tal y como está determinado en los principios básicos de nuestro marco jurídico, incluyendo los artículos 50 y 89 de la Constitución Política de Costa Rica y los artículos 60 y 102 de la Constitución Política de Nicaragua. De hecho, los decretos citados lesionan el derecho a un ambiente sano y equilibrado, además del paisaje rural y natural.

7. Que la tragedia ambiental y social provocada por la operación de las Minas Macacona en Esparza en los años ochenta, la Mina Beta Vargas en la Pita de Chomes de Puntarenas en los noventas y el desastre de la Mina Bellavista en Miramar en Puntarenas en los últimos años, deben ser el espejo donde nos miremos como pueblos y naciones a la hora de decidir sobre esta nefasta y agresiva actividad.

8. Que las comunidades de la zona norte y del país en su conjunto han dicho una y otra vez NO A LA MINERIA DE ORO A CIELO ABIERTO POR LIXIVIACION CON CIANURO y esa voluntad debe ser respetada por el actual gobierno.

9. Que el proyecto amenaza con generar demandas internacionales de orden ambiental por nuestros vecinos nicaragüenses de impredecibles consecuencias y pone en evidencia el doble discurso de la actual administración, que por un lado adopta la Proclama de PAZ ZONA LA NATURALEZA y en la práctica le declara la guerra a los ecosistemas y a las poblaciones que dependemos de ellos.

POR TANTO:

1. Pedimos se anule el Decreto Ejecutivo que declaró de interés público y conveniencia nacional el Proyecto aurífero Las Crucitas;

2. Hacer propias las demandas del Frente de Oposición a la Minería de Oro de la zona norte pidiendo la EXPULSION DEFINITIVA de la transnacional INFINTO GOLD de la zona norte y del país en su conjunto.

3. Solicitamos como Coalición Anti minera nicaragüense que se respeten los convenios internacionales que en materia ambiental han sido suscritos por ambos países sobre todo aquellos referidos a la conservación y protección del ambiente y los recursos naturales.

Adoptado por las organizaciones indígenas y campesinas que integran la Plataforma Norte Norte y la Coalición Anti minera de la Campaña “No a la minería en la Cuenca del río San Juan”, Dado en Crucitas, Costa Rica, a los 15 días del mes de marzo del dos mil nueve.

ORGANIZACIONES Y COMUNIDADES INVITADAS POR EL FRENTE DE OPSICIÓN A LA MINERÍA DE ORO A CIELO ABIERTO A PARTICIPAR AL ENCUENTRO REALIZADO 14 Y 15 DE MARZO DEL 2009 EN CRUCITAS DE CUTRIS: Por una sociedad inclusiva

APREFLOFAS , PASTORAL SOCIAL DE LIBERIA , COORDINADORA DEL SUR , UPA NACIONAL SECCIONAL MONTERREY , LA UNAG , UNO VIDA , PASTORAL SOCIAL PAVÓN , ESTUDIANTES DE LA U.C.R FRENTE PATRIÓTICO DE ESCAZÚCEÑO , ABRIENDO EL SURCO , FUNDACION DEL RÍO , PROFESORES DE LA U.C.R , DEL C.P.P DE PAVÓN , CENTRO HUMBOLT , FRENTE CULTURAL ECOLÓGICO PARAÍSO , FECON , UNDECA , DITSÓ , COECOCEIBA , PRESERVE PLANET , ERA VERDE , AGENTES DE PASTORAL , ESTUDIANTES DE LA UCR, DE LAS COMINIDADES DE CRUCITAS , MORAVIA , CHAMORRO , COOPEVEGA , LOS LIRIOS , CIUDAD QUESADA , TÈRRABA , TRES RÍOS .

Los marines llegaron ya

Pasaron 13 años desde que el entonces secretario de Defensa estadunidense William Perry dijera ante 10 mil soldados y cadetes y la plana mayor de las fuerzas armadas mexicanas, en el Campo Militar No. 1, que la seguridad nacional entre su país y México era el “tercer vínculo” sobre el que ambas naciones cimentarían una relación unida, ya, por lazos políticos y económicos. Desde entonces, la “sana distancia” que había prevalecido en las relaciones entre los ejércitos de Estados Unidos y México comenzó a acortarse, y los últimos residuos de nacionalismo castrense cedieron paso a una remozada doctrina contrainsurgente de cuño estadunidense, que tomó como el “enemigo interno” al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y al Ejército Popular Revolucionario (EPR), y en años recientes a los ejidatarios de Atenco y La Parota y los pueblos de Oaxaca.

Con la coartada de la soberanía limitada y la “seguridad democrática”, valiéndose de eufemismos tales como la “cooperación militar” y las “acciones mancomunadas” de las fuerzas armadas de ambos países contra los cárteles de la droga, el intervencionismo bueno del Pentágono no será ahora con bombas, misiles y proyectiles, sino con asesores, agentes encubiertos y mercenarios (que bajo la fachada de “contratistas privados de seguridad” serán los encargados del trabajo sucio en la “guerra” de Felipe Calderón contra los malos).

Todo eso ya existe, claro. Pero se intensificará con la “ampliación” de la llamada Iniciativa Mérida, que al final resultó que era el Plan México disfrazado, símil del fracasado Plan Colombia, según reveló sin aspavientos Michael Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos. Y cosa curiosa: Mullen, el militar de más alto rango de la administración de Barack Obama, cuyo comando había identificado a México como un Estado fallido próximo a un “colapso rápido y repentino”, y por tanto sujeto de una intervención militar de Estados Unidos, no acaparó las primeras planas a su paso por México.

La razón es obvia: ya había hecho su tarea. La guerra de intoxicación mediática que arreció en vísperas y tras la asunción de Obama en la Casa Blanca en enero pasado, en la que participaron el presidente saliente, George W. Bush (“México, primera línea de guerra”), el jefe del Pentágono, Robert Gates, y los titulares de los principales organismos de seguridad e inteligencia de la administración demócrata (CIA, FBI, DEA, Seguridad Interna) lograron construir la noción de México como Estado fallido, para el aterrizaje suave, ahora, de la “ayuda invasora” (Javier Ibarrola dixit) que salvará a México de los malos.

Como en la ex Yugoslavia –balcanizada en siete pequeñas naciones por la alianza occidental comandada por Estados Unidos–, y después del 11 de septiembre de 2001 en Afganistán, Irak, Pakistán, Irán, Venezuela, Cuba, Bolivia y otros puntos calientes del orbe, Washington libra una guerra asimétrica contra México, con apoyo de sus alfiles locales. La “guerra infinita” de Bush contra el terrorismo –un “enemigo sin fronteras“– fue impuesta a Canadá y México por conducto de la Alianza para la Seguridad y la Prosperidad de América del Norte (ASPAN, 2005), y ante los fracasados intentos por fabricar una narcoguerrilla creíble, bajo el calderonismo adquirió la forma de una “guerra” a los cárteles de la droga, como elemento idóneo para la construcción social del caos y el miedo.

En ello han venido trabajando, sin éxito aparente por ahora, expertos en detonar desenlaces sociales y políticos mediante operaciones de guerra sicológica orientadas a direccionar y controlar la conducta social masiva.

La guerra asimétrica o de cuarta generación es descentralizada, dispersa y utiliza escenarios combinados sobre un territorio. En su desarrollo se borran las fronteras entre el soldado y los civiles, entre los campos de batalla y la seguridad urbana, y adquiere la forma de una violencia social extrema y sin orden aparente de continuidad. Elementos que están presentes en el México actual, un día en Ciudad Juárez, otro en Uruapan o Reynosa, otro más en Cancún o La Marquesa.

Dado que el empleo planificado de la propaganda y el uso de tácticas y estrategias de control social mediante la manipulación informativa y la acción sicológica le son consustanciales, en este tipo de guerra los medios de difusión masiva son los nuevos ejércitos de conquista. El bombardeo militar es sustituido por el bombardeo mediático. Las consignas y las imágenes sustituyen a las armas de destrucción masiva. Sólo que las consignas de Calderón en pro de una “cruzada” masiva contra los malos (“vamos ganando por goleada”, “negociar con el narco, idea estúpida”, “sin esta guerra el próximo presidente sería narcotraficante”) y las imágenes con montañas de decapitados desnudos y otras expresiones de violencia extrema, así como la “operación limpieza” de malos funcionarios (impuesta por el Congreso bipartidista de Estados Unidos para liberar los fondos del Plan México) y los llamados a los comunicadores a ejercer un “periodismo patriótico” no prenden todavía en las audiencias objetivo del mensaje.

En el fondo, se busca anular la capacidad de pensar. Son consignas dirigidas a destruir el pensamiento reflexivo (información-procesamiento-síntesis) y a sustituirlo por una sucesión de imágenes sin resolución de tiempo y espacio (alienación controlada). El objetivo es que la gente no piense información (el qué, por qué y para qué de cada noticia), sino que consuma órdenes sicológicas direccionadas, de manera acrítica y pasiva. Cuando los medios bombardean a Bin Laden o Al Qaeda, se están consumiendo consignas de miedo asociadas con el “terrorismo islámico”. Igual ocurre con Los Zetas y otras fabricaciones en México. Sólo que aquí es una guerra de malos contra malos en un Estado fracasado. Y para que México no colapse, Obama ya enviará a sus marines. A eso vino el almirante Mullen.

Barak Obama y Nicolas Sarkozy tienen asuntos por resolver en México. El estadunidense está en proceso de decidir cómo intervendrá para aprovechar el fuego sin control que el vecino, un personaje que ha transmutado el blanco y el azul en rojo sangre, ha desatado en el traspatio con la esperanza de que el (cada vez menos) poderoso imperio le ayude a sobrellevar las penurias del mal gobernar. El bailarín esposo de la señora Michelle estaba “ansioso” de conocer el reporte que sobre México y el narcotráfico retador le llevó el almirante Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto, quien el pasado viernes vino, vio y reportó, en una visita que incluyó entrevistas preocupantes con jefes militares y marinos de México a los que se pretende convencer de que firmen acuerdos de “colaboración” entre ejércitos que en la práctica permitan acciones “conjuntas” en tierra mexicana.

Roberto Gibbs, el vocero de Obama, dijo ayer que la situación mexicana “es de interés para el presidente, de mucho interés” (¡gulp, como de guerra de pasteles!), y que “dada la relación que tenemos con el país, y ciertamente su proximidad al nuestro, esto es algo que el equipo de seguridad nacional y el presidente están observando de cerca” (¡recontragulp óptico!) Por si alguien aún no se escandalizara con los juegos palaciegos que pretenden justificar la injerencia militar abierta de los gringos en México, el propio Mullen dijo que su país podría proponer que acá se utilizaran las técnicas estadunidenses de combate al terrorismo: Irak, Afganistán, México.

El esposo de Carla Bruni, especializado en aprovechar coyunturas internacionales para ganar presencia interna como defensor de sus paisanas en peligro (recuérdese el caso de la secuestrada ex candidata presidencial de Colombia, Ingrid Betancourt), paseó ayer alegremente en Teotihuacán de Enrique Peña Nieto acompañado de Felipe Calderón y Margarita Zavala (lo que provocó natural enojo de los turistas sin cargo público, que fueron desalojados). Las sonrisas y amabilidades de ayer tendrán hoy confrontación con una realidad que muestra los graves peligros para la nación que acarrean los gobiernos simuladores y su tratamiento irresponsable de procesos judiciales. Resulta que el videoproductor Genaro García Luna montó durante el foxismo varias historias de “éxito” de su compañía de teatro policiaco denominada Agencia Federal de Investigaciones. Uno de esos rodajes, creados especialmente para su reproducción en Televisa y Televisión Azteca, involucró a una francesa a la que se acusó de ser parte de una banda nativa de secuestradores.

El creativo García Luna hizo que se escenificaran en diciembre de 2005 el rescate de los rehenes y la participación de los villanos, todo en “tiempo real”, según las mentiras compartidas con las muy serias y objetivas televisoras (que se habían prestado a otras engañifas parecidas, por ejemplo, en el montaje del rescate del entrenador argentino de futbol Rubén Omar Romano). A pesar de esas graves pifias de origen, la maquinaria judicial sentenció a 60 años de cárcel a la francesa.

Hoy, Sarkozy presionará para que su paisana pueda “cumplir” su condena en Francia, y el entrampado Felipe habrá de resolver si cede a esas pretensiones, con lo que demostraría a todos los mexicanos la parcialidad y el sentido selectivo con el que se aplica aquí el menjurje echado a perder cuya marca es “La Justicia”, o se expone a que continúe denunciándose a nivel mundial el caso de la francesa de la que a estas alturas, desafortunadamente, ya no se discute si fue corresponsable o no de los secuestros, sino las trampas de los procesos judiciales mexicanos.

Frente Amplio saluda restablecimiento de relaciones con Cuba

El Diputado José Merino saludó el restablecimiento de relaciones diplomáticas plenas entre Costa Rica y Cuba, anunciadas por el Poder Ejecutivo el día de hoy.

“El Frente Amplio celebra esta decisión del gobierno de la República, que pone fin a un aislamiento impuesto a los gobiernos latinoamericanos durante la guerra fría por los Estados Unidos” dijo el Diputado Merino.

“Es un momento de festejo para los sectores progresistas, democráticos y de izquierda que en Costa Rica, han luchado durante varias décadas para que se restablezcan las relaciones de amistad con la patria de Martí y Maceo”, agregó el legislador del Frente Amplio.

Costa Rica y El Salvador eran los últimos dos países en América Latina que no mantenían relaciones diplomáticas con Cuba. El presidente electo de El Salvador, Mauricio Funes, anunció ayer su decisión de restablecerlas y hoy el mandatario costarricense, Oscar Arias.

“Se trata de un reconocimiento a la influencia y prestigio de la Revolución Cubana, que en el caso costarricense favorecerá el creciente intercambio comercial, cultural y político”, dijo Merino del Río, quién agregó que es necesario seguir luchando para que termine el embargo comercial que mantiene el gobierno de Estados Unidos.

Desde el Frente Amplio manifestamos nuestra alegría y reiteramos nuestros históricos lazos de amistad con la Revolución Cubana, su pueblo y su gobierno.

¡Esta vez fue diferente!, Mauricio es el nuevo Presidente

Fue así que El Salvador empezó a vivir una nueva fase de su vida, después de 20 años de gobierno de Arena. Una victoria histórica por un cambio seguro. Una victoria histórica del pueblo salvadoreño. Lea más abajo el mensaje integro de Mauricio Funes a la nación salvadoreña.

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Martes 17 de marzo de 2009 – 21:22

Amigas y amigos,
esta es la noche más feliz de mi vida.

Y quiero que sea, también, la noche de la más grande esperanza de el salvador.

Quiero abrir esta noche pidiendo, de forma humilde y emocionada, muchas gracias a todos los que votaron por mí.

A todos los que escogieron el camino del cambio y de la esperanza.

A todos los que vencieron el miedo y se entregaron con el pecho abierto a la lucha democrática por un nuevo el salvador.

Quiero que esta noche tenga el mismo sentimiento de esperanza y reconciliación, que el día en que se firmaron los tratados de paz de nuestro país.

Sí, porque, en esta noche también se firma un nuevo tratado de paz.

Un tratado de reconciliación del país consigo mismo.

De hermanos con hermanos.

De hermanas con hermanas.

Esta es la gran noche de la nueva familia salvadoreña.

Y, para ser parte de esta fiesta, para ser parte de la gran tarea de construcción del futuro, yo invito a todos mis compatriotas, sin distinción de partidos, de género, de raza, credo o clase social
quiero ser el líder de la paz, de la unión y del progreso.

Quiero ser el líder de la justicia social.

Quiero ser el líder de la verdadera reconstrucción del país, que comienza con la reconstrucción da vida de las personas.

Amigas y amigos,
sé que tendremos un largo y trabajoso camino por delante.

Pero si el camino fuese fácil nosotros no habríamos sido llamados.
Nosotros fuimos llamados porque aquellos que estuvieron todos estos años en el poder ya no tenían más respuestas para nuestros problemas.

Su modelo estaba agotado.

Esta es la riqueza y la belleza de la democracia: cuando un partido o grupo social se agota en el poder, la sociedad convoca otro para sustituirlo.

Para trabajar en favor de los intereses de la mayoría.

Nosotros tenemos que llegar con la humildad de que no somos los mejores del mundo.

De que no somos los únicos buenos.

De que no somos los dueños de la verdad.

De que no somos los salvadores de la patria.

Ni que tenemos el monopolio del saber.

No podemos caer en el gran error de arena, que siempre se cerró a la contribución de otros segmentos sociales.

Que siempre se mostró insensible al dolor de los grandes sectores desprotegidos.

Y que siempre quiso perpetuarse en el poder como si solamente ellos supiesen o pudiesen gobernar.

¿Cómo, entonces, debemos llegar al poder?

Debemos llegar con la más fuerte voluntad, la más intensa energía y el más inquebrantable coraje, que ya existen en esta tierra.

Con el mayor sentimiento de amor que ya inundó nuestra patria.

Y con el mayor deseo de cambio que ya envolvió nuestros corazones.

Amigas y amigos,
Quiero hacer un gobierno de unión nacional, pero una unión basada en el cambio.

Los salvadoreños votamos por el cambio, y el cambio vendrá.

Un cambio seguro, con estabilidad, sin ruptura del sistema económico y jurídico del país.

Pero con cambios profundos en el modelo de la gestión pública, de la transparencia, de la participación y de la justicia social.

Amigas y amigos,

Esta es la hora del perdón y de la reconciliación.

Perdono a todos los que nos agredieron y calumniaron.

Y pido, también, que me perdonen aquellos que en el calor del embate, pudiesen haberse sentido ofendidos por alguna actitud mía.

Esta es la hora de la reconciliación porque solamente con paz y unión podemos vencer, más rápido, los graves problemas que nuestro país enfrenta.

Es hora de acción y no de agresiones.

Es hora de avanzar hacia el futuro y no de venganzas del pasado.

Es hora de disfrutar de un amplio esfuerzo de realizaciones por la patria.

Quiero ofrecer al presidente saca todo mi apoyo para que él concluya bien los últimos meses de su gobierno.

Y tengo la certeza de que él va a facilitar el trabajo de los equipos de transición.

Eso será fundamental para que el país no sufra ningún perjuicio, ni se agrave la crisis económica que enfrentamos.

Prometo respetar, hasta el último día, la autoridad de nuestro presidente y de su equipo de gobierno, pues eso es fundamental para el equilibrio democrático y el buen funcionamiento de las instituciones.

Quiero hacer un llamado especial a los poderes legislativos y judiciales que se integren, de manera soberana e independiente, en este esfuerzo de construcción del futuro de nuestra patria.

Tengo la absoluta certeza de que ellos tendrán un papel firme y positivo en este momento especial de nuestras vidas.

El día primero de junio, todos los salvadoreños, juntos, vamos a dar vuelta una página de nuestra historia e inaugurar un nuevo capítulo de esperanza.

Convoco a todos los salvadoreños y salvadoreñas, que nos unamos para reconstruir nuestro país y hacer de el salvador, de verdad, un país para todos.

Muchas gracias, que dios nos bendiga y buenas noches.

El FMLN confirma que El Salvador restablecerá las relaciones con Cuba

Efe | La Habana, 17/03/2009

El representante en La Habana del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), Alfredo Elías, anunció el lunes que El Salvador restablecerá las relaciones diplomáticas con Cuba tras la victoria de ese partido en las elecciones presidenciales del domingo.

“Con Cuba no existen relaciones diplomáticas. Para nosotros, el pueblo cubano es un hermano de sangre y, por tanto, lo primero que haremos será restablecer nuestras relaciones diplomáticas”, declaró Elías a la televisión estatal de la isla.

El Salvador rompió relaciones diplomáticas con La Habana en 1959, tras el triunfo de la revolución encabezada por el ex presidente Fidel Castro.

El restablecimiento de las relaciones con Cuba formaba parte del programa político de la campaña electoral del presidente electo de El Salvador, Mauricio Funes, del FMLN y quien asumirá la Presidencia de su país el próximo 1 de junio.

Con un 99,4% de los sufragios escrutados, Funes obtuvo el 51,3% de los votos, mientras que el candidato de la hasta ahora gobernante Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), Rodrigo Ávila, sumaba un 48,7%.

Elías señaló que al FMLN le interesa acercar su Gobierno a los países de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), que impulsa Venezuela y a la que pertenecen, además, Cuba, Nicaragua, Bolivia, Honduras y Dominica.

“Agradecemos al pueblo cubano que nos haya abierto sus hospitales y nos haya curado los lisiados de guerra, los enfermos de la vista en la ‘Misión Milagro’, que nos hayan abierto sus universidades para que nuestros estudiantes puedan formarse aquí”, dijo.

“Debemos hacer relaciones con los países amigos, con todos los países del mundo, nos consideramos amigos de ellos, respetamos su gobiernos”, agregó.

Novela: La autoridad política de Alex Solís

Por José Rodolfo Ibarra

Este miércoles sale a la luz publica el libro que podría evidenciar la corrupción, las fuerzas ocultas de la política, los grupos de presión (como diría otro libro), las relaciones detrás del telón con algunos medios de comunicación y hasta los enredijos de sábana para la consolidación económica o laboral de una funcionaria: “La Autoridad Política Superior” del Excontralor Alex Solís Fallas.

Claro que, como lo dice el autor, todo ocurre en otro lugar, en otra nación, democrática o no. Todos sus personajes son ficticios, pero…que se podrían relacionar muy fácilmente con algunos conocidos… sí se puede.

Al hacer un paseo por las más de 400 páginas, se pueden observar como una figura maligna, con nombre de Salvador Áureo, representa el poder concentrado en un ex presidente de la República que busca la reelección, facilitada por un Tribunal Constitucional que, según el libro, está al servicio de este ex mandatario.

Sería este ser oscuro y maquiavélico quien se encarga de hacerle la vida imposible a un Cuestor (lo que nosotros conocemos casualmente como Contralor) de la República. El personaje ficticio es Antonio Monge, un hombre que llega a ser Cuestor gracias al apoyo de casi todas las fracciones políticas de una Asamblea Legislativa cuyos diputados tienen nombres muy parecidos a los reales, o que sus respectivos roles en el texto son muy parecidos a quienes tuvieron alguna participación hace años atrás, cuando una situación similar ocurrió en nuestro país.

Antonio Monge, el Cuestor, resulta tener un hermano, quien por aquellas cosas de la vida, es también candidato a la presidencia de la República por el Partido Acción del Pueblo (como dice el libro, cualquier parecido es mera coincidencia).

El texto relata, cómo Antonio sufre de la persecución de un grupo integrado por lo que el llama una Autoridad Política Superior, que integran representantes de los medios de comunicación, del poder económico y del poder político. Confabulados todos en contra de Antonio, hombre honesto y recto, a quien le inculpan los graves delitos de ser defensor de la Constitución, de la Ley y de sus propios pensamientos éticos y morales.

Se revelan en este libro, acciones de sabanas, como el uso de sus encantos por parte de una periodista que es la jefa de prensa de aquella Cuestoría, para consolidar su poder en la institución y para continuar recibiendo favores y comisiones no económicas, para su beneficio.

En una única ocasión se hace referencia también a la inclinación sexual de otro comunicador de un medio escrito, así como a las relaciones infieles de la asesora de comunicación.

Antonio Monge pasa por el suplicio de enfrentarse a este poder. Narra no solo como es nombrado, sino también, como es cuestionado y derribado al fin del piso 14, de un edificio piramidal donde labora el Cuestor general de la República. Su sufrimiento, la emboscada, su vida en familia, las presiones recibidas, el acorralamiento por parte del expresidente Áureas y del tío de este Paco Áureas.

Finalmente, Monge cae. El titular en los periódicos del día siguiente sería: “se fue el Cuestor de Lujo”.

Repito, cualquier parecido, es pura coincidencia.

La presentación del libro es este miércoles a las seis de la tarde en el paraninfo Daniel Oduber de la Universidad Estatal a Distancia UNED y su participación es abierta.

* Periodista y colaborador de Informa-tico.com

Alex Solis: «La amenaza y el miedo se utilizan para lograr resultados en política»

Por Fernando Francia

Alex Solís es conocido por su participación en la política con el Partido Liberación Nacional. Pero, hace algunos años, volvió al tapete por su corto pasaje por la Contraloría General de la República.

No poca polémica generó su estadía en el 14avo piso del edificio cuasi piramidal de la Sabana. Luego de eso, vimos textos académicos, ensayos políticos y, de nuevo, en la escena mediática como asesor en la Asamblea Legislativa.

Pero lo que pocos sabían es que unos días después de que “se fue” de la Contraloría comenzó a fraguarse una idea que hoy verá la luz pública: una novela.

¿Cómo fue que Alex Solís terminó escribiendo una novela?

También me hago esa misma pregunta, porque ciertamente he escrito ensayos académicos y libros de texto sobre derecho constitucional y control del poder. Pero en estos tiempos escribí también poesía y ahora la novela.

Todo pasa por las experiencias de la vida, lo que uno va viviendo y aprendiendo y de repente sentí la necesidad de utilizar el género de novela ficción para decir algunas cosas que sentía que debía decir.

¿Cuáles eran esas cosas?

Pues, que no obstante que vivimos bajo instituciones de un sistema democrático institucional, en la práctica algunos se las han ingeniado para abusar de esa institucionalidad y abusar del sistema democrático.

La novela es una denuncia política, una novela que plantea el problema de la concentración de poder, la dictadura mediática, la corrupción política.

¿Pero es ficción o realidad?

Ciertamente hay algunos hechos que provienen de la vida real. No hay novela y no hay poesía que no tenga referente algo de la vida real. Pero obviamente que están presentados en forma de ficción. El relato transcurre en un lugar de América Latina, los nombres de las personas y los lugares son ficticios. Hay elementos, pues de la realidad y que son referentes a la realidad política del país, pero al incorporarlo a la novela, pues todo queda en ficción.

¿Qué podremos encontrar en esa novela?

Existe un compromiso en lo político, en lo ideológico, es una novela de denuncias, creo que al ciudadana le podría parecer interesante.

No tengo experiencia en esto, no se si le va a agradar o no el formato literario, el estilo, pues, pero estoy seguro que la denuncia política que se plantea será de interés de la gente que sigue con atención todos estos procesos del país.

Pero, ¿sabremos de quién estamos hablando dentro de esa ficción?

No es mi pretensión, pero cada ciudadano, cada lector podrá llegar a sus propias conclusiones, esa es la maravilla de la escritura de la novela, que al final lo que vale es lo que el lector piensa, más allá de la intencionalidad de lo que diga el autor, el lector hace su propia lectura.

Pero la novela habla de política, de traición, de libertad, de burla a las instituciones democráticas. Pero se condimenta o se mezcla con temas de poder y sexo. Una temática amplia, que tienen que leer para abarcar en todo su contenido.

Según pudimos ojear, aparece el tema de la reelección presidencial, la expulsión de la Contraloría, la Asamblea Legislativa y varios temas más, todos muy coincidentes. Por eso, la pregunta obligada es ¿se desquita usted en esta novela, respecto a los hechos recientes que le tocó vivir?

No. Si bien es cierto he sufrido una persecución política inmisericorde desde hace cuatro años, sólo porque me manifesté independiente y dije que no le debía el puesto a la clase política, la novela no tiene ese tipo de pretensiones, trasciende por mucho cualquier referencia a la realidad mía.

Lo que plantea, ojalá lo logre denunciar, es: cómo se están burlando de las instituciones de la democracia y, paradójicamente, cómo el chantaje, la amenaza, el miedo, son los que se utilizan en ciertas oportunidades para lograr resultados que compiten con el bien común y la transparencia.

En ese punto, pareciera, nuevamente que las coincidencias son… coincidencias. ¿Se referirá en algún pasaje al tristemente célebre “memorándum”?

Lo que usted quiera entender. Será interesante cuando lean la novela. La novela está plagada de esas amenazas, de esos mecanismos de chantaje y miedos. A veces de manera visible y a veces de manera invisible. Como si se tratara de un poder muy grande, un poder que tras bambalinas lo controla todo. Y que para controlarlo todo utiliza cualquier mecanismo: comisiones, propinas, chantaje, amenazas, miedo. Puede ser con favores de políticos o las facturas políticas, etc., todo eso lo plantea la novela.

Pero claro, una cosa es lo que se plantea allí y otra cosa cómo lo vaya a interpretar el lector.

Cuando inició esta idea, este trabajo, que seguro no se realiza de la noche a la mañana.

Comencé a trabajar luego de que salí de la contraloría y dure tres años escribiéndolo.

¿A qué novelistas leyó durante ese período de donde tomo inspiración?
Me gusta mucho la literatura, de manera que uno finalmente se ve influenciado por muchísimos autores. Pero siendo esta novela una que denuncia la concentración del poder me ha influenciado mucho Agusto Roa o Miguel Ángel Asturias, Gabriel García Márquez, y Alejo Carpentier. Pero hay más, La fiesta del Chivo, por ejemplo, de Vargas Llosa. Bueno, ese tipo de novelas siempre me han gustado. Pero he leído de todo, uno es la suma de muchas influencias.

Fuente: Informa-tico.com

Fotocopias con fines educativos si están amenazadas

Igualmente se adjunta artículo enviado por el Diputado José Merino a la prensa sobre el tema el 25 de febrero pasado, el cual no ha sido publicado hasta el día de hoy por ningún periódico.

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Varios profesores de la Universidad de Costa Rica han denunciado que los negocios que prestan servicios de fotocopiado en los alrededores de esa casa de estudios, se han negado a sacar copias de los libros de texto que se utilizarán en sus cursos, aduciendo que las leyes del TLC los castigan con multas millonarias y hasta con cárcel si lo hacen.

La imposibilidad de sacar fotocopias afectaría gravemente a miles de estudiantes pobres, que no pueden darse el lujo de comprar libros carísimos indispensables para continuar sus estudios y también a los centros educativos públicos que tampoco cuentan con recursos para ello.

Así las cosas, no ha tardado en difundirse en las universidades públicas la lógica preocupación y la indignación más que justificada ante este nuevo atropello contra la educación pública.

Los jerarcas del Ministerio de Comercio Exterior dicen, una vez más, que “no hay de qué preocuparse”. Según ellos, las fotocopias con fines educativos no están penadas por lo que el dueño de una fotocopiadora no incurre en delito “si se le saca a un libro a petición de un alumno” y “se sabe que lo utilizará con fines personales”.

Pero, nuevamente, no le están diciendo toda la verdad a la gente. El acceso a las fotocopias para estudiar sí está amenazado. El artículo 54 de la Ley 8039 sanciona con penas brutales (hasta cinco años de cárcel y quinientos salarios de multa) a quién “fije y reproduzca obras literarias o artísticas o fonogramas protegidos”. Obviamente, esto incluye a quien fotocopie libros.

Es cierto que al final de este artículo se agregó una excepción que excluye la reproducción “sin fines de lucro” para “fines ilustrativos de la enseñanza”. Pero, al contrario de lo que dice COMEX, esta excepción no salva a las fotocopiadoras que copien libros a solicitud de los estudiantes. ¿Por qué? Sencillamente, porque las fotocopiadoras son negocios, pequeños, pero negocios al fin. No operan sin fines de lucro.

Todo lo contrario. Venden un servicio, para obtener una ganancia. Es cierto que en la mayoría de los casos se trata de micro empresas y hasta negocios familiares. Pero la ley no diferencia entre empresas grandes y pequeñas.

Por lo tanto, aunque el estudiante pida las copias para fines personales o educativos, el requisito de no tener fines de lucro también rige para quienes realizan la conducta castigada por la ley, es decir para quienes sacan las fotocopias.

De manera que las pequeñas empresas de servicios de fotocopiado tienen mucha razón de estar preocupadas. Diga lo que diga el COMEX, nada impide que las grandes casas editoriales y las trasnacionales que controlan el comercio de los libros empiecen a presentar demandas contra ellas, amparándose en una ley que, además, les otorga poderes desmedidos para intimidarlas. Frente a tales demandas, no vemos a los negociadores de COMEX expertos en regalar lo que no les pertenece defendiendo a las fotocopiadoras.

Ante este panorama, el impacto inmediato de las leyes aprobadas es que, como mínimo, cientos de pequeños negocios de servicios de fotocopiado se encuentran en grave peligro de desaparecer, tal y como ya pasó en México y otros países con TLC. Si esto ocurre, ¿cómo harán los estudiantes de los centros educativos públicos para tener acceso a las fotocopias?, ¿tendrá cada uno que comprar su propia máquina de fotocopiado?

Pero esta no es la única amenaza para la educación pública. Los artículos 51 y 52 de la Ley 8039 castigan con penas igualmente duras a quién “represente o comunique al público” obras literarias o artísticas, fonogramas o ejecuciones, o quién los “ponga a disposición del público” por cualquier medio, incluyendo Internet. Esto quiere decir que quien lee un libro en público o representa una obra de teatro puede ser castigado.

También pueden serlo quienes publiquen libros en línea o utilicen programas que permiten compartir documentos en la red, acciones que, por cierto, han sido propuestas en las universidades públicas como alternativas a la prohibición de fotocopiar. En estos casos, los expertos de COMEX, ni siquiera se acordaron de incluir la excepción limitada del artículo 54, para eximir a quienes realicen tales actos sin ánimo de lucro y para fines educativos. A pesar de que este diputado planteó mociones para corregir el error, estas fueron rechazadas sin discusión alguna.

Esta ley sanciona con prisión todas estas acciones sin considerar su relación directa con el acceso a la educación y la cultura, y a pesar de que ni el mismo TLC así lo exige. El tratado permite que los países escojan si aplican penas de multa, de cárcel o una combinación de ambas. Pero en Costa Rica los diputados del G-38, más papistas que el Papa, no dudaron en acoger la opción que más favorece a las trasnacionales y más perjudica a la gente.

En síntesis, estamos ante una legislación draconiana y desproporcionada, incompatible con las necesidades educativas de nuestro pueblo. Una legislación que ninguno de los países que hoy son desarrollados tuvo que aplicar durante su proceso de desarrollo y que, además de dañar la educación pública, ocasionará gastos excepcionales para el Estado, obligándolo a desviar recursos destinados a atender otras necesidades apremiantes de la población.

Ningún pueblo está obligado a soportar semejantes abusos.

* Diputado, Frente Amplio

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Este es el texo del campo pagado por las editoriales

FOTOCOPIAS Y DELITOS

En diarios, semanarios; foros por internet y otras esferas de discusión, se han expresado recientemente opiniones acerca de la última reforma a la Ley de Observancia relacionada con la aplicación de procedimientos en materia de propiedad intelectual y su aplicación en relación con las fotocopias de libros.

Llama la atención que algunas de las posiciones expresadas asuman que se pueden seguir haciendo las cosas exactamente igual, aún con el nuevo marco legal que se promulgó para defender la creatividad y,. dentro de ella, la producción de obra editorial.

El razonamiento de algunos es que “como siempre lo hemos hecho’, prácticamente tenemos un derecho adquirido que no es otra cosa que pensar que la ley autoriza a irrespetarse a sí misma, lo que es un contrasentido. Es decir, si siempre transgredimos la ley, la costumbre nos exime y nos autoriza. Este pensamiento es inaceptable porque la ley siempre debe aplicarse y no pueden alegarse derechos adquiridos en contra de derechos fundamentales que han sido protegidos incluso a nivel constitucional.

Otros han llegado al extremo de transmitir “tips’ para soslayar la ley. Sobre ese particular, se tergiversa el concepto de “fines académicos’ y se cometen abusos con el término “antologías’, como vamos a exponer:

FINES ACADÉMICOS

Los argumentos que esgrimen los grupos que favorecen la fotocopia de libros son falaces e inaceptables por cuanto utilizan interpreta¬ciones que quedan fuera de toda lógica. Por ejemplo, si un centro de fotocopiado clona un libro y vende cien ejemplares de una sola vez, entonces comete un delito porque lucró. Sin embargo, si hace la venta de uno en uno, entonces no comete ningún delito, aún y cuando al final haya alcanzado el mismo lucro.

Esto supuestamente porque medió un ‘fin. personal’ de quien solicitó la fotocopia del libro. El concepto jurídico de lucro es distorsionado en su interpretación y pretendida aplicación.

Veamos cómo se tergiversan los fines académicos.

En el campo universitario es ‘común que se realicen investigaciones teóricas o aplicadas en campos inéditos, a cargo de ‘docentes e investigadores de la institución.

Precisamente para facilitar propósitos académicos como éste, las editoriales y otras empresas pueden extender permisos y dispensas especiales a las universidades, si éstas lo solicitan y justifican.

En esos casos al solicitante no le motiva ningún ánimo de lucro, ya que solo le interesa el beneficio de uso para un propósito académico-investigativo determinado. A este tipo de situaciones se refiere la ley a exceptuar la sanción de la conducta.
En contraposición, si el concepto de “fines académicos” se desvirtúa, entonces todos los abusos podrían ser justificados.

Ejemplos:

Un estudiante de música argumentaría que copia CD’s porque lo hace con fines académicos y para uso personal

Un estudiante de literatura copiaría con fines académicos y uso personal todos los libros de Isabel Allende

Un estudiante de computación quemaría todos los CD’s de software, aduciendo fines académicos y uso personal.

Un estudiante de mecánica plagiaria la tecnología de un auto. porque lo hace con fin académico y personal

Un estudiante de producción audiovisual no tendría impedimento para copiar todos los CD’s de ‘películas de cine que a su juicio considere,

Una persona se declararía autodidacta en todo y copiaría de todo para su autoformación.

La excusa de los fines académicos cobijaría prácticamente todas las inobservancias de la ley y de su espíritu. Esa posición es completamente errónea y evidentemente violatoria de la ley.

Si la universidad cobra por sus matriculas y el profesor universitario percibe una remuneración llamada salario, ¿por qué razón la editorial y los autores tienen que dejar de cobrar por las obras que producen precisamente para coadyuvar en los procesos de aprendizaje?

¿En qué momento se declararon los libros como bienes ‘gratuitos”?

¿Por qué cualquier persona se puede apropiar de un ejemplar copiado y validar su conducta diciendo que lo hace para fines personales?

¿Qué diferencia hay con otros bienes que también se compran para fines personales?

¿Por qué no habría delito de irrespeto a los derechos de autor del contenido de un libro?

Cuando en la misma universidad se propicia la fotocopia irregular de libros surge una paradoja, ya que es la misma universidad la que debiera proteger a sus graduados, una vez que éstos comienzan a producir profesionalmente y a gestar obras literarias. En un centro de enseñanza se educa y uno de los valores primarios de ésta lo es respetar la propiedad ajena, entre ella, la intelectual que tiene protección legal, constitucional e internacional. .
.
En el área de medicina se pretende justificar el uso de fotocopias por el precio de los atlas y tratados que son obras voluminosas y a ‘todo color.

Sobra decir que no es lo mismo estudiar con una fotocopia en blanco y negro que con la fotografía a color del cuerpo humano en la obra original.

El estudiante se ve afectado con la situación expuesta que reiteramos y siempre violaría la ley.

Dichosamente todavía hay estudiantes y profesionales en Medicina que reconocen la importancia de una biblioteca personal para fines de refrescamiento y actualización en el ejercicio profesional, sin distingos entre instituciones privadas y públicas de enseñanza.

¿VERDADERAS ANTOLOGÍAS?

Con las denominadas “antologías’ también se abren portillos, si no se delimitan. Una antología debe ser un trabajo intelectual, con un autor de por medio. De hecho, una antología es una obra que adquiere vida propia y debe registrar su propio ISBN, Presumiblemente, dicho autor estudia múltiples escritos y selecciona párrafos o páginas que favorecen su propósito, que consiste en hilvanar un argumento académico. Como mínimo, el autor debiera dedicar un espacio dentro de la antología para dar crédito a autores e impresores del material entresacado. Además, en buena teoría debiera existir autorización expresa por parte de aquéllos antes de ser incluidos en esta selección, Creemos que es así porque la Ley de Derechos de Autor está vigente.

Si en vez de ésto, la supuesta antología consiste en fotocopiar la mitad de un libro y la mitad de otro libro, entonces no hay ningún talento y más bien se usurpa lo que otra persona aportó al conocimiento. Aquí existiría irrespeto al ordenamiento jurídico.

Si una antología no tiene un autor responsable podría convertirse en un ardid para burlar la ley. El engaño, la afirmación de hechos falsos, el ardid, todas estas conductas son delictivas que deben conocerse, diseminarse y evitarse.

En esto el mismo centro de fotocopiado debiera protegerse y no comercializar antologías anónimas, para que en caso de controversia no se le llegue a imputar la paternidad sobre una “antología’ irregular. Podrían existir incluso. responsabilidades civiles en estas actuaciones por omisión.

FOTOCOPIAS EN REGLA y PAGO DE CÁNONES

Algunos centros de fotocopiado indican que ellos solo sacan copias con permiso del autor y de la editorial. Sería interesante conocer esa lista de permisos, ya que las principales casas editoriales del exterior nunca han recibido solicitudes para trámites como el apuntado. Más bien el centro de fotocopiado debiera negociar los derechos sobre tirajes limitados y acordar las tasas de pago con los creadores del anterior. Hoy en día, ésa es la practica común en los países donde se respetan los derechos sobre obras impresas. De esta manera, las personas pueden adquirir fotocopias con la certeza de que lo hacen sin irrespetar ninguna normativa.

VOLUNTAD POLITICA y FORMACION CIUDADANA

Recurrentemente se escucha al Ministro de Hacienda señalando que muchos profesionales liberales defraudan cantidades astronómi¬cas al Estado por evasión de impuestos. Esa conducta en el ejercicio profesional puede ser el reflejo de la falta de rigor en las etapas de formación y la pérdida de valores y de sentido ético.

En definitiva, la permisividad atenta contra una formación integral y ciudadana y la aplicación de la ley no puede ser vaga o laxa. Gobiernos de otros países como El Salvador se han comprometido a cumplir la ley de propiedad intelectual y han llevado a cabo operativos para regularizar el mercado, a través del decomiso de materiales a las personas que delinquen, Un caso muy sonado fue el decomiso’ de gran cantidad de libros piratas del Álgebra de Baldor, cuyos derechos pertenecen a Grupo Cultural Patria de México. En ese sentido, no queda claro el motivo por el cual el Poder Ejecutivo estaría publicando próximamente “directrices específicas sobre este tema’, a través del Ministerio de Justicia, según manifiesta la Viceministra de COMEX el diario La Nación, del 24 de febrero, página 6. Confiamos en que sean ilustrativas y apegadas al ordenamiento jurídico vigente en la materia.

En su lugar, debe mediar voluntad y responsabilidad política para que las autoridades de Gobierno velen por la aplicación cabal de esta ley de la República.

Es perentorio que en el país se haga realidad la aplicación de la legislación vigente sobre la protección a la propiedad intelectual y que se establezcan políticas agresivas de educación al respecto. Por otro lado, corresponderá al Poder Judicial hacer lo propio.

Las empresas que producimos e importamos libros nos comprometemos a darle seguimiento a este proceso y a profundizar en el tema.

Excepcional debate sobre la crisis

Fue un foro excepcional, no solo por la riqueza de los planteamientos sino también por la variedad de posiciones ideológicas, algo que ahora resulta poco frecuente. Porque así como la sociedad costarricense se ha polarizado, así también los economistas se han distanciado, en razón de sus orientaciones teóricas.

Los espacios de debate han desaparecido y los seminarios, reuniones y simposios se han convertido en actividades donde solo se invita a los que comparten el punto de vista de los organizadores.

Resultó muy estimulante ver en la misma mesa a académicos keynesianos, neoclásicos y monetaristas; escuchar argumentos desde la economía política y la institucional; y percibir un énfasis en la dimensión ética del crecimiento y el desarrollo.

Al menos seis elementos fueron destacados por varios de los expositores en el transcurso de las sesiones.

Primero. La crisis es de naturaleza sistémica, se originó en una burbuja del sector financiero estimulada por la desregulación, aunque tiene raíces estructurales más profundas y puede interpretarse desde la perspectiva de los ciclos económicos, que son recurrentes en las economías de mercado. La intervención del Estado resulta ineludible.

Segundo. Los cambios de los últimos años en las estructuras económicas, caracterizados por la autonomización del sector financiero, la mayor especulación en las bolsas y la globalización, le confieren a la actual recesión particularidades que la diferencian de otras anteriores.

Tercero. La crisis económica ha invisibilizado otros problemas que ya se manifestaban con intensidad y que tienen serias implicaciones en el mediano plazo: el petróleo, los alimentos, el agua y el cambio climático, entre otros. Las medidas de coyuntura no deben desconocer la necesidad de políticas de más largo aliento que conduzcan hacia un estilo de desarrollo más equitativo y compatible con el medio ambiente.

Cuarto. La recesión ha impactado a Costa Rica en el sector externo, lo cual era previsible dada la mayor apertura del país. Se manifiesta por un debilitamiento de la demanda efectiva: caída de las exportaciones y turismo; y menor inversión extranjera y remesas. El mercado interno debe contribuir a la reactivación.

Quinto. La reacción del Gobierno ha sido tardía e insuficiente. El Plan Escudo no constituye una respuesta adecuada a la gravedad del problema: objetivos poco claros, ausencia de un cronograma de ejecución, cuantificación poco precisa de recursos y reducida importancia a la generación de empleo.

Sexto. Las políticas del Banco Central se valoran como inconvenientes para la reactivación, en particular el régimen de bandas, calificado como “experimento cambiario” que debe abandonarse. Se insistió en la necesidad de un papel más protagónico del Ministerio de Hacienda respecto a la inversión en infraestructura.

Felicitaciones a la Universidad de Costa Rica y a la Comisión Especial Interdisciplinaria de la Rectoría, coordinada por el Dr. Manuel María Murillo, que propuso y organizó este primer foro. Las grabaciones se pueden obtener en la página web de Radio Universidad.

(http://www.radiouniversidad.ucr.ac.cr/static/index.htm).

17/03/2009

Latinoamérica: En defensa de la universidad pública

Años más tarde, en 1551, se fundan la de Lima y la Nacional de México.

En 1636, cuando apenas nacía la de Harvard en Estados Unidos, ya había trece universidades en la región latinoamericana, llegando más tarde a 31 en el momento en que se producen los procesos independentistas a comienzos del siglo XIX. En todos los casos, estas instituciones reflejaban el modelo medieval traído de Europa, asociado siempre con los poderes de la realeza y de la iglesia católica. Con la independencia de las nuevas repúblicas comienza a introducirse una nueva idea de universidad, acorde con el surgimiento de las nuevos Estados desarrollados sobre los modelos europeo y estadounidense, con la misión básica de formar profesionales liberales y desarrollar disciplinas académicas.

El modelo en juego imitaba el concepto napoleónico del siglo XIX, en el que la preparación profesional se separaba de los centros de generación del conocimiento, exclusivamente académicos y científicos. Frente a este modelo de profesional liberal fue surgiendo otra concepción en Alemania, donde aparece la “universidad de investigación”. Allí la enseñanza técnica se combinaba con la generación del conocimiento puro y la ciencia, lo cual tuvo el valor de una verdadera revolución académica.

Ese esquema investigativo fue consolidándose en Europa durante el siglo XIX y luego en Estados Unidos, acorde al crecimiento económico que iba impulsando más y más desarrollos técnicos para la floreciente industria capitalista. Ese modelo se fue solidificando y es el imperante hoy día, en el que se da una asociación directa del conocimiento generado en la universidad con su aplicación práctica en la esfera económica, vía empresas privadas básicamente.

En el transcurso del siglo XX la investigación científico-técnica terminó por ligarse enteramente al crecimiento económico, y las ciencias pasaron a ser el sostén de la industria moderna. El modelo universitario, por tanto, pasó a ser una actividad inseparable del crecimiento económico del capitalismo desarrollado, ya completamente alejado de los esquemas medievales que llegaron a Latinoamérica con los años de colonia.

En el siglo XXI esa tendencia se mantiene y profundiza, más aún con los nuevos paradigmas de producción caracterizados por la globalización de la economía y el paso hacia la “sociedad del conocimiento”, basada cada vez más en tecnologías hiper desarrolladas y sumamente cambiantes, enfermizamente competitivas. La tendencia, muy evidente en los países del Norte y que también llega al Sur, a veces provocando procesos distorsionados, forzados, es poner la universidad de investigación al total servicio del mercado, llegando así a la noción de “universidad empresarial”, donde lo que cuenta es la óptima relación costo-beneficio concebida desde el lucro y donde se va esfumando la idea de desarrollo social, de extensión y servicio comunitario.

Pero todos estos procesos, surgidos en los países que marcan el rumbo, llegan a la región latinoamericana como tibia copia. No ha habido, en general, procesos con dinámicas propias. Siempre se ha tratado de imitar al Norte, visto como opulento y modelo a seguir.

A principios del siglo XX, en toda Latinoamérica tienen lugar procesos de profunda autocrítica y explosión renovadora en el seno de las universidades.

Surgidas en la de Córdoba, Argentina, las protestas estudiantiles denunciaban la permanencia de estructuras clasistas y oligarcas en instituciones que no respondían a los procesos de modernización social que vivía el país por aquel entonces, con casas de altos estudios aún organizadas según criterios semi-medievales arrastrados durante toda la colonia, sentando así las bases para una ola de reformas universitarias y crítica social que en las primeras décadas del siglo va a barrer toda la región. Pero esos explosivos movimientos reformistas sólo llegaron a resultados reales en el plano político, sin alcanzar a transformar las estructuras económico-sociales de base de sus respectivas sociedades.

Las banderas fundamentales levantadas por estos movimientos eran la autonomía universitaria y la cogestión, elementos que se consideraron principios necesarios para convertir a las universidades en motores eficientes de la democratización social y cultural, y por tanto del desarrollo nacional. Pero sin dudas esos cambios no fueron suficientes para transformar las sociedades en que tuvieron lugar.

Las desigualdades sociales se mantuvieron y el acceso a la educación superior siguió siendo algo selectivo, tal como se mantiene a la fecha. En realidad, el principal logro concreto que obtuvieron los movimientos de reforma universitaria fue el de incorporar la representación estudiantil a los organismos de gobierno de las casas de altos estudios.

Con la autonomía, las distintas universidades latinoamericanas se convirtieron en centros de denuncias, semillero de luchas políticas y protestas contra el orden social imperante. Por largas décadas estas instituciones fueron un referente en la vanguardia intelectual pasando a ser centros de pensamiento crítico, y en la segunda mitad del siglo XX, el lugar donde se inspiraron numerosas propuestas de transformación revolucionaria. Pero todo eso ha cambiado en estas últimas décadas. Cambiado, claro está, a favor del gran capital y no en provecho de las mayorías populares.

Es necesario decir que aquellas reformas de inicios del siglo XX, si bien contribuyeron a crear un espíritu crítico entre estudiantes y catedráticos que se mantuvo activo por décadas, no lograron articular enteramente a las universidades con la producción de conocimiento y su función social. En toda la región latinoamericana, las universidades no se centraron en la creciente importancia de la ciencia para el cambio técnico-productivo, ni pudieron servir a proyectos políticos que superaran los modelos económicos dependientes y progresaran hacia la industrialización autosuficiente.

La historia de las universidades en Latinoamérica se ha ligado, fundamentalmente, a la formación de profesionales; su faceta de investigación y producción de nuevos conocimientos, tal como se dio en sus homólogas del Norte, no es lo que más ha destacado. A ello se agrega recientemente un proceso que refuerza lo anterior: el crecimiento imparable de las universidades privadas, concebidas especialmente como formadoras del recurso adecuado a la empresa privada que la demanda.

Vale tener en cuenta la forma en que el venezolano Vladimir Acosta sintetiza el perfil de nuestras casas de estudio superior:_ “uno de los grandes problemas de las universidades latinoamericanas es que son unas universidades colonizadas, dependientes, subordinadas a una visión derechista, globalizada, eurocentrista y blanca de mirar el mundo. Son universidades donde los saberes se disocian, se fragmentan, justamente para impedir una visión de totalidad, y para hacer del estudiante que se gradúa, que egresa como profesional, un profesional limitado, con una visión burocrática profesional, orientada en lo personal a hacer dinero, y en la visión que se tiene a encerrarse dentro de un marco profesional sin tener conocimiento de su identidad, de su historia y de su compromiso con su país”_.

Hoy por hoy se ha instalado en la región la dinámica de universidad pública versus privada. Ese crecimiento enorme de las universidades privadas es un fenómeno muy propio de América Latina; ello se explica por las políticas neoliberales de los años 80 y 90 que, luego de las sangrientas dictaduras de décadas atrás, vinieron a privatizar todos los espacios.

En la década de los 90 la privatización de la enseñanza superior alcanzó niveles notables en toda la región y a un ritmo muy acelerado, al mismo tiempo que se desarmaban los Estados nacionales y se privatizaban todos los servicios. En el transcurso de la década, la proporción de estudiantes matriculados en universidades privadas pasó de un 20% a cerca de 35%, lo que hace que la región cuente hoy con una de las mayores proporciones de estudiantes universitarios dentro de la opción privada en el mundo.

Estas universidades privadas se amoldan a cabalidad al modelo neoliberal que se ha impuesto, pues trabajan esencialmente para el mercado. Su visión se centra en la formación de recurso humano para las necesidades de la iniciativa privada, sin que cuente la idea de desarrollo nacional, de proyecto de país. Siempre copiando modelos de universidades “exitosas” (léase: privadas) del Norte, se prioriza la formación profesional de excelencia con criterios individualistas, sin pensamiento crítico. Los ideales de reforma universitaria de principios del siglo XX van quedando en el olvido.

Disciplinas que fomenten la visión global de los procesos dando herramientas de análisis político-social para entender, y eventualmente transformar, las realidades nacionales, parecen ser cada vez menos importantes, reduciéndose su presencia en los planes de estudio, orientados más a la formación en aspectos técnicos.

De todos modos, como lo advierte Roberto Rodríguez Gómez, “la gran expansión del sector privado se ha realizado sobre la base de una multitud de pequeños establecimientos que, si bien ofrecen enseñanza de nivel profesional, carecen, por regla general, de estructuras de postrado y de investigación.

Debe hacerse notar que no todas las instituciones de enseñanza superior
pública en América Latina pueden ser clasificadas como “universidades de investigación”, es decir, como instituciones que cumplen realmente con las funciones de docencia, investigación y difusión. En otros términos, ese auge de la privatización de la enseñanza universitaria no significa necesariamente una explosión de calidad y de excelencia académica. Es, en todo caso, un síntoma más de los tiempos que corren, marcados por la prédica neoliberal.

Pero lo más preocupante de todo esto no es la posible desaparición de la
universidad pública bajo el desarrollo vertiginoso de las privadas. Eso no
pareciera posible, por diversas razones históricas. De hecho, el peso de las públicas es ­y todo indica que seguirá siendo­ mucho mayor que el de las privadas, tanto en presupuesto, estudiantes matriculados, presencia social e impacto con su extensión comunitaria, así como en investigación y producción de nuevos conocimientos.

Lo que sí es alarmante es la ideología privatizadora que está en juego. Las universidades públicas se están privatizando en su concepción. Como bien lo expresó Deiby Ramírez: “la Universidad es pública cuando además de ser financiada por el Estado, está abierta con carácter de servicio público a todos los estratos sociales, y los beneficios de esa educación superior son para toda la sociedad”. Es decir: para ser un proyecto público no se trata sólo de recibir fondos públicos (la Nasa, en Estados Unidos, también los recibe, dicho sea de paso) sino de ver el modelo en función del que se trabaja.

Las universidades públicas, acorde al nuevo dios-mercado que se ha impuesto con su omnímoda exigencia de eficiencia en la relación costo-beneficio (leyéndolo en clave capitalista: lo que no da ganancia hay que desecharlo, olvidémonos del interés social) se van constituyendo cada vez más en expresiones de la ideología privatista. Sus sistemas de post-grado lo evidencian de modo palmario: son todos pagos, en muchos casos más onerosos incluso que las ofertas de las universidades privadas. Lo cual no significa que, por fuerza, deba ser así: si hay voluntad política de mantener tanto ese segmento de la educación superior, como el proyecto universitario en su conjunto, en forma pública, se puede. Y el sistema no se resiente. Cuba, por ejemplo, que tiene excelentes universidades, mantiene todos sus post grados en forma gratuita para los propios ciudadanos cubanos. Evidentemente la decisión de adorar al dios mercado no es técnica; es política.

Amparándose en la idea de autosuficiencia financiera y desregulación (eufemismos para nombrar la privatización y la apología del mercado), las universidades públicas se han visto compelidas a diversificar sus fórmulas de financiamiento bajo la hipótesis de corresponsabilidad con el Estado por medio del cobro de cuotas de admisión y colegiaturas, venta de productos y servicios, concurrencia sobre financiamientos concursables, entre otras.

Es decir: privatización encubierta.

Con todo ello, la universidad pública, aunque no desaparezca formalmente como tal, no deja de enviar un mensaje: hay que amoldarse a las fuerzas que lo deciden todo, es decir: el mercado. El proyecto en juego es seguir apuntalando un sistema económico basado en el lucro personal, que ya se ha demostrado infinitamente que no ofrece salida para las grandes mayorías de la población.

Pero definitivamente hay otras opciones a ese modelo. Luchar por la
gratuidad de la educación superior y por el compromiso de la universidad con su comunidad es seguir manteniendo viva la esperanza en que la vida no sólo puede concebirse como mercancía para vender. En ese sentido, defender la universidad pública ­y más aún: defenderla en Latinoamérica, donde la universidad tiene una larga historia de lucha social y compromiso con el pensamiento crítico­ es seguir apostando por otro mundo posible, por darle forma a las utopías, por no resignarse ante la injusticia.

* especial para ARGENPRESS.info, 16 de marzo de 2009

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