Honorable y respetada señora Ministra de Justicia y Paz, Dra. Ana Isabel Garita Vílchez: Respetuosos saludos.
De manera muy urgente, la ANEP le solicita la más firme decisión interventora de parte de su despacho para detener el grave atropello que con traslados abusivos están sufriendo los servidores de la Policía Penitenciaria, señores GERARDO ZÚÑIGA FERNÁNDEZ, LUIS GUSTAVO MONTOYA CARRANZA, ALLAN CHAVES ULATE y FULVIO CÁRDENAS; quienes venían prestando sus servicios destacados en la Finca La Paz (centro semi-institucional de San Ramón – régimen abierto), a los cuales, abruptamente, sin mayores razones de peso, sin justificación alguna, se les ordenó desplazarse hacia otros centros, sin mediar ninguna causa justificada y sin un debido proceso previo; así decidido por la Dirección Nacional de la Policía Penitenciara y su correspondiente subdirección.
Informes en poder de la ANEP indican que tales traslados habrían sido solicitados por la señora Giselle Jackson, directora de ese centro penal, habida cuenta de un problema con una vecina de la comunidad, en el cual ninguno de los cuatro afectados tuvo nada que ver. Tenemos entendido que la señora Jackson se habría molestado por el traslado anteriormente ordenado del servidor Rodolfo Azofeifa, quien fue la persona que tuvo el altercado con la vecina. Considera la ANEP que si hay un enojo de la señora Jackson por esta última decisión, en nada justifica los traslados de los otro cuatro compañeros aquí mencionados, quienes no tenían nada que ver con el altercado con la vecina.
Señora Ministra: Se la hecho un gran daño a los primeros tres servidores aquí nombrados, todos los cuales tienen padecimientos delicados que se pueden probar con epicrisis médica y que estaban en ese centro a raíz de sus correspondientes estados de salud, con el criterio favorable incluso de la sección de Salud Ocupacional de la institución; y, en el caso de don Fulvio su avanzada edad le hace estar cercano a la pensión y ajustó mucho tiempo trabajando en el CAI-La Reforma a donde le han retornado, causándole un daño emocional, tanto como es el daño emocional sufrido por don Gerardo, don Luis Gustavo y don Allan.
Respetuosamente señora Ministra, repetimos, urgimos de su inmediata intervención y de que usted ordene la más contundente investigación para esclarecer la naturaleza de este abuso de autoridad y de prepotencia jerárquica que para la ANEP es imposible dejar pasar desapercibido. Pero para reparar de inmediato tal injusticia, le solicitamos señora MInistra que usted ordene, como máxima jerarca institucional, que estos traslados queden sin efecto, instantáneamente y se repare, el algo, el dolor y la humillación que han sufrido estos cuatro compañeros de la Policía Penitenciaria.
Le agradecemos su pronto respuesta al efecto.