Crisis salarial en perspectiva

Ha empezado el año 2016 y quienes laboran asalariadamente para el sector Público entran en un período de incerteza total en cuanto a las diversas circunstancias que amenazan su salario y su propia estabilidad laboral.

Con base en la tesis oficial de que la inflación es “negativa”, emerge la circunstancia de concreción real del congelamiento salarial, algo muy satisfactorio para esos sectores del gran poder económico que le echan “los muertos” del déficit fiscal a los empleados públicos; aspecto éste que, por enésima vez, la ANEP rechaza categóricamente.

Es preciso que el Gobierno de la República convoque a la Comisión Negociadora de Salarios del Sector Público (CNSSP), con urgencia, para plantear este tema de la inflación “negativa”, las deudas salariales pendientes de honra acumuladas de tiempo atrás por deterioro de poder de compra, especialmente en puestos de los grupos laborales más golpeados por la concentración del ingreso y la propia desigualdad salarial intra-sector público: personal policial, misceláneo, secretarial, oficinista, administrativo, de seguridad y técnicos, choferes y otros.

Paralelamente, es preciso puntualizarle a las autoridades gubernativas la naturaleza profunda de las razones sindicales para rechazar, radicalmente, las intentonas de los grupos neoliberales (dentro del mismo gobierno y fuera de él), de crucificar el Empleo Público a cambio de leyes tributarias como las que se ocupan para frenar el robo de impuestos y el fraude fiscal en todas sus manifestaciones.

El congelamiento salarial por razones “´técnicas”: inflación “cero” o “negativa”; junto a la perversa relación-trueque que se quiere hacer entre llevar a la baja los salarios del sector Público para que haya leyes tributarias relativamente fuertes, no auguran nada bueno para un clima de paz social en el seno del sector Público.

Agreguémosle las decisiones de organismos reguladores matando los principios legales y constitucionales de la negociación colectiva y estatutos de personal… entonces tenemos serios problemas sociales a la vista.

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