Lo que expongo a continuación son solo ideas, con el fin de aportar un granito, ante el gran estrés del caos vial que vivimos diariamente los y las costarricenses en las carreteras y aceras del casco central de la provincia de San José, lo peor del caso es que no solo afecta a los conductores, sino a toda la población en general que camina por aceras y cruza carreteras.
Los empresarios autobuseros deben de tener sus propias terminales en San José, como las tienen algunas empresas y no usar las aceras y las vías públicas como parada de buses, para no obstaculizar el libre tránsito.
Por un lado, al construir terminales generaría entradas económicas a las Municipalidades, ya que los señores empresarios tendrían que pagar por una patente comercial, como lo hacen todos los grandes, medianos y pequeños comerciantes en todo el país. Inclusive, sin temor a equivocarme creo que las terminales de Lumaca, Los Caribeños, Tuasa, entre otras empresas, pagan sus respectivos rubros.
Además de lo anterior, se obligaría a estos señores empresarios construir servicios sanitarios en las terminales para los choferes, que buena falta les hace y también para los usuarios, según lo estipula el Ministerio de Salud.
La mejor opción es sacar los autobuses del casco central y que sus terminales estén a una distancia prudencial del centro, fuera del anillo periférico, de ahí la posibilidad de construir el TRANVIA. Claro que los grandes ganadores serían el servicio público de taxi.
Ampliar la Restricción Vehicular de lunes a sábado en toda la Gran Área Metropolitana (GAM). Ejemplo, Cartago, Alajuela, Heredia y San José o bien hacer un estudio que analice cuales son los números de placas que tiene más vehículos en carreteras el día de restricción, para que de esta manera las placas con más vehículos transite en días claves de la semana, que no sea lunes y viernes.
Eliminar o regular ciertos semáforos que provocan mucho congestionamiento por el tiempo que dura la luz o bien sincronizar el tiempo de espera de la luz roja a verde y con ello prever que concuerden los colores de un semáforo a otro, cuando estos se encuentran en una intersección muy cerca una de otra. Ejemplo; el semáforo de La Ladrillera que va en sentido de colima a San José, cuando este se pone en verde e inmediatamente el que sale a la Uruca se pone en rojo ocasionando una verdadera presa en ese sector, estamos hablando de un recorrido de 100 mts y así como este semáforo hay muchos. Lo mejor sería que si el de la Ladrillera se pone en verde el de la Uruca también se ponga en verde así se daría una mejor fluidez vehicular.
Contratar más personal para oficiales de tránsito, estos y estas profesionales debe de estar en puntos estratégicos y no bajo los semáforos, que ya por si solos, regulan el tránsito.
No construir más bulevares y valorar la posibilidad de eliminar aquellos que se construyeron y que al día de hoy, tengan menos afluencia peatonal y que se reactiven como paso vial vehicular. Desde que se implantó este sistema de “embellecimiento “de San José, se incrementó el congestionamiento vial debido al cierre de varias vías en el casco central.
Reacomodar las paradas de taxis a lugares de menos tránsito o bien eliminar las paradas fijas en lugares donde circula mucho vehículo particular por ejemplo como las del Parque Central, Morazán, Nacional, entre otros lugares.
Hacer estudio de carreteras de doble sentido, dependiendo si son anchas o angostas, para que en las calles angostas circulen en un solo sentido.
Creo que al igual que este servidor, todos y todas los y las costarricenses estaríamos anuentes a sacrificarnos con el fin de mejorar la situación vehicular en las calles de este país, todo sea para evitar el stress de las presas, choques y hasta atropellos a los que nos exponemos todos los días, inclusive ahora hasta los sábados y los domingos es imposible transitar y ni que hablar de los transeúntes que en cualquier momento son atropellados por un motociclista irresponsable de esos que toman las aceras como si fuera una carretera más, o el colmo hasta conductores de carros que se prestan para este tipo de conductas que se podría tomar como una fechoría.
Estas alternativas que propongo tal vez no solucionan mucho la lamentable precariedad de circulación vial en las carreteras que tiene Costa Rica, debido a la falta de inversión en infraestructura, por lo menos trato humildemente de aportar algunas ideas, que podrían ser para unas y unos descabelladas pero para otros y otras, no.
Si hay alguien que puede aportar más que ideas, practicando la buena voluntad política, son los señores diputados y las señoras diputadas, nuestros gobernantes y los llamados Gobiernos Locales de nuestra comunidad.
esquivando todo a nuestro paso, gritos, insultos, postes o árboles que caen sobre la vía, como le sucedió hace poco a un Juez de la Republica, cuando se dirigía en su vehículo de Limón hacia San José para visitar a su hija y esposa, que Dios lo acoja en su Santa Gloria.