- Ataques de ciudadanos hacia policías prácticamente quedan impunes, oficiales molestos por indefensión jurídica.
De acuerdo con la seccional, representante de una gran cantidad de policías; es urgente dotar de mayor protección jurídica la actuación de los oficiales, así como brindarles una mejor y constante capacitación.
“Podemos citar tres casos que han salido a la luz pública, el primero fue el enfrentamiento entre oficiales de la Fuerza Pública y vendedores ambulantes en San José, luego se presentó el ataque hacia un policía cuando acudió al parque de Barva de Heredia para atender una riña callejera y terminó con la nariz fracturada y tenemos a dos policías heridos de bala por perseguir a un vehículo en un retén en la zona de corredores, situaciones como estas no deben quedar impunes”, indicó Mainor Anchía, presidente de la Seccional ANEP-Fuerza Pública.
Anchía explicó que existe un malestar generalizado ya que el policía se encuentra en incertidumbre ante lo que vaya a pasar y en completa indefensión jurídica, por lo que es necesario plantear reformas legales que acuerpen el actuar de los funcionarios públicos.
Recordemos que el artículo 312 del Código Penal establece “prisión de un mes a tres años al que empleare intimidación o violencia contra un funcionario público o contra la persona que le prestare asistencia a requerimiento de aquel o en virtud de un deber legal, para impedir u obstaculizar la ejecución de un acto propio del legítimo ejercicio de sus funciones. La misma pena se impondrá a quien empleare fuerza contra los equipamientos policiales utilizados por la autoridad policial para realizar su labor”.
Para el dirigente sindical la mayoría de faltas en contra de la figura de autoridad pública, se encuentran en el libro de las contravenciones del Código Penal, con penas que resultan insuficientes para persuadir a quienes irrespetan la actuación de nuestras autoridades.
Además, la aplicación de la ley, tanto en el campo penal como en el Administrativo, viene siendo en perjuicio de nuestros policías, los cuales se ven en una clara desventaja, al momento de ser juzgados, en contrapelo de quienes les agraden e irrespetan.
“Hemos sido testigos de como un juez de la República argumenta en sus conclusiones que el policía debe soportar sin perder la paz a que lo escupan, lo golpeen y lo insulten porque para eso está “bastamente entrenado”. Según algunos juzgadores, si se da una aprehensión con necesidad de hacer uso de la fuerza, el policía puede ser golpeado pero el que se resiste de la aprehensión no. Por tanto, es menester recordar que en nuestro país la formación policial es básica y de carácter civilista”, agregó Anchía.
Nuestra organización sindical es consciente de que el Estado viene siendo incapaz de resolver la falta de oportunidades, lo cual es motivo de que muchas personas recurran a la informalidad, al mismo tiempo, nos convertimos en tierra fértil para el narcotráfico y el crimen organizado que se favorece de la incapacidad gubernamental.
Actualmente, existe mucho descontento en la sociedad por los fallos en las políticas públicas, la descomposición social, la exclusión, la falta de oportunidades que están haciendo de Costa Rica un lugar cada vez más violento.
“La intolerancia y el estrés quedaron de manifiesto en diferentes eventos que fueron captados por cámaras de videos, así como el flagrante irrespeto a la figura de autoridad de policía. Sin omitir, que también hace falta mejorar la malla curricular de los cursos de formación policial, tal cual se lo hemos hecho ver a las más altas autoridades de la cartera de seguridad pública”, dijo Anchía.