La comunidad de Escazú se ha manifestado, motivada por la incertidumbre e inseguridad, producto de los recientes hechos delictivos de los que han sido víctimas algunos comerciantes de la zona, impera en la localidad. Cabe destacar, en lo que va del año 2017, que el cantón de Escazú es el número 21 en la lista de incidencia, en lo que respecta a delitos contra la propiedad, es decir, esta categoría de ilícitos ocurridos en la zona (771) representan solo una pequeña parte de lo que se vive realmente a nivel nacional (48900).
Las exigencias de la población son un histórico calco al carbón, muchas comunidades demandan más policías, más presencia, operativos y más acciones antidrogas. Por su parte, el Ministerio de Seguridad Pública, como es costumbre, reacciona hasta que es puesto en evidencia ante la opinión pública, es con la presente administración que se han registrado los más altos índices de incidencia criminal, y sus jerarcas solo hablan al respecto cuando los ciudadanos expresan su malestar por medios de comunicación masivos.
“No tenemos suficiente recurso”, necesitamos más policías, es la trillada frase que escucha la población, cada vez que un acto criminal conmueve Costa Rica, y se aprovecha la situación para señalar responsables en Cuesta de Moras, por no aprobar más dinero a Seguridad Pública, o a los jueces de la República, por liberar presuntos responsables de un hecho delictivo.
¿Se requieren más oficiales? Definitivamente sí, pero antes es necesario otorgar buenas condiciones laborales y seguridad jurídica, a quienes ya ejercen la labor policial, para que la deserción no siga debilitando la Fuerza Pública. También, se requiere que el actual recurso con el que se cuenta sea bien administrado, que se dejen de utilizar plazas policiales para labores de limpieza, cocina, intendencia, combustibles y demás funciones de naturaleza administrativa. Que se supervise si aquellos a quienes mejor se les paga están realizando su labor, o por el contrario están utilizando a cuatro o cinco operacionales, como asistentes, para que hagan las verdaderas tareas que por Manual tienen encomendadas.
La misma administración, a través de sus políticas internas, ha venido propiciando desilusión y deserción policial; aunado a la sensación de incerteza jurídica, que se produce cada vez que uno de nuestros jerarcas amenaza con iniciar un proceso disciplinario o de despido, al momento de que un funcionario policial es cuestionado por una intervención policial.
Ante la manifestación de los vecinos de Escazú, el señor Ministro de Seguridad argumenta que van a analizar la cantidad de recurso que se utiliza para el cuido de embajadas, sedes diplomáticas y demás. ANEP coincide con la necesidad de revisar y replantear el recurso policial que se destina a tales fines. Según se observa en el oficio Nº 398-2017-DO, suscrito por el Comisionado Milton Alvarado Navarro, Director de Operaciones, en respuesta a consulta realizada por este sindicato, se tiene el siguiente desglose:
-Embajadas y residencias diplomáticas: 108 funcionarios policiales.
-Residencias exmandatarios: 16 funcionarios policiales.
-Residencias ex primeras damas: 12 funcionarios policiales.
-Funcionarios de altos cargos públicos: 77 funcionarios policiales.
Es decir, 213 efectivos policiales, (una delegación) utilizados para dar seguridad individual a personas que poseen un amplio poder adquisitivo y podrían entonces contratar su propia seguridad privada, como le toca hacer al resto de ciudadanos del país que deseen resguardarse ante los cuestionamientos, el señor Ministro de Seguridad argumenta que van a analizar la cantidad de recurso que se utiliza para el cuido de embajadas, sedes diplomáticas y residencias de ex mandatarios; en hora buena, aunque debieron hacerlo desde que les hicimos ver la situación. Por cierto, la mayoría de oficiales trabajan en casetas en condiciones infrahumanas, lo cual ya fue puesto en conocimiento del Ministerio de Salud.
Finalmente, es necesario, e imperativo contar con políticas criminales, fomentar el trabajo en equipo, la coordinación interinstitucional y la planificación operativa, brindando mayor ponderación sobre la prevención, el antes.
Mainor Anchía Angulo
Seccional ANEP-Fuerza Pública
ANEP