Honorable señor
PAUL GUTIERREZ
Representante ILG
Presente
Estimado señor:
Con mucho respeto pero con gran consternación expresamos nuestra alarma en cuanto a que los hijos y las familias de los trabajadores traileros se queden sin comida, luego de la lamentable decisión de su representada que, sin fundamento alguno, generó una sensible baja en el valor de los fletes.
No es de recibo para esta organización el argumento de que su representada sufre costos muy altos de operación por las comúnmente denominadas “cargas sociales” imperantes en la legislación costarricense, dado que no es menos cierto que nuestros socios traileros, agrupados en la ANEP, no están en condiciones de competir con sus homólogos centroamericanos y panameños pues éstos operan con costos sumamente bajo en detrimento de los nacionales.
El Sindicato de Traileros-Seccional ANEP y nuestra propia representada está desarrollando un proceso de negociaciones con el actual Gobierno de la República para, precisamente, atender estas graves desventajas deslealmente competitivas, proceso todavía sin terminar. Ello nos lleva a solicitarle, con vehemencia respetuosa, que su representada reconsidere tan desafortunada decisión hasta que el indicado proceso no arroje conclusiones definitivas.
Caso contrario y siempre en el marco del debido respeto, no queda más opción que ventilar ante la opinión pública nacional, vía medios nacionales de comunicación colectiva, la controversia con su representada ILG y mediando una protesta pública de cientos de cabezales en las afueras de sus instalaciones, dejando en evidencia la grave discriminación de que están siendo víctimas los transportistas-traileros costarricenses; situación sensible y delicada que nos llevará a exigir la intervención del propio Gobierno de la República, vía Ministerio de Hacienda, por ejemplo, considerando presuntas evasiones de responsabilidades legales de diverso orden con la contratación de mano de obra extranjera que podría estar al margen de la ley.
Es de tanta magnitud el impacto negativo psicosocial y económico-familiar de su decisión, que no se puede más que dar un margen razonable de 72 horas para tener mayor claridad de cómo debemos actuar en esta nueva realidad contraproducente para la paz social del país si nuestros razonamientos caen en oídos sordos y ILG no cambia esa nefasta decisión.
Con la mayor consideración,
Albino Vargas Barrantes
Secretario General ANEP
Marcos Murcia Hidalgo
Presidente Junta Directiva SINDICATO DE TRAILEROS-SECCIONAL ANEP