Cuando todo hacía suponer que, ¡por fin!, la policía migratoria costarricense y luego de unos 7 años de lucha sistemática, obtendría, por primera vez, un manual de puestos que le diera un verdadero estatus en cuanto tal; la indignación se ha apoderado de este estratégico personal del servicio público nacional, al enterarse de que la Secretaría Técnica de la Autoridad Presupuestaria, del Ministerio de Hacienda, se vio en la necesidad de devolverlo sin su trámite aprobatorio.
Tan lamentable circunstancia se da porque el Lic. Mario Zamora Cordero, en su calidad de Ministro de Gobernación y Policía (entidad a la cual pertenece la Policía Profesional de Migración y Extranjería PPME), emitió un decreto ejecutivo que instaura un reglamento para la misma, por medio del cual los mandos de autoridad quedarán en manos de personal del Régimen de Servicio Civil, y no como lo ordena la Ley General de Policía, No. 7410, de que los cuerpos de policía indicados en la misma deben ser dirigidos por policías y no jerarcas con rango administrativo.
La Autoridad Presupuestaria ha actuado apegada a la ley y si el Ministro Zamora no corrige tal “entuerto” en la próximas horas, el país podría presenciar un movimiento laboral inédito en la historia migratoria costarricense: El cierre de sus principales puntos fronterizos y/o de entrada, como los aeropuertos Juan Santamaría y Daniel Oduber Quirós, así como las fronteras de Peñas Blancas y Paso Canoas.
La ANEP, en cuanto tal, así como sus seccionales de la Policía Profesional de Migración y Extranjería (ANEP-PPME) y de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME), se encuentran ya realizando la labor promocional-organizativa y de sensibilización laboral para un paro de la policía migratoria para próximas horas; movimiento laboral que podría adquirir enorme relevancia internacional y que estallará sorpresivamente.
La ANEP espera que esta circunstancia no tenga que materializarse y que, por el contrario, el mencionado ministro Zamora proceda a derogar, con suma urgencia, el ilegal y espurio reglamento violatorio del carácter meramente policial de la policía migratoria costarricense, tal y como lo está recomendando la mismísima Autoridad Presupuestaria; derogatoria que debe instaurar la correspondiente estructura para normar la institucionalidad de un cuerpo policial nacional: es decir, las policías la dirigen policías.