Haití: «El viejo terror aún no ha desaparecido»

Ejemplo: el terremoto de Haití, de magnitud 7,0 en la escala de Richter, ha ocasionado más de cien mil muertos, mientras que el de Honshu (Japón), de idéntica fuerza (7,1), acaecido hace seis meses, apenas provocó un muerto y un herido.

“Los países más pobres y los que tienen problemas de gobernabilidad están más expuestos a riesgos que los otros”, confirma un reciente informe de la ONU (1). En una misma ciudad, el impacto humano de una calamidad puede ser muy distinto según las características de los barrios. En Puerto Príncipe, el seísmo se ensañó con las desvencijadas barriadas populares del centro. En cambio, los distritos privilegiados de la burguesía mulata comerciante apenas padecieron estragos.

Tampoco son iguales los pobres ante la adversidad. La Federación Internacional de la Cruz Roja sostiene que, en caso de desastre, “las mujeres, los discapacitados, los ancianos y las minorías étnicas o religiosas, víctimas habituales de la discriminación, son más castigados que los demás” (2).

Por otra parte, aunque un país no sea rico, si se dota de una política eficaz de prevención de catástrofes puede salvar muchas vidas. En agosto de 2008, el ciclón Gustav , el más violento de los últimos cincuenta años, azotó el Caribe con vientos de 340 kilómetros por hora. En Haití mató a 66 personas. Sin embargo, en Cuba no causó ninguna víctima mortal…

¿Es Haití un país pobre? En verdad, no hay países pobres; sólo existen “países empobrecidos”. No es lo mismo. En el último tercio del siglo XVIII, Haití era la Perla de las Antillas y producía el 60% del café y el 75% del azúcar que se consumía en Europa. Pero, de su gran riqueza sólo se beneficiaban unos 50.000 colonos blancos, y no los 500.000 esclavos negros que la producían.

Invocando los nobles ideales de la Revolución Francesa, esos esclavos se sublevaron en 1791 al mando de Toussaint Louverture, el Espartaco negro . La guerra duró trece años. Napoleón envíó una expedición de 43.000 veteranos. Triunfaron los insurrectos. Fue la primera guerra racial anticolonial y la única rebelión de esclavos que desembocó en un Estado soberano.

El 1 de enero de 1804, se proclamó la independencia. Sonó como un aldabonazo en el continente americano. Los esclavos negros demostraban que, por su propia lucha, sin la ayuda de nadie, podían conquistar la libertad. Afro-América emergía en la escena política internacional.

Pero el “mal ejemplo” de Haití así lo calificó el Presidente de Estados Unidos, Thomas Jefferson aterrorizó a las potencias que seguían practicando la esclavitud. No se le perdonó. Y nadie reconoció, ni ayudó a la nueva república negra, pesadilla del colonialismo blanco. Aún hoy, el viejo terror no ha desaparecido. Pat Robertson, telepredicador estadounidense, ¿no acaba acaso de afirmar: “Miles de hatianos han muerto en el seísmo porque los esclavos de Haití hicieron un pacto con el diablo para obtener su libertad” (3)?

El nuevo Estado independiente fue boicoteado durante decenios con la idea de “recluir la peste” en ese país. Haití cayó en guerras civiles que arrasaron su territorio. Se perdió la necesaria etapa de construcción de un Estado-nación. Institucionalmente, a pesar de la gran calidad de sus numerosos intelectuales, el país quedó estancado.

Después vino el tiempo de la ocupación por Estados Unidos que duró de 1915 a 1934. Y de la guerra de resistencia. El héroe de la rebelión, Charlemagne Péralte, fue crucificado por los marines , clavado en la puerta de una iglesia… Washington acabó por ceder Haití a nuevos dictadores, entre ellos: Papa DocDuvalier, uno de los más despóticos.

En los años 1970, aún gozaba Haití de soberanía alimentaria, sus agricultores producían el 90% de los alimentos que consumía la población. Pero el Plan Reagan-Bush, impuesto por Washington, obligó a suprimir los aranceles sobre la importación de arroz, producto básico del cultivo local. El arroz estadounidense, más barato porque estaba subvencionado, inundó el mercado local y arruinó a miles de campesinos que emigraron en masa a la capital, donde el seísmo los ha atrapado…
La única experiencia de gobierno realmente democrático, fue la de Jean-Bertrand Aristide, dos veces Presidente (1994-1996 y 2001-2004). Pero sus propios errores y la presión de Washington lo empujaron al exilio. Desde entonces, de hecho, Haití se halla bajo tutela de la ONU y de un conglomerado de ONGs internacionales. El Gobierno de René Préval ha sido sistemáticamente privado de medios de acción. Por eso resulta absurdo reprocharle su inoperancia ante los efectos del seísmo. Hace tiempo que el sector público fue desmantelado y sus principales actividades transferidas, si eran rentables, al sector privado, o a las ONGs cuando no lo eran. Antes de convertirse en el Ground Zero del planeta, Haití ya era el primer caso de “colonialismo humanitario”. La tragedia reforzará la dependencia. Y por consiguiente las resistencias. El “capitalismo de choque”, descrito por Naomi Klein, hallará una nueva ocasión de reclamar en nombre de la eficacia la privatización integral de todas las actividades económicas y comerciales ligadas a la reconstrucción.

Estados Unidos está en primera línea, con sus Fuerzas Armadas desplegadas en una ofensiva humanitaria de gran envergadura. Resultado sin duda de un generoso deseo de socorrer. Pero también de indiscutibles intereses geopolíticos. Washington prefiere invadir Haití de ayuda que ver invadidas sus costas por decenas de miles de boat people haitianos. En el fondo, se trata de la misma vieja obsesión: “recluir la peste”…

Notas:
(1) Riesgo y pobreza en un clima cambiante. Invertir hoy para un mañana más seguro , Naciones Unidas, Nueva York, mayo de 2009.
(2) Informe Mundial sobre los desastres 2009 , Cruz Roja Internacional, Ginebra, julio de 2009.
(3) Christian Broadcasting Network, 14 de enero de 2010.

10 de febrero de 2010

Banco Popular: El Consejo ratificó diálogo y defensa de la autonomía

Lea también: Don Rodrigo ¿Para qué quiere meterse en el Banco Popular?

Video: Unidad de Información y Comunicación, ANEP

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Ayer se reunió el Consejo de la Asamblea de Trabajadores y Trabajadoras, órgano intermedio entre ésta y el Directorio, de ahí que en su calidad de Consejo asesor, analista y canal coordinador de los sectores sociales representados, decidió seguir priorizando su trabajo en la defensa institucional de la autonomía del Banco, pero siempre antecedido por el diálogo intersectorial, concretado en la reactivación de dicho Consejo al tener integrantes del Directorio, la Junta Directiva y los Sectores Sociales y en los debates de la última Asamblea Plenaria.

Reglamento por una mayor democracia

El trabajo del Directorio en el Reglamento para la Integración de la Asamblea de Trabajadores y Trabajadoras ha ido en procura de fortalecer la rendición de cuentas, el control interno, la autonomía y, de manera consiguiente, la participación de las bases representadas en los 10 sectores, asimismo, se ha querido dar una real participación a las minorías, de ahí que se actuó en apego a estos principios y al mandato de la Contraloría General de la República, la cual dictaminó como oportuno que sea la Asamblea quien dirija el proceso de integración. Entonces, en una línea de transparencia y participación colectiva, la Asamblea y el Consejo avalaron lo actuado para aprobar un nuevo Reglamento, no obstante, los Decretos Ejecutivos No. 6 del 6 de enero del 2010 y el No. 21 del 1 de febrero del mismo año, vinieron a cambiar el espíritu con que se pensó el Reglamento, de manera que le quitó la competencia correspondiente y natural de la Asamblea: dirigir el proceso de integración. Así se favoreció de manera unilateral un manejo no democrático en los nombramientos de las organizaciones sociales así como la injerencia externa a través del Ministerio de Trabajo.

Acuerdo unánime del Consejo: diálogo por una mayor democracia institucional

Al tenor de lo indicado, el Consejo determinó unánimemente que deben hacerse las gestiones destinadas a fortalecer la autonomía del Banco Popular, además de que manifestó y continúa reiterando, su disposición a dialogar y respetar el consenso de los sectores sociales en las diversas instancias: Consejo, Asamblea Plenaria, Directorio, Comisión Permanente de la Mujer y Comité de Vigilancia. El Consejo se declara a favor del diálogo, en virtud de que sólo mediante éste se hace posible la estructura democrática con que nació la Institución, particularmente, su Asamblea, asimismo, la autonomía para favorecer a la población trabajadora costarricense.


Fuente: Licda. Marisol Delgado Rojas
Gestión de la Información y Comunicación con los Sectores
Asamblea de Trabajadores y Trabajadoras
Banco Popular y de Desarrollo Comunal

10º Foro Social Mundial: Los síntomas de decadencia

ALAI AMLATINA. Los síntomas son bien conocidos: debatir hasta el cansancio si lo que se está haciendo tiene sentido, si debe continuarse el mismo camino o torcer el rumbo en alguna dirección que permita encontrar soluciones a los males y malestares que se perciben. En efecto, tanto el seminario “10 años después” realizado en Porto Alegre, como el Foro Temático, con sede en Salvador, dedicaron buena parte de su tiempo a constatar la pérdida de vitalidad de un movimiento que pretendió ser la alternativa a la globalización neoliberal.

Este año, el Foro Social Mundial no contó con un evento central sino que realizó actividades en una veintena de ciudades de diferentes partes del mundo, entre ellas las dos capitales estatales brasileñas. La opción por la descentralización es un indicador de que los grandes eventos de decenas de miles de personas jugaron un papel importante en su momento, a comienzos de la década, pero en esta etapa no tendría sentido repetirlos ya que, según se pudo constatar en las últimas ediciones, el formato se fue desgastando.

El evento de Porto Alegre, a partir del 25 de enero, consistió en un conjunto de debates entre intelectuales y miembros de ONGs, con escasa participación de los movimientos sociales que son, en los hechos, la razón de ser del Foro. Por cierto, no era la intención de los organizadores apostar por la masividad que arrastró a más de 150 mil personas en las ediciones anteriores, pero los debates atrajeron ahora a menos del diez por ciento del anterior pico de participación.

En Salvador, por el contrario, en el Foro Temático realizado entre el 29 y el 31 de enero, la presencia de los movimientos era esperada con cierta expectativa. La opción por descentralizar el evento, con mesas de debates en hoteles de la ciudad y las actividades de los movimientos relegadas al recinto de la Universidad Católica, tuvo un efecto negativo para la participación social. A diferencia de lo que sucedía en Porto Alegre años atrás, cuando la ciudad giraba por unos días en torno al Foro, en la capital de Bahía la gente no se enteró del evento altermundialista.

Buscando nuevos rumbos

El viraje en la situación política mundial y en América Latina, parece estar en la base de un cierto desconcierto que se plasma en la aparición de propuestas notoriamente divergentes. En las primeras ediciones de los Foros, se registraba un fuerte ascenso del conservadurismo comandado por George W Bush, a caballo de las invasiones a Irak y Afganistán. En este continente, se estaban estrenando los gobiernos del cambio y se registraba aún una oleada de movilización social que desembarcó con sus múltiples colores en los eventos multitudinarios de Porto Alegre.

La crisis mundial, el ascenso de Barack Obama a la Casa Blanca, el otoño de los gobiernos progresistas y de izquierda de la región y la creciente desmovilización social, pautan una coyuntura bien distinta. El tono de la Carta de Bahía, documento final aprobado por una asamblea de movimientos, delata el nuevo clima. La declaración enfatiza en el rechazo a “la presencia de bases extranjeras en el continente sudamericano”, la defensa de la soberanía y de los grandes yacimientos de petróleo descubiertos en el litoral brasileño.

La Carta hace una defensa cerrada del gobierno de Lula. “En Brasil, muchos avances fueron conquistados por el pueblo durante los siete años del gobierno Lula”. Menciona que aún falta realizar reformas estructurales, pero llama a apoyar a los diversos oficialismos “en este período de embate político que se aproxima”, en clara alusión a los procesos electorales venideros.

En este punto, aparecen fuertes divergencias. El Movimiento Sin Tierra, muy crítico con Lula por no haber hecho la reforma agraria prometida, no movilizó sus bases hacia el Foro como en ocasiones anteriores. En Salvador, el movimiento más potente es el de los Sin Techo, que en diferentes talleres mostró claras distancias tanto con el gobierno federal como con el estatal, comandado por el petista Jacques Wagner.

La distancia, social antes que política, entre movimientos y gobiernos fue una de las características del Foro de Salvador. Uno de los “intercambios” con los movimientos se realizó en un hotel de cinco estrellas, con la participación del gobernador Wagner, el ministro de Desarrollo Social Patrus Ananias y el Secretario Especial para Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Samuel Pinheiro. No era ese el mejor ambiente para movimientos de base que, como los de Salvador, están integrados en su inmensa mayoría por negros pobres que viven en favelas, que son sistemáticamente rechazados en esos espacios.

En la visita que realizamos a tres ocupaciones urbanas de los Sin Techo, pudimos comprobar que las bases de esos movimientos no tenían la menor idea de lo que sucedía en el centro de la ciudad, ni mostraban intención de asistir cuando se les informaba que debían registrarse en otro hotel, también de cinco estrellas, ubicado en el corazón elitista de la ciudad racista. Si alguna vez los foros fueron un genuino encuentro de movimientos sociales, en los hechos se convirtieron en encuentros de elites, intelectuales, miembros de ONGs y representantes de organizaciones sociales.

En palabras de Eric Toussaint, miembro del Consejo Internacional del FSM, un dato central es que el encuentro “fue patrocinado por Petrobrás, Caixa, Banco do Brasil, Itaipú Binacional y con fuerte presencia de gobiernos”. O sea, grandes multinacionales que están también en el encuentro empresarial de Davos, donde Lula fue proclamado “estadista global”. En su opinión, el núcleo histórico de fundadores del Foro, donde tienen especial presencia brasileños vinculados al gobierno, son los más reacios a buscar otros formatos, que “se apoyen en fuerzas militantes voluntarias y se alojen en casas de activistas”.

Cuestión de Estado

En cuanto al formato, las propuestas son muy variadas. El portugués Boaventura de Sousa Santos, cree que el Foro fracasó en Europa, Asia y África al no haber conseguido “conquistar la imaginación de los movimientos sociales y los líderes políticos” como sucedió en América Latina. Cree que el FSM debería haber acudido con una posición propia a la cumbre de Copenhague y que el próximo encuentro, a realizarse en Dakar (Senegal), deberá “promover algunas acciones colectivas” en la dirección de buscar “una nueva articulación entre partidos y movimientos”.

Toussaint va más lejos y aspira a que los movimientos recojan la propuesta lanzada por Hugo Chávez de crear una Quinta Internacional, que sería un “instrumento de convergencia para la acción y para la elaboración de un modelo alternativo”. En el otro extremo, el sociólogo brasileño Emir Sader cree que el Foro ya fracasó porque al no estrechar vínculos con los gobiernos progresistas, “quedó girando en el vacío”.

Dos temas siguen estando en el centro de los debates, como estas posturas manifiestan: la relación entre gobiernos y movimientos y el grado de centralización y de organización que debe dotarse el Foro. Hay quienes, como Toussaint, defienden un modelo tradicional, que se resume en “un frente permanente de partidos, movimientos sociales y redes internacionales”, porque es la mejor forma de impulsar la movilización.

Cree, por añadidura, que el golpe de Estado en Honduelas se consolidó porque la movilización “fue totalmente insuficiente”.

De Sousa Santos echa más leña al fuego al abordar el otro tema en debate. Sostiene que “ahora existe un novísimo movimiento social que es el propio Estado”. Defiende su tesis señalando que si al Estado se lo deja librado a su lógica, “es capturado por la burocracia y por los intereses económicos dominantes”. Pero si los movimientos, que siempre han trabajado por fuera de los estados, lo toman en cuenta como “un recurso importante”, ese Estado “puede ser apropiado por las clases populares como está ocurriendo en el continente latinoamericano”.

En su comunicación al seminario_ “10 años después”_, Immanuel Wallerstein presentó una perspectiva que incluye una variante más, estirando las diferencias entre los militantes. Sostuvo que los impactos mayores de la crisis vendrán en los próximos cinco años, con un posible default de la deuda de los Estados Unidos, la caída del dólar y la aparición de regímenes autoritarios, incluyendo algunos países de América Latina, y la creciente demonización de Obama en Estados Unidos. Cree que se están formando varios bloques geopolíticos que excluyen a Washington: Europa Occidental-Rusia; China-Japón-Corea del Sur; Sudamérica liderada por Brasil.

En ese escenario, opina que en las dos próximas décadas la izquierda social y la política irán percibiendo que_ “la cuestión central no es poner fin al capitalismo, sino organizar un sistema que lo suceda”_. En ese lapso, la confrontación entre derechas e izquierdas, cuyas fuerzas se han expandido a todo el mundo, será inevitable, pero no será una batalla entre estados sino “entre las fuerzas sociales mundiales”. Y cree, además, que a las izquierdas y a los movimientos “les falta una visión estratégica de medio plazo”. Esto último se ha mostrado enteramente cierto, por lo menos en el último Foro Social Mundial.

[Publicado por ALAI AMLATINA, el 05/02/2010]

– Raúl Zibechi, periodista uruguayo, es docente e investigador en la Multiversidad Franciscana de América Latina, y asesor de varios colectivos sociales.

Haití: Cuba no viene, Cuba ya estaba con solidaridad permanente

PUERTO PRÍNCIPE, Haití.— El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz envió un mensaje de agradecimiento y un fraternal saludo a los miembros de la brigada médica internacional Henry Reeve, a los graduados y a los estudiantes de quinto y sexto años de la Escuela Latinoamericana de Medicina, a través de la comitiva cubana que, encabezada por el miembro del Buró Político Esteban Lazo y el canciller Bruno Rodríguez, visita a esta nación desde ayer.

Marcia Cobas, viceministra de Salud Pública, transmitió el mensaje del Jefe de la Revolución a los colaboradores cubanos que con especial emoción lo recibieron en sus puestos de labor, donde trabajan sin descanso.

De esta abnegación fue testigo Esteban Lazo, vicepresidente del Consejo de Estado, cuando recorrió el hospital de campaña de Croaix des Buquet, los centros hospitalarios La Paz y La Renaissance, y el Centro de Diagnóstico Integral de Mirebalais.

Con anterioridad el dirigente cubano fue recibido por el presidente haitiano René Preval. Lazo dijo a Granma que Preval lo había recibido con mucha alegría, sobre todo a partir del criterio de que Cuba no era un visitante nuevo; que Cuba no venía, que Cuba ya estaba en Haití. Comentó Lazo que Preval se interesó por saber cómo estaban Fidel y Raúl, y reconoció el tremendo trabajo de los médicos cubanos que convocaron también a los estudiantes y galenos haitianos.

Lazo informó a Preval sobre los casi 1 200 médicos que laboran actualmente en la brigada cubana en Haití, los cuales habían atendido a más de 70 000 personas luego del sismo. Le habló sobre lo importante que era evitar las epidemias, y el esfuerzo que estaban haciendo en la vacunación y la fumigación. También le comunicó que a la brigada cubana se le unió un grupo de doctores norteamericanos graduados en la ELAM.

Esteban Lazo planteó a Preval la propuesta de fortalecer el sistema de Salud en Haití, acuerdo tomado en la reciente reunión de los países miembros del ALBA. “Le explicamos que la idea es contribuir a lograr un sólido sistema de atención primaria, secundaria y terciaria que garantice la salud de este pueblo a partir de los esfuerzos del ALBA, y que como Cuba ya tenía aquí a una gran cantidad de compañeros con experiencia podría dirigir ese trabajo”.

Para ello, y mientras se construyen o remodelan las instituciones que servirán de centros de salud, se instalarán hospitales de campaña en las inmediaciones de las mismas. Explicó Lazo que para atender a los pacientes se creará un contingente de jóvenes graduados de la ELAM, que desde ya están llegando a La Habana, luego de ser convocados por Cuba. Queremos reunir en un corto periodo de tiempo unos 2 000 médicos.

Dijo Lazo que durante el encuentro con Preval también repasaron temas como la colaboración en la construcción del aeropuerto de Cabo Haitiano, en la zafra azucarera, en la pesca, en la campaña de alfabetización y en las comunicaciones. El dirigente cubano comentó que Preval había reconocido cómo Cuba siempre trabaja pensando en el futuro.

Asistencia solidaria

Actualmente se encuentran prestando asistencia médica en Haití un total de 998 cubanos y jóvenes haitianos. De ellos, 604 son cubanos y 394, jóvenes haitianos.

– Se habían atendido 53 mil 402 pacientes.

– Se realizaron 3 mil 367 intervenciones quirúrgicas.

– Cuba ha puesto en funcionamiento 16 salones de operaciones con 18 equipos quirúrgicos.

Evo Morales anuncia Cumbre Climática Alternativa

Evo Morales presentó la propuesta como la Cumbre Climática “de los movimientos sociales”, que intentará avanzar sobre lo que no pudo hacer la Cumbre promovida por las Naciones Unidas.

La cumbre de Copenhague no pudo conseguir un acuerdo vinculantes ni metas claras para reducir el impacto ambiental del que son responsables principales los países más ricos del mundo.

Evo Morales, junto con otros presidente de América Latina y el Caribe, denunciaron que Estados Unidos intentó imponer un documento ambiguo y poco comprometido.

En consecuencia, se opusieron al acuerdo junto con la mayoría de los países que participaron de la Cumbre, y el documento no fue reconocido.

Evo Morales aseguró que la cumbre alternativa “será una conferencia para preparar, debatir y presentar (propuestas) a las Naciones Unidas sobre los derechos de la madre tierra”.

A mediados del 2009, Morales fue declarado por el entonces presidente de la Asamblea General de la ONU, Miguel D´Escoto, “héroe mundial de la madre tierra” por su continua defensa del planeta.

El foro, cuya agenda se encuentra en etapa de consenso, tendrá como fecha principal el 22 de abril, día internacional de la tierra, adelantó Morales.

Convocatoria

El canciller de Bolivia, David Choquehauanca, convocó este lunes a representantes de todos los pueblos y Gobiernos del mundo a participar en la Cumbre sobre el Cambio Climático entre los días 20 y 22 de abril en Cochabamba.

Choquehauanca explicó que la Cumbre es una iniciativa que surgió a partir del fracaso de la Cumbre de Copenhague, Dinamarca, en 2009.

Sostuvo que los países industrializados se aferran a la decisión de no firmar el Protocolo de Kioto que establece normas para la emisión de dióxido de carbono y con ello atentan contra la naturaleza.

Además, señaló que para la Cumbre que se realizará en Bolivia se invitó a científicos de todo el planeta.

En la Cumbre de abril se espera la participación de alrededor de 11 mil personas que debatirán las causas estructurales y sistemáticas que provocan el cambio climático.

Al mismo tiempo, se incentivará la proposición de medidas de fondo “dirigidas al bienestar de toda la humanidad en armonía con la naturaleza”.

Fuentes: PÚLSAR-Agencia Informativa y Erbol

Hacia la Comisión Bicentenaria de los Pueblos de Nuestra América

¿Año o período Bicentenario?

Hablamos de período y no de año Bicentenario considerando que la ofensiva anticolonialista comienza con la gran insurrección indígena-popular liderada por Tupac Amaru allá en 1780, en los Andes centrales, con epicentro en la provincia de Tinta y que se extiende por veinticuatro provincias, desde el Cusco hasta las fronteras de Tucumán al sur y hasta parte del Virreinato de Nueva Granada al norte. Todo el antiguo Tahantinsuyo se conmueve ante la rebelión india, que incluye, por sus proclamas antiesclavistas, a negros, zambos y mestizos no asimilados. Más de cien mil hombres y mujeres se levantaron bajo las banderas de Tupac Amaru y Micaela Bastidas primero, y de Tupac Katari y Bartolina Sisa después.

Paralelamente, en 1781, la insurrección de los Comuneros en Nueva Granada sacude la estructura política colonial. Bajo el liderazgo de Manuela Beltrán y luego de José Antonio Galán y con epicentro en la ciudad de El Socorro, los sectores más pobres de la región se levantan contra los abusos del poder colonial.

Ambas insurrecciones serán aplastadas a sangre y fuego por las tropas colonialistas. Sus líderes ejecutados salvajemente, y la “pacificación” sólo llegará en base a la aplicación del método del terror.

Si bien estas dos insurrecciones no planteaban directamente la independencia de la metrópolis, sí cuestionaban profundamente el orden colonial, incluyendo en sus demandas medidas de corte democrático como también reivindicaciones de hondo contenido social. Los pueblos no toleraban más las formas de explotación a que eran condenados por el gobierno español.

Pero ante la derrota de los indios andinos y los mestizos neogranadinos, aparece victoriosa la insurrección de los negros esclavizados de Haití, quienes el 1 de enero de 1804 declaran la independencia tras derrotar a los ejércitos colonialistas de Francia, España e Inglaterra.

La ofensiva anticolonialista había comenzado en nuestra América, desde lo más profundo de las clases populares y desde el “interior” hacia las capitales del poder político. Desvincular estas insurrecciones del proceso independentista, o solamente ubicarlas como “antecedentes”, es un error mayúsculo que conlleva a no comprender el proceso revolucionario. Sería parecido a intentar entender la actual Revolución Bolivariana sin incorporar al Caracazo como inicio de la actual fase histórica.

Una etapa dentro de la ofensiva anticolonialista

Claro que los sucesos en la península, con la invasión francesa y la deposición del rey, fueron los detonantes para la conformación de los primeros gobiernos patrios en la América española. Mas la restauración de Fernando VII y el retorno al sistema colonialista fue el elemento definitorio para levantar sin ambigüedades las banderas independentistas. Pero la ofensiva la habían iniciado los pueblos 30 años antes, acumulando en esas insurrecciones 300 años de resistencia continua.

La confluencia del pensamiento liberal criollo (influenciado por el liberalismo francés, español, inglés y norteamericano) y las masas populares insurrectas se configurará recién en la primera década del siglo XIX, en un proceso de encuentros y desencuentros, pero que culminará en la conformación de un vasto movimiento popular independentista conducido por figuras de la talla de Simón Bolívar, José de San Martín, José Gervasio Artígas, Miguel Hidalgo, Antonio José de Sucre, Antonio Nariño, Bernardo O’Higgins, Gaspar Rodríguez de Francia, José María Morelos, Mariano Moreno, entre otros.

El momento de madurez de la gesta independentista, en este período, alcanza su máxima expresión en los campos de Ayacucho. La “alianza plebeya”, anticolonialista, democrática y de profundo contenido popular, luego de derrotar a los ejércitos realistas, comienza a ser carcomida por los intereses de las viejas y nuevas oligarquías criollas, que temían más a las masas populares que a sus antiguos amos europeos. El período de esta ofensiva anticolonialista terminará con la derrota del proyecto bolivariano y la balcanización suramericana.

En síntesis: el período de ofensiva anticolonialista para nuestros pueblos comienza a finales del siglo XVIII y culmina con la muerte de Bolívar en 1830. La era Bicentenaria, de lo que podríamos llamar la primera gran ofensiva anticolonialista, comenzó hace 30 años y lo que ahora celebramos es la etapa de conformación del amplio frente nacional de liberación, de las declaraciones de independencia e instalaciones de gobiernos soberanos. La etapa en que los criollos se incorporan de lleno a la Revolución, con el insoslayable aporte que eso significa, pero también con las limitaciones que un sector de ellos imprimirá al proceso por su condición de clase.

De los criollos –por educación, recursos económicos y conocimientos militares-, emergerán los principales conductores de la gesta independentista, pero asimismo ellos incorporarán al frente nacional anticolonialista, a través de su franja más encumbrada, a los propios sepultureros del proceso revolucionario.

La lucha por la independencia continúa

Entonces, las fechas Bicentenarias que este año celebraremos, se refieren a esa etapa de la ofensiva anticolonialista. A una etapa en particular, teniendo en cuenta que esa fase histórica involucra 50 años de lucha. Esto es importante aclararlo porque analizando la historia desde la perspectiva de los pueblos, de las masas populares, debemos de ser concientes que esa lucha por la independencia aun no ha culminado. No hay primera y segunda independencia, sino que es un mismo proceso de ofensiva y repliegue, donde en aquellos 50 años de finales del Siglo XVIII y principios del Siglo XIX se dio una formidable alza de masas pero que no alcanzó plenamente sus objetivos.

De lo que podemos hablar es de una primera gran ofensiva independentista, la que estamos celebrando en su etapa más difundida, en la que se constituyeron los primeros gobiernos patrios, y una segu nda gran ofensiva que es la que actualmente transitamos con los actuales gobiernos revolucionarios en Venezuela, Bolivia, Cuba, Nicaragua y Ecuador. Pero estas dos ofensivas son parte de un mismo proceso revolucionario, independentista y por la unidad de nuestra América.

De ahí que el Comandante Hugo Chávez ha señalado, refiriéndose al 19 de abril de 1810 y el 5 de julio de 1811: “… celebraremos los 200 años de esa revolución que es la misma que hoy llevamos a cabo, yo quiero insistir en esto, no es que aquella fue una Independencia y esta es una segunda Independencia, no, desde mi criterio desde mi punto de vista no es eso; no creo que debamos hablar de una segunda Independencia, es la continuación del mismo proceso de Independencia en todo caso una segunda fase histórica del mismo proceso independentista venezolano, suramericano, nuestro americano”.

La historia y el proceso revolucionario

“Nosotros no podemos perdonarnos ignorar no ya nuestra historia, sino incluso la historia de América Latina; nosotros no nos podríamos perdonar ignorar siquiera la historia del mundo porque están asociadas. Seríamos incompletos, estaríamos mutilados desde el punto de vista cultural si ignoramos la historia del mundo. Esas tres historias tienen que estar muy presentes”, afirmaba Fidel Castro en 1992, cuando la prédica imperialista nos hablaba del “fin de la historia”.

Hoy más que nunca, y aprovechando este período Bicentenario es que debemos profundizar en la historia, reinterpretar nuestra historia y releerla a la luz de los desafíos del presente. “Un pueblo que no conoce su historia no tiene nada que buscar en el futuro y nosotros casi desconocemos nuestra historia. Fortalezcámosla y estaremos fortaleciendo nuestra fuerza para construir”, ha expresado el Comandante Chávez, agregando, “no es una obsesión, pero casi, es decir, estamos aferrados a la historia, la historia es la tabla de salvación… mientras no terminemos de descifrar los códigos del pasado no terminaremos tampoco de descifrar los códigos del futuro”.

Y estas reflexiones, tanto de Fidel Castro como de Hugo Chávez, tienen que hacernos recapacitar a los revolucionarios nuestramericanos en estas celebraciones Bicentenarias. En primer lugar es fundamental apropiarnos de nuestra historia, la de los pueblos, la de la revolución en marcha. En segundo lugar, reconocer que la tarea inconclusa debe de ser culminada en la actual etapa y que la experiencia anterior es fuente inagotable de enseñanzas y experiencias. Decía al respecto Rodolfo Walsh: “Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes y mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores: la experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan. La historia parece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de t odas las otras cosas”.

En tercer lugar, tener claro que la lucha por la independencia es una asignatura pendiente, por lo tanto, debemos volcar todos los esfuerzos en alcanzar el objetivo con las herramientas y armas con que hoy disponemos, fundamentalmente el ALBA. Y cuarto, combatir la visión de la historia de las clases dominantes para evitar que esta se imponga como historia oficial a favor de la contrarrevolución y el imperialismo. Un revolucionario argentino, Arturo Jauretche, afirmaba. “La falsa historia (la historia oficial) comienza a funcionar no sólo por la desvirtuación del pasado… sino como sistema destinado a mantener esa desvirtuación y prolongarla en lo sucesivo imponiéndola para el futuro por la organización de la prensa y la enseñanza, de la escuela a la universidad, con una dictadura del pensamiento que hiciera imposible esclarecer la verdad y encontrar en el pasado los rumbos de una política auténtica nacional”.

Es por esto que cuando analizamos la historia desvinculada del presente y de la política, estamos entregando el campo al enemigo, a la reacción, a las fuerzas históricamente adversas a la liberación nacional y social. A los académicos e historiadores del sistema, les disgusta mucho la ya famosa frase: “la historia es la política pasada y la política es la historia presente”. Pero esa frase tiene que esgrimirse cotidianamente desde el campo de la Revolución, ya que, como decía Orwell: “Quien controla el pasado controla el futuro”.

¿Por qué a los enemigos históricos de nuestra América les interesa el Bicentenario?

Desde diferentes tribunas de opinión e información se percibe claramente que el tema del Bicentenario está presente. Tanto la cadena CNN como la BBC y el diario El País de España están dando un espacio destacado a las celebraciones del Bicentenario. ¿Estadounidenses, españoles e ingleses acompañándonos en la necesaria reflexión y debate que generará el recuerdo de estas fechas? Sí, ante la imposibilidad de ignorar el hecho, los agentes de la colonización cultural intentarán, inteligentemente, neutralizar las ideas anticolonialistas, patrióticas, unionistas, democráticas y populares que acarrea una reflexión seria sobre nuestro pasado y nuestro porvenir.

El gobierno español, a través de toda su plana mayor (el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, el ex presidente Felipe González, el Canciller Miguel Ángel Moratinos y el rey Juan Carlos), es quien juega más fuerte al respecto, incorporándose de lleno en el Grupo Bicentenario y financiando parte de las celebraciones en América Latina.

En un documento elaborado por uno de los tantos Think Tank financiados por el imperialismo, se advierte la conciencia que ellos tienen de la importancia del Bicentenario para nuestros pueblos. En el texto se lee: “…en varios países de América Latina y el Caribe, las celebraciones del Bicentenario en 2009 y 2010, que marcan el comienzo de las revoluciones que los independizaron de España, representarán un momento altamente simbólico que estimulará la introspección y el debate sobre sus roles en el mundo”. Inmiscuirse en ese momento de “introspección y debate” con el fin de manipular las conclusiones en beneficio de sus intereses, que no son precisamente los de nuestros pueblos, es su objetivo.

El documento que hacemos mención se llama “Replanteando las Relaciones entre Estados Unidos y América Latina, una Alianza Hemisférica para un Mundo Turbulento”, elaborado por la Comisión Alianza para las Américas Institución Brookings, de noviembre de 2008. Analizar someramente la trayectoria de algunos de los firmantes de este informe, exime de mayor explicación sobre las intenciones del grupo. Entre otros, firman: Thomas R. Pickering, ex subsecretario de Asuntos Políticos de Estados Unidos; Ernesto Zedillo, ex presidente de México; Mauricio Cárdenas, Director de Iniciativa para América Latina Brookings, Ricardo Lagos, ex presidente de Chile; John Deutch, ex Secretario Adjunto de Defensa y Director de la Agencia Central de Inteligencia; Jorge Quiroga, ex presidente de Bolivia; Jeffrey Davidow, Presidente del In stituto de las Américas.

¿Qué conclusiones debería acarrear la reflexión sobre la gesta independentista de los siglos XVIII y XIX en nuestra América? Según los ideólogos del imperialismo la necesidad de “madurar” políticamente, asumir el “orden internacional actual”, favorecer la inversión extranjera, abrirnos a los mercados, entrar en una suerte de “modernidad” despojándonos de ideas nacionalistas, “populistas” o socializantes. Que las conclusiones políticas a que lleguemos sean precisamente aquellas de contrasentido a la dirección que trazaron nuestros libertadores.

El Director del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Londres hoy Instituto de las Américas, John Lynch, habla sin ambigüedad sobre el tema, “haciendo política” desde la página web del Bicentenario del gobierno español. Allí el profesor inglés se despacha contra el comandante Chávez ante la pregunta si le parece bien que el presidente venezolano haya cambiado el nombre de su país por el de República Bolivariana de Venezuela, invocando a Bolívar como modelo. Dice Lynch: “Para responder menciono tres cuestiones: en primer lugar, se llama a sí mismo un “revolucionario bolivariano” y habla de establecer un Estado socialista. Bolívar nunca promovió una revolución social ni pretendió hacerlo.

La redistribución de la tierra, la igualda d racial, la abolición de la esclavitud, los decretos a favor de los indios eran las políticas de un reformista, no de un revolucionario. Bolívar era demasiado realista para creer que podía cambiar la estructura de la sociedad de América del Sur por la imposición de leyes o políticas inaceptables para los principales grupos de interés. La segunda cuestión se refiere a las relaciones internacionales. Bolívar cultivó el apoyo de las grandes potencias, no de los países marginales. Mantuvo cierto recelo hacia Estados Unidos pero admiraba cómo este país había encarnado los ideales de igualdad y libertad. Fue deferente hacia el poder imperial de Gran Bretaña.

El comercio y las inversiones británicas los vio como un beneficio, no como una amenaza. La tercera cuestión es tal vez la única que le da la razón a Chávez. Una de las ideas má ;s controvertidas de Bolívar era que los presidentes debían servir de por vida y tener el poder de nombrar a su sucesor. Y el historial de Chávez muestra que él siempre está hambriento de poder”. Conclusión inducida: Bolívar era un reformista, nunca revolucionario, pragmático y conformista; dócil ante los intereses de las grandes potencias, pero con un defecto, al igual que Chávez, ¡un dictador! La argumentación de Lynch es un modelo de la discusión que pretende imponer el imperialismo en el debate Bicentenario.

Pero quien ha planteado el tema sin ningún tipo de reparos ha sido el investigador Carlos Malamud del Real Instituto Elcano, organismo que integra la Comisión Nacional para la Conmemoración de las Independencias de las Repúblicas Iberoamericanas del Gobierno de España. Dicho catedrático ha alertado sobre “la emergencia del populismo y la fuerte presencia del nacionalismo en la región, exacerbado todavía más por el primero, asociados a las conmemoraciones de los Bicentenarios de la independencia, suponen una serie de riesgos para España”. Agregando: “el riesgo más inmediato se desprende de una serie de embates contra la imagen de España y de sus empresas…”. ¿Tendrá algo que ver la presencia de altos dirigentes de empresas españolas en la financiación de las celeb raciones Bicentenarias?

Que los latinoamericanos caribeños no aprovechemos el Bicentenario para cuestionar los grados de dependencia que aun mantenemos con las potencias imperialistas, es la idea en el involucramiento de España, Estados Unidos e Inglaterra. Ellos perciben con meridiana claridad el “riesgo” que representa una celebración con profundo contenido popular y patriótico.

Una Comisión Bicentenaria desde los pueblos de nuestra América

“No es en Europa que debe estar la dirección de la comisión (de conmemoración del Bicentenario); es aquí donde tenemos que conmemorar el grito de rebeldía y de rebelión de nuestros pueblos, contra ellos precisamente”, señaló el Presidente Hugo Chávez en declaraciones a la prensa.

Y esa categórica afirmación merece una reconsideración sobre el tema. Hasta el momento las comisiones de conmemoración de los Bicentenarios en cada uno de los países está designada por los gobiernos correspondientes. Si tenemos presente que durante el 2010 se celebrará la fecha en Venezuela, Argentina, Chile, Colombia y México y que en los tres últimos países mantienen regimenes neoliberales sometidos a los dictámenes imperiales (en Chile hay serias posibilidades que la derecha gane las elecciones), es lógico suponer que la reflexión y el debate se orientará hacia la línea contrarrevolucionaria antes señalada.

Una mezcla de aburrida Historia Oficial, opiniones de reciclados historiadores de academias, “saludos a la Bandera” y “show bicentenarios” parece ser lo que veremos este año, y no nos podemos resignar a eso. Un dato más que confirma esta posición lo indica que el ilegítimo gobierno mexicano ha contratado al estadounidense Phil Green, fundador de la empresa Autonomy, aquella que se encargó del espectáculo de inicio de los Juegos Olímpicos de Pekín, para la producción y supervisión del trabajo de la celebración del Bicentenario y Centenario de la Revolución Mexicana ¡Una verdadera afrenta a Hidalgo, Morelos, Zapata y Villa!

Una propuesta: Comisión Bicentenaria de los Pueblos de Nuestra América

¿Nos dejaremos robar el Bicentenario? Sabemos que en Venezuela y Argentina no será así, pero la celebración o tiene carácter nuestroamericano o se diluye en la balcanización que precisamente es producto de la derrota de esa ofensiva anticolonialista que ahora celebramos. La propuesta puntual es que se conforme una Comisión Bicentenaria desde los Pueblos de Nuestra América, constituida por las organizaciones sociales y políticas comprometidas en la lucha por la definitiva independencia y unidad latinoamericana caribeña.

Como decía Martí:_ “¿Adónde va la América, y quién la junta y guía? Sola, y como un solo pueblo, se levanta. Sola pelea. Vencerá, sola”._

Fernando Ramón Bossi es Presidente de la Fundación Emancipación y Director del Portal ALBA.

Cofundador del Congreso Bolivariano de los Pueblos y de la Red Popular Humanitaria Misioneros del Milagro Correo-e: fernandoramonbossi@hotmail.com

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Replanteando las Relaciones Entre Estados Unidos y América Latina:

Una Alianza Hemisférica para un Mundo Turbulento

The Brookings Institution

Noviembre de 2008 —

Los acontecimientos en la región de América Latina y el Caribe influyen significativamente en la vida diaria de los estadounidenses. Sin embargo, las distintas prioridades de Estados Unidos y la incapacidad de algunos países de la región de garantizar el cumplimento de sus compromisos internacionales, aunadas a la falta de confianza, han perjudicado el logro de una gestión genuina y continua entre las partes para responder a los desafíos regionales y mundiales.

Si se continúa soslayando la creación de una alianza hemisférica, los costos para Estados Unidos y sus vecinos serán más altos, tanto en términos de mayores riesgos como de oportunidades desaprovechadas. El carácter transnacional de los distintos retos que enfrenta la región en materia de narcotráfico, migración, cambio climático y crimen organizado requiere el esfuerzo conjunto de los países del hemisferio y Estados Unidos. La naturaleza de estos retos ha llevado a que los países de América Latina y el Caribe reduzcan la dependencia con Estados Unidos y refuercen sus lazos políticos y económicos con la comunidad internacional y, a la vez, tomen con mayor seriedad y responsabilidad sus compromisos.

Sin una alianza, el riesgo que las redes criminales representan para las personas e instituciones de la región continuará creciendo. Sin los resguardos apropiados de seguridad regional, los riesgos de proliferación nuclear aumentarán. La adaptación al cambio climático se producirá a través de medidas aisladas e improvisadas llevadas a cabo por los países de manera individual, en vez de efectuarse mediante una lucha más efectiva fundada en el aprendizaje mutuo y en la coordinación. La inmigración ilegal en Estados Unidos continuará sin restricciones y sin control, y se sumará a una subclase aún mayor que vive y trabaja fuera de los márgenes de la ley. Finalmente, todos los países del hemisferio, incluido Estados Unidos, perderán valiosas oportunidades de entrada a nuevos mercados e importantes recursos que permitirían realizar nuevas inversiones.

Este informe no propone reinventar las relaciones hemisféricas, ni tampoco busca ofrecer una solución única. En cambio, se funda sobre dos propuestas simples: los intereses comunes de los países de la región, y el rol de Estados Unidos en promover la cooperación en aquellos intereses, objetivos y soluciones comunes con el fin de formar la base para una alianza duradera. En este sentido, el informe ofrece una serie de recomendaciones modestas y pragmáticas que, de implementarse, podrían ayudar a los países de la región a lidiar con los desafíos transnacionales y a concretar el potencial de la región.

En el informe se identifican cuatro áreas que prometen apoyar la conformación de una alianza hemisférica: (1) el desarrollo de fuentes sostenibles de energía para mitigar el impacto del cambio climático, (2) el manejo eficaz del problema migratorio, (3) la expansión de oportunidades para la población mediante la integración económica y (4) la protección del hemisferio contra el tráfico de drogas y el crimen organizado. La siguiente sección de este informe explora la creciente necesidad de lograr una alianza entre EE. UU. y ALC.

Las próximas cuatro secciones ofrecen un análisis de cada una de las áreas promisorias para una posible alianza y brindan recomendaciones concretas para la formulación de políticas en EE. UU. La última sección trata sobre las relaciones de EE. UU. con Cuba. Aunque este asunto es de menor magnitud con respecto a las otras cuatro áreas, se incluye en el presente informe porque, durante mucho tiempo, Cuba ha sido un tema de sumo interés en la política exterior estadounidense y un obstáculo para las relaciones de EE. UU. con otros países del hemisferio.

Avatares de una elección

Al caer la tarde el bullicio llenó San José y banderas multicolores ondearon en miles de vehículos. Poco después de las ocho de la noche el Tribunal Supremo de Elecciones anunció los primeros resultados. Minutos después esos números se hicieron definitivos.

El PLN era el ganador con un 47% de los sufragios. El candidato del PAC solo obtenía el apoyo de una cuarta parte del electorado. El Movimiento Libertario lograba el respaldo del 20% de los ciudadanos. El PUSC no llegaba al 4%.

La elección de Laura Chinchilla, primera mujer en la presidencia de Costa Rica, seguramente será motivo de análisis y estudio en las próximas semanas y meses.

¿Fueron las propuestas de continuidad las que inclinaron la balanza? ¿Contaron sus atributos personales y su condición de mujer? ¿Influyó el financiamiento en el resultado? ¿Sigue teniendo la adhesión partidaria al PLN y su organización un peso decisivo? ¿Cuánto significó el apoyo de la actual administración y de Oscar Arias? Y los medios de comunicación, las encuestas y la propaganda ¿fueron relevantes?

Pero también la derrota del PAC merece ser examinada con detenimiento.
¿Estaba demasiado golpeada la imagen de Ottón Solís para poder enfrentar con éxito este tercer desafío electoral? ¿Hubo errores estratégicos en su campaña? ¿Se tomaron decisiones que debilitaron el respaldo popular y el ánimo de la dirigencia? ¿Faltó imaginación para enfrentar a los adversarios? ¿Se confió demasiado en que el descontento se teñiría de rojo y amarillo a última hora?

¿Y Otto Guevara? ¿Qué factores mediaron para que casi triplicara el porcentaje de votos obtenidos en 2006? ¿La dura crítica contra el partido de gobierno? ¿La publicidad mordaz y cáustica que algunos tacharon de grosera? ¿Los abundantes recursos económicos que tuvo a su disposición? ¿La relativa continencia en su discurso neoliberal? ¿La actitud enérgica contra la delincuencia que responde a un clamor general?

En cuanto al desempeño de Fishman, “el menos malo”, como él mismo se denominó, ¿qué puede decirse? Aunque la votación que obtuvo para la presidencia fue muy baja (4%), logró aumentar el número de diputados y eso mantendrá vivo al partido en los próximos cuatro años. ¿Son estos los estertores de una fuerza política que agoniza o el aliento de un pasado que pretende recuperar vigencia en el futuro? ¿Cómo se comportará el PUSC en Cuesta de Moras? ¿Renovará el liderazgo? ¿Habrá esperanza?

Los resultado legislativos, que aún no se conocen con precisión, deben llamar la atención de los cronistas. Una candidata que logra un triunfo contundente pero pierde curules. ¿Qué significa? Alrededor de 230 mil personas (27%) votaron verde y blanco en la papeleta presidencial pero no lo hicieron en la de diputados. ¿Por qué? Algo similar ocurrió con el PAC y el Movimiento Libertario. ¿Inconsciente colectivo que busca repartir el poder?

Nuevo balance de fuerzas en la Asamblea Legislativa. El PASE (Partido Accesibilidad sin Exclusión) dio la sorpresa y dejó de ser una fracción unipersonal para constituirse en bancada de cuatro diputados. ¿Cuáles fueron sus atributos electorales?

Concluyo. Las noticias son demasiado frescas y los números todavía están fluyendo. Avatares de una elección que harán reflexionar y opinar.

Felicitaciones a la presidenta electa y éxitos en su gestión.

9 de Febrero 2010

Condenan a políticas antipopulares del actual Gobierno en Panamá

Con la participación de más de 250 dirigentes de las distintas organizaciones que conforman la Coordinadora de Lucha por el respeto a la Vida y Dignidad del Pueblo, se celebró con éxito el encuentro de Dirigentes Populares y Gremiales este sábado 30 de enero en la Universidad de Panamá.

La mesa principal estuvo presidida por el Dr. Fernando Cebamanos de la Asociación de Médicos, Odontólogos y Afines de la Caja de Seguro Social (AMOACSS) y de la Comisión Médica Negociadora Nacional (COMENENAL), Andrés Rodríguez de la Asociación de Profesores de la República de Panamá (ASOPROF), Mario Almanza de la Asociación de Maestros Independientes Auténticos (AMIA), Saúl Méndez del Sindicato Unico Nacional de Trabajadores de la Industria de la Construcción y Similares (SUNTRACS), Prisila Vásquez de la Asociación de Empleados de la Caja de Seguro Social (AECSS), Sergio Molina del Movimiento de Bases Transportistas y Usuarios (MBTU), Carmencita Tedman de los grupos ambientalistas, Juan Moreno de la Asociación Nacional de Trabajadores Manuales de la Caja de Seguro Social (ANADETRAM) y Herminio Asprilla de la Asociación de Empleados de la Universidad de Panamá (ASEUPA).

Los representantes de las distintas organizaciones coincidieron en su condena a las políticas antipopulares del actual Gobierno, a los abusos de poder, al desprecio que muestra a las justas aspiraciones del pueblo, a los despidos masivos en el sector público, a la continuidad de los proyectos depredadores del ambiente, el alto costo de la vida, la política entreguista, la instalación de bases aeronavales, la amenaza de aumento de impuestos, el agua, el pasaje, a la persecución política, a la violación de la libertad sindical y los derechos laborales; el retrogrado e improvisado proyecto de transformación curricular, la privatización en el sector salud, agua y transporte.

El encuentro aprobó jornadas de lucha, piqueteos y volanteos que inician esta semana. También una gran Marcha hacia la Presidencia en el mes de marzo, la fecha exacta comenzará a discutirse en reunión de la Coordinadora de Lucha este miércoles 3 de febrero. También se aprobó una acción de solidaridad con Haití, solidaridad con el SUNTRACS en el juicio por el asesinato de Luiyi Argüelles este 18 de febrero, un estudio sobre el papel de las agencias financiadoras en los proyectos mineros y otros; y actualizar las demandas de la Coordinadora de Lucha.

También hubo un pronunciamiento en solidaridad con los trabajadores en lucha contra la privatización del Puerto Limón, en Costa Rica.

El encuentro se llevó a cabo en un ambiente de combatividad y de gran espíritu de lucha. Quedo así claro que el movimiento popular y gremial se prepara desde ya para libar los combates que sean necesarios en aras de la defensa de los intereses populares y nacionales.

Vea también el video soberbia y altanería – Presidente Martinelli en Honduras

* SIELAS

ANEP felicita a la señora Presidenta Electa

Pese a que como nunca antes se había visto en procesos electorales anteriores, fue la hegemonía del capital lo que marcó la pauta en estas votaciones, la señora Laura Chinchilla Miranda ya quedó registrada en los anales de la historia nacional como la primera mujer en la Presidencia de la República.

Reafirmando la vocación de diálogo que caracteriza a la ANEP y con base en nuestra capacidad de propuesta más que demostrada y que le consta a la señora Presidenta electa, la ANEP le toma a doña Laura su propuesta de diálogo pero sin dobleces; de altura y con transparencia, de cara a la ciudadanía y en estricto apego a los principios de la promoción del bien común y, particularmente, los que tienen que ver con la maltrecha situación de la clase trabajadora en su amplia acepción.

Dentro de los varios ámbitos en los cuales tal diálogo es más que necesario e imprescindible, la ANEP señala los siguientes:

Salarios mínimos: No solamente es necesario un nuevo sistema de fijación de los mismos, sino que hay que combatir la espantosa realidad, verdadero crimen social, de que a una de cada tres personas asalariadas ni siquiera se les paga el mínimo de ley, ya de por sí bastante bajo.

Política salarial: Urge estructurar una política de ampliación del poder adquisitivo de los salarios para aliviar la estrechez económica de miles de familias trabajadoras asalariadas, a la vez que se ayuda a dinamizar el mercado interno y, por ende, fortalecer el desarrollo de la micro, la pequeña y la mediana empresa.

Justicia tributaria: Urgen acuerdos no solamente en el plano de incrementar el control de la evasión fiscal que presenta altísimo niveles según lo ha determinado la autorizada voz de la Contraloría General de la República; sino que, urgen cambios en la propia estructura impositiva que, al menos, atenúen la velocidad de la concentración de la riqueza y del crecimiento de la desigualdad.

Libertades sindicales: Esperamos acuerdos para honrar los compromisos internacionales que Costa Rica tiene pendientes al respecto, de forma tal que se reduzcan los peligros de pérdida de beneficios arancelarios como podría derivarse de la demanda en curso ya presentada ante el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP-Plus) de la Unión Europea (UE).

Finalmente, la ANEP espera que la señora Presidenta Electa honrará su compromiso de que no habrá despidos de empleados públicos ni de empleadas publicas, tal y como lo dejó constancia en carta dirigida a esta organización sindical, fechada el día 1 de febrero de 2010, cuando ante respetuoso emplazamiento de la ANEP al respecto, indicó lo siguiente:

“…, me permito señalarles que en nuestra propuesta de gobierno no estamos contemplando el cierre de plazas en forma masiva ni el consecuente despido de funcionarios públicos. Creemos que para mejorar la eficiencia del Estado no es necesario recurrir a dichas medidas”.

San José, lunes 8 de febrero de 2010.

Albino Vargas Barrantes
Secretario General ANEP

Edgar Morales Quesada
Secretario General Adjunto ANEP

«Piensen cuál será su futuro salarial antes de ir a votar»

Según Vargas, ANEP respaldará aquella candidatura presidencial que garantice respetar el salario mínimo, que proteja a las instituciones sociales, que renegocie el TLC con Estados Unidos y que le entre sin miedo a una reforma fiscal estructural para gravar los grandes capitales.

¿Cómo ha visto la ANEP la campaña presidencial? ¿Cuál es su análisis?

– Para nosotros ha sido impresionante constatar el poder de la plata fluyendo a borbotones sin ningún control, como eje determinante para que los candidatos sean más notables.

Hemos visto la espantosa discriminación de algunos latifundios mediáticos que han arrinconado contra la pared a la ciudadanía, diciéndole cuáles opciones políticas son válidas y cuáles no.

Ustedes han sido duros críticos del Tribunal Supremo de Elecciones ¿Ha cambiado en algo ese parecer de la ANEP?

– No. Tenemos muchas reservas y desconfianzas sobre el Tribunal. Creo que hace tiempo dejó de ser neutral, pues es altamente permisivo con la hegemonía en el poder y me temo que ese Tribunal, tan endeblemente neutral, pueda generar mayores conflictos civiles en el futuro.

Un Tribunal que deja fluir esa cantidad de dinero, que se lo bailan y que se deja imponer una dictadura mediática, sólo fomenta que la gente deje de creer en el sistema democrático.

No es posible que los magistrados ni siquiera se fijen en detalles como que están guardando las papeletas en las bodegas de una empresa que pertenece al primo de quien fuera tesorero en la campaña de 2006 de Óscar Arias.

¿Entonces ANEP considera que las votaciones del 7 de febrero no serán limpias?

– Yo lo que le aconsejo a los partidos políticos opuestos al sistema hegemónico vigente es que cuiden los votos, como cuidar a la democracia misma. Porque yo sigo creyendo que a Ottón Solís le robaron las elecciones de 2006.

El Tribunal no quiso auditar 250 mesas y otras 700 mesas tuvieron un resultado “averiguado”, ahí pasó algo que empañó las elecciones. Por eso es que al menos el 40% de la gente desconfía de ese Tribunal, según la encuestadora más creíble del país, la de la Universidad de Costa Rica.

Esa posición suya podría desestimular a la gente que piensa ir a votar…

– No, no. La presencia masiva en las urnas es una garantía importante, porque dificultaría que se cometa fraude o se tuerza el resultado en las urnas.

¿Siguen teniendo indicios de que la campaña política de los partidos grandes se financia desde afuera?

– Creemos que hay un enlace oligárquico centroamericano, de los principales grupos de poder económico de Nicaragua, Guatemala y El Salvador que se han estacionado en Costa Rica.

Esos “capitales sangrientos” centroamericanos han venido siendo determinantes en la política nacional. Cuánto de esos capitales se ha metido al Movimiento Libertario y en la campaña de doña Laura es una gran incógnita.

Lo que sí le puedo decir con contundencia son dos cosas: en la lucha por el “SÍ” al TLC hubo mucho dinero que provino de esos capitales centroamericanos y le puedo decir que jamás el movimiento del “No” recibió un centavo proveniente del exterior. Aun así ganamos, pero nos robaron ese triunfo con la complicidad del Tribunal Supremo de Elecciones.

¿Por qué ANEP decidió escuchar a los candidatos presidenciales?

– Los candidatos han pedido conversar con la ANEP y nosotros hemos estado anuentes, es importante no solamente para que ellos nos expliquen sus planteamientos, sino, todavía más importante, nos sirve para presionar y ser majaderos sobre las propuestas de modelo alternativo de desarrollo que nosotros hemos formulado a lo largo de los últimos años, las cuales han surgido del sector laboral y social, para restaurar en Costa Rica la filosofía del bien común como eje de toda política pública.

¿Cómo ve la ANEP las elecciones presidenciales del 7 de febrero?

– Las vemos como la oportunidad para que este país no siga gobernado desde la perspectiva de la concentración de la riqueza.

¿Ya han analizado con cuál de las propuestas de los 9 candidatos presidenciales se identifican más?

– Sí claro. Hemos visto que desde la oposición se ha venido hablando fuertemente de una transformación tributaria estructural. Eso es muy importante. Si bien la inseguridad ciudadana es trascendente, el problema número uno que enfrenta el país es la concentración de la riqueza que, a su vez, genera los altos niveles de violencia y la inseguridad.

Creo que la oposición también ha sugerido renegociar el TLC con Estados Unidos, por haber quedado en evidencia que es una gigantesca estafa.

Creemos que es posible una regulación financiera diferencial para el Banco Popular y eso no lo vemos como un tema de doña Laura Chinchilla, que ha sido la única candidata que no quiere dialogar con la Asamblea de Trabajadores del Banco Popular. Para que usted vea por dónde va la película.

¿Laura Chinchilla les ha pedido cita para hablar con ustedes?

– No lo ha hecho, pero si lo hiciera con gusto se la daríamos. Supimos que Otto Guevara está interesado en conversar con nosotros.

Yo tengo un gran respeto por doña Laura, es una mujer honesta, de mucha trayectoria, pero su gobierno será controlado por los banqueros privados.

Ese grupo de poder político y económico es el que más ha ganado en los últimos 20 años.

Ahora ya no van a trabajar entre bambalinas sino que, en la figura de Luis Liberman, van a asumir la conducción política y financiera directa desde Zapote, si ganan la presidencia.

Sostener que Liberación Nacional sigue siendo socialdemócrata, con los banqueros adentro, es un gran engaño.

¿Tomará partido la ANEP a favor de alguna de las opciones políticas que compiten por la presidencia?

– Vamos a seguir defendiendo, por lo menos mientras yo esté al frente, nuestra independencia de todos los partidos políticos. Así ha sido durante los últimos 20 años y nos ha dado excelentes resultados, porque nos ha obligado a pensar por nosotros mismos y a hacer propuestas de visión de país sin que nos las impongan los partidos políticos.

Estamos convencidos de que más neoliberalismo para el país es mayor injusticia, mayor violencia, inestabilidad democrática y más desigualdad, con el riesgo de grandes confrontaciones sociales.

Vemos con gran interés la alianza donde figuran Ottón Solís, Rolando Araya y Walter Muñoz. Eso nos parece que el elector, el trabajador, deberían analizar muy bien lo que ofrece esa alianza.

Vemos que el nuevo humanismo cristiano que está pregonando Luis Fishman tiene contenidos que se acercan mucho a nuestra propuesta de país. Además, vemos importantes candidaturas diputadiles que están en el Frente Amplio, que recogen muy bien las banderas de la lucha social y laboral.

¿Qué consejo les da a los trabajadores, de cara a las elecciones presidenciales?

– Primero que todo, hay que ir a votar, sí hay alternativas.

El trabajador, antes de ir a votar, debe pensar en cuál será su futuro salarial, si será más rico o más pobre con el próximo gobierno y analizar si el candidato por el que piensa votar está dispuesto a comerse la bronca de tocar las grandes fortunas y ponerlas a pagar impuestos como se debe.

El tercer elemento determinante antes de ir a votar, debe ser el análisis de quién nos garantiza que se preservará la riqueza nacional que nos fue heredada, como la Caja, el servicio eléctrico universal, la preservación del agua y la educación pública.

Yo me inclino por aquellos políticos que proponen levantar la micro, pequeña y mediana empresa nacional y que van a relanzar el papel del Banco Popular para levantar la pequeña economía empresaria, familiar y productiva.

¿Se escucha la voz de ANEP?

– Pese a la anacrónica disposición que nos impide a las organizaciones sociales pronunciarnos en los procesos electorales, vamos a hacernos escuchar por diversos medios. Le vamos a decir a la gente por quién votar.

Lo hicimos en 2006 y el mismo Óscar Arias, dos veces, en público, ha reconocido que nuestro trabajo lo hizo perder 100 mil votos de entrada.

Somos un gran entramado social de organizaciones gremiales, sindicales y cívico-patrióticas que tenemos claridad de las actuales propuestas electorales, sus alcances y sus elementos. No tenemos ninguna aspiración electoral, estamos por la justicia social, por la equidad. No somos enemigos del empresariado, pero hay grandes deudas que deben ser saldadas.

“Los latifundios mediáticos han arrinconando al electorado a escoger entre pocas opciones”.

“El TSE hace tiempo dejó de ser neutral”.

“Entre más gente vaya a votar, menor posible será un fraude”.

“Votaré por el que cuide las instituciones, que respete el salario mínimo y que no le huya a una reforma fiscal”.

Fuente: Diario Extra
Gerardo Ruiz Ramón

18 enero 2010