Distintas organizaciones sindicales asistieron como un acto simbólico al funeral de la Democracia, el cual murió con el proyecto Ley Marco Empleo Público.
Las negociaciones dentro de la municipalidad de Guacimo van a paso firme, según detallaron los funcionarios de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP) quienes trabajan junto a la administración.
Por este motivo ya se han desarrollado tres reuniones mediante las cuales se han presentado las solicitudes pertinentes y por parte del alcalde junto a su equipo legal se han recibido para analizarlas.

A pesar de las diferentes situaciones negativas por las que el país atraviesa, se ha manifestado una buena recepción por parte de máximo jerarca, pero aún no se ha cerrado la renegociación.
Como bien se manifestó durante la reunión sostenida con el Fondo Monetario Internacional (FMI) el Gobierno de Alvarado Quesada le ha mentido a la población en varios puntos, al punto de que el mismo ente internacional negó ciertos puntos, como el de la venta de activos.
Por esta razón, se solicitó una nueva reunión con el FMI para presentar los diversos argumentos que comprueben que NO se necesita el préstamo.
Por: Paola Badilla Vargas, Antropóloga.
En este 2021, y en medio de una pandemia global, de consecuencias catastróficas en materia social, laboral, económica y cultural, el lema de la ONU para el Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo, es “Mujeres líderes: Por un futuro igualitario en el mundo de la Covid-19”. Este promueve «la participación de las mujeres y la adopción de decisiones por ellas de forma plena y efectiva en la vida pública, así como la eliminación de la violencia, para lograr la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de todas las mujeres y las niñas» (CSW65). Como mujer trabajadora, me siento plenamente identificada. No obstante, me parece relevante acotar que tales logros se construyen ciertamente con más espacios reales de toma de decisiones, más oportunidades, y más equidad tanto de género como económica, en la esfera pública y privada; con apoyo de todas y todos como sociedad y en especial como clase trabajadora.
Crecí en un hogar con una mujer como jefa de hogar, con solo primer grado de escolaridad, quien, si bien nos enseñó el valor del trabajo duro, la honestidad y el respeto; ella también respondía a patrones de su época, entre ellos el machismo. Entonces aun cuando tuve que hacer malabares entre mis deberes académicos y mis no renunciables quehaceres domésticos -a diferencia de los varones de la casa-, a quienes se les asignaba un tanto menos, no crecí creyendo que las mujeres debían tomar el poder, con el fin de hacer que ellos fueran los de los malabares. Como dice una amiga, no hay nada de constructivo en emplear los mismos mecanismos de un sistema opresor. -Sí, participar de la toma de decisiones, incluyente, no opresora a la inversa. Al contrario, traté de desaprender y motivar a la distribución de tareas de manera colaborativa, como equipo familiar. Es lo que se denomina ahora corresponsabilidad.
Al ingresar a la universidad, mi motivación se acrecentó. Por la equidad de género, por mostrar que las mujeres tenemos derechos sobre nuestro cuerpo, sobre nuestra comunidad, sobre nuestro país y el planeta. Tenemos derecho a igual remuneración por igual trabajo. A no ser discriminadas ni violentados nuestros derechos laborales, como sucede comúnmente en este país y alrededor del mundo. Incorporé lenguaje inclusivo porque me parecía una expresión reivindicativa y de visibilización. En varios momentos de mi vida, sufrí lo que ahora se nombra como «acoso callejero». Lamentablemente sé lo que ser tocada sin desearlo en la vía pública y en autobús – como tristemente continúa sucediendo. En esos años, no lo hablábamos, solo si podíamos le quebrábamos la sombrilla al fulano o acusábamos al «sátiro» a grito aturdidor.
Hoy, cuando se ha logrado la promulgación de una ley y se habla sobre el tema, sigo sin sentirme segura. Entonces, ¿Qué sucede? ¿Por qué se avanza en el papel, en lo punitivo, pero no en la conducta hostil hacia las mujeres? Ojo qué reconozco los logros alcanzados. Pero tengo preguntas y trato de dar respuesta desde mi propia experiencia de vida. Considero que parte importante del asunto tiene que ver con el señalamiento de los hombres como los responsables directos. Se ha, en no pocos casos, dibujado a los hombres como el enemigo. Esto olvidando conceptos claves como la interseccionalidad, el cual nos expande el lente de la superposición de categorías como la etnia, la clase, la identidad y la orientación. Es decir, validando que cada individuo tiene camisetas diferentes y ahí yacen las desigualdades persistentes. No todos los hombres son opresores; no todas las mujeres son oprimidassimplemente por serlo. Como dice Audre Lorde, «no puede haber jerarquías de opresión». Enfocar la discusión y apostar por resolver las desigualdades a partir de estas “jerarquías” -discutir sobre quien ha sufrido más y quien menos- conduce a más división.
Sí, por supuesto que hay poblaciones y grupos con historias de opresión milenarias y no pretendo obviar esto. Por el contrario, dirigir la atención hacia la superestructura de patriarcado, y un capitalismo separatista, basados en el divide y vencerás, tal vez nos permita encontrarnos desde las diferencias. Somos diferentes, pero eso no anula la necesidad de equidad y justicia social. Hay un sistema dominante que se nutre de prejuicios y desigualdades múltiples. ¿Qué tal proponer y hacer análisis incorporando el género, pero también la clase, la raza, la historia de vida? Desafiar todas las formas de poder estructural. Como trabajadora, considero que la toma de decisiones debe ser por un trabajo decente, por un modelo de país inclusivo y solidario, y eso es tan válido como tomar decisiones sobre la interrupción del embarazo o la posibilidad de las uniones legales entre personas del mismo sexo. Una agenda no es más importante que otra. Un grupo no es más relevante que otro. Y tanto mis compañeros como mis compañeras en la lucha pueden caminar junto a mí en esta reivindicación.
Si bien reconozco la persistencia de la desigualdad por género, expresada en la brecha salarial, en la débil corresponsabilidad del cuido -tanto dentro del hogar como la casi nula participación estatal en el asunto-, el aumento de la violencia hacia las mujeres y el creciente número de femicidios, esto no debe motivarnos a las mujeres a excluir a los hombres de la lucha, condicionando como y desde donde pueden asumir su apoyo. Un ejemplo concreto los pronunciamientos de algunos Colectivos para la marcha del próximo lunes, donde se les recalca a los hombres que “respeten los espacios seguros de mujeres en la marcha” y seles “invita” a apoyar desde otros lugares como “hacerse cargo de las tareas domésticas ese día”. Hay legitimidad en la petición, pero percibo una jerarquía de opresión que nos sigue alejando de la tan necesaria equidad transversal. El día es de celebración para todas las mujeres, un día de reivindicación, en el que considero hay espacio para caminar todas y todos en unidad. No se siente una más segura acordonando un espacio.No se resta, se suma en la lucha.
Paola Badilla Vargas, Es afiliada de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP). Magister En Estudios Latinoamericanos con énfasis en Desarrollo y Cultura por la Universidad Nacional de Costa Rica. Bachiller en Antropología por la Universidad de Costa Rica.
LAS PERSONAS, ORGANIZACIONES Y SECTORES ABAJO FIRMANTES, HACEMOS DE CONOCIMIENTO PÚBLICO
CONSIDERANDO:
PRIMERO. En el año de la conmemoración nacional del Bicentenario de la Independencia de la Patria, el 2021, la institucionalidad democrática costarricense está más vulnerable que nunca:
Cada vez más, miles de compatriotas sufren las consecuencias del desempleo, del aumento del costo de vida, de la reducción o congelamiento salarial, de la falta de oportunidades, de la exclusión de la economía, de la pobreza y de a desigualdad social.
Esta situación, que desde inicios del año anterior (2020), alcanzaba números preocupantes, se ha visto agravada llegando a cifras record alarmantes, ante la situación generada por “la llegada” del COVID-19 al país, por una parte; y por otra, la inoportuna respuesta del equipo económico del Gobierno y sus partidos aliados en la Asamblea Legislativa, a la situación antes descrita.
SEGUNDO. Quienes deciden las políticas públicas, han visto en el doloroso momento nacional actual, una oportunidad para profundizar un modelo económico concentrador y excluyente:
Cada vez más, cientos de miles de compatriotas vemos con preocupación, indignación e impotencia, cómo a pesar de experiencias que vivió la sociedad costarricense el año anterior; el 2021 inicia con la insistencia desde Gobierno y desde la Asamblea Legislativa, en impulsar como respuesta a la crisis sanitaria, económica y social, decisiones cuyo rumbo y consecuencias no hacen sino convertir el difícil momento que atraviesa el país, en una oportunidad para profundizar la receta económica que concentra riqueza en pocas manos, la cual viene en marcha en nuestro país desde los últimos 30 años, descartando cada vez más compatriotas de la economía.
Ante la exclusión social y económica en ascenso, las decisiones económicas que se impulsan nos colocan, nuevamente, a la sociedad costarricense en un punto delicado de polarización relacionada con la distribución del ingreso. Un gobierno, cuya gestión genera el mayor rechazo ciudadano de la última década y cuya imagen continúa en caída libre; y un grupo de diputados que siguen perdiendo legitimidad política real por su excesiva y descarada inclinación a favorecer al gran capital; ni unos ni otros tienen la autoridad moral para seguir polarizando al país que requiere soluciones equilibradas.
TERCERO. Las medidas económicas que impulsan el Gobierno y sus partidos aliados en la Asamblea Legislativa golpean a sectores claves para dinamizar la economía:
Es de suma preocupación, considerando el actual mega-período de sesiones extraordinarias que le otorga al Gobierno ocho meses para “mover sus hilos” en la Asamblea Legislativa, que lo inicie con iniciativas que afectan a sectores que dinamizan el mercado interno, el comercio, la producción, y a la sociedad costarricense en su conjunto; pero sin respuesta efectiva a problemáticas sectoriales reiteradamente señaladas. A saber:
Las negociaciones con el FMI se darán en un momento totalmente inoportuno, de considerable potencial provocador a un desasosiego social más intenso y extendido que el del año anterior. Particularmente, la naturaleza del desafío tributario que tenemos por delante, con su marcado sesgo regresivo; nos involucra en cuanto las características de los sectores sociales que estamos representando, castigados por ese sesgo de injusticia impositiva; de modo tal que no podemos aceptar más impuestos de orden regresivo. Por el contrario, llegó la hora nacional de que nos aboquemos a las transformaciones tributarias profundas que tengan como eje central, la progresividad fiscal.
POR TANTO: Anunciamos al pueblo trabajador, a la opinión pública nacional, a la clase política de todo signo:

Más allá de las características personales e histriónicas que el Sr. Chaves Robles suele mostrar cada miércoles, para solaz esparcimiento de su fanaticada; estamos obligados a esforzarnos por auscultar las reales intenciones, ideológico-estratégicas, que mueven su irrupción abrupta en la desprestigiada política costarricense.
“Dios no quiera que llegue el momento en que tengamos que actuar”. Imposible para cualquier persona costarricense de firme convicción democrática, sin importar su ideología político-partidaria, dejar desaparecida esta clarísima amenaza del Rodrigo Chaves Robles de atentar y de desestabilizar el orden constitucional de la República, próximo a cumplir 75 años de su promulgación, el 7 de noviembre de 1949.
El próximo 7 de Noviembre se cumplirán los 75 años de la promulgación de la Constitución Política de Costa Rica, vigente desde 1949, que integró, entre otros importantes avances, el Voto Femenino, el acceso al agua potable y a un medio ambiente sano y equilibrado, Derecho a la Salud, la Paz Social, la Educación, las Garantías Sociales, la Jornada Laboral de 8 horas,
Es claro que el Presidente Chaves poco conoce sobre el significado de la fauna en nuestro país, ya que hasta ha llegado a utilizar este término en varias oportunidades para referirse de manera inapropiada a la prensa nacional; y, cuando se necesita referirse a la fauna, lo primero que podemos denotar es que su intención es reducir el problema a un asunto de economía ambiental, bajo la óptica del todo mercado-nada Estado.

