Gracias infinitas, comunidad de Tibás:

Los trabajadores de campo de nuestro municipio, quienes a diario, con entusiasmo, dedicación, respeto y a veces con picardía, estamos desde las 6 de la mañana, ejecutando las tares de limpieza para que nuestro barrio permanezca limpio; después de 15 días de huelga, hemos vuelto a nuestro trabajo.

Nuestra presencia se siente a cualquier hora que usted salga a la calle, porque puede observar los caños limpios, recolectada la basura y mirar nuestras humildes figuras en horas laborales, empujando el carretillo o llenando las bolsas con los desechos que la noche anterior se dejaron en las calles.

Aunque no siempre lo demostremos, somos personas felices con nuestro trabajo. Así lo somos porque, aunque bajo, percibimos un salario con el cual mantenemos nuestras familias. Algunos tenemos hijos con algún grado de discapacidad y en algunos casos, nuestros propios compañeros son personas con discapacidad física.

La huelga la levantamos, a pesar que el señor alcalde Percy Rodríguez, nunca se apersonó a rendir cuentas de lo adeudado, ni a cumplir con lo mínimo, sea, tratar de buscar la fórmula que le permitiera incluir en el presupuesto municipal, la partida para cancelar, por lo menos, lo adeudado sobre salario escolar.

Fue el Honorable Concejo el que, por encima del poder de don Percy, se decidió por la negociación, gestión que efectuaron en una sesión colmada de vecinos de la comunidad, solidarios con los trabajadores y preocupados por su municipio y la salud de sus familias.

Esa presencia de vecinos tibaseños fue el estímulo que nos hizo retornar al trabajo y deponer el movimiento, sin las garantías plenas de no represalias, que debió firmar el señor alcalde, quién no se presentó a la sesión de esa noche.

Deben saber los vecinos de Tibás, que el día de la reincorporación al trabajo, los servidores municipales laboramos más que de costumbre. La mayoría de nosotros pasamos el día en ayunas, pero lo hicimos así, para reponer el tiempo holgado; en beneficio de la comunidad.

Para esa entonces ya estábamos sin salario a causa de la arbitrariedad del alcalde que retuvo el nuestro, quebrantando la ley; esto por cuanto la huelga nunca fue declarada ilegal.

Por esa razón, usted nos observará preocupados, toda vez que la situación económica no nos deja dormir, porque los conflictos familiares se agravan, la tranquilidad se ha ido de nuestros hogares y el hambre comienza a golpear nuestras humanidades y la de nuestras familiares.

No hay pan en casa y las pocas monedas que nos quedan las debemos utilizar para llegar al trabajo. De no hacerlo, el despido será la última represalia del alcalde.

Así nos está reprimiendo Percy Rodríguez a nosotros, sus trabajadores, quienes un día cansados de esperar el aumento salarial nos atrevimos a reclamarlo, con un movimiento de huelga; situación que nos vimos obligados a asumir como último recurso, ante la displicencia y desatención que el alcalde daba a nuestras demandas.

Esta es nuestra realidad, de quienes recogemos a diario su basura, limpiamos las calles y las aceras de su vecindario, podamos los árboles de los parques y mantenemos el césped verde y recortado; muchas veces comprando de nuestro sueldo las herramientas para poder laborar, porque el municipio está en quiebra y usted necesita el servicio.

Hoy acudimos a usted para que, solidariamente, nos brinde además del apoyo moral que nos dio en la huelga, el apoyo material que nos urge para no desfallecer en la lucha y mantener con dignidad nuestra frente el alto, porque fuimos a la huelga por el deseo de llevar más pan a nuestros hijos, que bien se lo merecen.

Ya que conoce nuestra situación, le pedimos su aporte económico. Sepa que nos servirá de mucho, mientras llega nuestro salario y los tribunales fallan con justicia como ha de corresponder.

Este domingo 31 de julio, estaremos en el Parque la Democracia, frente a la Basílica de San Juan a partir de las 8:30 a.m. esperando su aporte solidario, usted hará posible que la felicidad vuelva a nuestros hogares.

Desde hoy le invitamos a la sesión del próximo martes 2 de agosto, a las 7 de la noche. Su presencia será vital para que cese la represión y se confirme en el presupuesto municipal y, por ende, las partidas necesarias para cubrir las deudas de ajuste salarial que la corporación mantiene con nosotros.

Esto debe ser así porque los acuerdos tomados por el concejo que resolvían la situación, los vetó el señor Percy Rodríguez, en un acto de provocación más, para que los empleados retomemos la huelga.

De esta forma él pretende justificar el desmantelamiento de la corporación, ocultando su propia incapacidad para realizar una gestión exitosa como bien se lo merece este cantón.

Trabajadores de campo de la Municipalidad de Tibás

San José, 31 de julio de 2005.

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