Cuerpos policiales ponen al descubierto fallos del Gobierno en Seguridad Pública

Los cuatro principales cuerpos policiales del país, llámese, Fuerza Pública, Policía Penitenciaria, Policía de Tránsito y la Policía Profesional de Migración y Extranjería pusieron al descubiertos los fallos de la actual administración en el tema de seguridad pública, yerros que afectan directamente al personal de estas policías.

Los fallos fueron develados en conferencia de prensa, por los representantes sindicales de cada cuerpo de policía delegados por la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP). Donde resaltaron temas como: el manual de puestos, no pago de horas extra y disponibilidad, mal estado de las delegaciones, así como la solicitud al Gobierno entrante para que intervenga la Policía de Tránsito.

Éxito de seguridad del Gobierno ha tenido un alto costo humano

En los últimos días, tanto la Presidenta Laura Chinchilla y el Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora han señalado en los medios de comunicación y a la opinión pública que han cumplido con la tarea en el tema de seguridad, pero ¿de qué forma cumplieron?; si en realidad lo hicieron… más allá del tema de percepción que se pudo haber manejado con el uso de las redes sociales y del mercadeo de imagen, esto último es lo que se podría resaltar en esta administración en el tema de seguridad.

Para Mainor Anchía, Representante de la ANEP en la Fuerza Pública lo que la Presidenta, Laura Chinchilla y el Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora no mencionaron, que para cumplir algunas de las tareas han sobre explotado a los efectivos de la Fuerza Pública con jornadas que superan las doce horas diarias, donde los obligan a descansar cinco horas para volver a estar en servicio.

“A esto se une que deben de laborar en verdaderos cuchitriles, porque tenemos más de 600 delegaciones en este país que siguen siendo cuchitriles, en algunos casos deben de alimentarse con animales de toda especie, situaciones que son de conocimiento del Ministerio de Salud, ente que en varias ocasiones ha declarado como inhabitables varios puestos de policía”, manifestó Anchía esta tarde en conferencia de prensa.

Otro de los problemas abordados por el representante de la ANEP en la Fuerza Pública, es la alta desintegración familiar que viven los efectivos de la Fuerza Pública. Situación que no es ajena a las autoridades del Ministerio de Seguridad Pública, ya que conocen el dato.

“No solo son familias desechas, si no familias que han perdido la cabeza de su hogar por la vía del suicidio, debido a la presión y estrés laboral a las que son sometidos. Estas situaciones no han sido dichas por esta administración, que de paso, es la que ha visto más decesos por la vía del suicidio de nuestros compañeros de la Fuerza Pública”, aseveró Anchía.

Anchía tampoco dejó de lado el tema del manual de puestos, anunciado con bombos y platillos por la administración del Ministerio de Seguridad Pública antes de finalizar el año (2013), el cual en apariencia vendría a solventar el tema salarial en la Fuerza Pública.

“El escenarios es muy diferente, ya que en este momento lo que se está manejando es una absoluta incertidumbre y frustración en nuestras compañeras y compañeros, ya que la forma en que fue diseñado el manual por la actual administración podría inclusive llevar a una parálisis institucional”, finalizó Anchía.

Violan derecho al voto en la UIP

El día de hoy Sábado 05 de abril, recibimos llamadas de varios funcionarios de la Fuerza Pública, quienes nos informan se les estaría limitando su derecho al sufragio, este domingo 06 de abril.

Mediante circulares oficiales, así como solicitándoles cartas formales de “renuncia” al derecho al voto, se ha intentado coartar un derecho constitucional supuestamente inviolable. Todo patrono, incluído el Estado, debe permitir que, aun en tiempo laboral, sus empleados puedan tomar un tiempo para ejercer su derecho al sufragio.

Intentamos contactar al viceministro de Seguridad Publica, Walter Navarro Romero, pero no logramos localizarlo, se le paso uno de los casos al Comisario Mario Calderón, director del DUE, el cual manifestó ordenaría las correcciones del caso.

En ANEP estamos muy preocupados por esta situación. No es posible, que aun en caso de cumplir una función de importancia, se le suprima o se le intente violentar un derecho sagrado que tenemos todos los y las costarricenses.

El Centro Murciélago le abrió las puertas a la ANEP

La Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados ANEP visitó las instalaciones del Centro de Formación Policial Murciélago, ubicado en la Cruz de Guanacaste, visita que fue muy bien percibida por los efectivos de la fuerza pública que allí se encontraban, realizando cursos de inspectores.

Dicho centro cuenta con una capacidad de albergar a 270 estudiantes. En sus instalaciones se brindan capacitaciones de especialización en lo que es: patrullaje, armas, así como el restablecimiento y mantenimiento del orden público, además, en muchas ocasiones se brinda la preparación de básicos policiales. Incluso cuerpos especializados como la Unidad de Intervención Policial (UIP) y la Unidad Especial de Apoyo (UEA) se preparan en murciélago.

Tal fue el agrado de los oficiales al tener contacto con la ANEP, que muchos se quedaron en el centro para exponer sus inquietudes e interrogantes sobre el manual de puestos y los cursos de ascenso, esto a pesar de que finalizaban su internamiento y estaban preparando maleta para partir hacia sus hogares.

Dentro de las interrogantes que más resaltaron por parte de los oficiales, fueron sobre su jornada laboral, los diversos horarios que se establecen en la fuerza pública, así como el pago de horas extras, otros de los cuestionamientos planteados fue el de los cursos de ascenso, los cuales fueron paralizados por el Viceministro de Seguridad, Walter Navarro, ya que estos presentaban una serie de irregularidades que dejaban en clara desventaja a una buena cantidad de oficiales de menor rango y beneficiaba a los de mayor rango.

Posterior a la fase de consultas, y al conocer de una forma más clara la lucha de ANEP para que se respeten los derechos de los y las policías de la Fuerza Pública, así como sus beneficios; cerca de 10 efectivos decidieron establecer lazos con la ANEP y se agremiaron a nuestra organización.

Bajo un intenso calor, que rondaba los 33 grados, los policías agradecía nuestra visita a Murciélago, ya que el encuentro según estos, les sirvió para esclarecer muchas dudas que los rodeaban acerca de sus derechos laborales.

Sin embargo, no podíamos marcharnos del Centro de Formación Policial Murciélago, sin antes conversar con su encargada, Ingrid Serrano, que muy amablemente nos recibió y a la vez nos contó lo que significa como mujer estar al mando de uno de los principales centros de formación policial del país.

Con la labor cumplida nos despidos de estos oficiales de policías y de murciélago, trayendo consigo una enorme responsabilidad, defender y hacer respetar los derechos de estos hombres y mujeres que lo dan todo por el país. Reto que ANEP está dispuesta a tomar y cumplir.

ANEP deja en manos de la Contraloría investigación por compra de carros de lujo

La Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP), presentó la mañana de este miércolesuna cantidad importante de documentos ante la Contraloría General de la República, para que sea este ente el encargado de realizar la investigación por la compra de 52 carros de lujo por parte del Ministerio de Seguridad Pública.

Albino Vargas, Secretario General de la ANEP, indicó que dicha documentación llegó a la ANEP de forma anónima, y al revisar el contenido de la misma e identificar posibles irregularidades en la forma en que el Ministerio de Seguridad Pública adquiere los vehículos de lujo, se toma la decisión de enviar la documentación al ente contralor, para su respectiva investigación y que sea este quien determine si existe alguna irregularidad.

“Se ha demostrado las razones por las cuales el Ministerio de Seguridad Pública no debió adquirir estos 52 vehículos de lujo. Se le ha dado seguimiento al asunto y se ha recabado una importante cantidad de documentos que nos lleva a formularnos muchas interrogantes sobre todo el proceso que determinó la compra dentro de un Convenio Marco de estos vehículos”, dijo Vargas.

El Secretario General de la ANEP indicó que dentro de la documentación se identifica una amplia carta del Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora, enviada en junio del 2012, a la Proveeduría Institucional; solicitando que se detenga el proceso de dicho Convenio Marco, al detectar vicios de nulidad.

Por su parte Mainor Anchía, Directivo Nacional de la ANEP y representante de nuestra organización en la Fuerza Pública, indicó que además se trasgredió el artículo 59 de la Ley 7410, que establece: “De igual manera los vehículos que la Fuerza Pública adquiera y opere deberán ser del color azul o blanco, los cuales serán exigidos en todos los procesos de adquisición de dicho equipo”. Según Anchía los vehículos no cumplen con estas características.

Otro de los puntos señalados por la ANEP, en la conferencia de prensa que se brindó esta mañana, previo al traslado hacia la Contraloría General de la República, fue la forma en que las características de la licitación para la compra de los vehículos en apariencia favorecen a un solo oferente.

Ante estas irregularidades, la ANEP decidió trasladar la documentación al ente Contralor, para que sea este quien realice las investigaciones pertinentes y determine si existió o no anomalías en la compra de los 52 vehículos de lujo por parte del Ministerio de Seguridad Pública.

Carta pública al Ministro de Seguridad

El Lic. Mario Zamora Cordero, el viernes 28 de febrero, ante nuestro cuestionamiento por la compra de vehículos de lujo, 52 Toyota Prado, por parte del Ministerio de Seguridad Pública, dice que en ANEP queremos que los problemas en la Fuerza Pública persistan; para seguir manteniendo nuestro discurso, agregando según él que se vienen solucionando las dificultades, y con la implementación del manual, los problemas salariales desaparecen, ante esa manifestación pretende descalificar nuestra queja por la compra de automotores de lujo, manifestamos:

Primero: Los únicos que dan discursos son ustedes, los que cumplen una función política y como a buen pagador no le duelen prendas, reconocemos que usted es muy bueno en el uso del verbo; nosotros no somos políticos, cumplimos una labor que procura la justicia social, analizamos muy bien la información y la procedencia antes de plantear alguna situación, lo cual se dio en el caso que nos ocupa. Le aclaramos señor Ministro, nuestra principal demanda viene siendo desde hace varios años, la atención del ser humano que labora para la Fuerza Pública.

Segundo: Nos parece lamentable mirar cómo se intenta confundir a la opinión pública, diciendo que nos oponemos a que la Policía tenga buenos vehículos, lo cual es rotundamente falso; no estamos cuestionando la compra y distribución de 312 pick up, o las motos, estamos cuestionando la adquisición de vehículos de lujo, hablamos de los Toyota Prado, que solo manejan personas adineradas y/o grandes corporaciones, no una institución “pobre”, que no puede reparar delegaciones, patrullas, a la cual no le alcanza para el pago de horas extra, que adeuda feriados desde hace varios años a sus funcionarios, que no puede comprar equipo de cómputo y de oficina, o ¿desconoce usted las limitaciones en estos insumos?

Tercero: ¿Desconoce usted que la delegación de Palmares en enero y febrero de este año, le pide a una cooperativa y a la Asociación Cívica, ayuda para comprar una aspiradora y reparar dos motos? Además, muéstrenos cuándo hemos planteado algo referente a la accidentalidad, como lo llamo usted; lo que hemos denunciado en otras oportunidades es la falta de mantenimiento de vehículos de menor valor y por esta razón muchas veces se dan situaciones que perjudican al funcionario conductor de una patrulla. Le podemos mostrar los cobros aplicados por deducible afectando el salario de los policías.

Cuarto: Qué lamentable, señor Ministro, que un exfuncionario de la Defensoría de los Habitantes, como usted, omita que lo primordial en cualquier organización y máxime en una institución como la Fuerza Pública es su recurso humano, y que de poco servirá tanta inversión si el personal sigue siendo maltratado.

Quinto: Señor Ministro, ¿qué acciones tomó su cartera ante las muertes por suicidio de varios oficiales de la Fuerza Pública?, ¿cuánto valor le da usted al sufrimiento de familias como la del subintendente Ramírez, el subintendente Beita, y los otros compañeros que se quitaron la vida recientemente, ordenó alguna investigación?, ¿se ha preocupado usted por cómo está la salud mental del policía?, ¿se detuvo un momento a pensar por qué se están quitando la vida nuestros uniformados?

Sexto: Según los anuncios que en estos días incrementó el gobierno de turno y el propio Ministerio de Seguridad, la labor de la Fuerza Pública sería de lo más destacado de esta administración, señalan desarticulación de bandas dedicadas al narcotráfico, de grandes decomisos de drogas, aumento en las aprehensiones y decomisos de armas de fuego; importante parece, pero mientras tanto los policías luchan por una licencia de estudio, pierden sus hogares, la mayoría de funcionarios recibe una calificación de “bueno”, que según el reglamento no permite la licencia de estudio, y uno se pregunta: ¿Quién hace el trabajo del que se vanagloria la administración?

Sétimo: Señor Ministro, habla usted de un manual, que a hoy sigue siendo una expectativa de derecho, porque no se termina de implementar y nadie recibe un centavo más en su salario, además se aparta de la verdad al manifestar que dicho manual surge por su buena voluntad, omitiendo una vez más que nuestra organización (ANEP) venía reclamando su creación desde 2008, e inclusive usted participó de algunas reuniones en aquel entonces como Director de Migración y Extranjería.

Le ayudaremos una vez más con información, ese manual debería revisarse porque está generando mayor desigualdad y una “encarnizada” disputa por los puestos, que podría traer consigo situaciones lamentables, sumado a que muchos no cuentan con los requisitos; además, no debería usted decir a los medios que el manual resuelve el tema salarial, porque deja en la categoría Agente 1 a una importante cantidad de funcionarios, los cuales no superan con incentivos los ₡429 mil y líquido un promedio de ₡378 mil mensuales, a menos que usted considere esto suficiente para un policía, quien se enfrenta al narcotráfico y a la criminalidad actual.

Octavo: Pero, en el tema de los Toyota Prado, el Lic. Fernando Berrocal Soto, exministro de Seguridad, coincidió con nuestra tesis y le aseguro que no es afiliado de ANEP.

Lujo vehicular vs. precariedad infraestructural

“Chinchilla defiende inversión en vehículos para Fuerza Pública”. Con este título sale una nota periodística en La Nación, en su edición de este domingo 2 de marzo de 2014, realizada por el señor Carlos Eduardo Vargas (carlos.vargas@nacion.com). La nota hace referencia de nuestro cuestionamiento por la compra de autos de lujo, 52 vehículos Toyota Prado por parte del Ministerio de Seguridad Pública, que fue denunciada mediante conferencia de prensa.

En la nota se establece a nuestro Secretario General, Albino Vargas Barrantes, como el denunciante, lo cual es erróneo; por cuanto es quien suscribe quien obtuvo la información y la compartió a los medios de prensa que acudieron a la conferencia convocada por la ANEP. Nuestro Secretario General respaldó, con su presencia y en todos sus extremos, la denuncia que hicimos. En la nota del domingo 2 de marzo, la señora Presidenta de la República, licenciada Laura Chinchilla Miranda señala que “Ese sindicato, y otros sindicatos son enemigos de la Fuerza Pública”. Ante semejante manifestación tenemos que decir: ¡No, señora Presidenta!, en ANEP, no somos enemigos de la Fuerza Pública. Su manifestación “acalorada” pretende descalificar nuestra queja por la compra de vehículos de lujo, pero mejor debería usted aclararnos lo siguiente:

Primero: 1- ¿Si la mayoría de delegaciones son “tugurios” habitados por nuestros compañeros, ¿por qué no invirtió ese dinero en repararlas? 2- Si mensualmente se pagan sumas millonarias por el alquiler de delegaciones, ¿por qué no construyó delegaciones? 3- ¿Por qué se pagan sumas millonarias por delegaciones como la de Cristo Rey, que inclusive incumple con la Ley 7600, y por donde pasa el tren desde horas de la madrugada, impidiendo el adecuado descansó de los oficiales? 4- ¿Cuál es el negocio y/o el beneficio para la administración, al mantener alquileres de delegaciones como la descrita o la de La Merced?

Segundo: Entre los responsables del abandono de la Fuerza Pública, figura usted, señora Presidenta. Usted fue Ministra de Seguridad. Posiblemente sea el “mea culpa” que la tiene de manera “desesperada”, intentando hacer algo ahora. Sin embargo, en su desesperación no diga que en la ANEP somos enemigos de la Fuerza Pública. Nuestra principal demanda, inclusive en oficio que le remitimos a usted (y del cual tenemos constancia), viene siendo desde hace varios años, la atención del ser humano que labora para la Fuerza Pública.

Tercero: Cuando no se tienen argumentos, se apela a la confusión. Nos parece lamentable mirar cómo se intenta confundir a la opinión pública, diciendo que nos oponemos a que la policía tenga buenos vehículos, lo cual es rotundamente falso. No estamos cuestionando la compra y distribución de 312 vehículos “pick up”, como tampoco cuestionamos la compra y entrega de motos. Estamos cuestionando la compra de carros de lujo. Hablamos de los Toyota Prado y los Rav 4, que solo manejan personas adineradas y/o grandes corporaciones, No una institución “pobre”, que no puede reparar delegaciones, que no puede reparar patrullas, que no puede pagar horas extra, que adeuda feriados desde hace varios años a sus funcionarios, que no puede comprar equipo de cómputo y de oficina, o ¿desconoce usted las limitaciones en estos insumos?

Cuarto: Desconoce usted que la delegación de Palmares, en los meses de enero y febrero de este año, le pide a una cooperativa y a la Asociación Cívica, ayuda para comprar una aspiradora y reparar dos motos? Si no se planifica o no se cuenta con recursos para el mantenimiento de vehículos de menor valor (motos), ¿cómo sabremos para que sea distinto con estos vehículos de lujo?

Quinto: Doña Laura, nosotros no somos los que firmamos injustos despidos de trabajadores de la Fuerza Pública, que luego se ven en vulnerabilidad a la venganza de los delincuentes que alguna vez intervinieron; y no me diga que son casos de corrupción porque podríamos debatir al respecto y le aseguro puedo mostrarle que muchas veces se firma el despido de un inocente, “víctima del sistema”. Señora Presidenta: lo primordial en cualquier organización, y máxime en una institución como la Fuerza Pública, es su recurso humano, y de poco servirá tanta inversión si el personal sigue siendo maltratado.

Sexto: Señora Presidenta: intenta usted decir que su gran preocupación es la ciudadanía. ¿Nos habla de la misma ciudadanía a la que usted manda a garrotear?, utilizando a la noble Fuerza Pública, siendo luego las y los oficiales los que deben defenderse de las demandas por presunto abuso de autoridad. ¿Quién paga el daño y el deducible en caso de colisión de un Toyota Prado?: las y los oficiales de la Fuerza Pública que, en su mayoría, viven en comunidades vulnerables, porque el salario no les permite para más, y muchos apenas sobreviven con lo básico para su propia subsistencia y la de sus respectivas familias.

Sétimo: Pero, además, señora Presidenta, en el tema de los Toyota Prado y los Rav 4, el distinguido ciudadano y Exministro de Seguridad Pública, Lic. Fernando Berrocal Soto, coincidió con nuestra tesis y le aseguro que no es afiliado de la ANEP; pero sí es parte de su mismo partido Político.

Emplazamos al Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora

Ante nuestro cuestionamiento por la compra de vehículos de lujo, 52 vehículos Toyota Prado por parte del Ministerio de Seguridad Pública, dice usted señor Ministro Zamora que en ANEP queremos que los problemas en la Fuerza Pública persistan para seguir manteniendo nuestro discurso; agregando, según usted, que se vienen solucionando los problemas; y que con la implementación del manual los problemas salariales desaparecen. Ante esta manifestación que pretende descalificar nuestra queja por la compra de vehículos de lujo, manifestamos:

Primero: Los únicos que dan discursos son ustedes, los que cumplen una función política, y como “a buen pagador no le duelen prendas”, reconocemos que usted es muy bueno en el uso del verbo. Nosotros no somos políticos, cumplimos una labor que procura la justicia social; y analizamos muy bien la información y la procedencia de la misma, antes de plantear alguna situación. Esto se dio en el caso que nos ocupa. Le aclaramos señor Ministro: nuestra principal demanda viene siendo formulada desde hace varios años, la atención del ser humano que labora para la Fuerza Pública.

Segundo: Nos parece lamentable mirar cómo se intenta confundir a la opinión pública, diciendo que nos oponemos a que la policía tenga buenos vehículos, lo cual es rotundamente falso. No estamos cuestionando la compra y distribución de 312 vehículos tipo “pick up”; tampoco cuestionamos la compra y entrega de motos. Estamos cuestionando la compra de carros de lujo, hablamos de los Toyota Prado que sólo manejan personas adineradas y/o grandes corporaciones; no una institución “pobre”, que no puede reparar delegaciones, que no puede reparar patrullas, que no puede pagar horas extra, que adeuda feriados desde hace varios años a sus funcionarios, que no puede comprar equipo de cómputo y de oficina; o, señor Ministro Zamora, ¿desconoce usted las limitaciones en estos insumos?

Tercero: ¿Desconoce usted que la delegación de Palmares, en los meses de enero y febrero de este año, le pide a una cooperativa y a la Asociación Cívica ayuda para comprar una aspiradora y reparar dos motos? Además, ¿muéstrenos cuándo hemos planteado algo referente a la accidentalidad, como lo llamó usted? Lo que hemos denunciado en otras oportunidades es la falta de mantenimiento de vehículos de menor valor y que, por esta razón, muchas veces se dan situaciones que perjudican al funcionario conductor de una patrulla. Le podemos mostrar los cobros que les aplicaron por deducible afectando el salario de los policías.

Cuarto: ¡Qué lamentable, señor Ministro!, que un exfuncionario de la Defensoría de los Habitantes de la República, como usted, omita que lo primordial en cualquier organización y máxime en una institución como la Fuerza Pública, es su recurso humano, y que de poco servirá tanta inversión si el personal sigue siendo maltratado.

Quinto: Señor Ministro: ¿qué acciones tomó su cartera ante las muertes por suicidio de varios oficiales de la Fuerza Pública?; ¿cuánto valor le da usted al sufrimiento de familias como la del Subintendente Ramírez, el Subintendente Beita, y los otros compañeros que se quitaron la vida recientemente?; ¿ordenó alguna investigación? ¿Se ha preocupado usted por saber cómo está la salud mental del policía? ¿Se detuvo un momento a pensar por qué se están quitando la vida nuestros uniformados?

Sexto: Según los anuncios que en estos días incrementó su gobierno, el propio Ministerio de Seguridad, la labor de la Fuerza Pública, sería de lo más destacado de esta administración. Señalan ustedes desarticulación de bandas dedicadas al narcotráfico, hablan de grandes decomisos de drogas, aumento en las aprehensiones y decomisos de armas de fuego, importante parece; pero mientras tanto, las y los Policías luchan por una licencia de estudio; mientras tanto las y los Policías pierden sus hogares; mientras tanto la mayoría de funcionarios reciben una calificación de “BUENO”, misma que según el reglamento no permite la licencia de estudio… Y uno se pregunta, ¿quién hace el trabajo del que se vanagloria la administración?

Sétimo: Señor Ministro: habla usted de un manual que al día de hoy sigue siendo una expectativa de derecho, por cuanto no se termina de implementar y nadie recibe aun un centavo más en su salario; además se aparta usted de la verdad al manifestar que dicho manual surge por su “buena voluntad”, omitiendo una vez más que nuestra organización ANEP venía reclamando la creación de un manual desde el año 2008; e, inclusive, usted participó de algunas reuniones en aquel entonces como Director de Migración y Extranjería. Le ayudaremos una vez más con información: ese manual debería manejarse con muchísimo cuidado porque está generando mayor desigualdad y una “encarnizada” disputa por los puestos, lo que podría traer consigo situaciones lamentables; sumado a la circunstancia de que muchos no cuentan con los requisitos señalados en el mismo. Por otra parte, debería usted dejar de decir a los medios de comunicación que el manual resuelve el tema salarial, porque deja en la categoría “Agente Uno” a una importante cantidad de funcionarios, los cuales no superan, con incentivos, los ₡ 429,000 mensuales, para un líquido un promedio de ₡378,000.oo mensuales, a menos que usted considere esto suficiente para un Policía que se enfrenta al narcotráfico y a la criminalidad actual.

Octavo: Pero además, en el tema de los Toyota Prado, el Exministro de Seguridad, Lic. Fernando Berrocal Soto, coincidió con nuestra tesis y le aseguro que no es afiliado de la ANEP; pero sí miembro de su propio partido, señor Ministro Zamora.

ANEP pide explicaciones a Seguridad Pública por la compra de 52 carros de lujo

La Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP) denunció la mañana de este viernes, en conferencia de prensa la compra de 52 carros de lujo por parte del Ministerio de Seguridad Pública (MSP), ya que considera que la compra de dichos vehículos es innecesaria y el dinero pudo ser utilizado para otros fines.

Mainor Anchía, Directivo Nacional de la ANEP indicó que considera impropio e injustificado la compra de estos vehículos, más aún cuando se está hablando tanto por parte del Gobierno de que existe un gran déficit fiscal y de que no hay dinero.

“Nos enteremos y constatamos que se adquirió por parte del Ministerio Seguridad Pública vehículos marca Toyota Prado de lujo y 20 vehículos Rav4 que en total suman más de 70 vehículos de lujo. Estos vehículos Toyota Prado dan la exorbitante suma de más de 1.900 millones de colones, en momentos en que nosotros (ANEP) hemos denunciado que existe mucha necesidad dentro de la Fuerza Pública, no solo a nivel salarial, sino también de infraestructura”, dijo Anchía.

Precisamente la Unidad de Información y comunicación de la ANEP junto Anchía visitó la Escuela Nacional de Policía, ubicada en Barrio el Socorro y pudo constatar que en los patios de este centro se encuentran una gran cantidad de los vehículos de lujo, los cuales quedaron documentados por medio de fotografías.

“Queremos que los jerarcas de Seguridad Publica justifiquen la compra de estos vehículos de lujo, que no tiene además ninguna función policial, ya que son costosos. Además, tenemos documentos en donde nos enteremos que delegaciones de este país tienen que recurrir a la ayuda del comercio o de asociaciones para reparar, por ejemplo una motocicleta. Cuestionamos, si no se le puede dar mantenimiento a una motocicleta o a una patrulla, cómo se le va dar el mantenimiento a estos vehículos de lujo”, precisó Anchía.

Según datos del INS consignados por la ANEP, solo un Toyota Prado tendrían que pagar semestralmente de póliza una suma de 620 mil colones, si hacemos la operación por 52 la suma se incrementaría a unos 32 millones de colones cada seis meses.

“Le hacemos un llamado a la señora presidenta, para que ordene la devolución de esos vehículos; o al eventual gobierno que asuma a partir del 8 de mayo, para que ordene inmediatamente la devolución de eso vehículos de lujo y que ese recurso se invierta en mejorar las delegaciones del país o comprar vehículos que sean verdaderamente de carácter policía”, finalizó Anchía.

Carta abierta de un dirigente sindical a los candidatos a la presidencia de la República

Señores candidatos presidenciales de los distintos partidos políticos que participan en esta campaña electoral con miras a ocupar la presidencia de la República, he decidido en mi condición de dirigente y representante sindical de un importante número de trabajadoras y trabajadores de la Fuerza Pública, y como miembro de la Junta Directiva de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados, ANEP, escribirles algunas líneas a ustedes de manera general, esperando que alguno pueda brindarnos respuesta sobre las situaciones que a continuación expondremos.

Vengo dando seguimiento a sus pautas comerciales, a sus propuestas de un eventual gobierno, y aunque mencionan el tema de la seguridad ciudadana, no he mirado a ninguno de ustedes referirse a las y los trabajadores que brindan seguridad ciudadana, en la anterior campaña uno de los principales temas de la señora Presidenta fue la seguridad ciudadana, y al igual que ustedes hoy, se hablaba de más policías, más y mejor equipo, entre otras cosas, pero ni antes ni ahora se mencionan las necesidades que como seres humanos tienen y enfrentan las y los trabajadores de la Fuerza Pública.

Señores, respetuosamente les sugiero, hacer un análisis de las condiciones en que viven y trabajan las y los policías, debemos aceptar que hay corrupción en las policías, algo muy preocupante; pero… ¿quién se propondrá hacer los cambios necesarios? Desde nuestra perspectiva nada debería justificar la corrupción, menos en los encargados de velar por la seguridad de las personas pero, el “sistema” funciona como “agente inflamable”, te “absorbe o excluye”, y resulta difícil saber quiénes están a punto de cruzar la línea”.

Este tema debería ser prioritario, saben ustedes ¿cómo está la salud mental del policía que cuida su comunidad?, ¿saben cómo se siente si recién acaba de perder su hogar? por las jornadas que afectan la vida en pareja, por el desarraigo familiar, entre otras causas; ¿saben ustedes la cantidad de oficiales frustrados, desmotivados, que son tratados como una máquina que no siente?, ¿se pueden detener un momento a pensar, por qué se están quitando la vida nuestros uniformados?

En la Fuerza Pública, el número de hogares disfuncionales es altísimo, ronda el 70%, existe personal “enfermo” y nadie lo nota. Porque los “intereses” son ajenos a la calidad humana, al buen trato, al valor de servir. Nosotros tenemos claridad de la situación, por eso en un momento le solicitamos audiencia a la señora Presidenta de la República, quien declinó atendernos, le remitimos la misma solicitud a varias y varios legisladores de distintos partidos políticos, representados en la actual Asamblea Legislativa, (omitimos los nombres, por objetividad) de los cuales nunca recibimos respuesta, ante este panorama, y con lo que representa saber que varios de nuestros compañeros oficiales se han quitado la vida, y otros lo estarán pensando, les preguntamos, ¿qué harán diferente ustedes, en caso de ganar la presidencia?, ¿ordenaría alguno de ustedes una intervención a lo interno del Ministerio de Seguridad Pública, a efectos de depurarla del “polarizado”, que “encubre”, nombramientos por concursos del “amiguismo”, por citar solo un caso.

Pensarían en la familia de las y los policías, en su salud, ¿fomentarían, jornadas de trabajo distintas a las actuales, máximo de diez horas?, según lo establece el Código de Trabajo en trabajos riesgosos, apoyarían la jubilación de los policías a los 57 años, brindándole el derecho de una jubilación digna, o seguiremos como hasta hoy con policías, con más de treinta y cinco (35) años de servicio, funcionarios desgastados que se jubilan cuando la vida casi se les termina.

Fomentarían un Ministerio de Seguridad, que valore a su gente, que piense en el recurso humano como su principal “insumo”, que fomente la competencia sana, los concursos, los ascensos, y que de manera integral, repercuta en la calidad de vida de las y los policías y de sus familias.

Hemos venido dando un enfoque social, sobre la situación que viven muchas y muchos compañeros de la Fuerza Pública, con altísimos niveles de desintegración familiar, algo que paralelo genera problemas emocionales, y financieros, que tienen a varios de los servidores de la ley, viviendo en precarios, o en condiciones precarias, por esto hacemos pública nuestra preocupación, en aras de que se dignifique al trabajador de la Fuerza Pública y mejore su calidad de vida, esperamos respuesta.